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sábado, 11 de marzo de 2023

Roman Reigns vs Logan Paul, WWE Crown Jewel 2022


Terminamos la trilogía de luchas de Logan Paul en WWE hasta la fecha, revisando aquella que mantuvo frente a Roman Reigns en el evento Crown Jewel de 2022. Si no me equivoco, este es el primer show de WWE en Arabia desde que está Triple H al mando del chiringuito, y el resultado no ha podido ser mejor. Mientras que los eventos árabes, por lo general, antes recibían muy malas críticas, este ha gustado mucho. El main event en concreto, entre los dos hombres citados, fue premiado con notas muy altas. Analicémoslo.

Los eventos árabes de WWE requieren de elementos fuera de lo común para destacar. Los jeques pagan una cantidad de dinero absurda, así que hay que darles algo especial. Y son pocas las opciones de las que dispone ya WWE para enfrentar a Roman Reigns, cuyo reinado como Campeón Universal ha superado los 800 días. Este hombre ha derrotado ya a Lesnar, Goldberg, Cena, Edge, Bryan, Mysterio, Strowman, Undertaker, Triple H... No queda nadie que pueda hacerle frente. Así pues, para Crown Jewel, WWE se ha sacado de la manga la figura de otro luchador de tiempo parcial: el influencer Logan Paul. ¿Podrá hacer frente a un luchador del nivel del campeón?

Logan Paul lleva poco tiempo en el wrestling, pero ha demostrado cosas interesantes. Su empate en un combate de boxeo ante el legendario Floyd Mayweather Jr le avala; nosotros sabemos que ese combate no fue serio, pero en el universo de WWE, vale como uno de verdad, puesto que en WWE todas las luchas son pactadas, como aquella. Por eso mismo, el presentador Michael Cole lo menciona constantemente: es la prueba de que Logan Paul puede mantener combates de envergadura.

WWE anunció por todo lo alto este match entre estrellas. Su rivalidad frente a The Miz y sus habilidades en el ring pusieron a Paul over entre el público, como así este lo demuestra cuando el joven llega al ring. Por supuesto, el público Árabe es más agradecido que el americano. En la rivalidad no hay nada demasiado destacable, más allá de la presentación de la estrella del Social Media  como un underdog que viene a demostrar que puede enfrentarse al campeón. Cole incluso hace alguna comparación con el combate entre Rocky Balboa y Apollo Creed, aunque olvida que Rocky, en su película homónima, no fue seleccionado para enfrentarse a Apollo, precisamente, por hacer el tonto en Internet.

Logan no es un gran boxeador. Comparado con su hermano, de hecho, no es nada. Pero si su combate frente a Mayweather es su carta de presentación y conforma su personaje, debería utilizar sus presuntas habilidades con los puños en sus matches. Creo que ese es su problema. Lucha bien; sabe ejecutar muy bien sus ataques a pesar de llevar poco tiempo luchando, pero no cuenta verdaderas historias sobre el ring. Su historia es que, a pesar de ser una estrellita, sabe hacer cosas guays, y eso no le va a valer siempre. En el combate frente a Reigns vale un poco más, ya que forma parte del interés el hecho de que un novato se enfrente al mejor, pero podría llegar a algo más.

Como digo, en este caso le sale bien la jugada. Le sale muy bien, a juzgar por las reacciones del público. Es dominado la mayor parte del tiempo por un Roman poco respetuoso pero físicamente imparable. Imparable... relativamente. El match consiste en eso; en el espectáculo que producen los comebacks de Logan frente al dominio del campeón. Los numerosos nearfalls son recibidos en las gradas como si esto fuera la final de la Champions League, así que podemos decir que el bookeo del match es un éxito. Logan aplica el finisher de Adam Page, el Bulkshot Lariat, aquel que erró CM Punk miserablemente en un par de ocasiones durante su combate con Hangman. Que este chico, recién llegado, sea capaz de hacer aquello que resulta imposible para "el mejor del mundo" nos da que pensar.

Continúa el match. Reigns resulta invencible, mas Paul no se rinde. Sus vuelos son de gran altura, pero el daño que provocan es superficial. Incluso los Superman Punch, en sus manos de boxeador, resultan insuficientes, si bien vuelven loco al público. Debe intentar algo mayor: volar desde la esquina sobre un Roman tendido en la mesa de comentaristas. Agarra el móvil de un par de amigos que tiene en ringside, y vuela mientras graba un vídeo para redes sociales, aplicando un Frog Splash con gran facilidad. Entonces, llegan los hermanos Uso para animar el cotarro: agarran a los dos amigos de Paul y les pegan una buena paliza. Obviamente estos son wrestlers.

En ese momento, suena una música y aparece Jake Paul, el hermano de Logan, un tipo que tiene un récord en boxeo de 6 - 1, y que, por sus gestos, y su físico, tiene pinta de luchador. Noquea a los Uso, permitiendo a Logan aplicar un Frog Splash desde la esquina sobre Roman para intentar ganar, sin suerte de nuevo. A Reigns no se le vence tan fácilmente. Entonces suena una nueva música: la de Solo Sikoa, otro de los miembros de la agrupación samoana, The Bloodline, que llega para enfrentarse a Jake. Las autoridades de WWE evitan la pelea, mientras Logan vuela sobre los Uso. Cuando regresa al ring, no obstante, es recibido por un Superman Punch devastador. Con un Spear, se acaba la película.

Buena pelea; mezcla la rutina clásica de un David vs Goliat con una pizca de storytelling bastante potente, y un público enfervorecido. No creo que en términos de wrestling sea una joya, pero tiene tantas cosas que hay que valorarla bien. Por lo demás, ese careo entre los hermanos Paul y los hermanos Uso es digno de un combate en un gran evento; veremos si eso pasa.

Puntuación: ***3/4

sábado, 15 de octubre de 2022

Roman Reigns vs Brock Lesnar, Last Man Standing, WWE SummerSlam 2022


En este blog hemos hablado de la extensa rivalidad ocurrida en WWE entre Roman Reigns y Brock Lesnar. Nos parecía acabada tras lo ocurrido en WrestleMania 38, pero no fue así; volvió a activarse de cara a SummerSlam 2022. Y eso a mí, personalmente, me pareció un exceso, al menos a priori. Después de ver la lucha, creo que ha sido un acierto.

Y es que la lucha que mantuvieron en el mayor evento del año resultó ser bastante fría. Se anunció como el mayor combate de la historia del evento, y no llegó a ser absolutamente nada recordable. Era obvio que merecían mejor final, pero, al mismo tiempo, enfrentarlos otra vez resultaba arriesgado, en tanto que podían volver a decepcionar a todo el mundo. Pero WWE hizo lo posible por prevenir tal cosa: le puso al nuevo combate una de esas estipulaciones que nunca fallan, y que siempre animan las grandes y extensas rivalidades. La lucha sería un Last Man Standing Match. Eso es un seguro de entretenimiento, y a veces, de buen combate. En este caso ha implicado ambas cosas.

