domingo, 21 de agosto de 2022

Claudio Castagnoli vs Jonathan Gresham, ROH: Death Before Dishonor 2022


Después de un intento de push que se desinfló, como ocurre siempre en WWE, Cesaro abandonó por fin la empresa de los McMahon, con la intención de encontrar fuera lo que todo el mundo sabe que merece. Su destino fue el de todo el mundo: AEW.

Pero AEW no es el paraíso que muchos pensaban que sería. Allí donde hay ego, hay pelea. En próximos posts comentaremos algunos aspectos relacionados con sus problemas de vestuario. Pero partimos de lo obvio: la empresa ha fichado a demasiados luchadores de nivel, y no todos tienen hueco, lo que implica que muchos acabarán tan enfadados como lo estaban en WWE. Da la sensación de que Tony Khan compró Ring of Honor sólo para dar salida a muchos de estos luchadores.

ROH ha tenido varios dueños a lo largo de su existencia. Perdió hace mucho tiempo su esencia; debería haberse mantenido como pequeña indy, como ocurre con PWG, para mantenerla, pero ahí no hay dinero. Después del nacimiento de AEW, la existencia de la empresa dejó de tener sentido, y su roster se vio muy damnificado. Finalmente, Khan se ha hecho con la compañía. Algunos decían que sería una especie de territorio de desarrollo como el NXT de WWE, aunque por ahora no veo que sus shows incluyan a ningún wrestler en formación: todos los que participan tienen una carrera larga. En su último PPV, muy exitoso por cierto, ha incluido a algunos clásicos de la promotora, como Claudio Castagnoli, Jay Lethal, Colt Cabana, los Briscoe, o Samoa Joe. Cesaro, con su nombre de siempre (Castagnoli), logró, en este evento, convertirse en Campeón Mundial de ROH, algo que no fue capaz de hacer en su etapa anterior en la empresa, si bien es cierto que este triunfo puede recordar a aquellos de RVD o Tommy Dreamer, que se pusieron el ECW Championship en la cintura bajo el mandato de WWE, que tenía títulos más importantes. Porque Castagnoli será luchador de AEW (de hecho pertenece a un stable), y el título de ROH pasará a ser un título secundario de esa empresa, como tantos otros. No es lo mismo, aunque al final del día, como diría Ric Flair, lo que cuenta es la calidad del combate.

Castagnoli se presentó en Death Before Dishonor para enfrentarse al Campeón Mundial de Ring of Honor, el pequeño y técnico Jonathan Gresham, uno de los luchadores más interesantes del circuito independiente. En diciembre de 2021, Gresham consiguió vencer a Jay Lethal y ganar el título vacante, impidiendo un nuevo reinado de aquel, que ha sostenido el título ya suficiente tiempo. Desde entonces, impuso las clásicas Pure Rules, que tanto se adaptan a su estilo de combate, y defendió el campeonato en todas partes: en Impact Wrestling, en GCW, en Progress, en AEW, en la propia ROH... la verdad es que su reinado ha sido muy internacional, asemejándose a los grandes campeones del pasado. Sin embargo, este llega a su fin de una forma fría, en un combate irrelevante, opener del evento Death Before Dishonor.

Algo le ha pasado a Gresham. Parece estar quemado con el mundo  de la lucha libre. Él firmó con ROH/AEW, porque se alegraba de que la clásica empresa continuara arriba, pero no hay duda de que la duración del combate, así como su derrota o la situación del mismo en la cartelera, son aspectos que a él le parecen una falta de respeto, y por este motivo, ha pedido a Khan su liberación. Ha eliminado su cuenta de Twitter, y parece ser que se tomará un descanso de la lucha. Él mismo ha comentado que dejó de interactuar con los aficionados, porque no le gusta la manera en la que se comportan; la forma en la que "vomitan el Evangelio". Parece ser que el hombre está quemado con los comentarios acerca de su altura (debe ser un trauma para él que viene de lejos).

Gresham ha sido acusado por ser poco profesional; por exigir mucho a AEW en base a su posición en la lista PWI. Soberbio o no, desde luego la lucha en la que perdió el ROH Championship no fue lo que debía ser. Fue corta y simple, y no estuvo colocada en la cartelera en una posición importante, lo que confirma que AEW utilizará Ring of Honor para trabajar rivalidades de luchadores que no caben en sus programas principales, rebajando el valor del título mundial a algo menor. Y es una pena, porque yo tenía muchas ganas de ver a Castagnoli enfrentarse a Gresham en una gran lucha: al suizo siempre se le dieron bien los rivales pequeños.
 

El Campeón parece buscar la pierna del Superman Suizo; posiblemente su rodilla sea la parte más alta que podría alcanzar. Su ofensiva en buena; no pierde la cara al combate a pesar de la diferencia de tamaño, y espera que su trabajo a la extremidad iguale las cosas, si bien resulta evidente que para Claudio manejar su cuerpo resulta trivial.

Cesaro se duele de la pierna, y Gresham se duele de la espalda, por culpa de los Slams recibidos. Los dos trabajan bien, pero es obvio que a la lucha y al público les falta intensidad. Entre idas y venidas, Claudio caza a su rival con un Lariato y un montón de codazos, para acabar la lucha con una potente Power Bomb. La sensación que tengo es que estos dos hombres podrían haber tenido una enorme lucha en la forma apropiada, pero su talento, una vez más, no ha sido tenido en cuenta en todo su valor.

Puntuación: ***1/4

miércoles, 17 de agosto de 2022

Jun Akiyama y Mitsuharu Misawa vs Johnny Ace y Steve Williams 07/06/1996


Hablábamos hace unos días sobre Vince McMahon y sobre los cambios que están ocurriendo en WWE desde su salida de la empresa. Creo que nunca ha existido una ilusión mayor hacia los programas de la compañía, que han sido básicamente iguales durante los últimos 20 años, sin demasiada ambición o expectativa. Ahora Triple H tiene el mando; veremos qué hace con él.

Vince McMahon tuvo que dejar su trabajo en la empresa, al menos de manera oficial, porque la propiedad de las acciones no cambia. El que sí ha sido despedido, estimo que definitivamente, para alegría de muchos, es John Laurinaitis, un tipo al que todo el mundo reconoce por su trabajo de directivo en WWE, pero cuya carrera como luchador pocos recuerdan, siendo esta, en realidad, mucho más destacable que aquel. Hace años que tenía la intención de revisar algún combate de John Laurinaitis, o mejor dicho, Johnny Ace, en AJPW, y la ocasión ha llegado. Pero hablemos un poco, en primer lugar, sobre su reciente despido, que es lo que marca la actualidad.

Si uno lee libros o relatos sobre la manera en la que ocurrían las cosas en WWE en tiempos de la Era Attitude, sabrá que entonces Jim Ross, hombre querido y apreciado por todos en la industria, además de ser destacado comentarista de los principales programas de la compañía, era vicepresidente ejecutivo de relaciones con el talento, esto es, algo así como el jefe de recursos humanos, pero dedicado a los luchadores. En tiempos de la guerra entre WWF y WCW, su labor atrajo a mucha gente de la competencia. Sin embargo, en 2004 abandonó ese cargo, de igual manera que, un par de años después, y de manera progresiva, iría siendo alejado de los comentarios poco a poco, dada la paradójica fobia de Vince McMahon hacia los veteranos, así como su fobia hacia todo aquel que no viva haciéndole la pelota. Ross explicó en su blog que el cambio le permitió pasar más tiempo con su familia y dedicarse a otros negocios, pero ese es el tipo de comentarios que hace alguien para rebajar la humillación de haber sido sustituido, y no obstante, seguir trabajando para la misma empresa.

Y es que, para entonces, WWE ya no tenía competencia. No necesitaba, por tanto, trabajadores competentes, y de hecho, no quería firmar luchadores de fuera, sino crear productos desde cero en sus territorios de desarrollo. Básicamente, Vince quería a alguien que le lamiera el culo, y ejecutara sus órdenes al pie de la letra. John Laurinaitis, considerado por algunos como la mayor serpiente de la industria; un hombre servil y sin capacidad individual, recibió el puesto, que ha desempeñado durante una cantidad de tiempo absurda, destacando por tratar a los trabajadores como si fueran basura y no valieran nada. Un mierda.

