Hace un par de meses, tuvieron lugar un par de eventos de lucha libre en los que, por pura casualidad, ocurrió algo muy similar. Tanto AEW como WWE impulsaron una gran estrella hasta el triunfo en un PPV, y en ambos casos, esta estrella acabó lesionada, quedando su push frenado por el momento. El 29 de mayo de 2022, CM Punk derrotó a Adam Page en AEW Double or Nothing 2022, pero en el siguiente show de la empresa, el 1 de junio, se lesionó. Unos días después, Cody Rhodes, ex-vicepresidente de la propia AEW, ya de regreso en WWE, estelarizó el PPV Hell in a Cell, derrotando a Seth Rollins en el combate principal de la noche, dentro de una Hell in a Cell, pero lo hizo con una lesión más que obvia que lo alejará de los cuadriláteros durante muchos meses. Veremos ambos combates en el blog.
Ambos, en realidad, tienen que ver con el vestuario de AEW. Porque de él se ha dicho muchas veces que es un lugar idílico, que esta empresa sí escucha a los luchadores y que hay más espacio en ella para la creatividad. Pero esto es así mientras hay pocos luchadores y todos reciben lo que quieren. Cuantas más estrellas se juntan, más egos y discrepancias creativas nacen. Ya vimos lo que ocurrió en WCW, empresa que fue consumida por el poder de una serie de hombres a los que no se le podía toser detrás de las cámaras (y por tanto, tampoco delante). Por lo pronto, Cody salió de la compañía, a pesar de ser uno de sus fundadores y pieza clave de los primeros años de la misma.
En 2021, la compañía de los Khan cumplió uno de los principales sueños de los fans del wrestling, que era traer de vuelta a CM Punk. Punk es un luchador fantástico, y en su primer año en la compañía, se ha dedicado a dar buenas luchas contra cualquiera, lo que tiene su parte positiva, y su parte negativa. Pero en lo relativo a su lado humano, su nivel siempre ha sido más bajo. Es una persona un ego enorme, que sufre una gran frustración hacia todo lo que no sea su protagonismo, y que se pasa la vida criticando a los demás por lo mismo que él hace. Durante su paso por WWE se empeñaba en que debía ser considerado el líder del vestuario, una posición que ostentaban con mucho mayor derecho personas como Kane o Booker T, y estaba obsesionado con estar en los eventos estelares, quizás por protagonismo... o quizás porque los luchadores que participan en esos eventos son los que reciben la mejor prima. Cuando no lo conseguía, y en lugar de premiarlo a él, WWE convocaba a estrellas de tiempo parcial como The Rock o Undertaker, Punk los criticaba y los humillaba, porque estimaba que no hacían los méritos de un luchador a tiempo completo, y sin embargo, cuando dejó WWE, se fue a UFC a mantener combates para los cuales no estaba cualificado, y a ganar millones por ellos, solamente por su popularidad, quitándole precisamente el hueco a peleadores profesionales que se habían esforzado mucho más que él por estar ahí. Entonces, eso no le parecía incorrecto.
Ahora ha llegado a AEW. Cuando me enteré de tal cosa, me alegré mucho, por su enorme talento, pero me preocupé por Colt Cabana. Como sabe el lector, durante muchos años, Colt fue su mejor amigo, y durante esa amistad, después de que ambos abandonaran WWE, mantuvieron una conversación en un podcast en la que vertían graves acusaciones contra un doctor de la empresa. Como consecuencia de ello, fueron denunciados, y tuvieron que ir a juicio. Punk se comprometió a correr con los gastos legales de Cabana, pero no lo hizo, y este, que no ha ganado los millones que ha acaudalado él, se endeudó hasta los dientes, perdiendo todos los ahorros de su vida. Esta discrepancia económica les llevó a perder su amistad, y a odiarse mutuamente.
