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lunes, 14 de octubre de 2019

Shawn Spears vs Cody, AEW All Out 2019




Antes de empezar a ver programas semanales de AEW Dynamite, que ya han llegado a la televisión americana, quería echarle un vistazo a una lucha más del PPV All Out. Se trata del enfrentamiento entre Cody y Shawn Spears.

Ya sabemos que, tras su papel como vicepresidente en AEW y sus últimas luchas ante Dustin Rhodes y Darby Allen, Cody se ha convertido en todo un ídolo. También para mí, que creo que aporta algo que AEW no tiene, que es psicología y lucha de estilo vieja escuela. Está siendo lo mejorcito en los primeros shows de la empresa. Y, en All Out, tiene una nueva lucha, ante otro ex-WWE: Shawn Spears.

Shawn y Cody deben conocerse desde hace muchos años, porque coincidieron en Ohio y Florida, en los territorios de desarrollo de WWE. La carrera de Rhodes funcionó mucho mejor, mientras que Shawn, tras su paso por ECW, acabó pronto en la calle. Sin embargo, volvió a la empresa, construyendo un personaje en NXT de Perfect 10 que conectó con el público, lo que, aún así, no le sirvió para tener un buen papel en el main roster.

AEW, igual que WCW y TNA en el pasado, valora mucho a cualquier ex-WWE, colocándolo en una posición muy alta, sólo por la fama que le dio el paso por la empresa del gran Vince. Así, tras la lucha del vicepresidente frente a Darby, apareció como su gran némesis, pegándole un sillazo en la cabeza que se la partió.

Comenzó así la rivalidad entre Cody y Spears, que tiene un papel muy distinto al que trabajaba en WWE. No sólo es rudo, sino que tiene un nuevo mánager: Tully Blanchard, uno de los miembros de los Four Horsemen, que tuvo una gran rivalidad con el padre de Cody, Dusty Rhodes. Ahora, viene a por su hijo, apoyando a Shawn desde la esquina.

La lucha entre Cody y Spears, de nuevo, es de vieja escuela, aunque realmente tiene poca lucha. Está muy centrada en las interferencias de Tully, y en menor medida, de MJF, que está en la esquina de Cody. Shawn domina tras un gran ataque en la rampa sobre el American Nightmare, pero, por lo general, sus ataques son bastante aleatorios. Es un tipo que me resulta muy poco interesante, en general.

Todo el interés en la lucha está en Tully, que consigue hacer trampas una y otra vez, hasta que llega Arn Anderson, y aplica su Spinebuster legendario sobre Spears. Tully le sigue, confuso, pues eran compañeros como Four Horsemen, y, ya libre de ruido, Cody se lleva la victoria.

Esta no es una gran lucha, pero aporta cosas interesantes al show. El uso de leyendas, en la medida que introduce cultura luchística en la modernidad, siempre me gustará, y aún más si es con hombres a los que ya apenas recuerda nadie. Pero, poco más.

Puntuación: ***

lunes, 30 de enero de 2017

WWE Royal Rumble Match 2017



Tengo que confesar que tenía bastante 'hype' por el Royal Rumble Match de este año. Pobre de mí, que todavía confío en los bookers de WWE.

El evento Royal Rumble no ha estado mal. Las luchas titulares están bien, incluida la del título crucero, para variar. Ya las repasaremos durante los próximos días. Pero hoy voy a hablar del Royal Rumble Match, que es el que estropea la noche, sobre todo teniendo en cuenta que dura una hora, siendo una parte muy importante del PPV.

Royal Rumble es una lucha única. Solo se da una vez al año, y lo que ocurra, para bien o para mal, va a pasar a la historia, necesariamente. Por eso, sería de esperar que hubiera un equipo de guionistas,o bookers, escribiendo una historia interesante, para que la batalla sea recordada como algo grande. Pero no, como pasó en el Rumble de 2015, aquí nadie ha escrito nada, no pasa nada en toda la batalla, no avanzan, casi, rivalidades, ni hay actuaciones individuales especialmente reseñables.

No hay apariciones sorpresa interesantes, tampoco. Eso no es muy malo, porque las grandes estrellas de la batalla ya habían sido anunciadas, con el fin de llenar el AlamoDome de San Antonio. Pero Goldberg, Lesnar y Undertaker cobran mucho por combates reales, lo que significa que podían estar poco tiempo sobre el ring, así que llegan todos al final de la batalla. Mientras tanto, casi nada importa.

Empiezan Big Cass y Chris Jericho, que no hacen... nada. Entran Kalisto, Mojo Rawley, y Jack Gallagher como representante del programa 205, con su paraguas, haciendo un par de cosas divertidas. Luego entra Mark Henry, que tiene una buena reacción del público, ya que es texano, y elimina al crucero.

Posteriormente, entra Braun Strowman, que es lo mejor de todo el Rumble. Recordemos que, previamente, le había costado la lucha titular a Roman Reigns, pero a él no se le ocurre entrar a vengarse. Eso hubiera sido lógico.

Strowman elimina a todo el mundo, menos a Jericho, que es el único que tiene cabeza suficiente como para huir. Henry opone un poco más de resistencia, pero es inútil. Justo después entra Sami Zayn, el gran rival de Braun, que intenta realizar una nueva gesta, sin éxito en primera instancia. Luego llega Big Show, que tiene un buen duelo con Braun, pero sale derrotado, no sin antes dejar KO a Jericho con un puñetazo.