Ya conocemos la historia entre ambos luchadores. Hablamos sobre ella en el pasado, puede el lector buscar por el blog. Roman salió de WrestleMania como doble campeón mundial, con los títulos Universal y de WWE en su cintura. Se ha convertido en el campeón moderno más longevo, acercándose a los números de las grandes figuras de los 70 y 80. Veremos hasta dónde llega.

SummerSlam 2022 tiene lugar un poco antes de lo habitual: ocurrió el 30 de julio. Fue un evento muy grande, pues acogió a casi 50.000 espectadores en directo, en el Nissan Stadium de Nashville, Tennessee, ciudad en la que el Monstruo Rojo Kane es alcalde. Él mismo hizo acto de aparición para anunciar los guarismos, y darle al mechero. El main event está a la altura de las circunstancias.

Ya sabe el lector que Brock Lesnar es, en su vida real, un granjero. Ganó mucho dinero en su etapa como luchador de MMA, y ahora gana mucho dinero en WWE por un número de apariciones anuales muy reducido. El resto del tiempo lo pasa en su granja, y por eso en Nashville se siente como en casa.

El caso es que en el camino hacia el ring, hay una especie de grúa; uno de esos cacharros que sirven para coger arena y soltarla. Yo no tengo ni pajolera idea sobre esas cosas, pero Lesnar sí. Brock utiliza esa máquina durante la lucha, dándole un toque de originalidad nunca visto. La conduce hacia el ring, se sube al brazo de la máquina, y salta desde él para atacar al campeón dentro del cuadrilátero. Suena la campana y empiezan los mamporros.

La verdad es que me parece un poco peligroso. Es maquinaria pesada moviéndose entre el público, que está muy cerca. Un palancazo mal dado podría haber acabado en un desastre, si no para la salud de la gente, sí al menos un desastre legal, porque en Estados Unidos, le tiras un refresco encima a una persona del publico y puede demandar a la empresa por lesiones cerebrales graves, con un coste millonario. No obstante, todo sale bien, porque Lesnar sabe de cacharros de esos.

Después de esa entrada, Lesnar domina el combate, golpeando a Roman entre el público, estampándolo contra una columna de metal, y aplicando Súplexs contra el suelo. Prepara una mesa para acabar el trabajo sobre la espalda de su oponente, pero lo paga caro, porque Paul Heyman le despista, lo que posibilita que Reigns utilice un Samoan Drop sobre la mesa. Las cosas se ponen bien para el rudo, que ataca con los escalones de metal y aplica un Uranage Slam sobre otra mesa. Los conteos del referee empiezan a acercarse a 10, pero queda mucha batalla.

Roman empieza a aplicar Spears en el ring, pero está lejos de la victoria. Brock lo estampa con un Spinbuster sobre media mesa que quedaba sobre el suelo, aplicando un ataque muy peligroso: esa mesa no estaba colocada a una posición estándar para el wrestling. También le pega con los escalones mecánicos y con otros trozos de mesa en la cabeza, lo que no sé si estaba prohibido en WWE. Lo sube al brazo de la grúa, y lo lanza desde ella al ring.

La verdad es que ese ataque no resulta muy impresionante, porque la caída no es muy alta, pero es muy original. La gente lo disfruta y canta eso de "This is Awesome". Comienzan los Súplexs y los F5 por parte del granjero, mas el campeón consigue levantarse siempre antes de que la cuenta llegue a 10, apoyándose en las cuerdas. Brock quiere evitar esto, y lo que hace es... volcar el ring. Mete el brazo de la grúa por debajo del ring, sube una esquina de este, y eso provoca que roman caiga rodando a ringside. Lo nunca visto. Ya no hay ring en este combate.

Comienza la batalla final junto a las mesas de comentaristas. Roman lo tiene crudo, pero llega la caballería. Los Uso evitan que lo lancen contra las mesas, pero Brock los destroza a ambos con violencia extrema. El que aparece después es Heyman, que le da las correas a su antiguo cliente para que se vaya con ellas, pero recibe un enorme F5 sobre la mesa, sólo un segundo antes de que Roman aplique una Spear sobre su rival. Pero aún queda un último invitado... Austin Theory, Mr Money in the Bank.

Theory noquea a Roman con el maletín, pero recibe un F5 de Brock antes de cobrar su contrato. Después de esto el contendiente al título encaja una doble SuperKick por parte de Los Uso. A partir de aquí, es cuestión de tiempo que pierda. Se levanta antes de la cuenta de tres, pero recibe un Spear. Y un golpe con el maletín. Y otro. Y otro. Como la cuenta parece no llegar nunca a 10, los samoanos empiezan a tirarle cosas encima, para evitar que se levante. Ahora sí, la cuenta llega a 10; Lesnar no ha sido capaz de vencer a todo lo que Roman es capaz de convocar en su ayuda.

Gran batalla, entretenimiento máximo made in WWE.

Puntuación: ****1/4

lunes, 18 de abril de 2022

Roman Reigns vs Brock Lesnar, WWE WrestleMania 38


Especial WrestleMania 38

Seguimos hablando sobre el reinado de Roman Reigns como Campeón Univesal, que comenzó en agosto de 2020, y se mantiene hasta el día de hoy. Posiblemente se mantenga, de hecho, hasta WrestleMania 39, en un hipotético match entre Roman y su primo, The Rock, en Los Ángeles. Realmente es muy improbable que esto ocurra, pero me parece el único final lógico y consecuente para este reinado, si bien WWE nunca ha necesitado hacer las cosas de manera lógica ni consecuente.

A continuación, las luchas de este reinado que hemos comentado en el blog hasta ahora:

The Fiend vs Braun Strowman vs Roman Reigns, WWE Payback 2020

Roman Reigns vs Jey Uso, WWE Clash of Champions 2020

Roman Reigns vs Rey Mysterio, WWE Smackdown 18/06/2021

Edge vs Roman Reigns vs Daniel Bryan, WWE WrestleMania 37

Daniel Bryan vs Roman Reigns, WWE Smackdown 30/04/2021

Roman Reigns vs Cesaro, WWE Backlash 2021

Roman Reigns vs Edge, WWE Money in the Bank 2021

John Cena vs Roman Reigns, WWE SummerSlam 2021

Roman Reigns vs Brock Lesnar, WWE Crown Jewel 2021

Roman Reigns vs Goldberg, WWE Elimination Chamber 2022

Después de todo esto, en WrestleMania 38, Roman tuvo una lucha decisiva ante Brock Lesnar. Ya le había derrotado en Crown Jewel, si bien el resultado se dio de manera fraudulenta, lo que justifica la continuidad de la rivalidad. Lesnar, ahora como favorito del público, se convirtió en Campeón de WWE en Day 1, al ganar una lucha de 5 hombres, y por culpa de la intromisión de Roman, perdió el campeonato en Royal Rumble. Esto no hizo más que enfadar a la bestia, que apareció en el Royal Rumble Match y se llevó la victoria, accediendo, gracias a ello, a una lucha titular en WrestleMania. Pero tampoco se contentó con eso, pues, en Elimination Chamber, dentro de una jaula de eliminación, retomó la correa clásica de WWE, de tal manera que su pelea definitiva frente a Roman en WrestleMania es de unificación, ya que es campeón de WWE y retador para el Campeonato Universal.

