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domingo, 20 de noviembre de 2022

 Antonio Inoki vs Jack Brisco, JWA 08/05/1971




Especial fallecimiento de Antonio Inoki

Continuamos hablando sobre el enorme Antonio Inoki a pocas semanas de su fallecimiento. Estamos desarrollando una pequeña serie especial en la que incluimos luchas suyas que vale la pena ver. Comenzamos hace poco comentando un combate suyo en JWA, la empresa en la que debutó, fundada por el legendario Rikidozan. Antes de pasar a comentar algunas de sus aventuras en New Japan, la empresa que Inoki fundó en 1972 y que, desde entonces, es la más importante de Japón, vamos a mirar otra lucha propia de su primera etapa. Y es que en New Japan destacan muchos trabajos suyos que han pasado a la historia por motivos comerciales, como su lucha ante Muhammad Ali, o su enfrentamiento de samuráis ante Saito. Pero en JWA la pureza luchística era absoluta, para bien o para mal, de tal manera que es complicado, a veces, diferenciar las luchas que se daban en esa empresa, de una real, así que creo que el especial debe tener al menos dos referencias a JWA. Si en el primer artículo lo vimos luchar contra el Campeón Mundial de la NWA, Dory Funk Jr, hoy observamos un match suyo ante otro gaijin de primer nivel: Jack Brisco, con el que luchó en 1971.

Ya sabemos que, en esa época, NWA controlaba el Campeonato Mundial de Peso Pesado, e impedía a las empresas desarrollar uno propio a través de acciones mafiosas. Eso también implicaba que su campeón tenía que recorrer Estados Unidos luchando en todas las empresas asociadas, e incluso el extranjero. Más le valía, pues promotoras rebeldes como WWWF o asociaciones alternativas como IWA crearon sus propios títulos y amenazaban su soberanía. Otros países con tradición luchística, como Japón, México y Puerto Rico, vieron luchar a diversos campeones de la NWA. El problema es que las luchas siempre estaban cohibidas: el título no iba a ir a manos de gente que no controlara la NWA, y las empresas locales no querían que sus héroes fueran derrotados por el invasor. Por eso mismo, ocurrieron cambios de título que no fueron reconocidos por los dueños de la correa. Por eso, la alianza tuvo que crear otros muchos campeonatos que acabarían quedándose por siempre en otras empresas y en otros países, para conseguir que no se crearan títulos propios. Así ocurrió con el NWA United National Title, un título principalmente disputado en Japón, que se quedó en All Japan, y que acabó formando parte de la unificación que dio paso al Triple Crown Championship, uno de los títulos más importantes de esta industria. La correa del NWA United National Title se utilizó como cinturón del Triple Crown Championship hasta 2013. Pues bien, en 1971, esta correa estaba en la cintura de Antonio Inoki.

Antonio ganó el campeonato en un evento de la NWA en Los Ángeles, y así, lo llevó a Japón por primera vez. Lo tuvo durante un año, hasta que fue despedido de JWA, por intentar comprar la empresa. Ya sabemos lo que pasó después: fundó su propia compañía. Así pues, sólo pudo realizar unas pocas defensas. Una de ellas fue la que comentamos frente a Brisco, el 5 de agosto de 1971, en el Tag número 12 de Summer Big Series, en Nagoya, ante unas 7000 personas. Porque la lucha libre había crecido mucho en Japón durante los años 60, causando una gran ilusión entre ese cansado pueblo que reconstruía su nación trabajando sin parar después del desastre de la Segunda Guerra Mundial. Y esa fama se repartía, en gran medida, entre dos hombres: Giant Baba y Antonio Inoki, aquellos que seguirían con la tradición luchística en el país. Porque, después de la marcha de ambos de JWA, la empresa apenas duró un año en circulación. Cerró en 1973.

Pero vamos con la lucha entre Inoki y Brisco. Esta es más corta que la comentada anteriormente; "sólo" dura una media hora. No es, el disputado, un Campeonato Mundial, así que no es requerida tanta duración. Mas la pelea está muy bien bookeada; a mí me gusta más. Es al mejor de tres caídas.

