lunes, 29 de marzo de 2021

Acolytes vs The Hardy Boyz, WWF RAW 05/06/1999


Especial Hall of Fame 2020

A principios de 2020, WWE anunció los integrantes de su Salón de la Fama que debían ser inducidos en la ceremonia previa a WrestleMania. No obstante, y por causa de la pandemia de COVID-19, la exaltación no se produjo, y se pospuso para cuando las condiciones fuera más adecuadas. Parece que este año, 2021, sí habrá ceremonia.

Yo pensaba que tenía todo el tiempo del mundo para hablar sobre los egresados en 2020, pues serían estos, solamente, los que recibirían el honor en 2021. Pero no será así; WWE está anunciando una clase de 2021, en la que están Kane y The Great Khali, entre otros. Así pues, tengo que terminar el especial de 2020 antes de empezar el de 2021.

Especial de 2020 que ya empieza mal, porque Batista, del que hablamos durante el especial, finalmente ha declarado que no podrá estar en la ceremonia, y por tanto, dejará para más adelante su entrada. Pero ya hemos hablado de él en el especial, y eso no puede cambiar. Ahora, tenemos que seguir hacia delante, y decir un par de cosas sobre los inducidos de 2020 que aún no han recibido su trozo del pastel: JBL y la NWO. Empezamos por el primero.

JBL es un tipo que merece estar en el Hall o Fame. Es un currante, que fue leal a la empresa y que participó en la división de parejas durante muchos años, formando parte de The Acolytes, como Bradshaw, formando equipo con Ron Simmons, que utilizaba el nombre de Faarooq. Posteriormente, a partir del año 2005, cuando ya era un veterano, tuvo la oportunidad de encarnar a un nuevo personaje, y ser un main eventer luchando en la división single. Fue entonces cuando encarnó a JBL, un vaquero millonario muy odioso, con un uso del micrófono excepcional, que produjo grandes historias y rivalidades. Es cierto que sus habilidades arriba del ring nunca me interesaron mucho, pero por las cualidades de su personaje, su tamaño y la fuerza de sus golpes, era un main eventer más que creíble.

De hecho, Bradshaw debutó en WWF como un vaquero, un personaje parecido al de Stan Hansen, cuya inspiración, en general, es obvia. Estamos en el año 1995. En el 97 empezó a formar parte de The New Blackjacks, la reformulación del equipo ochentero, para después crear en el 98 el tag team que le haría famoso: Acolytes Protection Agency, un binomio de hombres rudos y enormes que trabajaban como guardaespaldas de otros luchadores, que formaron parte del Ministry of Darkness de Undertaker, y que fueron campeones en parejas en 1999. El equipo existió hasta su desaparición definitiva en 2004.

Para este especial, quería revisar una lucha del equipo, y una de JBL en su carrera individual, comenzando, claro está, por la primera. El caso es que no sé si estos dos tienen algún combate claramente bueno, porque estamos hablando de una época en la que las luchas de RAW eran muy cortas, y no había una gran calidad, en general. He seleccionado un combate que he visto recomendado por ahí, y que, efectivamente, no es gran cosa, aunque creo que refleja lo que era el tag team, y lo que era la división tag de la Era Attitude.

Es un match que disputan ante The Hardy Boyz el 5 de junio de 1999, en un combate de RAW, en el que pierden los campeonatos en parejas. La noche antes, en Heat, Bradshaw había sido destrozado por Kane, al recibir un Tombstone Piledriver sobre las escalinatas de metal, y no obstante, se empeña en luchar. Esa lesión en la cabeza será fatal para el resultado.

Los Hardy reciben a los gigantes volando sobre ellos. Son más rápidos, y más aéreos, pero sus rivales son más fuertes, así que pronto ponen la lucha a su favor, con ataques muy fuertes. Hay un clothesline de Bradshaw que es una bestialidad. Sin embargo, cuando parece que nuestro protagonista lo tiene todo controlado, recibe un golpe con un bate por parte de Jeff, lo que aprovecha Matt para rematarle con un DDT. Esa cabeza no aguanta más.