Delante de las pantallas, todo el mundo conoció a Laurinaitis porque entre 2011 y 2012 jugó un importante rol en televisión. Se convirtió en figura de autoridad, después de que CM Punk le insultara en antena; insultos que eran legítimos, y que se corresponden muy bien con su labor. En el mítico combate entre Punk y Cena de Money in the Bank 2011, acompañó al Chairmain para intentar impedir la victoria del Straight Edge, sin éxito. Tras eso, fue ganando protagonismo, pues su puesto como vicepresidente de gestión del talento fue usado en los programas, y, finalmente, se convirtió en General Mánager de Raw. En WrestleMania 28, organizó un equipo de rudos para enfrentarse a un equipo de Técnicos a las órdenes de Teddy Long, GM de Smackdown, con el fin de dominar definitivamente ambos programas. Salió triunfador del enfrentamiento, llevando así también el People Power a la marca azul.

Laurinaitis era un personaje repugnantemente heel, pero intentaba aparentar lo contrario. People Power era su eslogan; populista demagogia con la que quería expresar que en los programas se haría lo que quisiera el pueblo, mas el resultado fue el contrario. Así pues, su personaje era casi más ridículo que odioso, pues sus capacidades oratorias no eran muy buenas. Se le olvidaban los textos. Después de su victoria en WrestleMania y su absurda ascensión, comenzó una rivalidad con John Cena que le llevaría a la perdición. Ambos se enfrentaron en Over the Limit, en lo que debía ser una paliza del rapero sobre el ejecutivo.

Hay que decir que todo el mundo fue muy crítico con este bookeo, como lo es, en general, siempre que un no-luchador se sube al ring. Pero es que Laurinaitis sí era un luchador; un gran luchador, de hecho, y no tan viejo. Podía dar un combate serio de verdad, si bien en toda su storyline jamás, que yo recuerde, se mencionó que él hubiera peleado. Llegado el día, los críticos se vieron recompensados con la razón, porque Laurinaitis peleó como si jamás lo hubiera hecho. No sabía ni caer correctamente. Ya habíamos notado que era tonto del culo; que no hacía nada bien, pero hay cosas que no se olvidan. ¿Cómo es posible que diez años después de su retiro como deportista de élite, se hubiera convertido en semejante inútil? Apenas sabía andar...

Laurinaitis usó el enésimo turn-hell de Big Show para salir victorioso de aquel combate, pero acabó siendo golpeado y humillado por todos unas semanas después en RAW. Fue despedido delante de las pantallas, y también detrás, porque, por algún motivo que nunca llegué a conocer, durante su labor como personaje en el aire, perdió su puesto como ejecutivo. Después de que todo acabara, se convirtió en agente de campo, labor con la que había empezado a trabajar en WWE en el año 2000.

Vince apreciaba a Laurinaitis, porque le era fiel. A principios de 2021, cuando el dueño de WWE se deshizo de algunos ejecutivos importantes de la empresa, echando por tierra el trabajo de todo el mundo durante los años previos (incluyendo el de sus hijos y su yerno), y alzándose de nuevo con el poder absoluto, restituyó a Johnny Ace en su puesto de vicepresidente para el talento, provocando horror máximo en torno a él. Muchos luchadores huyeron de la empresa después de eso, si es que no lo estaban haciendo ya. En 2022, cuando se revelaron las supuestas acciones impúdicas de Vince McMahon, se dijo también que Laurinaitis lo sabía todo, y que había colaborado con Vince a la hora de desviar fondos de la empresa para pagar a mujeres e impedir que estas sacaran a la luz los trapos sucios del empresario. No sé si será verdad, pero lo cierto es que, si alguien quiere acabar con el reinado de Vince McMahon en WWE, una de las cosas que debe hacer también es quitar de en medio a la rata servil llamada John Laurinaitis. En junio perdió su puesto en la gestión de los trabajadores, siendo sustituido por el siempre eficaz Tom Prichard, y en agosto de 2022, ha sido despedido de la empresa. No es de extrañar, pues, que en los últimos meses, muchas de las personas que habían huido de la misma se hayan declarado mucho más interesadas en volver a trabajar en WWE.

John Laurinaitis es hermano de Joe Laurinaitis, esto es, de Road Warrior Animal. Empezó a luchar durante la década de los 80, y en muchos casos hizo equipo con su hermano. Ambos fueron especialistas en la lucha Tag Team, mas no pasarían a la historia por trabajar juntos. Mientras que Joe formó el famoso equipo Road Warriors junto a Hawk, Laurinaitis despuntó en Japón, en la AJPW de Giant Baba que, en los años 90, se convirtió en la mejor promotora de wrestling del mundo. Laurinaitis, con el nombre de Johnny Ace, puso su granito de arena, sobre todo, haciendo equipo. Fue dos veces All Asia Tag Team Champion, en ambos casos junto a Kenta Kobashi, y cuatro veces AJPW World Tag Team Champion; dos veces junto a Kobashi, una vez junto a Steve Williams y una vez junto a Mike Barton.

Vamos a ver una lucha suya. En 1996, disputó un combate al que el Wrestling Observer otorgó 5 estrellas, y que fue considerado como el mejor match del año en todo el mundo. Entonces, haciendo equipo con Williams, mantuvo una rivalidad frente a la gran estrella de la All Japan, Mitsuharu Misawa, y aquel que debía ser su sucesor: el aún joven Jun Akiyama. el 7 de junio de ese año tuvo lugar la lucha más aclamada entre ambos equipos.

Akiyama y Misawa formaban la llamada Super Generation Army. Este es el nombre que Misawa le dio al equipo que, unos años antes, había tenido la labor de destronar a Jumbo Tusuruta y a otros veteranos, para dejar paso a una nueva generación. Había dado ese nombre a su equipo con Kobashi, y ahora hacía lo propio compartiendo aventuras con Akiyama. Ambos habían derrotado a la poderosa Holy Demon Army de Kawada y Taue, convirtiéndose en Campeones Mundiales por Parejas de AJPW en mayo de 1996. Ace y Williams serían dos de sus grandes rivales en ese reinado, y de hecho, serían los que conseguirían quitarles los títulos. En el match que mantienen en junio, ya presentan candidatura.

Steve Williams también es conocido como Dr. Death. Había sido considerado como el más malvado gaijin de All Japan del momento, más estuvo alejado de los rings de la empresa por un año después de un lío en las aduanas japonesas. Su violencia y su energía lo convertían en un tipo imparable, perfecto para causar el terror entre los aficionados japoneses. Junto a él estaba Johnny, un hombre de un rango obviamente inferior, pero que quería hacer méritos. Por tanto, se podría decir que los equipos estaban muy igualados, pues frente a ellos estaba asimismo un hombre consolidado (el más consolidado), junto a otro no tanto. Después de terminaran las alianzas de Misawa con Kawada y Kobashi (de distinta forma), Akiyama ascendió al estatus de compañero de Mitsuharu, labor que hasta entonces había supuesto un paso previo a convertirse en gran estrella individual. En este combate, tanto Ace como Jun demostraron que estaban a la altura de las circunstancias.

No sé si la lucha es de cinco estrellas, pero no está lejos. Quizás se puede decir que hay cosas mucho más épicas en la época, y que por tanto, este match pierde enteros, por comparación, pero está muy bien. Tenemos a un cabrón como Williams, furioso y subversivo hacia las estrellas de la All Japan, que castiga sin parar al joven Akiyama. Él y su lacayo intentan centrarse en el chaval, mientras que las entradas de Misawa y sus ataques con el antebrazo, que pueden con todo, igualan las cosas. Así, comienzan a aparecer los Suplexs asesinos,de esos que pueden matar a una persona, aunque sea por acumulación durante años, como le pasó a Misawa.

