Había yo de redactar algo sobre Royal Rumble, así como de las luchas que me he perdido durante los últimos meses y que los amigos del blog me han recordado en comentarios. Lo haré; tarde o temprano, pero lo haré. Por ahora siempre encuentro algo que me aleja de esos objetivos. En esta ocasión, Youtube me ha alertado de la existencia de una reciente lucha entre Hechicero y Bryan Danielson que yo, por motivos obvios, tenía que ver. Haré un breve comentario al respecto.
Cuando hablaba, hace unos días, sobre el desempeño de Bryan Danielson en Wrestle Kingdom, decía yo que tan sólo le faltaba tener sus deseadas luchas en México frente a los maestros de las llaves y las contrallaves que allí existen; gente como Satánico, Blue Panther o el propio Hechicero, que posiblemente sea el mejor de la generación actual, en tanto que los otros, si bien en activo, son ya muy mayores. Pues bien, si Mahoma no va a la montaña, la montaña va a Mahoma. En un programa de AEW Collision de principios de febrero de 2024, el enmascarado del Consejo Mundial de Lucha Libre se presentó para enfrentarse al American Dragon. Insisto en que es para hacer este tipo de cosas que Daniel tenía que irse de WWE.
Como sabe el lector, El Consejo tiene a su disposición cientos de luchadores, a los que aprovecha de manera muy desigual, pues existen demasiadas jerarquías en la empresa. En fin, tienen escuela propia, que genera mucho talento, y a su disposición un país entero lleno de wrestlers que trabajan en condiciones, a veces, muy malas en los terrenos independientes. Hechicero es uno de esos luchadores que están ahí pero que nunca pueden demostrar su capacidad en luchas individuales, rivalidades o duelos de apuestas. Tanto es así que su principal rival, aquel a quien debía desenmascarar, Snuka Jr, acabó perdiendo su capucha en Aniversario ante Atlantis Jr, cuyo principal mérito es ser hijo de una leyenda de la empresa. Se tiró a la basura esa rivalidad de años entre dos midcarters, que se habían enfrentado varias veces en funciones secundarias de la compañía, con títulos de peso medio en juego, para regalar una máscara valiosa a un nombre famoso. Esa empresa es un desastre.
Y no obstante me pareció que, tras la pandemia, Hechicero estaba recibiendo cierto push. No sé si continuó; en esa época observé que pasaba lo mismo con Cesaro y WWE, y miren cómo acabó. Tendré que estudiar el tema, porque llevo tiempo sin ver mi apreciada lucha libre mexicana.
Hechicero es una máquina de pelear como así demuestra cada vez que tiene ocasión. Su personaje es bueno, además; tiene carisma. Incluso tiene físico. Pero es cierto que la lucha técnica de llaveo y contrallaveo "no está de moda". Este tipo de expertos acaba reducido a momentos de expresión artística para eruditos. Es lo que ocurre con Bryan. No me cabe duda de que Danielson quería luchar con él, de igual manera que quería luchar contra Sabre Jr. Esta dedicando esta etapa de su carrera a divertirse, y bien que hace. En esta lucha lo hace, aunque recibe de lo lindo.
Hemos visto a Danielson, recientemente, ir al Tokyo Dome a dominar a Okada, una de las grandes estrellas de lugar. Y sin embargo, aquí recibe a un mexicano al que no conoce nadie, y es anulado por completo. México es el viejo Oeste; los luchadores saben marcar terreno, y en este caso lo hace el Hechicero, que da una clase de lucha técnica que ha debido sorprender a propios y extraños. Entra con una bola de fuego en la mano, porque, al fin y al cabo, es un brujo, y se mueve de manera especial. Nadie dirá que es un enmascarado más. Bryan trata de llavear, pero es, simplemente, superado. Aplica lo que en México denominan Tapatía, como otras veces, pero Hechicero se libra y se la devuelve, con increíbles variantes. Así es toda la lucha, tanto en lo relativo a llaves como a otros movimientos que yo no sabría ni nombrar, porque los ha inventado él. Además, pega unos chops muy fuertes. Danielson trata de reaccionar, y tiene algún momento en el que lo consigue, aplicando sus patadas al pecho, pero poco más. En los minutos finales, se igualan en las llaves y contrallaves, y en los counters e intentos de pin, y es el americano el que gana con un embolsamiento, más por suerte que por otra cosa. Tras la lucha, lejos de mostrar respeto, Hechicero ataca a su rival, pues los luchadores mexicanos volverán a verse las caras con el Blackpool Combat Club. Castagnoli llega para hacer el salve. Espero ver también una lucha entre el suizo y este luchador.
Puntuación: ****1/4
viernes, 9 de febrero de 2024
Bryan Danielson vs Hechicero, AEW Collision 03/02/2024
lunes, 22 de enero de 2024
Bryan Danielson vs Kazuchika Okada, NJPW Wrestle Kingdom 18
Comentamos, hace unos días, la lucha que Bryan Danielson y Kazuchika Okada mantuvieron en el evento Forbidden Door que organizaron en conjunto AEW y New Japan en Toronto, Canadá. El combate fue bueno, y ambos wrestlers se citaron para repetir en un escenario aun mejor: el Tokyo Dome, en Wrestle Kigdom 18, ante, casi 30.000 personas. ¿Superará esta lucha a su predecesora?