WWE utilizó uno de sus house shows, esto es, uno de sus eventos no televisados, para seguir construyendo la historia. Fue un show realizado en el Madison Square Garden, el hogar histórico de WWE en New York, un estadio difícil de llenar para la empresa, que por lo tanto, requería de material de interés para el espectador de la Gran Manzana. Para atraerlo, se programaron dos luchas titulares: Roman defendió su campeonato frente a Seth Rollins, mientras que Lesnar hizo lo propio en una lucha rápida ante Austin Theory. Es mas rentable para WWE utilizar a Lesnar en un Live Show como este que utilizarlo en televisión.

Pero, tras su lucha, Lesnar volvió a ser atacado por Roman y los Uso. Si bien, en primera instancia se logró librar de ellos, cayó en sus manos tras la intervención de su antiguo amigo, Paul Heyman, sobre cuya lealtad ya no hay duda alguna. Lesnar sangró profusamente después de ataques con sillas y con escaleras metálicas. La imagen de Roman celebrando con la correa sobre el cuerpo sangrante de Brock fue tan buena, que se convirtió en canon de la storyline, a pesar de no pertenecer a un show televisado.

WWE anuncia este combate como el más grande de la historia de WrestleMania. Es obvio que tiene todas los ingredientes para serlo, pues son las dos estrellas más grandes del momento las que se enfrentan, y ambos tienen uno de los dos grandes títulos. Pero no nos engañemos: esto no puede estar a la altura de un Hogan vs Andre, un Hogan vs Warrior, un Austin vs Michales, un Taker vs Michaels o un Cena vs The Rock, porque estos tiempos no son tan buenos como los de aquellos. Es el wrestling un arte en decadencia. Es, este, el tercer enfrentamiento entre Lesnar y Reigns en WrestleMania, si bien las premisas para conformarlo han sido mucho mayores, y los luchadores tienen unos personajes más interesantes que en otras ocasiones. Aún con todo, el combate no es especialmente bueno.

Lesnar y Roman se enfrentaron por primera vez en WrestleMania 31. Entonces, la lucha fue mucho mejor de lo esperado, y mejoró gracias a la entrada en escena de Seth Rollins, que cobraba, así, su maletín de Money in the Bank, provocando un final para el show más grande del año a la altura. Volvieron a hacerlo en WrestleMania 34, en un momento en el que el rechazo de la afición hacia Roman era tan grande, que nada funcionó durante el match, y este fue boicoteado desde la grada en todo momento. Ahora se enfrentan en el mejor momento, con la mejor historia detrás, y con la premisa de haber dado una lucha en Arabia que a mí me pareció bastante buena, y las cosas les salen peor que nunca. No hay nada demasiado interesante en este combate.

Lesnar se quita los guantes al comenzar. Eso parece presagiar una lucha sangrienta como venganza por lo ocurrido en el Madison Square Garden. Pero no es así: no usa los puños para nada. ¿Para qué se los quita entonces?

Brock comienza buscando su Suplex City, y obliga a Roman a huir a ringside. Allí, Heyman vuelve a capturar la atención de la bestia, y eso lo aprovecha bien Roman para aplicarle un Spear, rompiendo las vallas de protección. Eso está apunto de proporcionarle una victoria vía countout.

Parece que la estrategia de Roman en esta lucha es vencer aplicando muchas veces la Spear. Lo hace nada más volver Brock al ring después de ese ataque. Brock tiene sus momentos de dominio vía Suplex, pero no saca nada de ellos, y sigue recibiendo Spears y Superman Punch. Consigue aplicar F5, pero no le sirve para ganar.

La lucha es bastante lenta, y tan sólo cuenta con eso: finishers e intentos de finishers. Con un nuevo Spear, Roman se lleva por delante a Brock y al referee, y aprovecha la situación para pegar un Low Blow y un golpe con la correa de Campeón Universal. El referee despierta mágicamente para contar, pero no llega a hacerlo hasta tres.

Roman sigue buscando Spears. Intenta aplicar aquel con la que venció a Undertaker, rebotando contra las cuerdas, pero hay un error de cálculo, y acaba haciendo una especie de Bulldog mediocre. Su reacción de incredulidad por el hecho de que la cuenta no llegue a tres es estúpidamente excesiva, porque el ataque no estaba bien hecho, y por tanto, el público no había reaccionado como debía. Aplica otro Spear, pero Brock al caer, lo convierte en su palanca al brazo, la Kimura. Heyman ayuda a Reigns a llegar a las cuerdas, y este se duele del brazo, para lo cual ayuda el hecho de que se hubiera hecho una herida en él durante el golpe contra las vallas. A pesar de este supuesto dolor, vuelve a golpear con un nuevo y frío Spear, y ahora sí se lleva la victoria.

Como digo, la victoria es fría, porque Reigns ha hecho tantos Spears durante el combate, que estos han perdido el impacto psicológico para el público que debían tener. En el momento de aplicar el nuevo, la gente se encontraba en un desahogo de tensión tras la Kimura de Lesnar, y por eso tampoco reacciona como debía aquí. La incapacidad de los luchadores para moverse en función de la emoción de la grada es patente.

 La lucha no es mala, pero es un combate cualquiera propio de cualquier evento, en el que pasan cosas muy poco trascendentes y para nada especiales. No se usa ningún detalle propio de la rivalidad para crear interés o intensidad, y por tanto, no hay storytelling contextual  de calidad. Falta de ambición y falta  interés a la hora de bookear e interpretar la que se ha vendido como la lucha más importante de WrestleMania.

Puntuación: **3/4


jueves, 14 de abril de 2022

Roman Reigns vs Goldberg, WWE Elimination Chamber 2022




Seguimos repasando combates del enorme reinado actual de Roman Reigns como Campeón Universal. Este hombre ganó la correa en Payback 2020, en agosto, y se está acercando a los dos años de reinado, sumando, ahora, el WWE Championship a su cintura. Es, este, el reinado de Campeón Mundial de WWE más largo desde tiempos de Hulk Hogan, y además, no existen muchas opciones de que finalice a corto plazo, en tanto que Roman lo ha defendido ante auténticas leyendas, y no existe un rival claro para él en el horizonte. Sus últimos dos contrincantes han sido dos de los luchadores más dominantes de la historia del wrestling: Goldberg y Brock Lesnar, y tampoco han tenido éxito. Vamos a ver su combate en Elimination Chamber ante el primero, mientras que en el próximo post repasaremos su lucha ante el segundo en WrestleManioa 38, donde unificó los títulos Universal y de WWE. Entonces, también añadiré al post un listado con los reviews de las luchas pertenecientes a este reinado que he publicado en el blog hasta el momento.