Este es un combate estructuralmente simple. Parece americano, de hecho. Pero no por eso está mal hecho; al contrario. Es muy emocionante, y el público está muy metido. Los gaijins intentan ganar a la parte débil del rival, mientras que Misawa aparece como un torbellino, y sin embargo, la superioridad numérica en esas ocasiones juega a favor de los americanos. La preocupación de Misawa hacia su joven compañero es tal, que en un momento dado, lo deja fuera, para hacerse cargo del match. Ace, que se encarga del trabajo de debilitar a Akiyama, soporta en este combate mucho dolor, lo que parece significar un push individual que no llegaría. Cada vez que Mitsu está a punto de ganar, cae ante un diabólico Suplex sorpresa de Dr. Death, y eso vuelve a poner el match de cara para los rudos. Así, Akiyama se ve obligado a comportarse como un héroe, y ser ahora el que salva a la leyenda, levantando al público con sus grandes ataques.

Después de un periodo de guerra con los cuatro arriba del ring, los buenos consiguen sacar a Williams de escena, para masacrar a Ace. Este aguanta Suplexs de manera absurda, teniendo en cuenta su perfil. Mientras Misawa se encarga de mantener a su compañero fuera, Akiyama, ayudado por los eventuales Suplexs y codazos del hombre de verde, acaba derrotando al hombre del People Power, que este día ha tenido una de las luchas más importantes de su carrera.

Puntuación: ****1/2


viernes, 12 de agosto de 2022

Vader vs Ron Simmons, WCW Main Event 02/08/1992


Se han cumplido 30 años desde una efeméride relativa al mundo del wrestling que una y otra vez, sale a la palestra. Ahora que tenemos un número tan redondo de años que celebrar, es buen momento para pararnos y hablar un momento sobre la cuestión. En agosto de 1992, por primera vez, un afroamericano se convirtió en World Heavyweight Champion. Fue Ron Simmon, ex jugador de futbol americano y famoso por formar parte de la APA en WWF años después, derrotó a Vader en un show de WCW que posteriormente se emitiría en el programa Main Event de la empresa, y se llevó la correa dorada. Simmons fue campeón durante cinco meses, y acabó perdiendo el título frente al propio Vader.

El campeonato de este hombre siempre me ha escamado. Si uno piensa en la WCW de principios de los 90, que hacía un buen wrestling, piensa en Cactus Jack, Sting, Vader, Dustin Rhodes, Steamboat, Flair tras su vuelta... Y no en Simmons. Ron era un midcarder. Su campeonato es  algo aislado en la continuidad de la época, y tras su reinado, volvió a su situación en el roster. Nunca he conocido muy bien lo que se esconde en la idea de hacerlo campeón. El cambio titular fue inesperado; se suponía que Sting se enfrentaría a Vader esa noche, y ante su ausencia, por una lesión que era keyfabe, se hizo un sorteo (también de mentira) que otorgó la posibilidad a Simmons. Así, sin historia ni mérito, y dentro de un programa secundario, un hombre negro se convirtió en Campeón Mundial por primera vez.

Parece ser que eso fue idea de Bill Watts, un legendario promotor, famoso por su trabajo en Mid-south Wrestling, que se había convertido en vicepresidente de WCW poco antes. Watts duró poco en su puesto, y sus ideas, en general, no gustaron. Eric Bischoff, un hombre que está en las antípodas creativas de Watts, decía en su libro que Bill estaba obsesionado con traer de vuelta las ideas de la vieja escuela, del wrestling de los 70, y que eso no gustaba nada en WCW. Se dice que Watts veía en Simmons algo parecido a lo que le había ofrecido Junkyard Dog en su promotora, y que por eso lo convirtió en campeón. También es cierto que Watts había tenido problemas por algunos comentarios racistas en su día, y temía que saliera a la luz y manchara el nombre de WCW. Pero, si nos ceñimos a las palabras de Simmons, da la sensación de que la baja de Sting de ese día fue real, y que el sorteo fue real. Watts quería hacer algo revolucionario ese día, pero no tengo claro si esa revolución consistía en proclamar al primer campeón negro, o si consistía en proclamar un campeón seleccionado aleatoriamente. Sea como fuere, Ron afirma que él no sabía que sería campeón ese día, y que se llevó una gran sorpresa con lo ocurrido. Fue un hito, sin duda.

Pero la pregunta es, ¿Ron simmons es el primer Campeón Mundial Negro de la historia del Wrestling? Bueno, esto es difícil de afirmar, porque los deportes en USA no están dominados por federaciones casi públicas como las que gestionan los deportes normales en Europa. En otros deportes y en otros continentes, sólo hay un campeonato mundial, o un campeonato nacional, pero en Estados Unidos, al ser las organizaciones deportivas entidades privadas que hacen lo que quieren y que compiten entre ellas, hay muchos. Así pues, sí que hay Campeones Mundiales negros previos en la historia del Wrestling, pero los campeonatos ganados por ellos no son demasiado relevantes. Yo creo que no es un error considerar a Ron Simmons como tal.

Por lo demás, la lucha es un enfrentamiento entre dos hombres enormes, que resulta muy stiff. Vader domina casi todo el combate, pegando sus habituales golpes demenciales. El público apoya a Simmons, y aplaude todos sus ataques. Finalmente, cuando Vader corre contra las cuerdas, Simmons lo recibe con un muy buen Power Slam, gracias al cual, consigue llevarse la victoria. Buena luchita de Power Houses. Tras ella, todos los luchadores de backstage salen para celebrar con Simmons. Todos son, por cierto, muy rubios.

Puntuación: ***

sábado, 6 de agosto de 2022

Andrade El Idolo y Ric Flair vs Jay Lethal y Jeff Jarrett, JCP Ric Flair's Last Match



Vamos un día más con el deporte de los septuagenarios. Últimamente hemos comentado luchas de Canek, Rayo de Jalisco y Vince McMahon, y hoy toca hacer lo propio con el último match de Ric Flair. Esto no es nostalgia; es arqueología.

El caso es que, tras once años alejado de los cuadriláteros, el legendario Ric Flair, uno de los luchadores más destacables de toda la historia del wrestling, volvió a subirse a un ring. Lo hizo en un evento llamado Ric Flair's Last Match, promovido, en teoría, por Jim Crockett Promotions, la promotora que lideró la NWA en la última parte de la era de los territorios y cuyo producto fue vendido a Ted Turner Enterprise, para acabar después en manos de Vince McMahon. Hay muchas cosas que comentar al respecto.

El logotipo de JCP no se había utilizado desde 1988. Fue una empresa dirigida, primero, por Jim Crockett, y después, por su hijo, Jim Crockett Jr, que la llevó a lo más alto. En ese sentido, los Crockett, como los McMahon o los Jarrett, conforman una dinastía con varias generaciones de promotores. JC Jr, falleció el año pasado, así que quizás debería escribir algo en su honor, ahora que voy a hacer lo mismo con Vince McMahon. A ver qué sale.

Este evento tiene lugar bajo el sello de Starrcast, una convención de lucha libre que se ha celebrado cinco veces desde 2018, desarrollada por Conrad Thompson, y que en 2019 se alió con la incipiente AEW para el show Double or Nothing de ese año. Los últimos días de julio de 2022, tras un parón de tres años, volvió, cerrando su fin de semana de fiesta luchística un este show que incluye varias peleas de nivel, con talento de Impact wrestling, y el main event, en el que tuvo lugar el enésimo retiro de Ric Flair. Thompson llevó a cabo ese evento con la colaboración de David Crockett, hijo de Jim Crockett y hermano de Jim Crockett Jr. Conrad entabló amistad con David gracias a su podcast, y juntos acordaron traer a Flair de vuelta, mas no tenían una promotora de lucha como tal. Por tanto, consultaron con sus abogados la posibilidad de hacerse con la propiedad de las marcas de JCP, y parece ser que no resultó muy complicado (no sé si estos pertenecían a WWE y esta empresa dejó de renovarlos, o bien si no entraron en el trato original con Turner). Thompson, eso sí, aseguró que, una vez terminado el evento, regalaría el 50% de los derechos de la marca a David Crockett, pues, en su opinión, es algo que debe pertenecer a su familia.  

