En mis tiempos mozos, cuando escribía por aquí con mayor fruición, solía yo comentar algún Royal Rumble Match clásico durante los días previos al evento homónimo del año en curso. Me gustan mucho esas batallas desde que era un niño. Así pues, he querido mirar si faltaba alguna edición en el blog, y de hecho así es. No he tardado mucho en vislumbrar que una de las primeras, y es más, una de las que vi cuando era pequeño, no ha sido comentada. Hablo de la edición de 1991, que por otro lado no tiene mucho que comentar, pero que debe estar en el blog, como todas. Hagámoslo.
Hoy en día pensamos en un Royal Rumble con la ilusión de ver sorpresas, regresos, expulsiones espectaculares, buenos momentos de wrestling, y el primer paso de cara a WrestleMania. En 1991 no había nada de esto. Hoy todos los frikis cuarentones con barba, como yo, leen cómics, juegan a videojuegos, ven wrestling, anime... pero en 1991 todo eso era para niños. Sí, era para niños; que un adulto pueda apreciarlo no significa que no fuera así. Y WWF era un producto para niños muy pequeños como yo. Un Royal Rumble no significaba nada más que el hecho de poder ver a 30 personajes juntos en un ring, saliendo de uno en uno. Y funcionaba; esa cuenta atrás es storytelling puro. Si un adulto mira hoy en día estos combates, la verdad es que le resultarán tediosos e infantiles, pero, cuando yo vi esta batalla con seis años recién cumplidos, la disfruté mucho... si no fuera porque en ese mismo evento, mi ídolo. The Ultimate Warrior, había perdido el Campeonato Mundial de WWF frente al Sargento Slaughter, gracias a las trampas de Macho King. En realidad yo, al ver la batalla, lo único que quería es que participara el Warrior, para así redimirse y volver a la senda del título, pero eso no pasó. Por lo demás, pude ver en ella a algunas de mis figuras de acción predilectas: El Serpiente, Mr Perfecto, Modelitos Martel, Greg "Martillo" Valentine, "Terremoto" Earthquake, El Marinero Tarugo, Hulk Hogan, El Enterrador, El Matador, El Tornado Texano, Bret Hart... Note el lector que en las transmisiones españolas los nombres mutaban un tanto.
Si aquellas retransmisiones empezaron a partir de WrestleMania 6 y la pelea entre Hogan y Warrior, los Rumble de 1991 y 1992 seguramente fueran las dos batallas que yo vi originalmente. Parece poco, pero piense el lector que un par de años, cuando uno tiene entre 5 y 7, es una cantidad enorme de tiempo, mientras que dos años, a los 40, no son nada. Así pues, esta Battel Royal, a pesar del enorme coñazo que supone, es símbolo de una parte para mí relevante de mi infancia.
Originalmente no existía la estipulación que indicaba que el ganador de Royal Rumble tendría una oportunidad titular en WrestleMania. No recuerdo si en 1991 eso ya había cambiado, pero, por un motivo u otro, el triunfante, Hulk Hogan, se enfrentó al Sargento Slaughter en el mayor evento del año, recuperando, así, su título, perdido en la edición del año anterior. Royal Rumble 1991 supuso su segunda victoria consecutiva, aunque pasaron muchos minutos antes de su aparición. El combate empezó con Bret Hart y Dino Bravo sobre el tatami.
Hart es uno de los luchadores con más pop de la contienda. Aún luchaba en la división de parejas junto a Jim Neidhart, aunque, como Shawn Michaels, se iba posicionando de cara a una carrera en solitario. De cualquier modo, los miembros de los tags de la época eran más considerados por el público y por la empresa que en la actualidad. Hart apaliza a Bravo, pero no consigue eliminarlo. Sí que lo hace el tercer participante, Greg Valentine. Hart, no obstante, es el protagonista de la primera parte de la batalla, que se llena de luchadores sin que ocurra nada realmente relevante.
Otro participante que hace su aparición en estos minutos es el odioso Rick Martel, que permanece en la batalla 52 minutos. Valentine, The Hammer, por su parte, tampoco lo hace mal: supera los 44 minutos. La lucha se anima un poco cuando entra, con el número 9, Jake Roberts, que utiliza sus mejores ataques contra Martel. Está a punto de eliminarlo en un par de ocasiones, pero este escapa siempre in extremis. Finalmente, es Martel el que elimina a Snake.
Otra entrada fundamental para la batalla es la de The Undertaker, con el número 12. Esta es su primera participación en Royal Rumble, competición que conseguiría ganar, finalmente, en 2007, 16 años después. Recordemos que había debutado un par de meses antes, en Survivor Series 1990. Su mánager, por el momento, es Brother Love Bruce Prichard. Poco tiempo después, en The Brother Love Show, se presentaría la figura de Paul Bearer
Taker llega haciendo daño, pues expulsa del ring a dos de los favoritos de la afición: Bret Hart y Bushwhacker Butch, uno de los Sacamantecas. La derrota del canadiense resulta especialmente espectacular, pues Taker lo levanta en peso agarrándolo del cuello para sacarlo por encima de la tercera. Me da la sensación de que, en general, las fuerzas del bien están en desventaja durante esta batalla, quizás porque WWF lo deja todo en manos de Hulk Hogan, aunque en ocasiones debe resultar frustrante para la afición. El Enterrador expulsa a un tercer héroe: Texas Tornado (Kerry von Erich), si bien es lanzado por encima de la tercera poco después, por el trabajo combinado de Hawk y Animal, los Road Warriors (The Legion of Doom en WWF). Un par de rudos aprovechan la ocasión asimismo para hacer lo propio con Hawk.