Como suele ocurrir con las luchas titulares de esta época, esta es muy técnica. La primera caída ocurre principalmente a ras de lona. Ambos luchadores llavean y se levantan en muy contadas ocasiones. Asimismo aprovechan cualquier oportunidad para poner la espalda del rival plana. Inoki no logra nada usando sus brazos para aplicar candados, así que pasa a aplicarlos con las piernas. La fuerza de sus extremidades inferiores es por todos conocida, y eso es algo propio también de Baba. Parece ser que la escuela de Rikidozan preparaba bien esa zona, aunque coincide que ambos atletas tenían piernas largas y fornidas. Como sea, el caso es que Brisco aprende la lección, y pasa a atacar la pierna de su rival con precisión.

En la mayoría de los casos, las luchas de esta época, efectivamente, gozan de un gran nivel de llaveo, aunque muchas veces carecen de esa búsqueda de debilidades concretas que a mí tanto me gusta. En este caso, no es búsqueda de debilidad, sino debilitamiento de fortaleza. Jack ataca de forma muy creíble la pierna del japonés, provocándole una cojera evidente. Ya no podrá volver a aplicar sus duros candados, al menos durante un rato. Aplica Figura 4, para expectación del respetable, pero Inoki llega rápidamente a la cuerda. La lucha continúa; Antonio aplica un Boston Crab con el que daña la espalda de su oponente. Intenta aprovechar tal dolor para aplicar su poderoso Manji Gatame, pero, inteligentemente, el americano se revuelve y pega un cabezazo hacia atrás al campeón para sorprenderle durante un momento y conseguir un veloz conteo de 3. Se lleva la primera caída después de 21 minutos, y aunque el final puede resultar confuso, es bastante verosímil.

Durante la segunda caída, el ídolo japonés se deshace de su rival, a pesar de los potentes candados y ataques a la cabeza de este. Con sus piernas recuperadas, llavea el brazo de Brisco, inhabilitándolo, y no lo suelta de ninguna manera. Está atrapado durante varios minutos. Cuando consigue soltarse y va a luchar de pié, se encuentra con la apisonadora de Inoki, un luchador adelantado a su tiempo. Brisco se zafa de su veloz rana, pero por otro lado se come un perfecto German Suplex que no ve venir, para perder la segunda caída. El golpe lo deja muy tocado, y en la tercera caída, no tiene ninguna oportunidad. Emocionado, Antonio le golpea en el cuello con gran violencia. Aplica Body Slam, y acaba la lucha con su Manji Gatame. Victoria para él.

Hay quien critica a esta lucha, porque la última caída es, básicamente, un squash. A mí me parece perfecto que lo sea. Tiene sentido: da crédito a lo ocurrido en la caída anterior, y no lo desperdicia. Asimismo, otorga credibilidad a los grandes golpes del wrestling. Vender mucho un gran ataque es algo bueno. Gran lucha, en mi opinión.

Puntuación: ****3/4


lunes, 14 de noviembre de 2022

Dory Funk Jr. vs Antonio Inoki, JWA 8/2/1970


Especial fallecimiento de Antonio Inoki

Hace poco conocimos la fatal noticia de la muerte de Antonio Inoki, una de las figuras más relevantes de la historia del wrestling. Arte-marcialista, luchador, promotor y político, su leyenda apenas tiene igual en el planeta entero, y desde luego no la tiene en Japón. Antonio Inoki, fundador de New Japan Pro Wrestling, merece unos pocos posts en este blog.

En 2019, Antonio Inoki abandonó su carrera política y promotora. Era miembro de la cámara de consejeros de Japón, y dueño de Inoki Genome Federation, una promotora de estilo shoot que mezclaba artes marciales con wrestling. Tenía problemas cardíacos. Sufría una Amiloidosis que acabó con su vida el 1 de octubre de 2022, a la edad de 79 años. Descanse en paz.

Así pues, intentaremos comentar una serie de luchas propias de su carrera. Lo haremos en cierto orden cronológico, de tal manera que podamos ir exponiendo datos biográficos de forma progresiva, en lugar de hacerlo de golpe.