En lo relativo a Flair, todos lo vimos retirarse en 2008, tras una gran lucha en WrestleMania 24 ante Shawn Michaels. Pero ese no fue su primer retiro. De hecho, había perdido un Steel Cage Retirement Match frente a Hulk Hogan ya en Halloween Havoc 1994. Mucha gente ha intentado alejarlo de los cuadriláteros desde entonces, empezando por Bischoff, con el que no tenía muy buena relación, pero él, una y otra vez, vuelve, porque no puede imaginar la vida sin lucha. Por eso ha regresado para luchar en una sexta década, tras cumplir 50 años como luchador. Dice que esta sí es su última lucha... veremos.

En 2007 comenzó una storyline en WWE, según la cuál, si perdía una lucha, debía retirarse. Él mismo, en una promo que tuvo lugar en RAW, declaró que jamás se retiraría, y quedó muy bien, porque, si bien era una storyline, se correspondía con la realidad de las cosas: Vince McMahon quería obligarle a retirarse, y el no deseaba hacerlo. Nunca ha querido. Por eso, poco después de abandonar WWE, tras no poder participar sobre el ring en la lucha que enfrentó a Jericho con otras leyendas de WWE en WrestleMania 25, volvió a pelear, primero en los shows de Hulkamanía Tour, y después en TNA.Trabajó para esa empresa hasta el año 2012, siendo su match frente a Sting, una vez más, en septiembre de 2011, su último combate hasta ahora. A finales de 2012, tras el infarto que sufrió Jerry Lawler en WWE, declaró que nunca volvería a luchar.

Flair firmó un contrato de leyenda con WWE para hacer algunas apariciones. Se convirtió en el mánager de su hija, Charlotte, la gran estrella de división femenina de la empresa, y fue traicionado por ella. Asimismo participó en la rivalidad final entre Batista y Triple H, que dio lugar al retiro del primero (aunque también, la suya, fue la última lucha en la carrera de Triple H). Para entonces, aunque resultaba obvio que Flair, por sus declaraciones, volvía a tener la intención de luchar una vez más, y miraba con ojos golosos la creación de AEW, había sufrido problemas de salud muy graves que casi acabaron con su vida. De hecho,  el segmento en el que Batista le atacaba en aquella rivalidad dejaba claro que los movimientos que podía hacer estaban muy acotados. Yo no podía imaginar por entonces que este loco se empeñaría en volver a subirse a un ring, pero lo ha hecho.

Hace unos meses, lo vimos empezar a entrenarse para hacerlo. Parecía una locura; es muy viejo, aunque no está muy mal físicamente. En fin, lo vimos luchar durante cuarenta años; cuando nacimos ya estaba ahí, así que le hemos visto envejecer en directo arriba del ring. Ya sabíamos que era el luchador viejo de la profesión. Su aspecto al subirse al cuadrilátero no provoca ahora tanto impacto, porque estamos acostumbrados (al menos los veteranos como yo). Pero, conociendo sus problemas de salud, y lo cerca que ha estado de morir, temíamos que acabara como Mickey Rourke en The Wrestler.

De hecho, hay gente que ha intentado evitar que luche. Se ha avisado incluso a las autoridades para que lo prohíban. Porque hay gente adicta a la política; adicta a decirle a los demás cómo deben ser, qué pueden hacer y qué no. La mayoría de la gente, de hecho, piensa que es legítimo dirigir la vida de las personas por su bien, sin pararse a pensar quién puede realmente decidir y en base a qué, qué es el bien y qué es el mal. Ric Flair podría haber muerto en el ring, pero al fin y al cabo, hubiera muerto siendo lo que es, y haciendo lo que siempre ha querido hacer. No se sube al ring para morir, se sube al ring para vivir. ¿Qué derecho tienen los paletos moralistas a perseguir las elecciones vitales que sólo afectan a quién las toma?

Ric Flair estaba entrenando con Jay Lethal, su buen amigo. Eso desencadenó la storyline que finalmente subyace tras la lucha. Lethal estaba tan preocupado por que le pasara algo, que le atacó violentamente, con la colaboración de un viejo conocido, Jeff Jarrett. Lo dejó ensangrentado en el suelo, porque "lo quería". Hay amores que matan. Así, estos dos villanos odiosos se convirtieron en los rivales de Ric en el que supuestamente es, ahora sí, su último combate. Su compañero de equipo es Andrade, su yerno, marido de su hija Charlotte. Nunca pensé, cuando veía a La Sombra dar saltos en la Arena México, que acabaría siendo el compañero de Ric Flair en su último combate, pero así ha sido.

Así llega un combate muy entretenido y basado en el storytelling. En las gradas vemos a Foley y Undertaker, así como al padre de Jeff Jarrett, Jerry, que aún se ve muy joven. Jarrett y Lethal hacen de rudos clásicos, llenos de odio y abucheados constantemente, mientras que Ric aparece con su música clásica, el tema Así habló Zaratustra de Strauss que Kubrick hizo famoso en 2001: Odisea en el Espacio. Lleva su bata de siempre, de esos tan caros, y el campeonato de World Heavyweight Champion en la cintura. En fin, la imagen de este cinturón sí que debe pertenecer a WWE, pero no creo que en esa empresa nadie quiera atacar a Ric Flair. La lucha comienza con un Flair que no se esconde, y que intimida a sus rivales.

Ric está viejo y se puede mover lo justo. Pero, como decía, lleva siendo viejo treinta años, y siempre se las ha apañado para ser un underdog creíble. Con un par de chops y un low blow que el referee no ve, levanta al público y se pone por delante en el match. Si eso le funcionó con Vader o con The Great Khali, funciona con cualquiera.

Obviamente, sus rivales son más rápidos y ágiles que él. Jarrett también es veterano, y aún así, hay más de veinte años de diferencia de edad. De todos modos, los villanos venden muy bien los golpes del anciano, para transmitir la imagen de que este combate es posible. Además, son tan cobardes y huyen en tantas ocasiones que esa sensación se transmite incluso cuando no pasa nada. Y cuando sale a luchar Andrade e intercambia movimientos con Lethal, el público se entretiene también a un nivel físico.
 

Como en toda lucha clásica tag, hay un buen rato de dominio de los heels sobre uno de los faces. Jarrett y Lethal atacan a Andrade, turnándose. Finalmente, Ric entra al ring y pelea contra los dos malos. Brawlean fuera del ring, frente a Undertaker, mientras este, al ver a Ric luchar, piensa que se retiró demasiado pronto. La mujer de Jarrett, Karen, también ataca a Ric, lo que provoca que mujeres de la grada se peleen con ella, posiblemente la esposa del Nature Boy. Este llega a sangrar profusamente, tal y como ha hecho tantas veces en su carrera.

El referee, Chioda, acaba KO. Después de mucha batalla, Ric recibe un puño americano, marca de la casa, y golpea a Jeff con él. Lo coloca en la Figura 4 y otro referee aparece para señalar la victoria. Buen entretenimiento luchístico, de vieja escuela y con mucha intensidad, sin demasiadas carencias de Flair a la vista, pues sabe muy bien luchar sin exponerse. Yo disfruto estas cosas; ya sabe el lector que prefiero a Ric con 70 años que a otros con 30, y no diré nombres.

Es difícil ratear el match. Sólo hay que ir a Cagematch y ver todos los rating en contra, escritos antes de ver el combate por gente que mide todo desde un punto de vista moral, incluido un espectáculo de entretenimiento irrelevante como este. Relájense.

Puntuación: ***1/4

martes, 2 de agosto de 2022

Mr McMahon vs Pat McAfee, WWE WrestleMania 38 Sunday


Comentamos en el último post la reciente dimisión de Vince McMahon como presidente y principal creativo de WWE, labores que lleva ejecutando desde hace unos 50 años. Se trata este de un hito histórico sin precedentes, porque él es la figura más importante en la historia del wrestling, y el hombre que ha dado forma a la industria que hoy conocemos y que sobrevive como entretenimiento a pesar de que todo el mundo conoce ya el secreto que en otra época justificaba su interés. Tendremos, pues, que desarrollar algún tipo de serie especial en el blog en la que repasemos los momentos más destacados en su trabajo como promotor, empresario, booker, comentarista, personaje y luchador. Eso me parece muy interesante.