Gran pop del público en la eliminación del Taker. Es gracioso ver al joven Shane McMahon, en el papel de referee, intentando sacar al Deadman del escenario; quién le iba a decir que 25 años después se enfrentarían en WrestleMania.
Con el número 18 no sale nadie, para decepción del público. Después de revelados los 30 participantes, queda claro que el que se ha quedado fuera es Randy Savage. Los presentadores se preguntan si sufre alguna lesión, mas sabemos que la cuestión está relacionada con su participación en la lucha entre Warrior y Slaughter. Randy había huido del lugar debido al peligro que corría. Esto le llevó a luchar contra el Último Guerrero en WrestleMania.
Me sorprende el pop que recibe Shane Douglas, luchador cuyo paso por WWF no recuerda nadie. Otro tipo amado por todos es Jim Duggan, que hace acto de aparición, así como Earthquake, uno de los principales malos del momento en la empresa, que seguía insistiendo en la fórmula "Hogan vs bestia obesa en bañador de señora mayor". Con el número 24 entra al ring el ídolo, Hogan, y el estadio se viene abajo. A partir de aquí, el ring lleno empieza a vaciarse poco a poco. Mientras que Earthquake expulsa a los chicos buenos, Hulk hace propio con los malos. Hay que decir que la mayoría de los participantes nuevos son rudos. Con el número 30 entra Tugboat
Douglas es eliminado en su disputa con Brian Knobbs, de los Nasty Boys, que había entrado un poco torpe, cayéndose, como si hubiera bebido, pero que tiene un papel importante en el match. Quedan nueve hombres en el ring, y entre ellos, sólo Hulk, Jim Neidhart y Davey Boy Smith, el British Bulldog, son realmente queridos por el respetable. Tugboat, en ese tiempo, estaba haciendo equipo con Hulk, enfrentándose en varios match a Earthquake, mas recordemos que, durante el año, el Marinero Tarugo traicionaría al Inmortal expulsándolo de una Battle Royal y formando equipo con el Terremoto. No es de extrañar, porque aquí ya saltan chispas (ha sido abucheado al salir). Hulk lo elimina.
El Bulldog y Hogan se quedan solos ante cuatro rudos, si bien estos no gestionan bien su superioridad. El inglés echa fuera a Hakú, y se enfrenta en solitario a Rick Martel mientras Earthquake y Brian Knobbs le pegan una paliza al Hulkster. Davey expulsa a Martel, que fija un nuevo record de tiempo dentro de un rumble, pero para entonces los otros dos rudos ya han dejado grogui a Hulk, así que se lanzan a por él y lo eliminan sin resistencia. Continúan, pues, con su paliza sobre el bigotudo, aplastándolo varias veces con el peso de ambos. No en vano, todas las ediciones hasta el momento han acabado de la misma forma: dos heels pegándole a un face, que finalmente contraataca y se lleva la victoria. Esto es lucha libre de dibujos animados. Hogan entra en modo "baile de San Vito", y deja de vender los ataques de los rivales. Se levanta, golpea con doble Clothesline, y elimina al Nasty Boy con un Big Boot. Se queda sólo con el obeso canadiense y ataca, mas cuando lo levanta en peso para aplicar Body Slam, este cae sobre su cuerpo, pues el peso resulta excesivo para él. Eartquake se lanza de nuevo con planchas, y aplica un potente Power Slam, lo que no le sirve de nada, porque Hulk resucita de nuevo, ahora con su ataque definitivo. Para los golpes del rival, aplica tres puñetazos, Big Boot y busca Leg Drop. Como Eartquake no cae, lo agarra y lo tira con un Body Slam que, ahora sí, consigue aplicar con éxito. Después de eso, su oponente es presa fácil, y se va a la calle. Victoria para Hulk Hogan, para variar.
Batalla bastante aburrida, en general, con algunos buenos momentos. El final es paródico, pero es bueno en cuanto a la historia que se cuenta. Las historias, entonces, eran simples e infantiles, pero funcionaban bien. Las heroicidades de Hogan tienen grandes reacciones, y las ejecuta a la perfección. Hondea, tras la batalla, la bandera americana. El traidor Sargento Slaughter debe temerle.
Puntuación: **3/4
sábado, 27 de enero de 2024
WWF Royal Rumble Match 1991
lunes, 25 de octubre de 2021
NWO vs Arn Anderson, Lex Luger, Ric Flair y Sting, Wargames Match, WCW Fall Brawl 1996
Acabamos con el especial del Hall of Fame 2020, revisando una última lucha en la que está involucrada la NWO. Tras comentar algunos de los grandes eventos de la historia del stable, volvemos a los primeros meses de su vida, en los que se estaba fraguando la historia que realmente los hizo grandes: su rivalidad con el icónico Sting.