Antonio nació en 1943, durante la Segunda Guerra Mundial, que costó la vida de su padre. No lo hizo con ese nombre, sino con el de Kanji; usó el nombre artístico "Antonio" en homenaje a Antonino Rocca, una gran leyenda de los años 40 y 50. En el 57, Inoki emigró al Brasil junto con su familia, y allí se convirtió en un gran atleta, ganando campeonatos de peso, disco y jabalina. Conoció a Rikidozan, el introductor del wrestling en Japón, un exluchador de sumo con gran conocimiento de artes marciales que lo acogió en su dojo junto a su gran compañero y rival, Giant Baba. Ambos lucharon en la empresa de Rikidozan, la Japan Pro Wrestling Alliance, que causó sensación en el país nipón. Sin embargo, Riki falleció en 1963 después de una pelea de bar con un yakuza, así que el sueño, poco a poco, se fue desmoronando. En 1972, la lucha libre japonesa cambió de manos, cuando Giant Baba fundó la All Japan Pro Wrestling, y Antonio Inoki fundo la New Japan Pro Wrestling. Esas dos empresas dominarían el wrestling en Japón durante las décadas siguientes, y siguen hoy en día en activo.

Me gustaría, pues, empezar esta serie con una lucha de Inoki en JWA. El gaijin Dory Funk Jr se lo puso complicado en varias ocasiones, y por eso resulta un rival interesante de cara a la redacción de este especial. La lucha más conocida entre ambos tuvo lugar en 1969, mas, que yo sepa, no se puede encontrar en Internet. Tan sólo está disponible un highlight que Dory subió a su web para promocionar su escuela de wrestling. Sin embargo, en Cagematch hay varios comentarios y ratings de usuarios, por lo que supongo que debe estar en algún sitio. Si doy con ella antes del fin de este especial, la comentaré. Hoy me "conformo" con el rematch que tuvieron unos meses después, en agosto del 70.

Este match se considera inferior al anterior, pero a mí me gusta. Es la clásica lucha shoot de la época en la que hay un empate por fin de tiempo reglamentario (60 minutos), puesto que no se desea hacer perder a ninguno de los dos contendientes. Un resultado salomónico con tintes políticos que es un poco frustrante, pero que tiene lógica para el negocio. Dory es el Campeón Mundial de la NWA, el título más importante del mundo, y no puede perderlo. Pero la JWA tampoco puede hacer perder a una de sus grandes estrellas. Hay que decir que la lucha original de diciembre del 69 acabó igual.

Como todas las peleas titulares, esta es al mejor de tres caídas. En la primera caída presenciamos un enfrentamiento muy técnico, a ras de lona, en el que ambos wrestlers aplican buenas llaves y candados. Dory, como Gaijin, utiliza algunos trucos fraudulentos. Por lo demás, el público es respetuoso en exceso con el match, pues en esta época están acostumbrados a presenciar esto con tranquilidad y estudio, dado que no hay hueco para las grandes sorpresas. Este deporte no era, entonces, así.

Como digo, esta era una modalidad, en aquel tiempo, en la que primaba el conocimiento. Los luchadores utilizan el cuerpo del contrario de manera hábil para poner su espalda plana, y poder llevarse la victoria. Muchos candados y crucetas acaban así: en nearfalls. Nadie se rinde ni se deja cubrir. Dory sabe que el tiempo está de su parte, y por eso saca a su oponente del ring en ocasiones: un nuevo empate le permitirá mantener el cinturón en su cintura.

Cuando las cosas se calientan y los luchadores van a los puños, tiene que huir: en un mano a mano no tiene nada que hacer contra la bestia japonesa. Este pega demasiado fuerte. Después de sus puñetazos, Dory consigue revertir sus candados en un Suplex. Con el segundo, se lleva la primera caída.

La segunda es más corta. Inoki atrapa a Funk con sus poderosas piernas, y ambos tienen un enfrentamiento encarnizado en el suelo. Dory escapa e intenta recrear su victoria de la primera caída, con Suplexs, pero Inoki ha aprendido la lección. Los reversa, y se lleva la victoria con uno alemán más poderoso. Empate.

La cosa se decide en la tercera caída, si bien no hay decisión: la hora se termina sin que nadie gane. El público se ha animado un poco con el punto ganado por Antonio, y ahora, se pone nervioso ante la llegada del minuto final.  Antonio vuelve a usar las piernas, ahora buscando el cuello del americano. Y este sigue usando trucos ilegales. Pero nadie remata. Dory sigue perdiendo mucho tiempo en ringside ante la indignación general, y sobrevive a la Figura 4, que por la reacción de la gente, ya debía ser un finisher mortal. Después de muchas llaves y mucho agotamiento, llegan los puñetazos y los Suplexs. Hay mucha lucha en ringside, y muchos nearfalls. No hay manera de que nadie gane, así que llega el final. La gente lo acepta, pero tenía la esperanza de ver a su hombre ser Campeón Mundial.