Por ahora, estamos comentando la última vez que se subió al ring, algo que ocurrió sólo unos meses antes de que llegara el supuesto final de su carrera, quizás de forma premonitoria (quizás se olía la tostada y quiso despedirse así, y quizás por eso su hija dimitió de sus cargos en esa misma época, para poder regresar como sustituta desde una posición alejada de él). La última lucha de Vince McMahon en WWE la mantuvo frente a la leyenda de la NFL Pat McAfee, actual comentarista de WWE y luchador ocasional.

Ya comentamos en el último post que la rivalidad surgió a partir de una entrevista que Pat mantuvo con Vince en su Talk Show, y que esa conversación, dada la buena relación legítima que existe entre ambas personas, les condujo a una rivalidad dentro del universo de ficción de WWE. Vince eligió al tramposo Austin Theory como rival de Pat, pero este no fue capaz de cumplir con los deseos de su señor: Pat McAfee derrotó a Austin Theory en WrestleMania 38 Sunday, ante la mirada de Vince, que estaba junto a los comentaristas.

Ante este final, ni corto ni perezoso, el anciano se quitó la americana y se dispuso a enfrentarse a su odiado oponente. Vince es el típico culturista que ha sido alcanzado por la vejez a traición: sigue estando muy fuerte, pero raro: sus músculos están mal. Como diría Héctor Del Mar, "se le ha caído el pecho". Aún así, ante la expectación de todos, se sube al ring y domina a su cansado oponente de una forma muy poco verosímil.

Repito que hay algo raro en este match, y que eso me lleva a pensar que se trata de una especie de despedida. Porque no tiene sentido que a los 76 años, después de haber abandonado tanto tiempo el protagonismo en pantalla, se ponga a pelear, olvide su obsesión por no exponer el negocio, y se saque la chorra de esta manera. El caso es que Pat se lanza contra él, pero impacta contra los clotheslines lentos que consigue aplicar con sus musculosos pero ancianos brazos. Vince intenta enfadar a la grada, pero esta no puede sino aclamarle. McAfee se levanta para cargar contra su jefe, pero es atacado por la espalda por Theory, ante lo que el referee no puede decir nada, porque aquí manda Vince. Austin le da a McMahon un balón de fútbol americano para que lo patee al público, como hace Pat, pero obviamente es todo ironía. Vince no se lo pasa al público, sino que dispara contra McAfee, dejándolo KO, y consiguiendo una victoria extraña y sin demasiada resistencia.

En fin, más que lucha, es un momento en el que Vince trolea a todo el mundo por última vez en su carrera. Tras lo ocurrido y para rematar la función, momentos antes del main event, llega Steve Austin, que en la noche previa había derrotado a Kevin Owens, y por última vez en la historia, comparte cervezas y Stunner con el Chairman. Primero golpea a Theory, que hace un overselling propio de The Rock; y después, bebiendo con su antiguo rival, golpea al anciano, que casi se cae solo, demostrando que no está en condiciones para hacer estas cosas. Entretenido.

Puntuación: -

lunes, 1 de agosto de 2022

Pat McAfee vs Austin Theory, WWE WrestleMania 38


En las últimas semanas, han ocurrido cosas en WWE relacionadas con su sempiterno líder, el señor Vincent Kennedy McMahon. Todos pensábamos que veríamos a este hombre mandar en la empresa hasta el día en que muriera, algo que ocurrirá, probablemente, alrededor de 2050. Si bien cada vez se parece más al Señor Burns, el tío sigue estando en plenas condiciones físicas y mentales como para mandar en WWE a múltiples niveles. Y de hecho, en los últimos años ha aumentado su poder, despidiendo gente, dando de lado a sus hijos y a su yerno, cuyos papeles en la compañía se ha reducido drásticamente, y rodeándose de unos pocos lacayos lameculos como Nick Khan o John Laurinaitis que le dicen sí a todo. Y sin embargo, ha ocurrido algo improbable: Vince tuvo que dimitir de su puesto de presidente de WWE debido a un presunto caso de acoso y soborno a una trabajadora. Su hija Stephanie ha ocupado su puesto. Finalmente, y aunque parecía, este, un cambio cosmético, debido a la investigación que está llevando a cabo la junta directiva de la empresa, parece ser que Vince ha dejado por completo su trabajo en la promotora de lucha libre más antigua de Estados Unidos, lo que debe ser la mayor noticia en la industria en décadas.

Por lo que se dice, parece ser que Vince tenía algún tipo de relación con una trabajadora de la empresa, y le pagó para que no hablara al respecto. O eso es lo que se está investigando; no sabemos si será verdad. En realidad, teniendo en cuenta el historial de este hombre, apenas parece un detalle sin importancia en comparación con lo que ha llegado a hacer para sacar adelante su compañía durante los últimos 40 años. Da la sensación incluso de que podría haber existido una conspiración en su contra, debido a los cambios de poder ocurridos dentro de WWE últimamente. Desconozco el devenir de los acontecimientos, pero lo cierto es que Steph y su marido, Triple H, que hace unas semanas parecían haber perdido toda su fuerza en WWE, ahora vuelven más fuertes que nunca. La expectación cunde por doquier, ante un futuro en semejante sin Vince, algo nunca visto para la mayoría de nosotros. Podemos esperar cosas increíbles... o el fin de la compañía. Ni idea.

No sé si será casualidad, pero esto coincide con la reaparición de Vince arriba del ring en el último WrestleMania. Cuando, a principios de año, se empezó a especular sobre una hipotética pelea entre Pat McAfee y él, a mí me pareció una locura. Tenía la sensación de que se había echado a un lado en lo respectivo a la fama, y de que no necesitaba de ese tipo de momentos ante el público. Es más, me preocupaba su estado físico de cara a una confrontación en el ring, por simple que esta fuera (tiene 76 años de edad). Finalmente se usó la cabeza, y se utilizó a la figura emergente de Autin Theory como herramienta de Vince, lo que sirvió para dar un push al joven luchador, y para que Vince tuviera su momento de una manera menos arriesgada. Ambos se enfrentaron a McAfee, en dos luchas que vamos a comentar estos días. Yo tan sólo quería escribir un post sobre este tema, pero por el formato del blog, es necesario que cada uno de los combates oficiales que incluye el storyline tenga su artículo.

Pat McAfee es un jugador de NFL retirado, bastante famoso por su paso por Indianápolis. Yo no conozco mucho ese deporte, ni a sus estrellas, así que no puedo valorar realmente el tamaño de su fama. Entiendo que si fuera enorme no hubiera empezado como un comentarista de NXT, sino que causaría sensación, pero es obvio que es un tipo querido. En la marca amarilla se metió en una rivalidad con Adam Cole, y sorprendió a todo el mundo, tanto por su capacidad para contar historias, como por su habilidad para ejecutar movimientos de wrestling de manera verosímil, a pesar de su inexperiencia. Ahora, WWE ha aprovechado ese aspecto anímico diferencial que incluye este hombre para meterlo en una historia importante de cara a WrestleMania, y no creo que nadie se arrepienta de ello.

Vince estuvo presente en el talk show de Pat, y ahí empezó algo entre ellos. Obviamente, esas entrevistas son legítimas; no hay nada (o casi nada) de storyline, pero siempre es susceptible, la cosa, de ser usada. Vince ofreció una lucha en WrestleMania a Pat, lo que no es de extrañar, porque este tipo de eventos siempre acoge bien a las estrellas de la farándula, y esta edición ha tenido varias. Pero no fue el Chairman el que se metió en problemas físicos con él, sino Austin Theory. El joven Theory apareció en un programa de Smackdown para ofender al locutor, recordando que él es el protegido de Vince, y anunciando el plan de este, consistente en que Austin le rompa los dientes en el mayor evento del año. Los dos tuvieron escarceos puntuales durante los siguientes programas, hasta que Vince tuvo que defender a su ahijado, cuando este era perseguido por Pat. En ese momento, Vince confirmó su rol a favor del rudo en este feudo, si bien aún no se esperaba que acabara peleando.