Recordemos que, en verano de 1996, Hulk Hogan traicionó a los fans y al bando de los técnicos, para unirse a los Outsiders, y conformar la NWO, un nuevo orden mundial en la industria del wrestling. Sting, Savage y Luger cayeron derrotados ante ellos. Entonces, poco podían imaginar que el de la cara pintada desarrollaría una gran transformación que lo convertiría en la mayor amenaza que se encontraría la agrupación.
Durante aquel combate en Bash at the Beach, Luger tuvo que retirarse del match, por recibir, accidentalmente, el ataque de Sting. Esto no fue casual : comenzaba un storyline en el que se ponía en duda la lealtad de Sting hacia su bando, y en concreto, hacia su amigo Lex.
El dominio de NWO en WCW continuó, incluyendo ataques a todo el mundo, como aquel que llevó a cabo Kevin Nash contra Rey Mysterio, al que lanzó contra una carabana, con la cabeza por delante, y a una gran altura. Llegábamos a septiembre sin que nadie parara a la NWO, que había recibido nuevos miembros, y la financiación del millonario Ted DiBiase, que una vez más, iba acompañado de su lacayo Virgil, cuya relación original se había truncado tras una interesante rivalidad a principios de los 90 en WWF. Cuando se acercaba Fall Brawl, evento en el que las fuerzas vivas de WCW volverían a unirse frente a la agrupación, esta quiso quebrantar su hermandad, sembrando dudas, al afirmar que Sting estaba de su parte.
En el programa del 2 de septiembre de 1996, las actuaciones sesgadas del referee Nick Patrick a favor de la NWO, aparentemente pagado por DiBiase, condujo a una persecución en carretera, protagonizada por Sting y Luger, que incluso robaron un coche de policía para dar caza a la limusina de los malvados. Aún no existía GTA. Mientras eso ocurría, en la arena, se confirmaba la llegada al grupo por parte de The Giant (Big Show), para atacar a los Four Horsemen, que entonces eran Flair, Anderson, Benoit y Mongo McMichael, e incluso a sus rivales, The Dungeon of Doom, para acabar torturando a Randy Savage y pintando sus siglas sobre su cuerpo.
En el programa de la semana siguiente, previo al PPV, Luger estaba luchando, cuando fue atraído por Patrick al aparcamiento, pues allí estaba DiBiase. Él se había señalado a sí mismo como el cuarto integrante de la NWO, pero había dejado claro que había un quinto (sin contar a Giant, que no era parte del equipo en el momento en que hizo el gesto, sentándose entre el público). En este programa del 9 de septiembre, Luger da caza a Ted, ya retirado de la acción, tan sólo para ser sorprendido por Sting, que sale de la limusina, para atacarle junto al resto de los villanos. Así pues, se acerca el evento, en el que hay una Wargame, en la que la NWO, supuestamente, se enfrenta a Flair, Anderson, Luger y Sting, con una duda: ¿en qué bando pelearía el escorpión?
Llega Fall Brawl, con un Sting que jura no ser el atacante. Durante el Show, Randy Savage es derrotado por The Giant, con la participación del resto de miembros de la NWO. Poco después, Miss Elizabeth sería añadida a la storyline, a través de otro de esos interesantes giros ocurridos durante los primeros e intensos meses de vida de la NWO.
Recordemos las reglas de las Wargames: hay dos rings, incluidos dentro de una jaula. Los miembros de los equipos salen de uno en uno, de tal manera que, en principio, hay igualdad de condiciones, pero en tanto que los luchadores salen de uno en uno, cada vez que sale un luchador del bando rudo, hay unos minutos de ventaja gracias a los cuales, los malos consiguen dominar. En principio, no hay una regla que diga que los rudos salen primero, pero creo recordar que siempre ha sido así en todas las ediciones ocurridas en la historia de WCW. Cuando todos los wrestlers están en la jaula, se activa la posibilidad de cubrir a uno de ellos. Cuando un luchador se rinde o recibe la cuenta de tres, su equipo pierde.
La lucha comienza con la pelea entre Kevin Nash y Arn Anderson, tan sólo para que Scott Hall rompa la igualdad. La cosa continúa así, hasta que Hogan, Nash y Hall dominan a Luger y Anderson. Ahora es el momento de Ric Flair.
Ric Flair disfruta de la mayor ovación de la noche. Ya es una leyenda. Parece una locura verlo enfrentarse a sus tres enormes rivales, pero logra, con sus provocaciones, que sea Hulk el único que vaya a su encuentro, en el ring vacío. Así, de uno en uno, consigue noquear tanto a Hulk como a sus compañeros, usando un puño de hierro y golpes bajos. La gente disfruta el momento.
Un nuevo conteo llega a cero, para que el cuarto miembro de la NWO aparezca. Y, efectivamente, para decepción de todos, es Sting. En este ambiente depresivo, los buenos se ven en clara desventaja frente a los malos. Sin embargo, y para alegría general, termina el último conteo, y un nuevo Sting, el original, aparece. ¡Se confirma que el malvado era un falso Sting!