Con el número 10, entra, de NXT, Tye Dillinger, The Perfect 10. Era una entrada un poco obvia. Tye se une a Sami para intentar derrotar a Braun, que es demasiado fuerte. Otra sorpresa obvia es James Ellsworth, que no se atreve a entrar, hasta que sale el siguiente luchador, Ambrose, que le obliga a subir, tan solo para que sea destruido. El siguiente en entrar es Baron Corbin, que aprovecha una Helluva Kick de Zayn sobre Braun para eliminar al monstruo, de una forma un poco fría.

Y aquí muere la lucha. Hasta entonces había estado bien la cosa, pero ahora tenemos una media hora por delante en la que no pasa nada. Empiezan a entrar luchadores, pero ninguno sale fuera. Se amontonan. Kofi Kingston tiene su momento de escapar de la eliminación, agarrándose al poste  exterior del ring. Pero lo más llamativo es la eliminación de New Day por parte de la pareja formada por Sheamus y Cesaro, que justo después son sacados fuera por Chris Jericho.

Siguen entrando luchadores. Randy Orton y Bray Wyatt coinciden. Llega Luke Harper, y les ataca, continuando con la historia de la Familia Wyatt. Está a punto de aplicar un Sister Abigail a su señor, pero se come un RKO, como la mitad del ring.

También sale Dolph Ziggler, que aplica superkicks también a todo el mundo. Aparece Apollo Crews, que se supone que está en rivalidad con Dolph, pero este ni le mira. Luego se pasa la vida por los medios, hablando de lo bueno que es. La gente grita "booring" y "Bullshit", porque aquí no pasa nada.

La cosa se anima cuando llega Brock Lesnar, con el número 26, y asesina al ring completo. Y en el ring hay gente muy importante, como Bray, Orton, Jericho o Rusev. Lesnar elimina a Ambrose y a Ziggler, como si no valieran nada. Como tampoco han hecho nada destacable en toda la batalla, a nadie le importa. No hay ninguna referencia a la rivalidad pasada entre Lesnar y Ambrose. Con el número 27, tenemos la aparición sorpresa de... Enzo Amore. Lesnar le destruye con un clothesline, y le elimina.

Ahora llega Goldberg. Aplica un Spear a Lesnar, y le elimina. A este se le queda cara de tonto, porque le ha hecho lo mismo que en Survivor Series. Gran jugada, y gran preparación de cara a WrestleMania. Como WWE cuenta con pocas apariciones de los dos luchadores, y Goldberg no está en condiciones de luchar mucho, han creado una historia que se adapta perfectamente a esta falta de medios. Es parecido a lo que hizo Steven Spielberg en Tiburón, que podía mostrar poco, y mal, al bicho, lo que  hizo a la película ganar en tensión por el terror a sus contadas apariciones.

Llega Undertaker, y se mira cara a cara con Goldberg. Va a por ChokeSlam, pero se meten Rusev y Corbin, que acaban eliminados. Spear de Goldberg sobre Taker, pero cuando el ex WCW elimina a Harper, el Deadman le echa fuera. Da pena, porque no llega a haber emoción entre los 3 grandes, no hay grandes batallas entre ellos.

Con el número 30 sale Roman Reigns, a quien nadie espera, la verdad. Elimina a Undertaker, cuando este estaba sacando a Zayn. El público no reacciona nada bien a esto, porque teme que otra vez va a ganar Roman. Reigns consigue echar a Jericho y Wyatt del ring, pero no puede con Orton. Randy gana, y va a WrestleMania, lo que significa que su storyline con Bray tendrá el título de por medio.

Por cierto, ni rastro de Seth Rollins, ni de su rivalidad con Triple H. Lo sacaron del Rumble en Raw para... nada.

Puntuación: **1/2 

domingo, 12 de junio de 2016

Andrade Cien Almas vs Tye Dillinger, WWE NXT Takeover The End




Nuevo evento especial de NXT, y de nuevo, un evento redondo, sin nada malo. Lo más malillo es la lucha que comentamos hoy, el debut de La Sombra en WWE, al menos de forma televisada.

Han pasado unos cuantos meses desde que La Sombra dejó el Consejo Mundial de Lucha Libre. Allí, era una de las principales estrellas, y estelarizó la pasada función de Aniversario de la empresa, perdiendo en ese evento la máscara. Después de varios años de éxitos como técnico, formó parte fundamental de los Ingobernables, causando el caos por todos los rings de México. Y también gozaba de gran popularidad en Japón, siendo posiblemente el luchador del Consejo más aplaudido allí.

Pero ha tardado muchos meses en llegar a los eventos televisados de WWE. Y es que, no podía pasar lo mismo que con el Místico, necesitaba entrenamiento para poder competir en Estados Unidos, más allá de las coreografías de México. 

En su combate de debut, en Takeover The End... of the Beginning, el mexicano se enfrentó a Tye Dillinger, un tipo que lleva mil años intentando destacar en WWE, e incluso estuvo en el roster principal, en ECW, como Gavin Spear. 8 años después, sigue intentando encontrar un hueco, pero ahora tiene un personaje definido de verdad, así que tiene más opciones. Y es que, de ECW solo salían tios con gallumbos, que luchaban mejor o peor, pero eran muy poco interesantes.

La lucha en sí no es gran cosa, tan solo tenemos a la Sombra, con su nuevo nombre, Andrade Cien Almas, mostrando algunos de sus vuelos frente a un Dillinger, que se defiende como puede. El de México acaba con el rodillazo en el esquinero que hicieron famoso los Ingobernables. 

Puntuación: **1/2