El combate es normalito, de unos minutos, tal y como se produjo la carrera de APA en general. En el próximo artículo veremos algo de JBL.

Puntuación: **1/2

miércoles, 24 de marzo de 2021

Atsushi Onita vs Tarzan Goto, No Ropes Exploding Barbed Wire Deathmatch, FMW Spectacular in Shiodome


Lo decía en el artículo anterior: AEW desarrolló un match en Revolution 2021 con tintes históricos. Se trataba de un Deathmatch con pinchos y explosiones, ese tipo de combates que inventó Atsushi Onita en su empresa de lucha extrema, la mítica FMW. De hecho, el propio japonés estuvo en algún segmento grabado durante los programas de la empresa americana, incluyendo imágenes de sus luchas clásicas. Obviamente, en tanto que amantes de la historia del wrestling, no podíamos dejar pasar esta oportunidad. Con motivo de este match, vamos a ver uno clásico de FMW.

FMW es una empresa legendaria, una creadora constante de paradigmas dentro de la lucha violenta, incluyendo el No Ropes Exploding Barbed Wire Deathmatch, un combate a muerte con alambres explosivos en lugar de cuerdas. Más allá de esos conceptos, tampoco hay un libro de reglas fijo para la estipulación; cada uno lo hace a su manera.

Atushi Onita creó esta estipulación, y la puso en práctica en FMW, siendo la promotora muy joven. Si esta se fundó en 1989, fue en 1990 cuando la rivalidad entre el propio Onita y una nueva estrella emergente en Japón, Tarzán Goto, que había subido como la espuma, se enfrentaron en un match de este tipo, el primero. Esta lucha es considerada histórica, por los motivos expuestos, y a mí me gusta bastante. Para el público, resulta muy sorprendente, pues las explosiones provocan pavor. La verdad es que son mucho más realistas que las de AEW, porque aquí no hay nadie pulsando botones en el momento adecuado: los petardos estallan de verdad cuando los luchadores se acercan a los alambres, a veces, sin querer.

Decía cuando, veía la lucha entre Omega y Moxley, que no entendía muy bien por qué uno de ellos atacaba la pierna del otro, y aplicaba una Figura 4, en un combate de este tipo. Ahora veo que debe ser una referencia a esta lucha, porque Goto hace lo propio, al usar esa llave sobre Onita durante un buen rato. Aquí, se insiste mucho más, pero también hay un motivo: las reglas son propias de un Last Man Standing. Sumando a ello que aquí no hay cuerdas, sólo alambres que explotan, la verdad que es resulta un ataque inteligente: va a resultar difícil para Atsushi, estando cojo, con la cabeza partida, y sin tener lugar dónde agarrarse, levantarse antes de la cuenta de 10.

Porque Onita sangra, pero Goto también lo hace. Hay muchas explosiones bastante impresionantes. Los dos intentan darse bien en la cabeza. Goto ataca repetidamente con el que parece ser su finisher, un facebuster, y Onita demuestra problemas graves para levantarse, hasta el punto de que se cae contra los alambres, y estos le explotan, haciéndole mucho daño, y alarmando a los fans. Goto lo aprovecha para patearle la espalda dañada, pero, cuando este está despistado, Onita se levanta corriendo y lo empuja violentamente contra los alambres, que explotan, también, en su espalda. Tras esto, el fundador de la empresa no da respiro; utiliza la dualidad DDT - Power Bomb varias veces seguidas, hasta que Goto no puede levantarse antes de la cuenta de diez.


Esta lucha me gusta. No es muy larga, no es tan espectacular como otras, pero está bien escrita, se cuenta una historia muy inteligente que aprovecha bien la estipulación, y el efecto novedoso que esta ejerce sobre luchadores y sobre público.