En realidad, la lucha entre Goldberg y Roman debería haber sido la primera del reinado. Porque Goldberg venció a The Fiend en Super Showdown 2020, y se presentó en WrestleMania como Campeón Universal, para enfrentarse a Roman Reigns, cuando este todavía estaba en el bando de los técnicos. Sin embargo, en el lapso de tiempo entre un evento y otro, estalló el problema de la pandemia por COVID en todo el mundo, y Roman, por sus graves problemas de salud, decidió no seguir luchando, para no arriesgarse a enfermar, teniendo en cuenta la debilidad de su sistema inmune (había superado la leucemia meses antes). Así pues, la lucha entre ambos, cuando ya estaba planeada para el magno evento, tuvo que ser cancelada, y fue Braun Strowman el hombre que se convirtió, entonces, en Campeón, al derrotar a Bill en un WrestleMania que tuvo lugar en un Performance Center vacío y triste, que aún hoy me sorprende tener que recordar.

Roman regresó a la acción en verano, y no tardó mucho tiempo en hacerse con lo que era legítimamente suyo, ya con una personalidad muy diferente. Tras todos los éxitos logrados con la correa en su cintura, ahora se ve las caras con su rival original, Goldberg, un hombre que, a pesar de su edad, salió muy reforzado tras su rivalidad frente a Bobby Lashley, en la que venció e hizo un buen trabajo a nivel de puesta en escena. Yo sigo diciendo que no es bueno lanzarlo a combates que es obvio que va a perder, porque este tipo de leyendas deberían aprovecharse con otros fines, pero está claro que esta lucha entre los dos debía hacerse, en tanto que se tuvo que cancelar la original, y por tanto existían tanto el anhelo como la historia subyacente. La lucha definitiva no tiene lugar en WrestleMania, pero sí en un Elimination Chamber bastante especial, que se desarrolla en Arabia Saudita, lo que implica que hay cosas de "nivel wrestleMania" que se utilizan aquí para justificar los millones que pagan los jeques. Así, tenemos el regreso de Lita a una lucha titular, que es algo que a mí me hizo mucha ilusión, y la participación de Brock Lesnar en una Elimination Chamber, además de la lucha entre Roman y Goldberg que abre el evento y sobre la que hablamos hoy.

Resulta, este, un enfrentamiento entre bestias de un tamaño y un peso similar, pero con 20 años de edad de diferencia. Es una lucha corta, de 6 minutos, pero bien llevada; una vez más, y como ocurrió en sus combates frente a Bobby, Goldberg no se limita a recrear un nuevo duelo de finishers, sino que lucha como un profesional. No es el mejor en este campo, pero sí parece un wrestler.

Roman domina la lucha, mientras que Bill se revuelve en un par de ocasiones, adelantándose al Spear del campeón con el suyo, que como siempre, resulta muy violento, por la forma poco ortodoxa con la que lo aplica. Cada vez que lo hace, busca el Jackhammer para ganar, pero Roman se ha estudiado bien su forma de luchar, y sabe como evitarlo. Una vez más, se nota la mano de Heyman en el bookeo. En la primera ocasión, Reigns convierte el Jackhammer de Goldberg en un Suplex a su favor, mientras que en la segunda, lo cambia por una Guillotina. Bill se revuelve de mil maneras para quitarse de encima la presión del pesado campeón; se lanza contra la esquina varias veces, pero no tiene éxito. Roman no sólo aprieta el cuello, sino que además hace cargar al adversario con su peso, que no es poco. Bill acaba cayendo al suelo, débil, y de ahí es muy complicado salir. Finalmente, queda KO, pues sus brazos no responden, y el referee decreta la victoria de Roman. Combate correcto, sin florituras, pero bien estructurado.

Puntuación: **3/4

domingo, 10 de abril de 2022

Roman Reigns vs Brock Lesnar, WWE Crown Jewel 2021




Durante el pasado año, Roman Reigns, ya como rudo, se consolidó como gran estrella de WWE en este tiempo, y como su gran campeón. Durante esos meses, como ya comentamos en el blog, derrotó a grandes leyendas históricas de la empresa, como Daniel Bryan, Edge, John Cena, Rey Mysterio o incluso Cesaro, que no se puede considerar una leyenda de WWE, pero sí una leyenda del wrestling indy. Este legendario reinado dura hasta el día de hoy, y a él se han sumado las figuras de Brock Lesnar y Goldberg. De hecho, recientemente, venció al primero por segunda vez consecutiva en WrestleMania, para unificar los títulos Universal y de WWE, lo que lo sitúa en una posición imposible, y sin rivales.

Porque a todos estos luchadores a los que derrotó durante el año pasado, hay que sumar a sus víctimas anteriores: Undertaker, Triple H, Seth Rollins, Big Show... Me da la sensación de que no existe un rival posible para él, no ya en el roster actual, sino en la historia del wrestling, salvo quizás su primo The Rock. Está claro que a WWE le encantaría llevar a cabo esa rivalidad entre los dos medio samoanos algún día, pero no sé si eso es posible. El caso es que, aún siéndolo, debe ocurrir en WrestleMania, y mientras tanto, hay que rellenar un año entero de combates titulares. ¿Quién leñe va a resultar un contendiente creíble para el tipo que ha vencido a John Cena y Brock Lesnar?

Es obvio que esta situación no es nueva en WWE. Es la manera, de hecho, en la que funciona de forma natural la mente de la casta McMahon: les encanta que un sólo luchador cargue con el peso de toda una empresa. Ocurrió con Sammartino, con Backlund, con Hogan, y pasada la época de ardor televisivo en la que, por motivos de audiencia, era necesario un cambio constante de campeones, pasó con Triple H, con Cena y con Reigns. Pero creo que la diferencia principal es que los campeones anteriores luchaban frente a wrestlers regulares de la empresa, mientras que Reigns se está enfrentando a leyendas de tiempo parcial, de tal manera que, cuando pasan los grandes eventos (WrestleMania, SummerSlam, y los shows en Arabia), y tiene que regresar al mundo real, parecen muy poco creíbles sus rivalidades ante "los de siempre". Pero es de esperar que gente como Drew McIntyre o Bobby Lashley se enfrenten a él, además de un retornado Cody Rhodes. Tampoco descartemos próximos regresos de luchadores como Braun Strowman o The Fiend, que llevan un tiempo fuera y, sin embargo, no han llegado a firmar con la competencia.

El caso es que, durante el año pasado, me dediqué a ver y postear grandes luchas del reinado de Roman. Ahora debo seguir con esa tarea, incluyendo sus dos peleas frente a Lesnar, y su combate frente a Goldberg. Sé que también se enfrentó a Balor y a Big E, (y seguro que se me olvida alguno), pero no creo que  estas luchas se puedan considerar propias de la misma liga, por lo comentado en los anteriores párrafos.

Comenzamos por su match frente a Lesnar en Crown Jewel. Como todo el mundo sabe, el exUFC fue derrotado por Drew McIntyre en WrestleMania 36, coincidiendo con la parada del planeta por el problema del COVID. Como Caín Velasquez y muchos otros, Lesnar salió de la empresa, que se enfrentaba a un año y medio de duras restricciones por el motivo de la pandemia, y lo asumió con un roster limitado. Pero en verano de 2021, todo parecía volver a la normalidad. WWE podía volver a llevar a cabo eventos con público, y organizar shows en Arabia y macroeventos como el WrestleMania de este año. Lesnar, así, terminó sus vacaciones, y volvió a la lucha, apareciendo en SummerSlam 2021, tras la victoria de Roman sobre Cena.