Sting entra al ring como una fiera, y se encuentra a aquel que pasará a la historia como NWO Sting, que es, físicamente, exactamente igual que él. La pintura tapa sus rasgos, pero, por lo demás, tanto el pelo como el cuerpo y la altura son muy parecidos. EL Sting bueno asesina a sus cuatro rivales, pero está muy enfadado con la desconfianza de sus compañeros. Tras la paliza a la NWO, hace un corte de mangas a Luger, y se va. Este queda en shock, y esto provoca el comeback de los rudos. El Scorpion Detashlock del falso Sting sobre él, apoyado por un candado al cuello de Hulk, acaba con la resistencia de Lex. Tras la lucha, los buenos son apalizados por los malos.
La historia del falso Sting, bajo cuya pintura se encontraba Jeff Farmer, que en la empresa había usado el personaje de Cobra hasta entonces, daría paso a la transformación de Sting en una versión de El Cuervo, y a sus apariciones por sorpresa, desde las alturas. Grandes historias, buenos tiempos.
Puntuación: ***1/4
martes, 19 de octubre de 2021
NWO vs Steve Austin y The Rock, WWF 18/03/2002
Vamos a terminar el especial sobre la edición 2020 del Salón de la Fama de WWE, con un par de combates más del stable que protagonizó la ceremonia celebrada, finalmente, en 2021, por causa de la Pandemia de COVID-19. Debemos terminar con esto ya, porque también hay unos pocos exaltados que pertenecen, oficialmente, a la clase de 2021, sobre los que tendremos que charlar un rato. Hablamos una vez más de la NWO.
Hablamos, en su momento, y con tranquilidad, sobre el nacimiento de la NWO, y su caída, junto con la de la empresa que los vio triunfar, la WCW del imperio Turner. Sus programas televisivos triunfaron, pero cayeron ante la ardua competencia de la WWF de Vince McMahon, y su descarnado producto. Cuando la lucha libre dejó de darle dinero, Turner se desprendió de ella, y McMahon la compró, casi regalada, en el año 2001.
Durante unos meses, los espectadores de Monday Night Raw, como ya hemos hablado en varias ocasiones, pudieron disfrutar de una storyline de invasión; de guerra entre la WWF y las dos empresas que habían acabado en poder de la familia, WCW y ECW. Sin embargo, en esa storyline, no hizo acto de aparición la NWO. Lo hizo, finalmente, unos meses después, durante la temporada de WrestleMania 18, para protagonizar una rivalidad histórica frente a las dos figuras de la WWF que habían ganado la guerra de los lunes por la noche: Steve Austin y The Rock.
Una nueva etapa para la NWO comenzó en WWE, pero no funcionó bien. La forma en la que trabaja la cabeza de Vince no acepta las reacciones ni los comportamientos de gente desfasada como Hall, Nash y Hogan. En WrestleMania 18, los Outsiders se enfrentaron a Austin, y Hulk se enfrentó a The Rock. Durante el histórico encuentro, el público se puso de lado de la leyenda, que en principio, era el villano y, aunque los luchadores reaccionaron de manera genial al cambio de expectativas, tras el evento, WWE tomó la fácil decisión de convertir a Hogan en Face, motivo por el cuál, abandonó la NWO, para enfrentarse a ella. Poco después, ganaría su último Campeonato Mundial de WWE.
Por su parte, Nash y Hall continuaron con el proyecto, añadiendo a miembros clásicos de la agrupación como X-Pac y Big Show, y enfrentándose a gente como Kane. Aquello no cuajó, y las lesiones de los dos Outsiders complicaron las cosas. De la noche a la mañana, WWE canceló la historia, y todos los involucrados volvieron a sus cosas. En 2003, los tres estaban en la calle.
Así pues, y para ser justos con ellos, deberíamos decir que el match entre The Rock y Hulk Hogan en WrestleMania 18 es el final de la NWO. Al menos es el final bueno. Como esta batalla ya la comentamos en el blog hace mucho tiempo, hoy vamos a hablar del mencionado combate en el que Rock y Austin, antes del magno evento, en RAW, se vieron las caras con la mítica tercia. Es interesante verlo, porque ya sabemos que Austin, como hizo con Lesnar, se negó a pelear con Hogan, porque el tipo estaba un poco ofuscado. Como él mismo confesó mucho después, perdió mucho dinero por culpa de su ego.
Nos encontramos con un combate histórico en el que los tres rudos dominan a sus rivales, aprovechando la diferencia de número, y las trampas. En todo momento, intentan mantener al héroe en cuestión en su esquina, para intimidarlo y agredirle cuando sea necesario.
The Rock lucha con valentía, y se enfrenta a todos a la vez, en esa esquina, pero, tarde o temprano, llega el ataque por la espalda que frena su ofensiva.La gente agradece mucho los momentos en los que Hogan entra al ring, aunque estos son pocos. Deja el trabajo duro en manos de sus lacayos. Hulk está mayor.
The Rock logra el hot tag, que permite a Austin entrar en el ring para dominar a los Outsiders, pero, finalmente, se traga el Big Boot de Nash, de tal manera que el dominio rudo comienza una vez más. De nuevo, los intentos de comeback del héroe son aceptados con gratitud por la multitud, pero frenados rápidamente. The Rock consigue entrar de nuevo, y le pasa exactamente lo mismo.
