Hay dos combates de Fastlane que quería
ver, sobre todo por las repercusiones que podían tener de cara a
Wrestlemania: John Cena vs Rusev y Daniel Bryan vs Roman Reigns.
Vamos con el primero.
Hay algunas cosas en las que WWE ha
mejorado ultimamente. Una de ellas, es en la forma de presentar a un
luchador como invencible. Brock Lesnar, hoy por hoy, parece
totalmente invencible, como lo parecía en su momento el grupo The
Shield. Y como lo parece el ruso (o búlgaro, en realidad) Rusev,
quien se mantiene imbatido en combates individuales, y quien no ha
sido cubierto nunca por ningún otro luchador.
La empresa ha hecho intentos antes de
instaurar tipos invencibles. Otro Ruso, como Kozlov, estuvo imbatido
durante muchos meses. Pero al final, la empresa se cansaba de ellos,
y solían demostrar que eran bastante malos en el ring. En el caso de
Rusev, gracias a la situación política internacional y la Guerra de
Ucrania, vuelve a ser una buena idea reforzar la figura de un ruso
malvado que odia a Estados Unidos, es el tipo de luchadores que más
odio generan entre los fans.
El personaje de Rusev tiene ciertos
parecidos con Ivan Dragon, el malo de Rocky IV: un ruso patrocinado
por su nación, representado por una mujer malvada, y que busca
humillar a los estados unidos, y demostrar la superioridad de los
rusos. Rusev lo ha demostrado hasta ahora, venciendo a todos los
americanos que han osado hacerle frente. Y no se ha enfrentado a
simples jobbers, ha luchado con tipos de peso, como Jack Swagger,
Mark Henry y Big Show, y los ha derrotado a todos, de la forma que
resulta más humillante para un face, por rendición. O más bien,
quedan KO al ser atrapados por su llave final, la Camel Clutch.
Durante mucho tiempo, se ha preparado a
este luchador para tener una gran rivalidad en Wrestlemania, en la
que, seguramente, sea vencido por un héroe americano que devuelva la
dignidad al país. La duda era sobre quien sería ese héroe, si TheRock, o Hulk Hogan o John Cena. Al final, el elegido ha sido este
último.
Cena ya estuvo en una rivalidad,
digamos, secundaria, en el anterior Wrestlemania, y ahora vuelve a
estar alejado del campeonato mundial. Eso es una prueba de que ha
llegado al estatus en el que no necesita títulos de por medio para
tener grandes rivalidades, como Triple H o Undertaker. En este caso,
el honor de USA está en juego, y la rivalidad empieza en Fastlane.
Rusev ha definido a Cena como el
pasado, como un vejestorio, por la cantidad de años que lleva en la
empresa. Es el turno del ruso. Este, es el primer combate suyo en PPV
que veo. Dicen que ha mejorado mucho últimamente, veremos si es
verdad.
La verdad es que la lucha es muy buena.
Comienza con Rusev dominando la mayor parte del tiempo, con patadas y
golpes al tronco de su rival. Su ataque es bueno para dañar la
espalda y el pecho de Cena, de cara a derrotarle con el Camel Clutch.
Pero esta parte parece la clásica lucha de Cena en la que el rival
le da una buena paliza, e intenta venderla tan bien, que no hace
nada, y se hace bastante aburrido todo.
Pero los ataque de Rusev son buenos, y
la lucha va mejorando al final, cuando Cena comienza a tener buenos
come-backs. Atrapa a Rusev con el cross-face, y con el STF, pero el
Ruso no se rinde. Incluso llega a resistir un Attitude Ajustment.
Cena no puede creerse el poder de Rusev.
Rusev atrapa con su finisher a Cena. Lo
destroza, pero consigue safarse. La distracción de Lana, la rubia
que va con Rusev, permite a este darle un fault a Cena, seguido de
una patada en la cara. En ese momento, le atrapa con otro Camel
Clutch que deja definitivamente KO a Cena, ganando por rendición.
Debe ser la primera vez que John Cena
pierde por rendición, y por eso esta lucha merece estar en un blog
sobre historia del wrestling. Es cierto que no se rinde
explícitamente, pero el KO es bastante humillante, y vale la pena
mencionarlo.
Puntuación: ***1/4