Puntuación: ****

domingo, 21 de marzo de 2021

Jon Moxley vs Kenny Omega, Exploding Barbed Wire Deathmatch, AEW Revolution 2021


AEW se está poniendo interesante. Aunque WWE siempre ha sido la casa de las sorpresas, a partir del comienzo de la crisis por pandemia de COVID-19, rebajó sus medidas para acaparar todo el talento de la lucha, permitiendo a otras empresas cebarse. En el caso de AEW, esto no sólo se ciñe al talento, sino también a las leyendas.

Durante los últimos años, Vince, que lleva haciendo el mismo programa de televisión 20 años sin introducir, apenas, novedades en el formato, se negó a utilizar a gente muy interesante como Big Show, Sting, Shaquille O'neal o Christian, y todos están ahora en AEW. El caso del último es el más llamativo, pues hace un mes, lo vimos participar en Royal Rumble, y hacer un gran papel, y aún así, a Vince no se le ocurrió ofrecerle un contrato. Todo le explota en la cara, porque todo lo que él no ha querido hacer con estas figuras, lo va a hacer AEW.

Recientemente, tuvo lugar el último gran evento de la empresa, Revolution 2021, que, más allá de los nombres señalados, ahonda en la rivalidad que comenzó junto con el propio nacimiento de la empresa. Jon Moxley y Kenny Omega se ven las caras una vez más, y lo hacen con una estipulación que también evoca cultura luchística: un Exploding Barbed Wire Deathmatch.

De hecho, en los programas de la empresa, ha aparecido el gran Atsushi Onita, fundador de la violenta FMW, en la que disputó varios combates de este tipo, que también se extenderían a otros lugares. Veremos en próximos posts algún combate de esa época, porque esto es un blog de historia del wrestling, y esto es historia. Es una pena que esta lucha entre Moxley y Omega pase a la historia, no tanto por este tipo de innovación, sino por un llamativo evento ocurrido tras el combate, que luego comentaremos.

El caso es que Omega es Campeón de AEW. Sabemos que su primer año en la empresa no estuvo al nivel que se esperaba, pero, tras la liberación de WWE de los Good Brothers, el antiguo líder del Bullet Club ha podido rearmar su facción, y ahora, es rudo, y tiene un nuevo mánager, Don Callis, uno de los ejecutivos de Impact Wrestling. Porque, ahora, las empresas están colaborando, y Omega está apareciendo en los programas de ambas, lo que también es un motivo de interés. En AEW están pasando cosas, y eso ya supone una ventaja con respecto a WWE.

Esta lucha violenta, en la que hay muchos pinchos, y bates con pinchos, y cuerdas electrificadas, es interesante, por ser el main event de una gran empresa, y aún así, ser muy sangrienta, pero no me parece una gran lucha. Omega parece querer atacar la pierna de Jon, lo que no sé si tiene mucho sentido en este tipo de matches, y le hace desangrarse, rajándole la cabeza con un bate de pinchos. Hay muchos lanzamientos sobre las cuerdas, con grandes explosiones. En una de ellas, ocurrida cuando Omega empuja a Jon, es el rubio el que se lleva la peor parte, al tener la cabeza pegada a la cuerda. Se hace daño en un ojo, y lo vende bien, pidiendo agua para poder ver.

Moxley quiere aprovecharlo, pegándole rodillazos en la cara, y lazándolo con un Dirty Deeds sobre un colchón de púas en ringside. Omega cae de cabeza, pero Ambrose cae con todo el cuerpo, quedándose enganchado. Los dos luchadores vuelven al ring, cubiertos de sangre. Allí, Omega conecta el One Winged Angel, pero Moxley llega a la cuerda con la pierna, provocando una explosión que vuelve a cegar al campeón.

Omega está perdido, así que llegan sus amigotes, cuya ayuda decanta su victoria. Tras la lucha, hay una cuenta atrás, que precede, supuestamente, a una explosión destructiva. Moxley queda KO en el ring, y aparece su viejo amigo, Eddie Kingston, para salvarlo. Como no puede llevárselo a tiempo, intenta protegerle con su cuerpo, , y ocurre una explosión... que consiste en unos ridículos fuegos de artificio. Parece ser que algo ha fallado, no ha funcionado bien, y sin embargo, Kingston vende que la explosión le ha herido y está KO sobre su amigo. Resulta ridículo y expone al negocio. En el siguiente programa de la empresa, habrá varias referencias a esto, y se buscará una excusa rancia.