La rivalidad resulta interesante, así como el enfrentamiento entre Pat McAfee y Austin Theory. Son dos figuras que tienen una personalidad muy marcada, y que por tanto podían contar una buena historia. No sé muy bien qué ha visto de especial McMahon en Austin, en tanto que por sus rings han pasado montones de luchadores mejores que él en cualquier aspecto, y uno tras otro, han sido enterrados, mas parece que con este chico va en serio, aunque sea por un tiempo. Eso le permite disfrutar de un privilegio como lo es tener un combate individual en WrestleMania, y participar de una historia relevante. Veamos.

Austin es anunciado como un futuro Universal Champion por Vince, que para calentar al publico, se hace un selfie con él. En lo relativo a McAfee, este es presentado por las cheerleaders de los Dallas Cowboys. Me parece sorprendente, dado el rumbo de la moral americana, que todavía existan Cheerleaders. Patea McAfee en la capital mundial del fútbol americano para continuar con un duelo que es puro storytelling, incluyendo prematch y postmatch.

Theory domina a su rival. Manda callar al público, y muestra sus músculos. Está haciendo un trabajo de rudo de manual. Por contra, los golpes de Pat, contados, son comprados con gran ilusión. Ataca el jugador de football, golpea contra la mesa, y se pone los cascos de comentarista para lanzar una de sus frases, si bien falla a la hora de utilizar la Swanton  Bom. Acierta no obstante un impresionante Superplex, y acaba ganando el combate gracias a un paquetito sorpresivo, aplicado en el momento en el que Theory iba a rematarlo con un Jumping TKO. McAfee celebra, pero Vince se aproxima al ring. Veremos la lucha entre ambos en el próximo post.

Esta lucha no está mal. Un rudo domina a un técnico, y este protagoniza puntuales comebacks, animado efusivamente por el público. Es un formato que ayuda a esconder las carencias luchísticas de la estrella invitada.

Puntuación: **3/4

lunes, 27 de junio de 2022

Canek vs Psycho Clown, AAA TripleManía 30 Monterrey



Especial TripleManía 30

Terminamos de comentar la primera ronda de la Ruleta de la Muerte de TripleManía 30. Ya decía en otros posts que una de las cosas que más me gustan de esta competencia es la aparición en ella de leyendas que llevan muchos años alejadas de los focos, y que pueden tener un momento de protagonismo por primera vez desde hace muchos años. Así ocurre con Rayo de Jalisco y con Canek, hombres que, no obstante nunca se han  retirado, son muy mayores, y eso incluye un riesgo para la verosimiltud de los matches. En esta cuarta lucha, Canek se enfrenta al joven y enérgico Psycho Clown, a los... 70 años de edad.

Ya sabemos quién es Psycho; es la gran estrella de Triple A, y por lo tanto, uno de los luchadores más importantes de México, y posiblemente del mundo. Ha estelarizado varios eventos de TripleManía, en los que ha desenmascarado a Dr. Wagner Jr y ha rapado a Rey Escorpión, Pagano y Texano Jr. Por su parte, Canek es una de las grandes estrellas del Toreo de 4 Caminos; y su principal peso completo. Mientras que Rayo de Jalisco Jr dominaba el CMLL, y Mil Máscaras era amado en Estados Unidos y Japón, Canek peleaba en la tierra de los independientes, donde se le dio el papel de recibir a las grandes estrellas extranjeras, lo que le permitió pelear contra gente como Hulk Hogan y Andre the Giant, al que levantó mucho antes de que lo hiciera el Hulkster en WrestleMania. Entre sus máscaras más valiosas está la de Universo 2000, o la de Blue Blazer, conocido por todos como Owen Hart. Como Rayo, lleva unos 15 años fuera de las grandes ligas, pero hoy viene a reivindicar que, a su edad, está muy vigente.

Y es que lo primero que uno piensa cuando se da cuenta de la diferencia de edad que hay entre los dos luchadores, es que Psycho Clown va a pasar por encima del gigante, porque su velocidad y su energía son mucho mayores. Pero Canek no es tonto, y sabe escribir una historia precisamente para la ocasión. Cada vez que Psycho se lanza contra él con algún tope, lo espera y lo desvía, consiguiendo, con poco esfuerzo, que se haga mucho daño. En la primera caída, el totalmente payaso está a punto de abandonar, porque el golpe contra la valla de protección que se pega es bestial.

Canek sabe que el público de Triple A está con el payaso, así que no tiene ningún problema para luchar como rudo, y para subirse al ring y presumir de musculatura. Hay que decir que para la edad que tiene, es bastante impresionante. Golpea al Clown hasta sangrar, le rompe la máscara hasta dejarle media cara fuera, y lo proyecta contra las sillas del público, aprovechando de nuevo un impulso del joven no lo suficientemente meditado.

Así transcurre la lucha. Psycho ataca con varios comebacks, pero Canek es más listo. Incluso usa alguna llave de rendición muy técnica. El combate no está mal, pero AAA no piensa permitir que una lucha, por importante que sea, acabe limpiamente. De igual manera que en el match anterior aparecieron los Dinamita para atacar a Rayo de Jalisco Jr, en esta ocasión aparece el Legado Wagner, que hace tiempo que no pertenecía a la empresa, en principio, para hacer daño a Canek, un viejo rival. Sin embargo, Fue Psycho el que desenmascaró a Wagner, así que es este la víctima del ataque del Galeno del mal, que le pega violentamente con un bate de béisbol, dejando la victoria sencilla para el Principe Maya. Tras el match, Wagner se alía con Andrade el ídolo y juntos prometen fechorías.

Hasta llegar a la interrupción, el combate tenía buena pinta.

Puntuación: ***

sábado, 25 de junio de 2022

Rayo de Jalisco Jr vs Blue Demon Jr, AAA TripleManía 30 Monterrey




Especial TripleManía 30

Seguimos hablando sobre la Ruleta de la Muerte de TripleManía. La tercera lucha de esta competición enfrentó a dos leyendas: Blue Demon Jr y Rayo de Jalisco Jr. Es, este enfrentamiento, especialmente interesante, porque los Blue Demon y Rayo de Jalisco originales se enfrentaron en su día en combate de apuestas, para victoria del primero. Así, Rayo de Jalisco, que no sé si es verdaderamente padre de este Rayo de Jalisco Jr, pues existe una diferencia física entre ambos abismal, decidió, al final de su carrera, dar una última gran lucha en un escenario incomparable, precisamente la Monumental de Monterrey, y perder su máscara, ante una gran leyenda como Blue Demon, que sabemos que no es padre de Blue Demon Jr. Por eso a mí me hacía mucha ilusión que luchadores como Jalisco Jr o Canek estuvieran en este torneo: pensé que sería posible que leyendas vivas como ellos hubieran decidido perder al fin su máscara, después de muchos años fuera de los grandes focos, y tener un último momento de protagonismo. Finalmente, el que hará tal cosa será Villano IV, y eso no es poca cosa: está haciendo un torneo genial, mucho mejor de lo que podrían hacer los otros, pero es cierto que no es lo mismo, porque él siempre ha estado ahí, y su caída de máscara era una cuestión de tiempo. Que el perdedor fuera Canek o Rayo hubiera sido una noticia histórica sin precedentes.

Y es que son dos luchadores que han estado en lo más alto en México. En el próximo post hablaremos sobre Canek. En lo relativo a Rayo, este fue la gran estrella del Consejo durante los 90 y los primeros años de este siglo. Ganó las máscaras de MS-1, El Egipcio o Cien Caras, con quien mantuvo una batalla histórica en la función del 57 Aniversario de la Empresa Mundial de Lucha Libre, y fue el principal Campeón de Peso Completo de esa empresa durante años. Si bien nunca ha perdido la conexión con la Arena México, lleva unos 15 años trabajando en el circuito independiente sin demasiada presión. Muchas veces se ha encontrado con Canek, y muchas veces se han retado, pero ninguno se ha decidido por dar forma a la batalla definitiva de apuestas. No será tampoco esta la ocasión para que tal cosa ocurra, puesto que sale ganador de la primera ronda de la ruleta, al vencer a Blue Demon Jr.