El tema es que Lesnar, desde su regreso en 2013, ha recibido el apoyo de Paul Heyman como mánager, y este último se ha ocupado siempre de sus promos, de tal manera que el luchador parecía poco menos que un animal a las órdenes del abogado, y que ni hablar sabía. Ahora, Paul está en la esquina de Roman, así que existen dudas sobre su lealtad. Brock se presenta con un "look" muy cambiado; ahora habla, y viste de una manera más natural: parece el granjero que efectivamente es. Por supuesto, ahora es el bueno.

El combate entre los dos animales es pospuesto para Crown Jewel, y mientras tanto, Roman no tiene demasiados problemas para derrotar a los rivales que le salen al paso. WWE vuelve a Arabia Saudita, y en el main event, propone un nuevo enfrentamiento entre estos dos hombres, que se han visto las caras varias veces en el pasado, pero en contextos muy distintos.

Y aquí tienen una lucha bastante buena. Parece uno de esos combates que Paul escribe de principio a fin, y en el que no ocurre nada que se salga del storytelling. Roman ya no es un héroe, así que reacciona con temor hacia el poder de Lesnar, que busca introducirlo en Suplex City. Una y otra vez, Reigns se sujeta a las cuerdas para impedir que el abrazo de La Bestia se convierta en un Suplex. Desde luego, se nota que viene con la lección aprendida.

Así, usando las cuerdas y el poste a su favor, Reigns consigue dañar al monstruo. Y lo consigue gracias al hecho de agarrarse a todo. Lo lanza contra el poste, y le pega un Superman Punch. Y después de eso, vuela a ringside sobre él, cayendo con demasiada potencia y velocidad.Es un golpe muy peligroso, pero por suerte, las barreras protectoras de WWE están muy acolchadas. Roman remata con un gran Spear que, no obstante, no le da la victoria. Brillante comienzo de la lucha para el campeón.

Lesnar sigue recibiendo, hasta que Reigns vuelve a lanzarse sobre él con un Spear, y este lo esquiva saltando verticalmente. Roman se estrella contra la esquina, y así, el retador consigue un respiro, y lo aprovecha para comenzar con su recital de Suplexs. Sin embargo, en esta ocasión, no aburre como otras veces haciendo demasiados (eso no es propio del concepto de "héroe" que tiene WWE), y tras cuatro golpes, lanza el F5. Como era de esperar, Roman lo soporta. Sigue la batalla.

Cuando Lesnar busca un nuevo finisher, Roman se revuelve, aplicándole su Guillotina, un movimiento de rendición que en los últimos meses le ha valido varias victorias. Esta vez no es así, porque Brock se lo quita fácilmente con un Spinebuster. Busca, la bestia, de nuevo, el F5, y lo ejecuta, pero tiene mala suerte: su rival cae sobre el referee, Robinson, que lleva recibiendo golpes de este tipo desde los 90, sin que su aspecto físico varíe demasiado. Lesnar, en modo Hulk, se libra del referee como si fuera un muñeco, y se traga el ataque de Roman por la espalda. Ambos están tendidos sobre el ring, sin referee, y es el turno de Heyman. Este tiene la correa de campeón en la mano, y se mantiene en una posición ambigua, lanzándola entre los dos luchadores. Ambos batallan por cogerla y es Lesnar el que se hace con ella, mas, en ese instante, aparecen los primos de Roman, Los Uso, y le pegan una gran Super Kick doble. Roman remata con un golpe de correa, coincidiendo con la llegada de un nuevo referee que cuenta 3 a su favor. Siempre me ha parecido genial que los referees de WWE sepan cuando un compañero debe ser reemplazado, pero no se den cuenta de que, hasta su llegada, han ocurrido ilegalidades que deberían provocar una descalificación. El caso es que Reigns gana, pero lo hace de una manera que permite que la rivalidad entre ambos luchadores se mantenga fresca de cara a WrestleMania 38.

La lucha me parece buena, muy bien escrita. Creo que este show es el mejor en la historia de WWE en Arabia.

Puntuación: ****

domingo, 7 de noviembre de 2021

Luke Harper y Erick Rowan vs Daniel Bryan y Roman Reigns, WWE Hell in a Cell 2019

Especial fallecimiento de Luke Harper

Como todo el mundo sabe, el gigante Luke Harper falleció a finales del año 2020, cuando pertenecía a la empresa AEW. Por ese motivo, a principios de este año 2021, iniciamos un pequeño especial sobre su carrera, en el que revisamos un par de combates de su etapa como luchador independiente. Yo quería añadir un par de luchas más a ese especial, propias de su carrera mainstream, así que voy a aprovechar su primer aniversario luctuoso para hacerlo. Hoy, revisamos una lucha suya en WWE.

Ya sabemos que Harper tuvo una carrera larga en la empresa de los McMahon. Luchó en FCW y NXT, donde formó la Wyatt familia junto con Erick Rowan y Bray Wyatt y más tarde, ya en WWE, junto a Braun Strowman. Estos cuatro hombres, que juntos, tuvieron bastante éxito, formaban una nueva generación de gigantes que debía sustituir a  clásicos como Undertaker, Kane o Big Show. Sin embargo, hoy en día, los cuatro están fuera de la empresa, que no para despedir gente de una manera muy excesiva.

Wyatt y Braun tuvieron éxito a nivel individual, pero Harper y Rowan no. Se les intentó dar pushes, pero ninguno funcionó, y siempre volvían a juntarse. Como pareja hacían buen equipo, aunque las lesiones también frenaban su ascenso en este campo. Los dos acabaron fuera de la compañía, pero en 2019, meses antes de irse, aún tuvieron la posibilidad de juntarse para enfrentarse a Bryan y Reigns.

Durante un tiempo, Bryan formó parte del bando rudo, y en esa época, tuvo a Rowan de su parte, como guardaespaldas. Es un método clásico de WWE, que últimamente hemos vuelto a ver, con el protagonismo de AJ Styles y Omos, un tipo imponente que aún no ha demostrado tener calidad para luchar individualmente. Rowan, sin embargo, como Harper, a pesar de su tamaño, es bastante hábil. Durante el verano de 2019, llevó a cabo algunas acciones en contra de Roman Reigns de las que se culpó a Bryan, y este empezó a dudar sobre su compañero. Finalmente, Rowan lo atacó, y Reigns llegó a rescatarlo. Así, mientras Bryan realiza un nuevo turn, en este caso hacia el bando face, Rowan volvía a unirse a Harper, que llevaba meses sin hacer nada, para enfrentarse a los dos héroes en Hell in a Cell, en una lucha bastante buena.

Una lucha que es de tipo Tornado, esto es, todo los luchadores pueden pelear al mismo tiempo, y no hay descalificaciones. Harper y Rowan aprovechan su mayor compenetración para dividir a sus rivales, y darles una paliza por separado. Durante muchos minutos, dominan por separado a sus oponentes, realizando muchos movimientos de equipo. Aunque Reigns y Bryan realizan muchos comebacks heroicos, los hacen por separado, y por tanto, sin éxito, porque la fuerza y la habilidad de los gigantes es muy grande. 