La lucha no está mal, pero no es un gran main event.

Puntuación: ***1/4

domingo, 14 de marzo de 2021

Kazuchika Okada vs Will Ospreay, Wrestle Kingdom 15


Especial Wrestle Kingdom 15

Seguimos hablando sobre Wrestle Kingdom 15, la edición de 2021 del mayor evento del año en el wrestling japonés. El match de hoy es uno que superó las 5 estrellas, según el juicio de Dave Meltzer, del Wrestling Observer Newsletter. Se trata de un momento clave dentro de una gran rivalidad: la que mantienen Kazuchika Okada y Will Ospreay. No es sorprendente que reciba tan buena nota en el WON, porque son dos de los luchadores favoritos de Dave.

He pasado un año sin ver a Ospreay, y ahora, me ha sorprendido verlo muy cambiado. Tiene mucho más peso que antes, y es muy rudo. Está liderando un stable, por lo que puedo observar. Se nota que NJPW quiere promoverlo para que sea uno de sus principales luchadores de peso completo, y no se puede llegar a ese nivel siendo un highflyer de peso junior. Así las cosas, ha llegado a infligir ataques al mítico Okada muy duros, incluyendo su codazo en la nuca, que dejó en muy mal estado al excampeón. Ese estado lo aprovecha durante la lucha, pues comienza trabajando la nuca de Okada.

El cambio de estilo me parece muy positivo para él. Ataca la nuca de su oponente con múltilpes ataques zonales, que es algo muy novedoso en su forma de luchar. Con un ataque en ringside, le daña mucho el cuello, aunque Kaz se defiende a base de Dropkicks. Si bien el dominio es del inglés, el japonés parece tener también una estrategia, que es hacerle rendir a través del Cobra Clutch. Para eso, aplica dos extraordinarios Tombstone Piledriver, uno de ellos en el borde del ring, para hacer el daño apropiado antes de llevar al oponente a la rendición. Aunque no tiene éxito en esa tarea.

La verdad es que aplica la llave durante mucho rato, y eso no tiene mucho sentido, sobre todo teniendo en cuenta que ha usado antes el ataque sobre cuello más fuerte que existe. Debería ganar, y no lo hace, y eso me recuerda a Kurt Angle aplicando Ankle Lock durante minutos y minutos. Pero, al menos, Angle no trabajaba previamente la pierna del rival, lo que entonces me parecía negativo...

Quizás esto sea lo peor del combate, que por lo demás, es bastante bueno. No tan bueno como dice Meltzer, que es un fanboy, pero realmente bueno. Tenemos una secuencia final, marca de la casa, en la que Will se abre más al uso de su material habitual, e incluso copia los finishers de Okada, aplicando Tombstone y Rainmaker. Finalmente, tras secuencias muy fuertes, el japonés se lleva el gato al agua con unas versiones del Tombstone y del Rainmaker mucho más poderosas de lo habitual. Así se cierra una lucha made in New Japan que está muy bien.

Puntuación: ****1/4

martes, 9 de marzo de 2021

Shingo Takagi vs Jeff Cobb, NJPW Wrestle Kingdom 15

Especial Wrestle Kingdom 15

Es momento de hablar sobre el evento Wrestle Kingdom 15, magna velada del puroresu japonés, que cae como agua de mayo, para dejar atrás un malogrado año 2020, también en lo relativo al wrestling en Japón. New Japan Pro Wrestling, por segundo año consecutivo, presenta una cartelera dividida en dos jornadas concatenadas de lucha, en las que, con varios años de retraso, pero por fin, Kota Ibushi se corona, al derrotar a Tetsuya Naito y a Jay White, y llevarse los campeonatos IWGP de peso completo e Intercontinental.