Blue Demon es heredero de una de las grandes marcas de la historia de la lucha libre mexicana. Pero a pesar del gran nombre que porta, se considera que su carrera no ha estado a la altura de las expectativas, quizás por no haber luchado lo suficiente en una de las dos grandes empresas de lucha libre de su país. Su relación con el Consejo se torció hace tiempo, y de hecho esa empresa hace negocios con el verdadero hijo de Blue Demon, dando de lado al Junior, que decidió hacer promotoría, y montar una sucursal de la NWA en México, proclamándose Campeón del título que portaron en su día las grandes estrellas del wrestling americano. Cuando ese proyecto fracaso, volvió a luchar puntualmente con AAA, lo que le permitió participar en el main event de TripleManía, y pelar a Dr Wagner Jr, siendo este, posiblemente, el mejor trofeo de su trayectoria.

Unos años antes había tenido una potente rivalidad frente a Villano IV, y eso podía dar pie a que, finalmente, fuera él el que destapara al miembro de la Dinastía Imperial este año. Hubiera sido genial que así fuera, puesto que ese feudo tuvo highlights interesantes. No será así, por desgracia, si bien estuvo a punto de serlo, en tanto que en primera ronda es derrotado por Rayo.

La lucha entre ambas leyendas empieza bien, con un Demon que castiga violentamente a su enorme contrincante, rompiéndole la máscara y haciéndole sangrar. Rayo se libra y sube a su rival al ring, para utilizar su mayor tamaño a su favor, y hundirlo a base de fulminantes chops. Su forma de luchar no es muy atractiva, y eso justifica los malos ratings recibidos, pero a mí me parece acorde a su tamaño. Los mexicanos no están acostumbrados a este estilo, porque son muy chaparritos. De todos modos, es cierto que esta parte del combate se hace muy pesada.

Ya sabemos que AAA es adicta a las apariciones random que joden los combates. Eso nunca ha funcionado, pero ellos siguen haciéndolo. En este caso, son Cien Caras y Máscara año 200 los que aparecen para distraer a Rayo, e intentar propiciar su derrota gracias al ataque de la Nueva Generación Dinamita. Los Capos quieren vengarse por lo ocurrido con Cien Caras hace más de 30 años. Sin embargo, el gigante se libra de todos, y acaba venciendo a Blue Demon.  No hay mucho que destacar en esta pelea. 

 Hay que decir, porque lo había olvidado en la primera edición del post, que el combate entre Rayo y Cien Caras de 1990 pasó a la historia por un guitarrazo del rudo al técnico. Esta es una técnica muy conocida en Estados Unidos, y utilizada ya para entonces en infinidad de ocasiones, pero en México supuso un momento histórico. En este match, es Rayo el que consigue usar la guitarra contra su oponente, Blue Demon. Después del combate, todos los Dinamita atacan al gigante, y este promete quitarles las máscaras a todos, como a su padre. Mientras tanto, el referee hace la señal de lesión legítima, pues el guitarrazo parece haber herido de verdad a Demon.


Puntuación: **1/2

lunes, 20 de junio de 2022

Villano IV vs LA Park, AAA TripleManía 30 Monterrey


Especial TripleManía 30


Seguimos hablando sobre la Ruleta de la Muerte que está teniendo lugar en las distintas jornadas que componen el evento TripleManía 30, la edición de este año del gran show de AAA. Ya vimos en la primera pelea del torneo a Pentagón Jr ser derrotado por el histórico Último Dragón. Ahora, son dos leyendas vivas de la lucha mexicana las que se ven las caras: LA Park y Villano IV.

Estos son dos luchadores de una edad parecida, que llevan decenios dando grandes luchas. El primero, La Parka original, sigue siendo aún hoy la gran estrella de la lucha libre en México, y sobre todo en Monterrey, donde se le quiere mucho. Un gran brawler, devorador de máscaras, que tiene en su armario montones de trofeos, incluyendo las incógnitas de Hijo del Fantasma, Pierroth Jr o Tiger Mask III, y la cabellera del Villano III, el fallecido hermano mayor de su rival hoy. Este, Villano IV, es el último superviviente de la dinastía imperial, y si bien no ha gozado de los éxitos individuales que han tenido algunos de sus hermanos, ahora, a punto de acabar su carrera, quiere retirarse a lo grande. Estuvo con el Villano I y el Villano V en la lucha histórica en la que desenmascararon a los Brazos, e hicieron lo propio con algún otro equipo. Los Villanos I y II murieron jóvenes, trágicamente, y el Villano III fue el que más destacó como luchador individual, hasta ser desenmascarado por Atlantis. Los Villanos IV y V hicieron equipo, y lucharon en WCW, en la época dorada de la división Cruiserweight de esa empresa, en la que también estaba presente el propio LA Park. Hace unos años, cuando su hermano mayor, Villano V, tuvo su gran push de pérdida de máscara en el Consejo, ganando primero la tapa de Blue Panther y perdiendo, después, la suya ante Último Guerrero, IV le acompañó en muchas batallas. Pero nunca fue él el protagonista.

Y es consciente de que para serlo tiene que aceptar perder su máscara. Eso le asegura a cualquiera un main event. Con Villano III ya también fallecido, y V retirado, dedicado a otro trabajo, en el que también le ayuda IV (tienen una clínica de acupuntura, o algo similar que no recuerdo), el más pequeño de su generación tiene ante sí sus últimas peleas. En los últimos años, se ha convertido en el patriarca de su familia, acompañando en el ring a algunos de sus sobrinos (Villano III Jr, Hijo de Villano III, Rokambole Jr y Villano V Jr), y guiándoles. De hecho, estuvo junto a Hijo de Villano III en el debut de este en el CMLL, y parecía que podían meterse en una rivalidad doble ante Atlantis y Atlantis Jr. Me parece que a Villano IV le hubiera gustado perder su máscara ante la leyenda del Consejo, pero ya que no pudo ser, en AAA va a encontrar un lugar en el que perderla dignamente, aunque su rival no será el que él preferiría, me temo.
 

Villano IV se enfrenta en la primera ronda del torneo a LA Park, el que debería ser, posiblemente, su oponente final. Porque la lucha que mantienen es extraordinaria, propia de un máscara contra máscara. Es una pena que esta no sea la lucha definitiva de la Ruleta de la Muerte; ya sabemos, puesto que escribo esto justo después de que tenga ocasión el segundo evento de TripleManía, que será Pentagón el que pelee contra Villano, y aunque me alegro de que este joven al fin tenga su primer gran enfrentamiento de apuestas, quizás la lucha carezca de la épica que implicaría una historia existente ente los dos leyendas que se enfrentan. Como digo, LA Park rapó a Villano III, y aunque Villano IV dice no guardar rencor a su oponente por ello, pelea como si lo hiciera.

Esta es una brawl brutal, de aquellas que se hacían en los 80 en las luchas de apuestas del Toreo de 4 Caminos, quizás la cosa que a mí más me gusta en el wrestling mundial. Cualquiera que haya visto entrevistas hechas al Villano IV en los últimos años, pensará que es un hombre mayor y muy sensible, de los que lloran enseguida, y sin embargo, se sube al ring y se convierte en una auténtica bestia. Además, ha perdido bastante peso desde esas luchas que citaba en el Consejo junto a su sobrino. Se ha preparado bien para dar la talla en este torneo, y lo ha conseguido.

Villano no permite a su rival llegar al ring: le ataca sin piedad, rompiéndole la máscara, y haciéndole sangrar. Pronto, la cara de Adolfo Tapia se deja ver en exceso, aunque llena de sangre, como le ha ocurrido en otras tantas luchas (recuerde el lector su enfrentamiento con La Parka de AAA, por el personaje). Villano muerde la frente de su oponente, y escupe su sangre: lo va a matar, y el referee le apoya.

Villano IV está cerca de ganar en varios momentos, pero en todos ellos levanta la cabeza de su rival. Quiere hacerlo a su manera, pero se arrepentirá de ello. Golpea con el puño cerrado, y con codazos, mientras la sangre llena el ring. También le pega en los riñones, con gran permisividad del referee. Sin embargo, la suerte del Villano cambia cuando deja al árbitro KO con un puñetazo fallido, y LA Park reacciona, a base de sillazos y brawl por el estadio. Un ahora también sangrante Villano atraviesa una mesa, y se duele mucho.