Por eso me alegré de que Cabana, un luchador ya veterano, consiguiera un trabajo fijo en AEW. No hay muchos lugares en los que un wrestler profesional pueda ganar dinero de verdad, sobre todo cuando tiene deudas judiciales por valor de medio millón de dólares. Pero la llegada de Punk puso su trabajo en riesgo. En lugar de hacer las paces, o quizás llevar sus rencillas a una rivalidad en el ring, directamente Punk exigió su despido. No le importó poner en riesgo, una vez más, la seguridad económica de alguien que fue amigo suyo. Esto no gustó mucho entre el roster de AEW, puesto que Cabana es muy apreciado por todo el mundo. Da la sensación de que la decisión de Khan ha sido, finalmente, salomónica: Cabana no seguirá luchando en AEW, pero sí lo hará en ROH, empresa que ahora también le pertenece. Algo es algo. Para Punk, parece ser que no fue suficiente.
La sensación es que Punk no cae muy bien en el vestuario, tal y como Adam Page le dijo en alguna promo, por este y otros motivos. Dave Meltzer ha llegado a comparar las promos entre ambos con aquellas que llevaban a cabo Bret Hart y Shawn Michaels en WWF, en las que a través de los guiones, dejaban salir todo el odio que realmente sentían el uno por el otro. Punk ya ha tenido batallas dialécticas encarnizadas en AEW con MJF, pero aquello fue un duelo de talento; esto es personal. Page le dijo claramente, que, aunque delante de las cámaras Punk fingía ser una persona nueva y mejor, detrás de ellas seguía siendo una basura. Y es que Punk intentó parecer muy respetuoso con él y cariñoso con el público, como es normal en un babyface; pero no cuela. Page puede ser considerado como la primera estrella de verdad creada por AEW; es el campeón, y se ha ganado el respeto de todos durante su reinado. Es, pues, un hombre de grupo que es para sus compañeros lo que a CM Punk siempre le hubiera gustado ser. Durante la promo previa, así, vimos a un hombre que fingía ser lo que no es, frente a alguien que, a pesar de tener un perfil inferior, representaba de verdad al vestuario de la empresa, y lo defendía frente a un lobo con piel de cordero. Page, pues, no sólo defenderá su título, sino que defenderá a AEW de Punk... en kayfabe y fuera de él. Yo creo que Punk debería ser heel, y que este podría ser un buen comienzo para comenzar el turn.
Buenos mimbres para mantener una buena lucha en Double or Nothing. Los luchadores comienzan pegándose fuerte, haciéndose daño a propósito, con muchos chops y otros golpes stiff. Punk se impone con sus ataques de marca, pero Page consigue levantarlo tras un Crossbody, y lanzarlo con una Power Bomb, tras lo cual, comienza su dominio.
Page busca el Buckshot Lariat, pero no consigue aplicarlo. Punk lo frena en varias ocasiones, y busca su pierna. Después de eso, es el propio Punk el que trata de hacer el Buckshot Lariat de su rival, pero falla miserablemente en dos ocasiones. Esto no forma parte del guión: Punk no es físicamente capaz de realizar el movimiento, si bien en el segundo caso consigue levantarse a tiempo para aplicar un potente Lariato que sustituya al errado. Algo es algo.
Mucha gente ha criticado a Punk por esto. No me parece grave, y de hecho este tipo de cosas pueden formar parte de buenas historias. El problema es que no se utiliza como tal, porque al fin y al cabo, ambos son faces, así que la incapacidad de realizar un movimiento por parte de Punk es difícilmente aplicable en la historia. De todos modos, la cosa sigue.
Ahora es Page el que consigue aplicar el finisher de su rival. Aplica GTS, en este caso sin errores de ejecución, mas la cuenta no llega a tres. Punk observa que no puede ganar de tú a tú, y vuelve a buscar la pierna de su rival, ahora sí provocando relativas secuelas. El referee recibe un golpe en un intento de GTS, y en ese momento, Page agarra su correa de campeón. Piensa en usarla contra Punk, pero, finalmente, se niega. No es la clase de campeón que quiere ser. Busca su finisher, pero no acierta (hubiera sido correcto que hubiera vendido su dolor en la pierna en ese momento, pero no está fino en ese sentido). Punk consigue transformar su ofensiva en un GTS, y llevarse la victoria. El campeonato se va a manos de la leyenda del wrestling.