Un año más, a Dave Meltzer se le ha ido la cabeza con las valoraciones, dando 5 estrellas o más a cuatro combates, y una posición de MOTYC a otros tantos, de cuantos ocurrieron en WK. Yo, que tengo una cantidad de tiempo limitada, voy a ver esos combates teóricamente perfectos, empezando por aquel que enfrentó a Shingo y Jeff Cobb, con el Never Openweight Championship en juego.

Esta lucha me resulta muy interesante, por suponer un choque de trenes. Son dos tipos muy parecidos, muy rudos, stiff, con un peso similar. y un estilo similar. No creo que sea un match de 5 estrellas, como observó el WON, pero está muy bien.

Al comienzo del match, Cobb conecta un Suplex sobre su rival en ringside, destrozándole la espalda. A partir de ahí, comienza un buen castigo zonal, que quiere terminar lanzando a Shingo fuera del ring con una loca bomba. No obstante, este se libra, y vuela sobre él. Después de eso, la batalla es igualada, en torno a romper la espalda del rival, sin un claro dominante.

Los dos usan montones de Suplexs y Power Bombs. En un momento dado, parece que Shingo quiere cambiar de estrategia, e ir a por la pierna de Cobb, pero eso no daña demasiado la ofensiva del americano. Los dos siguen golpeando con bombas y Suplexs. Finalmente, y por esta vía, la victoria es para el japo.

Muy buena lucha, igualada y consecuente con la igualdad entre ambos, con pocas cosas que sobren.

Puntuación: ****1/4

domingo, 7 de marzo de 2021

The Question Mark vs Gentleman Jervis, CWFH 450

 


Hemos hablado de los fallecimientos de Brodie Lee y Pat Patterson. Acabamos estos días de necrológicas recordando la muerte de un luchador un poco menos conocido, pero cuya muerte ha sido asimismo muy llamativa, en tanto que era un tipo en activo y estaba en el mejor momento de su carrera. Se trata de Josephus, también conocido como The Question Mark.

Quizás algunos lectores no lo hayan visto pelear nunca. Es uno de esos hombres que luchan en territorios independientes americanos que no tienen ninguna repercusión y que, por tanto, no dan ni para comer. Josephus participaba en la promotora NWA Championship Wrestling from Hollywood, que, en un determinado momento, se convirtió en el principal hogar del título de la NWA. Así pues, cuando Billy Corgan compró la marca y creó un programa para Internet, Josephus tuvo la suerte de estar en el lugar adecuado y en el momento adecuado. En los programas de NWA Powerr, conocimos al personaje The Question Mark.

Este hombre humilde, desarrolló personajes principalmente humorísticos. Josephus, si no me equivoco, era una especie de mesías, mientras que Question mark era un chistoso tipo enmascarado, que jugaba un rol muy particular en los programas de NWA Powerr. Desde 2019, y gracias a este programa, empezó a gozar de la fama que nunca tuvo en su carrera, y sin embargo, la muerte lo alcanzó con premura. Así lo anunció Billy Corgan, que se refirió a problemas médicos no diagnosticados como causa del deceso. 

Pretendía ver alguna lucha suya en NWA Powerr, pero hemos tenido mala suerte, porque Corgan ha llegado a un acuerdo con Fite TV para la emisión en exclusiva, y ha retirado todos los programas. Así pues, sólo he encontrado un combate suyo en Internet, uno muy malo, además, que mantiene con un personaje similar, Gentleman Jervis, en CWFH. Se supone que es un gran evento especial, pero no hay mucho humor, y apenas se recurre a la naturaleza de los personajes durante la batalla. No tiene mucho para comentar...

Puntuación: *1/5

miércoles, 3 de marzo de 2021

Pat Patterson vs Sargent Slaughter, Alley Fight, WWF Madison Square Garden 04/05/1981


En este blog, estamos desarrollando un pequeño especial por el fallecimiento del luchador Brodie Lee, en el apogeo de su carrera. Pero no es el único miembro de la industria que ha perecido en los últimos tiempos. Asimismo lo ha hecho la leyenda de WWE Pat Patterson, a los 79 años de edad, tras ser derrotado por el cáncer el 2 de diciembre de 2020.