Danielson se fue de WWE soñando con cumplir con algunas de sus cuentas pendientes en el mundo del wrestling. Ya ha tenido grandes luchas en WrestleMania, y ahora hace lo propio en Wrestle Kingdom. Solo resta, para conquistar los tres grandes países del wrestling mundial, que se juegue la cabellera en la Arena México, en una función de Aniversario del Consejo Mundial de Lucha Libre. Eso sí, teniendo en cuenta que los bookers del Consejo no han visto a las estrellas del wrestling americano desde que fueron a México Hulk Hogan y André the Giant, resulta mucho más probable que Bryan participe en una TripleManía de AAA. Pero centrémonos en el combate que nos trae aquí, la primera lucha del Dragón Americano en New Japan desde 2004, cuando, por su tamaño, todavía participaba en la división junior de la empresa. Y es que, aunque todo el mundo critica a WWE por su obsesión histórica con el tamaño, lo cierto es que eso en Japón es mucho más evidente. Aun en NOAH, entre los años 2007 y 2009, participó en innumerables batallas, generalmente enmarcadas en esa división, a pesar de haber demostrado en Estados Unidos poder enfrentarse a gigantes como Takeshi Morishima. En lo relativo a rivales japoneses, son destacables asimismo su matches frente a Shingo y Yamato, en Dragon Gate USA en 2010.
Danielson sufrió una lesión en el hueso orbital en octubre, durante una lucha frente Andrade. Después de eso, ha luchado con un parche en el ojo. Oficialmente su objetivo es proteger el ojo, mas eso es obviamente mentira. Un parche no protege una mierda. Lo usa como parte de su historia, y le da cierto carácter. Llega al Tokyo Dome con él puesto, por supuesto.
Si Bryan consiguió rendir al imbatible Okada gracias a su trabajo en el brazo, en su anterior pelea, sería estúpido si no insistiera de nuevo. Esa es su estrategia desde el principio. Mas, si aquella lucha, a pesar de su trabajo técnico, acabó desbocada, desencadenando la épica propia de todas las luchas de Okada, en esta ocasión este no tiene la posibilidad de llevar el match a su terreno. Daniel se asegura de mantener el control en todo momento porque quiere hacer algo que pueda ser recordado. Creo que lo consigue, o al menos, que esta lucha es mejor que la anterior, si bien ambas se mueven en un nivel muy alto.
Bryan ataca al brazo sin parar. Conecta patadas muy stiff que dejan el cuerpo del rival marcado a la altura del hombro y coloca a este en una situación cercana a la rendición en varias ocasiones. Kaz consigue contraatacar aplicando Tombstone en el borde del ring. Es interesante, porque, si sumamos, a los problemas con las conmociones de Bryan, su lesión en el ojo, se puede justificar así una estrategia del japonés más allá de los lariatos, pues el estado de sus brazos no debería permitirle aplicarlos con fuerza. Okada le quita el parche a Daniel y le pega patadas a la altura del ojo; eso está bien. A diferencia de su lucha anterior, y de todas sus luchas, en general, no hay un momento en el que olvide el dolor en los brazos y se lance al ataque enloquecido: mantiene la psicología durante todo el match.
Pero no se rinde ante nada. Cada golpe; cada patada que recibe, apoya el estado evidente de dolor que sufre. Pero ninguno de los Crossfaces del americano consiguen doblegarlo, a pesar de doblar sus brazos de forma peligrosa. Finalmente, el japonés consigue aplicar dos veces el Rain Maker y ganar.
Vamos a ver; esta es una lucha muy clásica americana en la que "el malo", en este caso el de fuera, domina el combate, mientras el público espera la reacción del oponente. Pero no es una lucha enfocada a las rudezas: Bryan domina con mucha técnica y conocimiento; verdadera superioridad. Domina dentro del kayfabe y fuera, porque, de igual forma que necesita dominar dentro para ganar, necesita dominar fuera para conseguir que el combate sea como debe ser, teniendo en cuenta que su rival pelea de una manera muy manufacturada. Pero es una pena ese final. No me parece mal que Okada gane con el Rain Maker a pesar del dolor en los brazos; no podría hacerlo de otra forma. Pero ese Tombstone en el filo del ring y el parche en el ojo de Danielson le daban otra vía para colocar a su oponente en un estado físico lo suficientemente malo como para que un par de Rain Makers debilitados pudieran acabar con el match de una forma más creíble. Si hubiera insistido por ahí, se habría acercado a las cinco estrellas.
Creo que, en cualquier caso, la lucha es bastante mejor que la que mantuvieron en Norteamérica, a pesar de que la nota numérica, como observa el lector debajo, sólo difiere por un cuarto de punto. Porque esta es una lucha a la que doy 4.5, pensando en la posibilidad de ponerle 4.75, mientras que la anterior, más que opciones de recibir algo más, las tenía de recibir algo menos. Al fin y al cabo, los números son números.
Puntuación: ****1/2