Muy buena lucha, aunque le faltan algunos elementos de tensión propios de este tipo de combates. Quizás su mayor handicap es el público, y el ringside: Terry acompaña a su hermano Dory y no tiene una presencia lo suficientemente insultante. Por lo que he leído, en su anterior combate, estaban ahí Dory Sr y Harley Race, y eso es otro nivel.

Puntuación: ****1/2

lunes, 15 de abril de 2019

Giant Baba vs The Destroyer, JWA 05/03/1969




Seguimos con el especial sobre The Destroyer, increíble luchador enmascarado que falleció en 2019. Hoy vamos a comentar una de las rivalidades más importantes en su carrera: la que mantuvo con Giant Baba.

En el anterior post del especial, hablamos de la llegada de The Destroyer a Japón, y de su rivalidad con el padre del puroresu, Rikidozan. Pero ya dijimos que el fundador de la JWA falleció a finales de 1963, pocos días después de enfrentarse al enmascarado, tras una pelea en un bar con un yakuza. Como sabemos, en los 70, dos de las grandes estrellas de la JWA, Giant Baba y Antonio Inoki, fundaron sus propias empresas. Baba, de hecho, fundó All Japan Pro Wrestling, en colaboración con los hijos de Rikidozan. Por eso, JWA había perdido su fuerza, a pesar de que, en sus primeros años, causaba locura en Japón. En el 73, cerró las puertas.

Pero, en esos últimos 9 años de vida tras la muerte de su fundador, hubo grandes luchas, porque tanto Baba como Inoki siguieron dando peleas al nivel de su maestro. El gigante, en concreto, ocupó su lugar en primera instancia, siendo el protagonista principal de esa era.

Baba conocía bien al Destroyer. Había luchado un tiempo en Estados Unidos, donde cosechó buenos resultados. Aunque en la costa este luchaba como face, gracias a su habilidad a ras de lona, por supuesto, en New York, era un gigante extranjero que llegaba para destruir a los héroes americanos. Ese ha sido siempre el wrestling que ha gustado a las 4 generaciones de McMahons que se han dedicado a esto. De esta manera, Baba se enfrentó a Buddy Rogers, a Bruno Sammartino en el Garden, y a The Destroyer.

Cuando se convirtió en la estrella de JWA y volvió a trabajar a tiempo completo en Japón, Baba invitó a estos rivales para que lucharan con él, ahora, en un estilo más shoot. Ya vimos en su día su gran lucha con Bruno Sammartino en el país nipón, que es la mejor lucha del italiano que se puede encontrar. Y también se vio las caras con Destroyer, el rival de su maestro, con el que dio algunas de las mejores luchas de la historia del wrestling.

Destroyer es un gran luchador técnico, pero su personaje es más llamativo aún. Protesta y lloriquea mucho, en una lucha que tiene un estilo shoot, con mucho llaveo. The Destroyer ataca los brazos del gigante, y este, las piernas de su rival. Hay intentos de Figura 4 del invasor, Ankle Lock del japonés, y buenas palancas al brazo por parte de un Destroyer que ya empieza a usar las cuerdas a su favor.

La cosa sigue así durante muchísimo tiempo. Baba usa su STF, gran técnica de rendición del estilo shoot, así como medios cangrejos. La primera caída de esta batalla es pura técnica, y también es eterna. The Destroyer está ya desesperado, y busca hacer trampas.

Aplica un piquete al ojo de Baba, y utiliza un objeto que tiene escondido en el bañador. Baba vuelve a lleva la lucha a la lona, y empieza a aplicar sus castigos con las piernas. Gracias a la longitud y fortaleza de estas, consigue cerrar muy buenos candados a cabeza y cuerpo.

Destroyer tiene un gran aguante. Recibe mucho castigo. Dadas sus trampas, Baba se enfada, y le pega hachazos en la cabeza, tapándole la cara con la máscara, de tal manera que parece que se va a ahogar. Pero aún así, el americano sigue aguantando las llaves con las piernas del japonés.

Destroyer se esconde el arma en la máscara, y le da un cabezazo a Giant, haciéndole mucho daño. Repite la acción muchas veces, sin que el referee se percate. Es un objeto muy pequeño, pero duele. 