Después de buenos minutos de brawl en ringside, los dos barbudos intentan usar las mesas de comentaristas en contra de sus rivales. Cuando van a destruir a Daniel con una Power Bom ahí, este se escapa con una hurracarrana, mientras Roman aparece de entre el público, donde había sido expulsado con violencia, y aplica una Spear sobre la mesa. Finalmente, sobre el ring, la iteración de ataques técnicos: Superman Punch + Running Knee + Spear, acaba con Harper para siempre. Quizás esto fuera la ultima gran lucha del ya fallecido Luke en WWE.

Lucha larga, con estrategia, dominio y habilidad por parte de los gigantes, buena brawl y buenos comebacks por parte de los técnicos. Daniel finaliza su turn tras la lucha; mientras que Roman quiere apretarle la mano, este le pide uno de sus clásicos abrazos, y el público lo recibe con ternura.

Puntuación: ***3/4

miércoles, 29 de septiembre de 2021

John Cena vs Roman Reigns, WWE SummerSlam 2021



Seguimos mirando algunas de las grandes defensas titulares que Roman Reigns en los últimos meses. En SummerSlam 2021, el mejor de la actualidad se enfrenta al mejor de todos los tiempos: John Cena.

Ya comentamos la lucha entre el Campeón Universal y Edge en Money in the Bank. Al finalizar el evento, sonó la música más icónica de la historia del Wrestling. John Cena regresaba, de cara a SummerSlam, un evento al que acudieron más de 50.000 personas. Las medidas anticovid se han flexibilizado, y la empresa puede volver a promover sus grandes shows, incluso fuera de Florida. Por tanto, y dado que a WrestleMania pudieron acudir menos personas de las previstas, debido a que ese estado permitió, finalmente, la mitad de lo que WWE pedía, SummerSlam cubre parte de la grandeza perdida por el mayor evento del año. El Allegiant Stadium de Paradse, Nevada, recibe la visita de Roman, Cena, Goldberg, Lashley, Edge, Seth Rollins y Brock Lesnar, entre otros.

Puede parecer que John Cena ha regresado para un combate, y se ha vuelto a ir. No es así; si bien la lucha ante Roman es el único match que se ha retransmitido de cuantos ha disputado este año, han sido 15 las luchas en las que ha estado presente estos meses. Una vez más, y a pesar de su floreciente carrera actoral, John se ha sacrificado por la empresa, trabajando en muchos Live Shows y Dark Matches, lejos de los grandes focos, para atraer al público a las arenas en este regreso a la carretera. Parece que ha tenido éxito en esa empresa, si bien tras su regreso a la interpretación, las ventas se han resentido mucho, lo que no es de extrañar teniendo en cuenta las recientes bajas en el roster, algunas, como la de Braun Strowman o la de Bray Wyatt, aún inexplicables.

Cena, como The Rock antes, se ha introducido en el mundo de la interpretación, vía cine de acción juvenil, como la saga de los Transformers o el Universo Cinematográfico de DC. No va a ganar un Oscar, pero hará dinerillo, y mantendrá el cariño del público, lo que se nota en sus regresos a WWE. Físicamente, ha bajado su masa muscular, pues la que tenía era excesiva para interpretar seres humanos normales, y lleva un peinado muy juvenil, que choca con sus 44 años de edad, y el hecho de que se le empieza a ver el cartón en la coronilla. Ningún pelo le queda bien; por eso iba rapado.

Hoy, viene a enfrentarse a Roman Reigns, que le ha sustituido en el cargo de figura principal de WWE. Recordemos que ya hubo una lucha entre ellos en No Mercy 2017, que fue buena, pero que no estuvo a la altura de las expectativas, pues Reigns estaba verde, y John estaba de salida, motivo por el cuál, WWE no respetaba mucho su capacidad para ganar combates. Ahora, Roman es un monstruo, y Cena tiene un puesto en el Olimpo de los grandes luchadores de la historia del wrestling.

Roman defiende su carrera, afirmando que esta ha ido evolucionando con el tiempo, mientras que John ofrecía lo mismo noche tras noche, como la posición del Misionero. Cena responde que, si Roman ha tenido que evolucionar, es porque ha fracasado en aquello que ha emprendido. En cualquier caso, la actual estrella de Hollywood sostiene que, siendo cierto que la posición de poder de Reigns es insuperable, él no necesita demostrar que es el mejor: sólo necesita que la cuenta llegue a tres. Esto es importante, porque tiene mucho impacto en el sentido de la lucha.

Como había hecho en los programas anteriores al PPV, Cena sale a ganar a través de paquetitos, Rollups y conteos rápidos. Sabe que está perdido en un mano a mano, , así que tiene una estrategia clara, que puede valer para vencer al más pintado. Pero Roman es el más pintando, y en cuanto agarra a su oponente, lo destroza. Su dominio es absoluto, y ya sabemos lo pasivo que puede llegar a ser John Cena cuando es dominado. Los minutos pasan de esta manera, hasta que la leyenda resurge con la intención de aplicar el finisher más poderoso de la historia, el Attitude Ajusttment, tantas veces como sea necesario. Y esto es un gran acierto, porque, si bien todo el mundo está muy interesado en este match, nadie confía en una victoria real de John. A través de este mecanismo, los bookers del match consiguen convencer al público de que Cena puede llegar a ser campeón por 17ª vez.

Cena aplica AA sobre el ring, sin suerte. Posteriormente, y de manera sorprendente, lo aplica sobre la mesa de comentaristas, golpeando brutalmente al campeón. Con este ataque, el segundo AA, que se ha aplicado sobre una mesa, el público empieza a creer que la cuenta puede llegar a tres. No es así, pues Roman sobrevive, motivo por el cuál, llega un tercer Attitude Ajustment, que es el golpe más poderoso de Cena: el AA desde la esquina. El público está seguro de su victoria, pero esta tampoco se da. Cena estaba en lo cierto desde el principio: Roman es invencible a través de técnicas de poder.

Finalmente, Reigns alcanza una Spear sobre John, y lo derrota. Me parece que, si bien es cierto que esta es una muy buena lucha, John llega a soportar muy poco sufrimiento, y creo que el motivo es que WWE protege su cuerpo, para no dañar su carrera como actor. Así pues, un único Spear acaba con él.

Puntuación: ***3/4

domingo, 26 de septiembre de 2021

Roman Reigns vs Edge, WWE Money in the Bank 2021


Seguimos hablando sobre el reinado como Campeón Universal de Roman Reigns durante 2021, año en el que se está enfrentando a unos rivales de inmensa entidad. En todos los casos, está saliendo triunfal, y además, está construyendo un personaje fantástico, que pelea bien, que gesticula bien, y que habla bien. Y es que, el actual campeón pasó años desarrollando un papel para el que no había nacido, y que no encajaba con su forma de trabajar, motivo por el cuál, el público lo odió a pesar de ser face. Ahora, ha vuelto a la bestialidad con la que empezó su carrera en The Shield, y ha aumentado su masa, convirtiéndose, ahora sí, en un campeón  para mucho tiempo, que desafía la histórica necesidad de la compañía de tener a un héroe como principal figura.

