Una de las cosas más llamativas en la celebración del evento indy All In, es la participación como luchador profesional de Stephen Amell, que seguramente le habrá dado bastante publicidad al producto de Cody Rhodes y los Young Bucks. Pero, ¿es realmente conocido este chico?
Depende del contexto. Desde luego, si te gustan los superhéroes, o las series de televisión, te sonará. Stephen Amell es un actor que se ha hecho famoso por dar vida a Arrow (Flecha Verde), superhéroe arquero, en el universo televisivo de DC. Es protagonista de la serie homónima, y también es un personaje recurrente en series como Flash, Super Girl o DC's Legends of Tomorrow. En su momento, se habló de que podría aparecer en la película de La Liga de la Justicia, pero luego DC y Warner decidieron que las series de televisión y las películas formaran universos distintos, así que no hubo suerte para Amell.
Pero comenzó a hacerse un hueco en Hollywood al aparecer en la última película de Las Tortugas Ninja, haciendo el papel del mítico Casey Jones. No es una gran película, aunque en 2018 participó en un corto llamado Mi Madre, My Father, que ha sido premiado en Cannes. Tiene buena pinta.
Amell es fan del wrestling, y tuvo varias apariciones en WWE, cuando Cody trabajaba en la empresa con el papel de Stardust. Gracias a su interacción en redes sociales, montaron una rivalidad bastante original, muy basada en lo superheróico. Cody creó una especie de joker muy divertido, que se enfrentaría al arquero Arrow.
Pero WWE no se siente segura al meter a famosillos a luchar en un ring sin un gran entrenamiento previo, al menos en un single match en el que el negocio se vea muy expuesto. Eso es lo que rompió el trato con Shaquille O'Neal de cara a su combate con Big Show en Wrestlemania; querían ponerlo en una lucha de equipos. Y eso es lo que hicieron con Arrow, que acabó haciendo tag con el aéreo Neville, para enfrentar a Stardust y el Rey Barrett. La rivalidad tuvo una temática superheróica, una ambientación especial para ello, y las promos de los malos fueron propias de unos supervillanos. Divertido.
Pero la idea de un combate definitivo entre Amell y Stardust no cuajó. No creo que a WWE le interesara demasiado. Pero Cody y el actor hicieron buenas migas, se convirtieron en buenos amigos. Cuando Cody salió de WWE, Amell retomó su ilusión por luchar. Hizo algunas apariciones en Ring of Honor, y fue introducido en el Bullet Club. En Survival of the Fittest 2017, tuvo su segunda lucha profesional, haciendo equipo con Cody, Los Young Bucks y Kenny Omega, para enfrentarse a The Addiction, Flip Gordon y Scorpio Sky. Y, en All In, tenemos su tercera lucha, la primera en singles, y su rival es el veterano Fallen Angel Christopher Daniels.
Tampoco hay una gran historia detrás de este combate. Se vieron las caras en esa lucha por equipos, y tuvieron careos en algún vídeo del canal de Youtube de The Élite, pero poco más. En un vídeo, Amell aseguraba que su primer single match sería el último de Daniels, mientras que este se reía de tales palabras, asegurando que dejaría en ridículo al actor. No hay mucho de ambas amenazas en el combate.
Que, no obstante, no es malo. Amell está muy digno, no comete ningún gran error. Daniels, desde el primer minuto, ataca el estómago del rival, preparando sus planchas y su moonsault. Aunque domina buena parte de la lucha, Amell no se deja humillar, y contraataca. Sus ataques son básicos, pero cuando intenta cosas más arriesgadas, lo hace de forma espectacular. Aplica Coast to Coast, y se lanza con un Flying Elbow sobre Daniels, que estaba en una mesa. Pero todo era una trampa por parte del Fallen Angel, que se aparta. Stephen atraviesa la mesa, poniendo su físico en juego.
Jerry Lynn es el referee especial de este combate. Después de ese movimiento, parece que puede haber un doble count-out, pero el excampeón de la ECW vuelve a introducir a los luchadores en el ring. Mientras Daniels discute con él, Amell está a punto de ganar con un paquetito, pero no lo consigue. El veterano, finalmente, se lleva la victoria mediante un Moonsault.
La lucha no es mala, es bastante correcta. Daniel hace un buen trabajo sobre el estómago del rival, aunque no hay nada específico de su condicion de estrella en la rutina del enfrentamiento. Amell demuestra que no ha venido a pasearse, y que el wrestling el gusta de verdad.
Puntuación: ***