Buena lucha. El fallo de Punk no resulta especialmente grave a la hora de poner la nota. Podría haber sido mejor; yo lo hubiera preferido que el error final hubiera sido claramente causado por el dolor en la pierna de Page. La parte de las dudas sobre el hecho de usar la correa es buena, aunque la historia de Page como campeón ha tenido ya demasiadas dudas de este tipo, y no era su enfrentamiento con Punk, quizás, el lugar más adecuado para ello.
Ya sabemos que Punk, posteriormente, acabaría lesionado. AEW encontraría un nuevo campeón temporal en la persona de Jon Moxley, que hace unos días, de hecho, derrotó al propio Punk tras su regreso, para ser considerado Campeón Indiscutido de la compañía.
Puntuación: ***3/4
sábado, 27 de agosto de 2022
CM Punk vs Adam Page, AEW Double or Nothing 2022
sábado, 21 de mayo de 2022
Adam Page vs Bryan Danielson, AEW Dynamite 05/01/2022
Recientemente, comentamos la lucha entre Hangman Page y Bryan Danielson de diciembre de 2021, en la que lucharon durante 60 minutos, sin alcanzar un resultado. Hoy, nos vamos a enero del 2022, pues en el primer combate del año, se vuelven a enfrentar. Veamos qué tal.
Este es el primer show de Dynamite en TBS. Si bien todos nos alegramos mucho de ver un nuevo programa de wrestling en TNT, como ocurría en nuestra infancia, el sueño no ha durado mucho. No estamos en los 90; la lucha libre es una cosa del pasado. TNT ya movió el programa a días alternativos, para dar mayor prioridad a otros deportes, lo que es una mala señal, y ahora lo mueve a otra cadena. Desde enero de 2022, se emite en TBS, que es la cadena que, en los 90, cobijaba a los programas secundarios de WCW: Thunder o Saturday Night. Pierde un poco de gracia la cosa.
Para rebajar la probable caída en las audiencias, AEW abre su paso por la nueva cadena con varias luchas titulares, incluyendo un combate por el AEW World Championship. Tras el empate antes citado, Page y Bryan se ven las caras. Esta vez, no puede haber empate, porque hay jueces para dictar un resultado final en caso de que acabe el tiempo límite sin resultado: Mark Henry, Big Show y Jerry Lynn. No sé si Henry y Show pensaban que este sería su papel cuando dejaron WWE para venir a AEW; hacen menos aquí que allí.
Sobre todo, porque no hacen nada. La lucha no llega a los 60 minutos (ni siquiera a los 30), así que su juicio es irrelevante. Esta, de nuevo, es una muy buena lucha, aunque quizás no tanto como la anterior, o como se ha juzgado, por lo general. Page comienza pegando un muy buen golpe a la espalda de Daniel, que parece presagiar un trabajo a esa zona, pero tal cosa no ocurre. Es Bryan el que tiene un objetivo claro: el brazo derecho de su rival. Hay que anular sus clotheslines.
Creo que eso es lo peor de la lucha. Porque Bryan hace un trabajo fantástico sobre el brazo de su rival para anular sus lariatos... pero este los hace. Cuando protagoniza comebacks, los hace SOLO con clotheslines. Que la necesidad de contar una historia no te obligue a dejar de ser guay. Pero Daniel también ataca la cabeza de su rival, y se la destroza; se la abre. Daniel le golpea con el puño cerrado sobre la frente rajada, e incluso le pega cabezazos al más puro estilo de monsters heels como los citados Show y Henry. Está muy bien este trabajo, aunque el Dragón toma de su propia medicina, pues es golpeado contra un poste, y sangra también... y mucho más que su rival.
Page enloquece y golpea a Daniel en la herida... y le pega cabezazos. Ambos lo hacen. A pesar de sangrar como puercos en matanza, se asesinan a cabezazos, lo cual es bastante interesante... hasta cierto punto. Están bien las secuencias en las que los luchadores no venden sus lesiones, como en este caso, si responden a momentos de locura transitoria. Aportan cierto toque dramático a la lucha. Pero yo estimo más meritorio venderlas mucho, y tener que luchar limitando tu capacidad. Porque todos sabemos que las luchas son de mentira, y las lesiones también, y por lo tanto, no vender es fácil. Lo difícil es vender y dejar de lucirte luchando, por el bien de la historia que se cuenta.