El público se da cuenta de las trampas que hace, pero cada vez que el referee lo comprueba, ya se ha escondido el arma en el bañador. La sangre brota de la frente de Baba que, enloquecido, se lanza sobre su oponente, golpeándolo con sus chops sin parar. Con las rodillas, le atrapa, y le pone la espalda plana. Así, se lleva la primera caída, después de mucho tiempo de combate. 

Destroyer tiene en su esquina a un montón de vaqueros, que intentan protestar y darle a él la victoria, por algún extraño motivo. Por supuesto, el referee pasa de ellos. La verdad es que vestir a los americanos de vaqueros en japón es igual que vestir a los japoneses de karatekas o sumos en Estados Unidos. Es igual de racista, pero tiene gracia. 

En la segunda caída, Destroyer va a morderle la cabeza al rival. Quiere aprovechar su contusión, pero el gigante se lanza como un loco a destrozarle la pierna, para ganarle con un medio cangrejo. Beyer intenta hacer lo propio, para derrotarle vía Figura 4, pero fracasa miserablemente. Cuando Baba falla una dropkick, Beyer vuelve a usar la técnica de esconderse un arma en la frente de la máscara, atacando con cabezazos al luchador local. Se lanza con un rodillazo sobre la frente de Giant, pero la cuenta no llega a tres. Los luchadores chocan, y quedan tendidos en el suelo. El reloj de acerca a la hora limite.

Destroyer ataca la pierna del gigante sin parar, y este ahora parece muy dañado. Al fin, consigue aplicar la Figura 4, y la campana suena. Sus amigos le levantan el brazo de nuevo, pensando que ha ganado por rendición, pero lo que ocurre es que el tiempo límite ha llegado. El referee le levanta el brazo de Baba, que es el que ha ganado la primera caída. Este, cojo y con la cabeza partida, se va con el título de campeón, para enfado de los vaqueros.

Esta lucha es realmente extraordinaria. Cosas como esta son imposibles en el wrestling moderno. Hasta las 5 estrellas se le quedan cortas, pero ya sabemos que es el límite físico que se le puede dar a un combate. Una hora de técnica, trampas y drama.

Puntuación: *****

sábado, 6 de abril de 2019

The Destroyer vs Rikidozan, JWA 02/12/1963




El pasado 7 de marzo de 2019, falleció Dick Beyer, conocido en el mundo del wrestling como The Destroyer. Contaba con 88 años de edad, de lo que se deduce que su muerte ocurrió por causas naturales. Descanse en paz.

Destroyer es un luchador de vieja escuela, muy antiguo, por lo que habrá una importante parte de los lectores que no lo conozcan, o que, habiendo escuchado hablar de él, nunca haya visto una lucha completa suya. Pero, a pesar de que no se encuentre, hoy en día, en boca de todos, es un luchador muy importante en la historia de este deporte, y muy bueno.

Desde luego, merece que le hagamos un especial. Dado que tenemos millones de cosas pendientes de las que hablar, estamos haciendo especiales de este tipo con, tan sólo, tres luchas. Merecería más, y es difícil quedarse, sólo, con tres combates suyos. Pero esperamos que sea suficiente para estimar su carrera.

A principios de 2018, más o menos, un año antes de su fallecimiento, The Destroyer recibió un premio, otorgado por el gobierno de Japón. Se trata de la medalla del Sol Naciente, The Order of the Rising Sun, creada por el Emperador Meiji en 1875, la primera condecoración  nacional  otorgada por el gobierno del país. El premio fue dado al luchador por "una vida dedicada a promover la buena voluntad y lo intercambios culturales entre Japón y Estados Unidos.

Y, es que, Beyer es un luchador americano, pero consiguió transcender hasta el infinito en Japón. Aunque empezó a luchar en América en la década de los 50, no fue hasta 1962 cuando empezó a usar máscara, algo que le definió, y le diferenció claramente del resto.

Beyer fue baby face durante sus primeros años como luchador, pero cuando se puso la máscara y empezó a actuar como heel, destacó a ojos de todos. Era un luchador que poseía tanto técnica, como físico y personalidad, y, además, usaba una máscara atroz, que distorsionaba y exageraba sus rasgos. Lo tenía todo para ser una estrella.

Destroyer se hacía llamar a sí mismo "The Sensational Intelligent Destroyer", presumiendo, así, de sus estudios universitarios, y sus triunfos como deportista. Empezó a destacar en Los Ángeles, con una buena rivalidad  frente a Freddie Blassie, quien le descubrió, y se hizo muy amigo suyo. Y allí conoció también a Rikidozan.

