El pasado 1 de septiembre de 2019, se cumplieron 40 años desde el nacimiento del Intercontinental Championship de la WWF. Más o menos. Porque este campeonato nació en 1979, siendo coronado como primer campeón Pat Patterson, que tenía el WWF North American Championship en su poder. En realidad, se trata tan sólo del cambio de nombre y correa para un campeonato, pero WWE inventó un torneo realizado, supuestamente, en Río de Janeiro, cuya victoria se atribuye a Patterson. Este torneo, en realidad, nunca se llevó a cabo, todo es una ficción. Pero la fecha oficial que se le atribuye es la del 1 de septiembre de 1979.
Durante unas semanas, WWE publicó mucho material en sus redes sociales sobre este campeonato, celebrando, así, sus 40 años de existencia. Nosotros haremos algo parecido, comentando 3 luchas clásicas en las que el IC Championship estaba en juego.
Y hay cosas de mucho nivel para comentar. Es un título con el que se ha experimentado. Por lo general, se considera un campeonato para midcarders, para crear historias más allá de los main events, de cara a futuros pushs. No siempre ha sido así, porque ha habido muchos luchadores consagrados que han tenido la correa en su cintura. Otras veces, esta ha sido totalmente olvidada, cayéndose de las carteleras de los PPVs con frecuencia.
Ya sabemos que Patterson fue el primer campeón, mientras que el último, el actual, es Shinsuke Nakamura, que es el campeón número 172. Pedro Morales es el hombre que ha portado la correa durante más tiempo, sumando 619 días, mientras que Chris Jericho es el luchador que más reinados ha tenido, 9. The Miz, seguramente, superará ambos records, porque ha sido 8 veces campeón, y suma ya 599 días como tal.
La primera lucha que voy a comentar en relación a este título es la que mantuvieron Bret Hart y Dave Boy Smith en SummerSlam 1992, en el legendario primer PPV de la empresa llevado a cabo fuera de suelo americano, en Londres, Inglaterra, en Wembley, ante más de 80.000 personas. Ese día, Ultimate Warrior derrotó a Randy Savage, y Undertaker derrotó a Kamala, pero el plato fuerte, el main event, fue el combate en el que un inglés, Dave Boy Smith, The British Bulldog, venció a su cuñado, Bret Hart, ganando, así, el WWF Intercontinental Championship.
Es increíble el ambiente que hay en ese estadio, por un evento de lucha libre en un país en el que no había mucha lucha, en esa época. Pero la WWF de Hulk Hogan, Ultimate Warrior y Randy Savage, había conquistado todo el mundo. Era un producto de entretenimiento que volvía loca a la gente.
Antes del main event, Roddy Piper, que, recordemos, hace un papel de gaitero escocés, a pesar de ser canadiense, toca la gaita junto a gaiteros reales. Y, después, tenemos las palabras de Diana Hart, mujer de Smith y hermana de Bret, tratando la disyuntiva familiar. Pero tanto ella como todo el público, está con el British Bulldog.
La lucha es larga e intensa, con un claro dominio de Bret Hart. Este, ante la diferencia de fuerza, intenta llevar la lucha a ras de lona con mucha habilidad, para evitar la confrontación directa, pero Davey demuestra que no es un saco de músculos sin cerebro, y que también sabe luchar. Hay buenos movimientos a los brazos de ambos en estos primeros minutos.
Pero, como digo, pronto, es la técnica y rudeza de Bret la que se impone. Durante muchos minutos, Hart domina, con mucho ataque frontal, muy variado, y con buenos headlocks. El público anima a su paisano, y espera pacientemente un resurgimiento, a pesar de tanto buen ataque del campeón.
Bret conecta una Sleeper, finalmente, que casi consigue dormir al inglés. Davey resiste, llegando a las cuerdas, pero Bret insiste varias veces más. El brazo del British Bulldog siempre responde, a la tercera, a las preguntas del referee, y, en varias ocasiones, consigue quitarse de encima al canadiense, lanzándose de espaldas contra la esquina. Así, al fin, comienza su esperado Comeback, a base de movimientos de poder contra la espalda. Utiliza Súplex sostenido, Running Power Slam, y Superplex, y está a punto de ganar, pero Bret resiste, y también conecta un Sharpshooter. Pero no ha trabajado la pierna lo suficiente, así que no se lleva la victoria.
El premio es para el British Bulldog, cuando consigue embolsar a Bret, provocando la cuenta de tres. La gente queda sorprendida, por la forma en la que termina la contienda, pero es feliz, igual que Diana.
La lucha es muy buena, muy dura por parte de Bret, y con un Smith que hace bien el papel de superhéroe que reacciona al final, con ataques muy consecuentes.
Puntuación: ****1/4