Después de mucho tiempo, Nash da entrada a Hulk, el próximo rival de Johnson. Mientras Steve se enfrenta a los Outisders en ringside, un Rocky disminuido por los ataques previos es derrotado limpiamente por Hogan, para sorpresa de todos, a través de su clásico combo de puñetazos, Big Boot y Leg Drop. Austin, que no ha coincidido con él en el ring en ningún momento, se lanza a por Hulk, pero es frenado por la tercia. La NWO celebra.
La lucha no está mal. Es un combate clásico de tipo hándicap, en el que se intenta expresar que esa diferencia de 3 vs 2 resulta determinante. Ver a Hogan vencer a The Rock es bonito para aquel que era un niño en sus tiempos de gloria, como es mi caso.
Puntuación: ***
domingo, 25 de julio de 2021
Paul Orndorff vs Hulk Hogan, WWF MSG 20/02/1984
Especial Paul Orndorff
Recientemente, conocimos el fallecimiento de Mr Wonderful, Paul Orndorff, a los 71 años de edad. Su hijo anunció su muerte, sin dar demasiados detalles sobre los motivos de esta, pero con una gran expresión de cariño paternofilial. Vamos a dedicar un par de posts a este luchador, para recordar su legado.
Paul Orndorff es uno de esos muchos luchadores que pelearon durante años en NWA y otras promociones americanas, pero que todo el mundo recordará por su paso por WWF. Estuvo en la empresa de Vince McMahon durante la década de los 80, llegando como una megamusculosa amenaza para el flamante nuevo campeón de la compañía, The Incredible Hulk Hogan. Se alió con Roddy Pipper, que, con su gran trabajo con el micrófono, supo situarlo como un heel importante, llegando, ambos, a enfrentarse a Hogan y Mr T en el main event del primer WrestleMania.
Durante la década de los 90, Orndorff luchó en WCW, ganando sus primeros títulos de importancia (Tag y TV). En el 95 se retiró, mas volvió en el 99 como un gran veterano que hacía apariciones eventuales. No debió hacerlo, pues en una lucha grupal, aplicó un Piledriver y cayó mal sobre su cuello, quedando tendido sobre el ring, inmóvil. El referee, Charles Robinson, tuvo que parar el match, porque la cosa pintaba mal. Orndorff se retiró y pasó a entrenar en el WCW Power Plant. En 2005 fue inducido al Hall of Fame de WWE, y en 2017 tuvo una última lucha en un evento de CWE.
Veamos, pues, un par de luchas de este hombre. La primera que he visionado, que es la que comentamos hoy, es un match titular que mantuvo frente a Hogan en el Madison Sqaure Garden el 20 de febrero de 1984. Es una lucha clásica de Face vs Heel al estilo Hogan, pero creo que no está mal.
Hablamos de dos Power Houses, dos hombres de gran musculatura, mas la diferencia de tamaño es clara a favor del campeón; Hogan es muy alto. Hay muchas pruebas de fuerza, pero van todas a favor del héroe. Hulk domina y aplica buenos headlocks, aunque Orndorff aprovecha cada oportunidad para hacer alguna pequeña trampa y atacar con mucha fuerza al gigante. Pronto, Hulk se lo quita de encima, y vuelve a dominar, aplicando buenos headlocks.
Orndorff golpea de forma stiff y con buenas dropkicks a su rival, y remata con su finisher, el Piledriver, hasta que llega el momento del baile de San Vito. Hogan se vuelve loco, y protagoniza esa rutina en la que deja de vender los puñetazos de su rival, los para, y golpea sin parar, con el fin de rematar con un Leg Drop. Sin embargo, esta no es completada (no sé si para febrero de 1984 estaba ya inventada tal y como sería luego, pues sé que, en primera instancia, no remataba con Lep Drop, sino con Clothesline). En cualquier caso, Orndorff es proyectado fuera del ring, y pierde por Count Out después de una gran caída, lo que permite que el público sea feliz por la victoria de Hulk, y que el rudo no pierda push, de cara a esa rivalidad tan larga que llevaría a ambos al main event de WrestleMania en 1985.
Puntuación: ***1/4
jueves, 24 de junio de 2021
Hulk Hogan vs Kevin Nash, WCW Nitro 04/01/1999
Continuamos hablando sobre la NWO en este especial del Salón de la Fama de WWE de 2020. Hoy no hay mucha lucha para comentar, pues tratamos un tema muy delicado: el Fingerpoke of Doom.
En el último post que publicamos, revisamos la lucha entre Sting y Hogan, aquel extraño momento en el que el de la cara pintada volvía a la acción después de un año de storyline, para quitarle el título al diabólico líder del movimiento. Ese podría haber sido un buen momento para el fin de la storyline de la NWO, o al menos, para el principio del fin, y sin embargo, esta se fue complicando, dividiéndose el equipo en facciones, y acogiendo, con el tiempo, prácticamente, a cualquier luchador de WCW que en el pasado le hubiera plantado cara al stable, de una forma casi autoparódica.
Este Fingerpoke of Doom es el penúltimo disparate de la NWO. WCW ya había metido la pata al hacer perder su racha invicta a Goldberg en un combate irrelevante ante Kevin Nash, y eso tan sólo sirvió para que la historia volviera a comenzar de cero, porque Nash le regalaría a Hogan el título unas semanas después, en el primer show de Nitro de 1999, reconciliándose así con él, y demostrando su servilismo.