Estos detalles son los que me conducen, finalmente, a estimar que esta lucha, que podría ser muy muy buena, sea, tan solo, muy buena. En la etapa final de la misma, Danielson consigue aplicar Lebell Lock, y está a punto de ganar. Aplica muchas llaves, a brazo, cabeza, y también piernas, aunque Page consigue asestar un Power Bomb. Tras todas esas llaves, se quita de encima al American Dragon con un Back Suplex muy duro, muy japonés, que redunda en su dolor de cabeza, y eso le permite aplicar su lazo vaquero definitivo, el Buckshot Lariat, para conseguir una victoria bien construida, con un buen final.
Puntuación: ****
martes, 17 de mayo de 2022
Adam Page vs Bryan Danielson, AEW Dynamite 15/12/2021
Seguimos hablando sobre AEW, porque, como comentamos en post pasados, son tantos los luchadores de calidad que tiene en su roster, que los combates, al menos sobre el papel, son muy interesantes. Y a veces salen bien, y a veces mal. En el caso del que hablamos hoy; la rivalidad entre el campeón de la empresa, Adam Page, y uno de sus flamantes fichajes del año pasado, Bryan Danielson, salió muy bien.
AEW está ofreciendo reinados muy largos a sus campeones. Tan sólo 4 hombres han portado su campeonato mundial hasta el momento: Chris Jericho, Jon Moxley, Kenny Omega y Adam Page. Esto otorga consistencia a la correa, y hace que cada reinado sea especial, si bien al mismo tiempo convierte a los programas en algo predecible y carente de emociones fuertes. Es obvio que los tres primeros campeones eran campeones de otras empresas, pues ya llegaban a AEW con un bagaje enorme, mientras que Page, si bien no era un Don Nadie, sí que se puede considerar una de las grandes creaciones de esta joven promotora. Se le ha hecho campeón, y se le quiere vender como el mejor del mundo, si bien a mí esa idea me parece muy loca. Me da la sensación de que la elección de su push es similar a las que se tomaban en los 70 en los territorios: un chico guapito, rubito y vaquero siempre encaja bien con el público americano. Y si bien es cierto que combates como el que comentamos hoy, ameritan su carrera, también lo es que hay pocos luchadores en el roster de la empresa que no darían una gran lucha bien bookeada y con una hora de duración ante Bryan Danielson, que fácilmente puede ser, libra por libra, el mejor luchador de la historia (o uno de ellos). Yo diría, de hecho, que esta elección de rival en primera instancia, tuvo precisamente esa función: poner a Page por las nubes y darle credibilidad como campeón. La rivalidad se puede comparar a la de John Cena y Shawn Michaels en 2007, que asimismo tuvo una lucha de una hora en un programa de televisión semanal. Después de esa larga historia entre Page y The Elite que acabó con el primero siendo campeón y siendo aplaudido por todos, era hora de hacerlo ver como un grande arriba del ring.
La rivalidad tiene, de hecho, un ligero olor a eso: Danielson esperaba poder enfrentarse a Kenny Omega por ese título, y está un poco decepcionado con encontrarse a Page. El American Dragon desempeña un papel más parecido al Best in the World de su reinado en ROH, y provoca mucha ira en el público de AEW, que es muy fan de todo lo que tenga que ver con The Elite. Danielson llegó a decirle cosas al público de Virginia que sin duda le habrían costado un despido en WWE, si bien allí no podría hablar sin guion.
Danielson ganó su oportunidad titular tras salir triunfador de un torneo cuyo último rival fue Miro, anteriormente conocido como Rusev. Tras saber que su contrincante no sería Omega sino Page, se enfrentó a todo el stable que lideraba este: The Dark Order, derrotando a Colt Cabana, Alan Angels, John Silver y Evil Uno. Así, llegaba a diciembre de 2021, a un show de Dynamite que recibía el título Winter is Coming, imbatido, y dispuesto ganar el AEW World Championship, de manos de Adam 'Hangman' Page.