Hemos visto, recientemente, sus combates ante Bryan y Cesaro, así como la Triple Amenaza en la que participó en WrestleMania, en la que sus  rivales fueron el propio Bryan y el legendario canadiense Edge. En Money in the Bank 2021, se enfrenta por primera vez, en solitario, a este último, protagonizando una nueva defensa histórica y de calidad.

Edge se retiró en 2011 siendo World Heavyweight Champion. Fue un retiro muy sorprendente, pues lo anunció días después de defender con éxito su campeonato ante Alberto Del Río en WrestleMania. No había ni un sólo rumor en la calle sobre la lesión que sufría. Ahora, 10 años después, superados sus problemas físicos, y de hecho, en un estado de forma muy superior al que presentaba cuando era luchador regular, a sus 47 años de edad, tiene una nueva oportunidad de revalidar la posición de Campeón Mundial que ostentaba cuando se retiró.

En WrestleMania, no consiguió ganar el campeonato. No obstante, pudo ver el miedo en los ojos de Roman, tras aplicarle un Crossface con un trozo de metal en la boca. Ahora conoce la manera en la que puede ganar a Roman, y así lo ha recreado durante los programas previos a Money in the Bank. Edge buscará aplicar este mismo Crossface, aún teniendo en cuenta que esta no es una lucha sin descalificación, motivo por el cuál, debemos esperar que haya líos con los referees, para que se pueda introducir ese trozo de metal necesario en la batalla.

Y así resulta. Esta es una lucha buena, intensa, con interferencias y lesiones arbitrales. Es, pues, un main event de estilo clásico de Era Attitude, con mucha acción, un público volcado, y mucho storytelling. Combate made in WWE.

Tenemos unos primeros minutos en los que Edge intenta atacar los brazos del Campeón, utilizando varios movimientos sobre ellos. Lo hace así, porque en primera instancia, no encuentra el camino para abrir hueco sobre el poder del bestiajo. Pero la verdad es que las esperanzas que deposita sobre esta estrategia se vienen abajo pronto, porque Reigns está en un nivel de poder difícil de igualar. Aplica Samoan Drop en ringside, y después, empuja al canadiense contra uno de los postes. Hace daño en la cabeza a Edge, y le tortura durante muchos minutos. Su dominio es largo y un poco aburrido, pero el público está muy metido en el match, y nunca abandona la esperanza de que llegue el comeback del Rated R Superstar, como así acaba ocurriendo.

Hay que recalcar el papel de Roman como rudo. Durante su dominio, calienta al público una y otra vez, con ese personaje de Head of the Table, que podríamos traducir como "Cabeza de familia". Es, como Máscara año 2000, el padre de todos, el que manda, y trolea humillantemente tanto a su rival como al público asistente. Aplica Headlocks, hasta que Edge se libra, y se vuelca al ataque.

Como oportunista definitivo, consigue conectar un par de counters peligrosos que le acercan a la victoria. La gente, y yo mismo, disfrutamos la manera en la que se saca de la nada sus clásicos movimientos de marca, incluyendo el Edgecution de toda la vida. Consigue aplicar STF y Crossface, pero es pronto para ganar con ellos. Sin metal, es complicado que Reigns se rinda.

Continua la acción y el entretenimiento. Roman falla un Spear en ringside, y atraviesa las barricadas, para, posteriormente, atravesar las segundas al ser víctima de la lanza, mucho más técnica, de su oponente. Nada de esto le sirve para ganar. Ahora, el referee, el veterano Robinson, cae lesionado tras un choque, lo que da pie a que sea el propio Reigns el que rompa una silla para quitarle el trozo de metal con el que pretende dar a Edge de su propia medicina. Cuando intenta aplicar un Crossface con él, Edge lo evita para pasar a ejecutarlo él mismo. Es el momento definitivo, el que tanto había esperado, aunque no hay árbitro, Roman sufre un dolor devastador.

Parece que el referee suplente estaba en el baño, porque tarda mucho en salir. Mientras tanto, Llegan los Uso para ayudar a su primo, tan sólo para ser expulsados por Rey Mysterio y su hijo, con los que tienen una rivalidad en este momento. Parece que Reign no tiene salvación, pero ahora es Seth Rollins el que acude para evitar la victoria de Edge.

Previamente, Rollins había caído derrotado en el Money in the Bank Ladder Match, tras recibir un enorme Big Ending por parte de Big E, desde la parte superior de la escalera. Su destino, decía, era ganar el maletín para salir de Money in the Bank como Campeón Universal, más no ha podido ser. Ahora, culpa a Edge por haberle robado la oportunidad titular. Esto dará pie a una rivalidad entre ellos que comentaremos próximamente.

Roman busca el Spear, pero es Edge el que lo alcanza. El nuevo referee llega, pero lo hace tarde: la cuenta sólo llega a 2, ante la locura del público. Rollins vuelve, y su interferencia provoca que el nuevo Spear caiga de parte de Roman. Victoria para el campeón, en una lucha que supone un espectáculo bastante loco, con algunas carencias luchísticas, pero con tamaño e intensidad de sobra para ser una lucha por el mayor campeonato que existe ahora en la industria. Rollins aún tiene tiempo para volver a atacar a Edge, ensalzándose en una batalla con el canadiense, con el que pelea por todo el estadio.

Roman coge el micro cuando suena la legendaria música de John Cena. El mundo entero se vuelve loco, pues vuelve la mayor figura de la lucha libre de este siglo, para retar al campeón. Se verán las caras en SummerSlam.

Puntuación: ****1/4

sábado, 25 de septiembre de 2021

Roman Reigns vs Cesaro, WWE Backlash 2021


El año 2021 está siendo un año de grandes retos para el reinado de Roman Reigns como Campeón Universal. Leyendas como Daniel Bryan, Edge, Rey Mysterio, John Cena y, dentro de poco, Brock Lesnar, ponen en riesgo su título, mas hasta ahora nadie ha logrado derrotarlo, y parece improbable que Lesnar lo haga. Como dicen en Internet, Roman se está dedicando a dar palizas a viejitos.

Pero, entre todo este grupo de mitos de la lucha libre mundial, se coló un retador inesperado, que plantó cara a Roman en Backlash. Se trata de Cesaro, un luchador que protagonizó decenas de combates increíbles en su carrera como independiente, con el nombre de Claudio Castagnoli, pero que ha pasado desapercibido durante un lustro en WWE. Aplaudido por sus obvias habilidades como luchador, daba la sensación de que jamás tendría un push importante, porque Vince McMahon no veía nada interesante en él. Pero 2021 es un año extraño para la lucha libre: hemos visto un push para Hechicero en CMLL, y otro para Cesaro en WWE. Este, tuvo una lucha en WrestleMania ante Seth Rollins, y después, un match titular ante Reigns. Por desgracia, después de eso, parece haber caído de nuevo en el olvido por parte de los bookers de WWE, que, una vez más, muestran carencias creativas a la hora de utilizar luchadores más allá de los combates por los títulos principales.