Rikidozan es conocido por ser el padre del puroresu. Introdujo el wrestling en Japón, y creó la JWA, una promotora de lucha libre, cuyas funciones se retransmitían por televisión, y que sumaban decenas de millones de telespectadores. Por desgracia, falleció prematuramente a finales de 1963, lo que provocó, tiempo después, el fin de JWA. Dos de sus principales alumnos, Giant Baba y Antonio Inoki, continuaron con su labor, al crear la All Japan Pro Wrestling, y la New Japan Pro Wrestling, respectivamente.

The Destroyer y Rikidozan protagonizaron una de las luchas más importantes en la historia del wrestling. El 24 de mayo de 1963, se enfrentaron, con el WWA World Heavyweight Championship en juego. Esta lucha fue emitida por el Channel4 de NTV, marcando un 64% de TV Rating, lo que supone más de 70 millones de espectadores, siendo, como comentaba Dave Meltzer hace unos meses, el combate de wrestling más visto de la historia.

The Destroyer y Rikidozan lucharon durante 60 minutos, hasta llegar al límite de tiempo. No he podido encontrar esta lucha en Internet, pero sí que he visto otra de diciembre del mismo año, ocurrida pocos días antes del fallecimiento del coreano. No es tan larga ni, posiblemente, tan buena, pero está muy bien. Es al mejor de tres caídas.

Demuestra perfectamente el tipo de rudo que era Destroyer. Domina, prácticamente, todo el combate, con llaveos y headlocks. Pero, sobre todo, protesta y gesticula. Es un malencarado, se pelea con el referee, y se pelea con el público.

En ningún momento, deja que Rikidozan le ataque. Cada vez que lo intenta, huye a ringside. Se aprovecha de las cuerdas, de forma tramposa, para desesperación de los aficionados. De esa manera, colocando la pierna sobre una cuerda, consigue llevar a cabo la cuenta de tres. 

En la segunda caída, la cosa sigue igual. El Demonio Blanco Enmascarado sigue haciendo de las suyas, pero Rikidozan consigue conectar un chop tremendo que lo hunde en la miseria. El coreano se lleva la caída, y el americano tarda varios minutos en poder levantarse para seguir con la contienda. Le ha dolido mucho ese golpe.

La tercera parte de la batalla continúa con la línea mantenida anteriormente. The Destroyer aumenta su castigo sobre las piernas del rival, preparando la llegada de su llave definitiva, la Figura 4. Pero, esta vez, lo hace pegado a las cuerdas, aumentando el cabreo de referee y afición. Las utiliza siempre para ayudarse en las llaves y conteos, y se niega a soltar cuando la autoridad se lo exige. Muchas veces, suelta el agarre con los brazos, pero sigue apretando con las piernas. El referee protesta, y se se defiende gritando "Le he soltado", aunque el árbitro no entiende inglés.

Cuando Beyer intenta cerrar su Figura 4, Rikidozan se impulsa con las piernas para lanzarle fuera del ring, por encima de la tercera. Ahí, brawlean como locos, mientras la cuenta de 20 avanza. Rikidozan aplica un fortuito Belly to Belly Súplex que deja al americano en el suelo. Él sube al ring, justo antes de que la cuenta llegue a su fin, para conseguir la victoria y mantenerse como campeón del NWA International Heavyweight Championship. Por supuesto, fue su última defensa del campeonato, aunque los ataques de Destroyer tras la contienda auguraban que la rivalidad continuaría.

No fue así, por el fallecimiento de Riki, ocurrido en circunstancias realmente extrañas. Parece ser que fue a causa de una pelea en un bar, en la que recibió una puñalada. El luchador de origen coreano fue llevado al hospital, donde se le salvó la vida, pero la herida se abrió, pocos días después, causándole su fallecimiento definitivo a causa de una peritonitis el 15 de diciembre de 1963. 

El autor del ataque, Katsuji Murata, fue encarcelado por asesinato. Se dice que era miembro de la Yakuza, y que asestó la puñalada tras recibir una buena paliza por parte del luchador profesional. Como suele ocurrir con los grandes duelos entre samuráis a lo largo de la historia, es probable que esta historia haya sido muy exagerada.

La lucha es realmente buena, con un trabajo sensacional de rudeza y técnica por parte del enmascarado. Como veremos en siguientes posts, este continuaría con su carrera en Japón, llegando a instalarse en el país, y a convertirse en una estrella de la televisión, apareciendo en programas y series.