A mediados de 1998, Nash se había pasado al bando técnico, y había entrado en una rivalidad con Hogan, formando un nuevo stable: el NWO Wolfpac, al que se sumaron tipos buenos como Savage, Sting y Luger. Hogan se mantuvo como líder del equipo original, que pasó a llamarse NWO Hollywood, junto a gente como The Giant o Scott Hall.
Nash, que como digo, era face, venció a Goldberg con trampas de su antiguo amigo Hall, así que le ofreció un rematch, pero este fue arrestado por acoso sexual sobre Ms Elizabeth, en otro arco argumental delirante y propio de Vince Russo. En tanto que Goldberg no estaba disponible, Nash ofreció la posibilidad de luchar por la correa a Hulk, y este la aceptó. Así, llegó un combate que, ahora sí, podemos decir que supuso la caída en picado definitiva de WCW.
Porque Eric Bischoff, durante la transmisión en vivo, hizo algo de lo que ya hemos hablado otras veces: anunció el resultado del programa de la competencia, WWF RAW, que se emitía en diferido. Anunció que Mankind se convertiría en campeón durante esa noche, para conseguir que los aficionados se centraran en ver su combate titular, el que enfrentaba a Nash y Hogan. Lo que consiguió, en su lugar, es que medio millón de personas cambiara de canal, dejara de ver Nitro en TNT para ver Raw is War en USA Network. El rating final de ambos programas fue de 5.0 para Nitro, y 5.7 para RAW.
Lo peor de todo es que, mientras que la lucha entre The Rock y Foley fue una pelea de verdad, la de WCW no. Nada más comenzar, Hogan tocó con su dedo a Nash, y este se lanzó sobre la lona, dejándose ganar. La NWO se volvía a juntar, y la gente sentía que ese gran reinado de Goldberg se había acabado para nada.
Tras la lucha, mientras la NWO y sus tres miembros originales celebran, Goldberg llega a por venganza, pero es traicionado por Lex Luger, que demuestra su posición en el reformado equipo. Aunque WWE había superado en ratings a WCW durante 1998, durante los meses previos a que esto ocurriera, la cosa estaba muy disputada, pero a partir de aquí, WCW fue en caída libre hasta su venta a WWE. Si ese 4 de enero de 1999 tenía un rating de 5.0, en 2001 había caído a 2.0.
Puntuación: -
sábado, 19 de junio de 2021
Sting vs Hulk Hogan, WCW Starrcade 1997
Estamos desarrollando un especial sobre los exaltados al salón de la fama de WWE en el año 2020 y 2021. Comenzamos, en el artículo anterior, a hablar sobre el nacimiento de la NWO, ya que el grupo ha recibido el honor este año. Hoy, vamos a comentar un punto culminante en su enorme storyline; quizás uno de los combates más importantes en la historia del wrestling: Hollywood Hulk Hogan se enfrenta a Sting en Starrcade 1997.
Como comentamos el otro día, Hogan se presentó por sorpresa en Bash at the Beach 1996, para hacer equipo con los Outsiders y atacar a los héroes de WCW, Sting, Luger y Savage. Entonces nació la NWO, y la historia del wrestling cambió.
La NWO atacó WCW, y fue haciéndose con la empresa. El programa principal de la misma, Nitro, competía con el programa de WWF, RAW, en las conocidas Monday Night Wars. Si bien, en junio de 1996, McMahon estaba por encima de Turner, aunque no de forma muy clara, a partir de ese verano en el que nació la NWO, y casi durante dos años, WCW superó ampliamente a WWF. Quizás es el combate entre Hogan y Sting que comentamos hoy el que marca la recuperación de Raw, a través de su llamativa Era Attitude. El caso es que la guerra entre los dos programas y las extravagantes propuestas de ambos lados, llevaron al wrestling a una exposición realmente grande, de tal manera que, incluso el programa que estaba por detrás en los ratings, hacía buenos números.
Hogan pronto se convirtió, gracias a las trampas, en World Heavyweight Champion, y mancilló la dorada correa del campeonato con pintura negra en la que ponía "NWO". Muchos hombres se unieron a su causa, empezando por Ted Dibiase y su clásico criado de WWF, Virgil, que teóricamente corría con la financiación del movimiento, si bien estuvo en él muy poco tiempo. Eric Bischoff, con su ansía de protagonismo, se convirtió en miembro oficial, así como un montón de rudos, mientras que en el bando de la WCW apenas resistían unos pocos, como Lex Luger o el también exWWF Roddy Piper, que mantuvo una acalorada rivalidad con Hogan.
Pero algo raro pasó con Sting. El gran héroe de WCW cambió; se alió con NWO y ayudó al grupo a vencer en una Wargames, haciendo rendir a su amigo de toda la vida, Lex Luger, con un Scorpio Deathlock (quizás comentemos este combate en el especial, me apetece). Luger juró venganza, pero Sting se sintió contrariado: afirmó no ser él el que aparecía junto a Hogan y compañía. Debido a las dudas de Luger y el resto de la gente sobre su integridad , se declaró agente libre, y juró aparecer cuando lo estimara oportuno.