Cuando comenté la lucha entre Pentagón y Dragón, dije que el público estaba apagado, y culpé al carisma de los oponentes. Pues no; la culpa es de la producción televisiva, porque en esta lucha tampoco se escucha mucho ambiente, a pesar de que la gente parece muy loca, tal y como lo comentan los narradores. Una lástima: la producción se carga una de las cosas más importantes de la lucha. Aún así, se escucha algún grito de "esto es lucha".

Con máscaras rotas y sangre por todas partes, los luchadores buscan una agónica victoria, aplicando, ambos, un fault que el referee no ve.  Sorprendentemente, ninguno gana. Sigue la pelea, a puñetazo limpio. Villano vuelve a confiarse, como si no quisiera ganar, algo probable, dado que quiere tener una lucha de apuestas. Después de atacar las piernas de LA Park con sillas, busca una cruceta, pero su oponente se lo lleva con un counter para ganar. Gran lucha, aunque la falta de ambición a la hora de llevarse la victoria de Villano creo que resulta algo confusa. Pelea como si estuviera en la lucha de su vida, como si cada una de las peleas que forma parte del torneo fuera una lucha de apuestas, y eso es un nivel de psicología tan alto que no todos sus rivales pueden estar a su altura, mas me atrevo a decir que al menos en los casos de LA Park y Psychow Clown, el Villano IV los lleva a tener una de las mejores luchas de su vida. Viva por siempre los Villanos, la mejor familia de luchadores de la historia.

 
Puntuación: ****1/2

jueves, 16 de junio de 2022

Último Dragón vs Pentagon Jr, TripleManía 30 Monterrey


En 2022, se cumplen 30 años desde el nacimiento de AAA como empresa. Hace 3 décadas, en 1992, Antonio Peña, un creativo del Consejo Mundial de Lucha Libre, "traicionó" a la empresa histórica de lucha libre en México, se llevó a algunas de sus grandes estrellas, y montó una segunda gran promotora, con una proposición mucho más americanizada y moderna que la dirigida por su antiguo amigo Paco Alonso. Este año, pues, y después de una cruenta pandemia en México, AAA nos ofrece un evento de TripleManía especial, separado en tres jornadas, y con un torneo de máscaras de gran relevancia.

Hablamos de la Ruleta de la Muerte, una competición en la que varias leyendas y estrellas de la empresa se juegan la tapa. Participan Último Dragón, Pentagon Jr, Psycho Clown, Villano IV, LA Park, Blue Demon Jr, Rayo de Jalisco Jr y Canek. Son todos tan grandes e importantes para la historia de la lucha, que cualquier cara que conozcamos va a causar mucha sensación.

Hace unos meses, tuvo lugar la primera de las jornadas de TripleManía, que incluyó las primeras eliminatorias, que son las que vamos a comentar los próximos días. La verdad es que los resultados obtenidos dejan muy claro que el perdedor de la Ruleta de la Muerte, y quien pierda la máscara, será Villano IV. Es una solución fácil, pero está bien: me encanta que un tipo como ese tenga una última gran gira de despedida.

Y es que creo que todos los luchadores históricos deberían retirarse de esa manera: una última rivalidad, unos últimos meses de lucha y de sueldos; una batalla en un main event, una derrota, un dinero para la jubilación, una jornada para la historia y un push para el luchador que lo destape. Creo que es la mejor manera de retirarse, y me da pena que tipos como Canek y Rayo se empeñen en no aceptar una lucha de apuestas con la que terminar de una vez.

Además, ocurre que Fuerza Guerra ha vuelto al Consejo Mundial de Lucha Libre para una gira de despedida, y se ha tirado directamente contra el cuello de Atlantis, la gran leyenda y depredador de máscaras de la empresa coliseina. No tengo claro si finalmente Fuerza se retirará tras una lucha de apuestas de leyendas, pero creo que sería genial que tal cosa ocurriera en el próximo aniversario, o en el siguiente, lo que implicaría que viéramos dos máscaras de dos leyendas gigantes caer en el mismo año: Fuerza Guerrera y Villano IV. Me encantaría que así fuera.

Vayamos pues con esa primera eliminatoria. Recordemos que, el ganador, no se clasifica para la siguiente ronda, sino que salva su máscara, y ya no tiene que participar en la ruleta. Así es; es una de las cosas que pasan en México: los protagonistas son los perdedores. Se supone que lo que un luchador desea es tener una gran lucha de máscaras en TripleManía; esa es una ambición que debería sentir cualquiera. Sin embargo, aquí, los ganadores de las eliminatorias finalizan su participación en el evento, y jamás serán recordados.

El primer combate que ocurre en TripleManía XXX Monterrey es el que mantienen Pentagon Jr y Último Dragon. El primero, es una de las grandes estrellas de la empresa actualmente; un gran rudo que ha impactado tanto en México como en Estados Unidos, y que forma junto a su hermano Fénix una de las parejas más importantes de la actualidad a nivel global. Es un hombre que nunca ha participado en una lucha de apuestas realmente importante, así que da la sensación de que este podría ser un momento oportuno para darle una gran victoria de este tipo, si bien sus deslealtades hacia AAA podrían alejarle del éxito. Por otro lado, no tiene ninguna opción de perder la máscara, dada la relevancia de esta a nivel internacional.

Tampoco hay opción de que Último Dragón la pierda. Es un luchador que tiene una carrera muy activa en Japón; aún lucha a jornada completa, a pesar de superar los 50 años de edad. Igual que Liger o que Tiger Mask IV, posiblemente se retirará con su personaje inalterado, aunque ha pasado el suficiente tiempo en México como para, quizás, querer terminar su carrera perdiendo la máscara. Un japonés como él no requiere de tal cosa para tener una jubilación digna; eso es de países tercemundistas como México, pero podría hacerlo por romanticismo. En cualquier caso, eso no va a pasar en un corto periodo de tiempo.

Dragón comenzó a luchar en México. De hecho, se dice que fue Antonio Peña el que creó su personaje cuando aún trabajaba en el CMLL (entonces EMLL). Gran mérito, pues el luchador le lleva sacando partido desde hace 35 años. Último luchó en el Consejo y en el Toreo de 4 Caminos. Durante los 90, trabajó al mismo tiempo en México y en Japón, haciendo temporada en WAR, para luego formar parte de las divisiones crucero de WCW y WWE. Luchó en New Japan, y siguió peleando en el Consejo durante varios años, hasta 2007. Es un tipo que nunca ha tenido contrato fijo con nadie; ha peleado en todas partes, incluyendo su empresa Toryumon, que lleva a cabo eventos puntuales en México desde 1997. Además, entre 2013 y 2019 luchó a tiempo completo en All Japan Pro Wrestling, y desde entonces lo hace en Dragon Gate. Es un hombre, por tanto, que no para, y sin embargo, no es tan reconocido en México, o al menos no lo es en Monterrey. El público no acaba de reconocerle, así que a la lucha le falta ambiente, a pesar de que AAA hace lo que puede presentando los perfiles de los distintos luchadores. Último Dragón, por cierto, es el japonés que mejor hablar el español que yo haya visto nunca.

La lucha no es muy buena. El Zero Miedo es más grande y fuerte, y parece querer golpear la cabeza de su oponente con fuerza. Y también intenta aplicar su palanca al brazo, mas el japonés se libra. Este cambia la ruta del match con un Canadian Destroyer que sorprende relativamente, ya que si bien no es uno de sus movimientos clásicos, es un ataque que todo el mundo hace en México. Después de eso, trata de aplicar su finisher, el Asai DDT, y lo consigue, proclamándose ganador de la pelea. Poca cosa aquí.

Dragón dedica su victoria a su fallecido amigo Antonio Peña, y lo hace junto a la viuda de este, Maricela Peña, que parece la novia de Chucky, debido a la cantidad de cirugía estética que lleva en la cara, pagada con décadas de explotación de luchadores.

Puntuación: **1/2