Puntuación: ****1/2

sábado, 2 de junio de 2018

Bruno Sammartino vs Giant Baba, JWA 07/03/1967




El pasado 18 de abril de 2018, falleció el famoso Bruno Sammartino, uno de los luchadores más importantes en la historia del wrestling. Durante décadas, fue conocido como La Leyenda Viviente. Por desgracia, a la edad de 82 años, ha dejado de hacer honor a ese apodo.

Hemos hablado sobre Bruno en varias ocasiones. Últimamente han fallecido varios luchadores que coincidieron con él en el ring. Y, por supuesto, pelear contra Sammartino en el Madison Square Garden por el Campeonato Mundial de la WWWF siempre será uno de los momentos más importantes en la carrera de un luchador. Ahora, tras su fallecimiento, llevaremos a cabo un especial en su honor, revisando al menos 5 luchas de su carrera.

Uno de los elementos a favor del éxito de Sammartino entre el público americano es su historia personal. Nacido en 1935 en Italia, huyó a Estados Unidos junto a sus padres y sus 6 hermanos, tras la ocupación de los Nazis de su ciudad natal, Pizzoferrato. Aunque Italia era aliada de Alemania en la Segunda Guerra Mundial, en un momento dado de la misma, ante el empuje aliado en el frente africano, y la incapacidad de los italianos de derrotar a sus vecinos griegos, la presencia de soldados germanos en el país fue más que habitual.

La carrera como luchador profesional de Bruno empezó en 1959, y ya en el 60, tuvo su primer combate en el Madison Square Garden. Durante su carrera, sería famoso por ser el gran campeón de la WWWF, y por defender el título en el edificio de la Gran Manzana en decenas de ocasiones. Fue el primer luchador en tener el Campeonato Mundial de la WWWF en dos ocasiones.

En enero de 1963, Buddy Rogers derrotó al Campeón Mundial de la NWA, Lou Thesz, pero su campeonato no fue reconocido. Vince McMahon Sr acabó separando el destino de su empresa de la alianza nacional, y creo un título propio. Aunque la WWWF empezó a hablar de Rogers como campeón en enero, sus libros oficiales no lo reconocen hasta unos meses después. El título nació, según WWE, el 25 abril de 1963. El primer campeón fue Rogers, al que se le dio por haber ganado un torneo en Brasil que nunca existió. En cualquier caso, 22 días después, fue derrotado por Sammartino en el Madison Square Garden.

Sammartino sostuvo el título hasta enero de 1971. Fue campeón durante 2803 días, o sea, casi 8 años. Es el mayor reinado de la historia de la empresa, y nunca volverá a haber nada parecido. Mucho tendría que cambiar el wrestling para que pasara de nuevo. Y perdió el título porque quiso tomarse un descanso. Daba tanto dinero, que WWWF no estaba interesada en cambiar de campeón.

Así, en enero de 1971, fue derrotado por Ivan Koloff, que sería un campeón de transición, dejando la correa en manos de Pedro Morales 3 semanas después. Sin embargo, Bruno volvió a aceptar el puesto de campeón de la empresa un par de años más tarde, coronándose el 10 de diciembre del 73. Su rival fue el siguiente campeón rudo de transición, Stan Stasiak. Este segundo reinado de Sammartino duró 1237 días, o 3 años y medio. De él, se dice que tiene el récord de haber llenado el Madison Square Garden en 187 ocasiones, en las que él estuvo en el main event.  En realidad, este dato es exagerado, y algunos historiadores afirma que eso no ocurrió más de 50 veces. Aún así, teniendo en cuenta que el MSG tiene una capacidad de más de 20.000 espectadores, aunque la mayoría de los llenos no fueran absolutos, que estuvieran más o menos cerca de serlo ya es un gran dato.

Después de abandonar la lucha por el título de la WWWF, Samartino tuvo varias rivalidades buenas, destacando aquella que sostuvo con Larry Zbyszko. También tuvo la oportunidad de estar en las primeras ediciones de WrestleMania, aunque con un rol muy secundario. Ya se acercaba a los 50 años de edad. Intentó consolidar a su hijo, David Sammartino, como estrella, aunque en esa tarea no tuvo mucho éxito.