Así, asistimos a una temporada en la que Sting no tuvo ninguna lucha en un montón de meses. Cambió su aspecto, convirtiéndose en un vengador cuya imagen era similar a la de El Cuervo, protagonista de una película homónima de culto. El nuevo Sting destapó al falso, y atacó, bate en mano, a la NWO, apareciendo desde el cielo en los momentos menos esperados. Era una gran época en la que, si bien la cosa siempre acababa igual, había una historia subyacente detrás, una evolución y un fin que los espectadores esperaban alcanzar, algo muy distinto a los programas de WWE de hoy en día, en los que uno sabe que no va a pasar nada, y en los que da igual, en realidad, lo que pase, salvo por alguna aparición estelar eventual.
El día definitivo en el que Sting se vio las caras con Hollywood Hulk Hogan llegó. Ocurrió en el evento Starrcade 1997, con el Campeonato Mundial en juego. Por desgracia, todo fue un desastre, y marcó el inicio de la decadencia de la storyline de la NWO.
Semanas atrás, Bret Hart había llegado a WCW, tras el conocido por todos Screwjob de Montreal en WWF. Durante el show, veló por los intereses de WCW frente a NWO, y su papel en el combate definitivo fue determinante.
El combate en sí mismo es la nada más absoluta. Sting y Hogan pelean sin hacer nada que se pueda recordar mínimamente. Después de un inicio arrollador del de la cara pintada, el campeón domina y, aparentemente, lo derrota con facilidad, si no recuerdo mal, tras un simple codazo. La frialdad es total entre el público.
Pero no hay toque de campana. En ringside, Bret Hart ha evitado que el encargado de la campana señale el final del match. En su lugar, él se viste de árbitro, expulsa al referee Nick patrick, afín a la NWO, y bajo su cargo, Sting derrota a Hogan para convertirse en World Heaviweight Champion, y anotar una victoria, al fin, al bando de los buenos. Todo el mundo sale de backstage para celebrar lo ocurrido.
Pero la realidad es que Le han robado el combate a Hulk. Los aficionados esperaron muchos meses para ver a un nuevo Sting vengar la causa de la justicia contra una alimaña tramposa que destrozaba todos los combates y todos los programas de la empresa, y al final, ese nuevo Sting, es derrotado de forma patética, y sólo es capaz de ganar gracias a las trampas. ¿Por qué WCW ha hecho esto?
Se suponía que no debía ocurrir así. Patrick era un referee rudo; debía contar muy rápido, de tal manera que fuera obvio que el resultado había sido injusto, y que la victoria de Hogan, era causa de las trampas. En tal situación, la actuación por parte de Hart habría sido legítima. Sin embargo, de la forma en la que se hicieron las cosas, la imagen fue la contraria a la pretendida.
Algunos defienden que fue un error de Patrick, y otros que este estaba conchabado con Hogan, fuera del kayfabe, para que así el Hulkster quedara bien. No está muy claro. Lo que sí ha trascendido por parte de Bischoff es que Sting no estaba en forma para tener el match; en todo el tiempo en que había estado sin pelear de manera regular, no había entrenado como debería. La verdad es que todas las luchas de Hulk Hogan de esta época eran de este tipo, así que tampoco se nota mucho la diferencia...
Puntuación: *
viernes, 11 de junio de 2021
Sting, Lex Luger y Randy Savage vs Kevin Nash, Scott Hall y Hulk Hogan, WCW The Bash at the Beach 1996
Estamos realizando un especial sobre el Salón de la Fama de WWE, y sus egresados en el año 2020 (o 2021, físicamente). Sólo nos falta hablar sobre la NWO, el stable más importante de la historia del wrestling, cuya storyline cambió el sentido de la industria e hizo que los programas de televisión de wrestling fueran seguidos por muchos millones de personas cada semana. Hacía tiempo que debíamos hablar sobre este tema en el blog, pero hemos esperado al momento oportuno: la ocasión la pintan calva.
La NWO está en el Salón de la Fama, como stable, aunque no han sido convocados todos sus miembros, que fueron muchos. Los agraciados son Hulk Hogan, Scott Hall, Kevin Nash y Sean Waltman. A mí me parece correcto que sólo reciban el honor los miembros que, realmente, tengan relevancia dentro del grupo, aunque la selección de Waltman no me agrada mucho, pues no es tan relevante como otros. Ted DiBiase estuvo en NWO antes que él, pero es cierto que WCW pasó de su participación pronto. También Big Show (The Giant) tuvo un papel importante, pero es cierto que fue y vino en varias ocasiones, tal y como lo hizo Randy Savage. Quizás, el que realmente lo merecía es Eric Bischoff, y parece ser que WWE pensó en otorgarle el honor a él también, y por eso ha sido exaltado en 2021 en solitario. Así las cosas, yo hubiera dado la plaza sólo a los Outsiders y Hogan, porque meter ahí a Waltman es muy arbitrario. El tipo ya tiene dos anillos, y ninguno de ellos es individual.
Vamos a dedicar varios artículos a la NWO, empezando por la formación del grupo. Esta ocurrió en verano del ya lejano 1996. Un día, sin que nadie los esperara, apareció un tipo en ringside que no debía estar ahí. Se trataba de Razor Ramon, uno de los luchadores más importantes de WWF, que se presentaba allí con su verdadero nombre, Scott Hall, como un outsider, como un luchador de WWF que pretendía destruir WCW desde su interior. Obviamente, ya no luchaba en la empresa de Vince, pues Turner estaba pagando cantidades económicas enormes, así que abandonó la promotora en la que se hizo famoso para recalar en la competencia, pero dentro del Kayfabe, era un invasor.