En una lucha que ha recibido 5 estrellas de mucha gente. Yo no se las doy, pero creo que no suponen una gran exageración. Ante un crono tan extenso, Danielson se siente libre para poner en práctica todo su conocimiento técnico. Utiliza todo su repertorio, que incluye LeBell Lock, Cattle Mutilation, Achilles Lock o Surfboard terminado en Dragon Sleeper. Danielson no ataca ningún punto específico del cuerpo sino que, como los luchadores técnicos clásicos, desgasta y busca puntos débiles durante largos periodos de tiempo que se hacen cortos. Si bien esto ocupa la mayor parte del tiempo del combate, Hangman tiene sus comebacks, plagados de ataques directos, que es lo suyo. Cada uno a su manera se hace daño, sin llegar a suponer un peligro para la continuidad del otro. Pero ambos ponen en práctica su estilo y su estrategia.
El dominio de Bryan se rompe cuando, pegando sus Yes! Kicks, le pega al poste, lo que aprovecha Page para atacar su pierna herida, e intentar provocar que se rinda, incluyendo una Figura 4 que, esta vez sí, está a punto de hacerle ganar. Cuando Bryan se deshace de sus ataques a las piernas, pone el brazo del oponente como objetivo, y utiliza los postes para debilitarlo. Uno de esos golpes contra el poste provoca un corte en la frente del Campeón (claramente buscado), lo que le da una nueva ventaja al retador. Danielson golpea con el puño cerrado sobre la frente de Adam, como se hacía antiguamente, y aplica el LaBelle Lock, con la idea de que se rinda, dado que tiene tanto brazo como cabeza heridos. No hay suerte para él, mas Page parece realmente muy desgastado.
No obstante, lega un momento en el que ambos luchadores dejan de vender sus respectivas lesiones, y como si de un combate de NJPW esto se tratase, se vuelven locos. Adam aplica Tombstone, uno por cada lado (Page-Dead Eye), pero vuela desde el ring, y se traga una mesa, pegándose un golpe morrocotudo.
Aunque hasta aquí el match es casi perfecto, yo creo que se alarga un poco más de la cuenta, hasta el punto de que algunas de las cosas que hacen ambos luchadores resultan bastante intrascendentes. El reloj se acerca a la hora límite propia de AEW, sin que ninguno consiga el pin, y surjen las prisas. A la desesperada, Adam ataca, pero es víctima del Crossface de Bryan, que parece definitivo. No lo es, y a falta de segundos, Page contraataca. Pega su Buckshot Lariat, y está a punto de ganar, pero se acaba el tiempo antes de que lo haga. Así, el resultado es un empate; un DRAW. El público queda decepcionado, pero al mismo tiempo con ganas de más.
Creo que esta es una gran lucha. Se podría decir que su desarrollo se debe al enorme tiempo del que goza, pero es cierto que pocos hombres pueden mantener un combate a alto nivel durante tanto tiempo, sin caer en la redundancia y la banalización de los ataques. Bryan ha visto suficiente wrestling de los 70 como para saber que el trabajo técnico es vital para que un combate sea bueno aún durando una eternidad. En gran parte del match, es él el que lleva las riendas, mientras que Page se limita a hacer sus finishers llamativos, como buen Elite. Sin embargo, cuando tiene que usar la técnica para trabajar la pierna del Dragón, lo hace bien.
Más allá de eso, aunque los últimos minutos pueden ser excesivos, creo que el límite de tiempo les da un poco de sentido, y evita la reiteración de finishers hasta su banalización. El empate puede decepcionar un poco a los aficionados, pero era obvio desde el momento en el que el match había superado los tres cuartos de hora. La lucha tiene cosas que la alejan de la perfección, pero creo que no acaba muy muy lejos de ella. Veremos próximamente su secuela, que tuvo lugar en enero de 2022, tras el cambio de cadena de Dynamite.
Puntuación: ****3/4