Posteriormente, Sammartino tuvo problemas con Vince Jr. Criticó su producto, y se mantuvo alejado de la empresa durante décadas, hasta que en 2013 hizo las paces con Vince, gracias al trabajo de Triple H, y acabó siendo inducido al Salón de la Fama de WWE. Era vergonzoso que uno de los luchadores más importantes en la historia de la empresa no estuviera ahí. Me alegro mucho de que entrara antes de fallecer, hubiera sido muy penoso que no lo hiciera. Sammartino tuvo una estatua de bronce en su honor, y pudo aparecer, al fin, en videojuegos de WWE 2K. Tras su fallecimiento, WWE realizó un homenaje en su honor en el siguiente programa de RAW.

La lucha con la que empezamos este especial no es muy famosa. Pero es de las más antiguas que se pueden encontrar. Pero, cuidado. Es una lucha de una hora, en Japón, del año 1967, entre Bruno Sammartino y Giant Baba. Es un visionado tan solo apto para los frikis muy frikis del wrestling.

No es fácil encontrar material tan antiguo en USA, y mucho menos en México. Pero en Japón, durante los 60 y 70, las cadenas nacionales transmitían wrestling con regularidad, y con bastante calidad. Gracias a eso, podemos ver luchas old school muy interesantes. Este combate pertenece a la empresa JWA, que venía a ser la NWA japonesa. Fundada por el legendario Rikidozan, para finales de los 60, tenía dos grandes estrellas que sobresalían sobre el resto: Antonio Inoki y Giant Baba. Estos dos luchadores se harían tan famosos y ricos, que pudieron fundar sus propias federaciones en el año 72. Inoki fundó la New Japan Pro Wrestling, mientras que Baba creó la All Japan Pro Wrestling. JWA no resistió mucho después de eso.

En el año 1967, Giant Baba era Campeón Mundial de la JWA, y Bruno Sammartino era Campeón Mundial de la WWWF. Y se vieron las caras en Japón, en un Dream Match en toda regla. Baba llegaría a ser el primer campeón japonés de la NWA, y también tuvo su oportunidad de luchar por el título de los McMahon. No es un gran spoiler decir que no lo ganó. Pero, ¿Qué paso en ese combate? Vamos a comentarlo. La lucha es al mejor de tres caídas.

La lucha es fascinante. Estamos en el año 67. Todo es muy lento, todo es muy old school, pero está muy bien hecho. No hay prisa ninguna, eso sí. Era muy normal en esos tiempos que las luchas duraran una hora. Durante toda la primera caída, Baba utiliza palancas al brazo sobre Bruno. Este no se rinde ni loco. Minutos y minutos de castigo, hasta que Baba se da cuenta de que no va a ganar por ahí, y se lanza al ataque con hachazos y chops de esos suyos, asesinos. Recordemos que Ric Flair no había empezado a luchar todavía. El aumento de velocidad es tan repentino, y los golpes tan fuertes, que Sammartino queda KO y pierde el primer envite.

En la segunda caída, Baba intenta comenzar de nuevo con sus palancas, pero es sorprendido por el italiano. Bruno es ahora el que ataca, con una Nelson muy muy ajustada, y muy asfixiante. Bruno es muy fornido, pero el gigante es mucho más grande. El Campeón de la WWWF ataca también con palancas al brazo durante muchos minutos. Pero tampoco parece probable que el japonés vaya a rendirse. Finalmente, Bruno pasa al ataque también con gran violencia. Cuando Baba intenta contraatacar con un Body Slam, su rival le cae encima, y la cuenta llega a tres. Shohei intenta quitarse al italiano de encima, pero no lo consigue. Nos vamos a la tercera caída.

Esta es totalmente distinta. Es una batalla tremendamente violenta, y stiff. Es un combate muy moderno, en realidad. Es una lucha de hace 50 años, pero estos golpes son propios de la actualidad. Y es que, los dos están desesperados por ganar. Las dos caídas previas han durado tanto, que el límite de tiempo se acerca poco a poco. Y se frustran, porque ninguno de los dos da su brazo a torcer. Los hachazos de Baba le destrozan la cabeza a Bruno, y este le atrapa muchas veces con su Bear Hug. Incluso ambos tienen que hacerlo a veces desde el suelo, porque casi se arrastran por el ring. Pero el tiempo límite se agota, sin que logremos saber quién es el mejor, si el campeón americano, o el campeón japonés. Y creo que ese final apoya la historia que se está contando, aunque sea menos espectacular.

Puntuación: *****