Hoy en día, cuando un luchador deja una empresa, e incluso mucho antes, todo el mundo lo sabe con antelación y detalle, gracias a Internet. Antes de que se haya ido, y por supuesto, antes de su debut en otro sitio, hay múltiples rumores, filtraciones, debates y teorías. Ya no hay lugar para las sorpresas de verdad. Pero, entonces, todo eso sonaba muy raro.
Hall amenazaba a Bischoff, hasta que Sting apareció para defender al director de WCW y comentarista de sus programas. Scott prometió una sorpresa muy grande, y fue grande, literalmente: a su misión se unió otro exWWF, el enorme Kevin Nash, que en la empresa de Vince había luchado con el nombre de Diesel. Mientras McMahon creaba versiones fake de estos dos luchadores en WWF, con los personajes que estos usaban originalmente, Nash y Hall comenzaban a contar la historia de sus vidas.
Hall y Nash, los outsiders, amenazaron a WCW. En The Bash at the Beach, evento veraniego de la compañía, se presentarían junto a un tercer miembro, uno que intentaría dinamitar a la empresa desde dentro. Así, Bischoff convocó a las fuerzas vivas de la misma para plantar cara a la amenaza. Con el héroe Hulk Hogan fuera por su trabajo grabando películas, los seleccionados para defender a WCW fueron Sting, Lex Luger y Macho Man Randy Savage. Los tres llegaron con la cara pintada, para enfrentarse a los Outisders en el main event del evento, al que, en primera instancia, no se presentó ese tercer miembro. La posibilidad de que el traidor fuera uno de los tres defensores estaba en el aire, y aumentó en el momento en que Luger quedó KO tras un Sting Splash de su propio amigo y compañero. Luger tuvo que ser retirado, y el match se convirtió en un 2 v 2, que, en términos de calidad, era muy aburrido, con un Nash dominando, en teoría, por su mayor tamaño, pero sin utilizar este en favor de la historia en ningún momento.
Con fuerza y trampas, Nash y Hall dominan, hasta que en un loco segmento, los cuatro luchadores quedan tendidos, siendo Savage el luchador vigente arriba del ring por parte de los técnicos. Entonces, llega su amigo de toda la vida, Hulk Hogan, ante la alegría del público. Si el lector se fija bien en el vídeo del evento, podrá observar que rodeando la rampa de llegada de Hulk, hay una cantidad de policías enorme. ¿Por qué es necesaria tanta seguridad? Pronto lo sabremos.
Hogan llega al ring, y los Outsiders huyen. En principio, ha venido a salvar a Savage de ellos. Y no obstante, sorprende al mundo entero lanzándose sobre él, y aplicándole un salvaje Leg Drop. Todo el mundo está estupefacto.
Hogan aplica varios Leg Drops, y expulsa al referee. Los Outsiders realizan, entre burlas, en conteo de tres, aunque, legalmente, el combate acaba sin resultado, porque ningún referee oficial ha determinado la victoria de los rudos. Sting y Savage abandonan la arena, con el rabo entre las piernas, mientras otro gran amigo de Hulk, Gene Okerlund, sube al ring para entrevistar al traidor.
Y llevan a cabo una entrevista que tiene lugar entre una enorme lluvia de basura y objetos que caen al ring, con cierto peligro. Ahora es obvia la razón de la presencia policial: frenar el furor del público. Okerlund hace un trabajo genial, tratando a Hogan como un traidor y, casi, un delincuente, mientras este explica los motivos de su histórico turn heel. Hulk habla sobre su carrera, sobre la manera en la que se ha relacionado históricamente con el público, y sobre su hartazgo. Así, declara el nacimiento del Nuevo Orden Mundial, The New World Order, con el futuro de la lucha libre en sus filas, refiriéndose a Nash y Hall.
Hay que tener en cuenta que el término New World Order estaba muy de moda. La Unión Soviética había caído y había nacido un Nuevo Orden Mundial en el que USA era la única gran fuerza que dominaba el planea a placer. Hogan se adueña de este término, para traicionar a la WCW, harto de hacer rico a Ted Turner y a mucha gente, harto de los fanáticos, a los que compara con la basura que ha caído al ring. Sin Hulk Hogan, no existiría la lucha libre, no existirían los fans ni los luchadores de segunda fila que pelean en la empresa y que se creen mejor que él. "Whatcha gonna do when the New Worl Organization runs wild on you?"
Así termina uno de los segmentos más importantes en la historia del wrestling, que incluyó el turn heel del luchador más importante de la historia del wrestling. A pesar de su maldad a la hora de narrar su promo (no muy ensayada, por las tonterías que dice), hay que decir que no fue, la suya y la del equipo una decisión fácil de tomar. Seguramente se especuló mucho con la identidad de ese tercer miembro, y hubo mucha resistencia a convertir a un hombre tan querido en un hombre tan odiado. Pero todo salió bien, como supimos. Seguiremos hablando del tema.
Puntuación: **3/4