No tenemos tiempo, ahora mismo, para dedicar un espacio grande para Pat, aunque sí que tenemos que comentar algunas cosas sobre su carrera, pues, por ser esta tan antigua, parece haberse perdido en la inmensidad del tiempo. Este hombre debutó en el mundo del wrestling en la década de los 50, y no fue hasta finales de los 70, cuando llegó a WWF. Es su carrera en la empresa de Vince McMahon lo mas conocido de cuanto ha hecho en el wrestling, y no sólo por su papel dentro del ring, pues, una vez retirado en 1985, Pat jugó un papel importante como mano derecha de Vince a muchos niveles.

Pat Patterson gozó del cariño del publico asistente al Madison Square Garden de New York. Fue coronado como primer Campeón Intercontinental de la empresa, tras "ganar" uno de los torneos ficticios en el extranjero que se inventaban los McMahon, y protagonizó algunas intensas rivalidades, destacando aquella que tuvo con Sargento Slaughter, que los llevó a pelear en una Street Alley Fight, considerada por la empresa como su primera lucha extrema.

Patterson es recordado por otras muchas cosas. Es el primer luchador que se confesó abiertamente gay, y el creador del Royal Rumble Match. Trabajó en WWE hasta su muerte, en labores creativas o de producción, y formó parte de la stroyline de La Corporación de WWE, teniendo un rol muy activo, junto a Gerald Brisco, y llegando a disputar algún que otro match en esa época. A mediados de 2019, durante el show Raw Reunion, ganó el 24/7 Championship, y lo perdió, precisamente, frente a su antiguo compañero Brisco, terminando así su gran carrera con un nuevo título.

Comentamos, pues, la pelea violenta que mantuvo frente al malvado Slaughter en el Garden. Este combate supone la culminación de una larga rivalidad entre ambos, que comenzó con motivo del Cobra Clutch, la famosa llave final del que llegaría a ser personaje de los G.I. Joe. Este, aún rudo, sostenía que el candado era inquebrantable, así que ofreció una recompensa para aquel que consiguiera zafarse. 

Patterson, también en la labor de entrevistador y comentarista, criticaba a Slaughter, que era muy odiado, por abusar, en esos concursos, de hombres más débiles. Finalmente, Patterson participó en el Cobra Clutch Challenge. Después de mucho sufrimiento, consiguió librarse, para alegría, y casi locura, del público asistente. A esto, el sargento respondió con un sillazo en la cabeza, y una buena paliza, previa a un nuevo Cobra Clutch. Un momento épico y muy potente, made in WWE.

La violencia se sucedió durante sus matches posteriores, acabando, muchos de ellos, en descalificación. Así pues, sólo quedaba una opción: una lucha sin límites, que es la que vemos hoy.

Una lucha en la que los dos se pegan muy fuerte con correas. Pat se quita la suya, y ahorca a su rival, pero este, en un momento dado, se hace con ella, y la usa como rama de impacto. El público, una vez más, está como loco, en favor del recién fallecido, que ataca con rodillazos muy fuertes, y muy duros, y, una vez más, es respondido con lo mismo. Hay mucha igualdad.

Pero esta se rompe cuando Patterson proyecta al rudo contra el poste exterior, rajándole la cabeza. Slaughter se desangra, pierde mucha sangre, y acabará perdiendo la lucha por eso.

Pero no en seguida, porque, antes de morir desangrado, se defiende con un puño americano, con el que casi deja KO a su rival. Sin embargo, está muy mareado. Pega un segundo golpe, provocando también una pequeña herida en su oponente, pero no consigue llegar a un tercero, porque está muy mal. Patterson vuelve a tirarlo contra varios postes, y le pega con la punta de su bota de vaquero, hasta que su mánager tiene que tirar la toalla, porque se nos muere en el ring.

Victoria para Patterson en uno de los grandes momentos de su carrera.


Puntuación: ***3/4