Volvemos a la lucha entre Roman y Daniel Bryan de la que hablamos hace unos días. Tras la pelea, el campeón asesinó al retador, como excusa para su desaparición definitiva de la empresa (ya sabemos que ahora está en AEW). Cesaro llegó para evitarlo, enfrentándose a Roman y a sus primos, los Uso.

Dentro de esa familia, había una pequeña guerra civil, y entre las dudas, Cesaro y Rollins mantuvieron un match en busca de una lucha titular. Debido a la indebida participación de Jimmy y Jey, Cesaro salió victorioso, logrando su lugar en el main event de Backlash, que es una lucha tremendamente buena. El viejo Castagnoli nunca defrauda.

El evento tiene lugar en el Thunderdome, así que es difícil valorar la reacción del público al match de Claudio, porque, recordemos, la gente accede al estadio de manera virtual. Los relatores se pasan el encuentro recordando lo buen luchador que es el suizo, y la longitud de su carrera, para convertirlo en un retador creíble. Pero, realmente, esto resulta innecesario, porque su trabajo arriba del ring lo dice todo. Este es el mejor combate de WWE que he visto en mucho tiempo, aunque aún me falta por ver los combates de Roman ante Edge y Cena, que tienen buena pinta, y que estarán en el blog muy pronto.

Observamos un comienzo de match dubitativo en ambos casos. Roman acaba fuera del ring, intimidado por la habilidad colegial mayor del europeo, mientras que posteriormente es este el que tiene que salir a descansar, debido a la mayor fuerza del campeón. Al caer, se hace daño en el brazo derecho, y eso marcará el rumbo del combate.

Porque, como todo el mundo sabe, los castigos, normalmente, en Estados Unidos, se llevan a cabo sobre la extremidad izquierda. Ya vimos en el último match entre Roman y Bryan que esto no fue así, y no sé si eso responde a algún cambio de estrategia empresarial. En cualquier caso, el objetivo de este tipo de metodologías es que el dolor sobre la extremidad dañada tenga consecuencias sobre su forma de aplicar ciertos ataques, debido a que esa es la extremidad con la que se aplican (no recuerdo muchos luchadores zurdos). El método es interesante, pero tiene un riesgo: que el selling no se realice correctamente, porque en un gran combate, es difícil que un luchador renuncie a usar sus mejores herramientas.

Y esto es lo que parece ocurrir durante cierto instante del combate del que hablamos. Cesaro ataca la pierna de Roman, para después aplicar un Sharpshooter que no tiene mucho éxito. Parece un torbellino de lucha, aplicando muchos Uppercuts, en el ring y fuera, y volando desde varias perspectivas. Ante esa capacidad luchistica inaudita, Roman se acuerda de ese golpe en el hombro, y aplica varios estiramientos, aprovechándose del esquinero. Después de eso, aplica llaves y palancas, casi burlándose del rival. Se burla de Cesaro, y del retirado Daniel Bryan, recordando que ese estilo técnico es "DB Style". Le divierte el "amor por el wrestling" que dicen sentir personajillos como estos.

Hablaba antes de hipotéticos problemas con el selling, porque, efectivamente, Cesaro se lanza al ataque con su brazo derecho. Si bien en principio se duele mucho, llega a olvidar totalmente el dolor utilizando la infalible técnica médica de mover mucho el brazo para desentumecerlo. Así, aplica un increíble Súplex desde el esquinero, de esos en los que levanta el cuerpo del oponente entero desde la lona. Esto sería un problema para la calidad del combate, si no fuera porque el castigo al brazo vuelve posteriormente, y entonces es vendido a la perfección, lo que expresa que, para este instante, el trabajo no había sido lo suficientemente duro aún como para causar graves problemas. De todos modos, tras el suplex usado, Cesaro es incapaz de utilizar el Neutralizer, lo que quiere decir que usar esa técnica le ha hecho aún más daño en el brazo.

Cesaro sigue fallando ataques por culpa de su brazo, y recibe la primera Guillotina. Consigue escapar de ella con un Spinebuster, y convertirla en un Sharpshooter. No puede aplicarlo con el brazo derecho, así que lo hace con el izquierdo. Aplica asimismo Crossface, y una vez más, la debilidad de su brazo resulta decisiva para que Roman escape. Así pues, aunque en principio parecía haber un problema de selling, ahora sabemos hacia dónde iba el trabajo, y es genial.

Roman golpea con codazos y con Power Bomb. Se pone colegial, demuestra que él también sabe luchar a todos los niveles, no sólo a través de la fuerza, y se revuelve para aplicar nuevas Guillotinas. Cesaro lo vuelve a levantar en peso para aplicar Spinebuster y librarse, pero esta vez Reigns permanece agarrado a su cuello. Cesaro está a punto de abrir la llave, pero su brazo no tiene suficiente fuerza para hacerlo, así que esta se vuelve a cerrar. Finalmente, para terminar una secuencia de lucha tremendamente buena, Cesaro queda KO debido al candado de su oponente. Victoria para Roman en una lucha que, en mi opinión, no está muy lejos de la perfección.

Puntuación: ****3/4

sábado, 11 de septiembre de 2021

Daniel Bryan vs Roman Reigns, WWE Smackdown 30/04/2021


Recientemente, y tal y como era de esperar, Daniel Bryan hizo su debut en AEW. Lo hizo con su nombre clásico, Bryan Danielson, ese que le hizo famoso entre los fans del wrestling de calidad, y que tanto echábamos de menos. Una vez más, AEW da un paso adelante para generar interés por encima de una WWE pasiva que deja escapar a todas sus estrellas, en una situación que recuerda un poco a la guerra con WCW de los 90.

Vamos a recordar, pues, la última lucha que tuvo en la empresa de McMahon. En realidad, ya pretendía hacer tal cosa, porque quería ver todos los combates especiales por el Universal Championship de Roman Reigns, hasta encontrarse con Cena en SummerSlam. Lo aprovechamos doblemente.

Como sabemos, a Vince nunca le ha gustado mucho Bryan. Sin embargo, en la temporada previa a WrestleMania 37, recibió un push inesperado, metiéndose en la rivalidad principal del show, entre Edge y Reigns. Obviamente, el objetivo fue convencerle de quedarse en la empresa, pues su contrato finalizaba poco después del magno evento. Ya sabemos que WWE no tuvo éxito en eso, pues Daniel ahora está en AEW, aunque espero que no se trate de un contrato de exclusividad, y que pueda luchar en otras partes.

Y es que Bryan es el mejor. Lo era antes de llegar a WWE, y lo es ahora, más de una década después. Y por eso quiero verlo en el mayor número de situaciones posibles. El Bryan de WWE estaba un poco maniatado, no tanto por esa tontería que dicen algunos de que Vince no permite a los luchadores dar el 100%, sino porque las posibilidades de dar grandes combates ahí se limitan a los momentos de push. Es cierto que en el caso de Bryan estos momentos no han sido pocos, pero podrían haber sido muchos más con un bookeo acertado. En cualquier caso, AEW todavía no ha demostrado que sea mejor que WWE organizando combates de calidad (de hecho, es muy inferior, pero todas las incorporaciones que está haciendo pueden dar mucho juego).

Bryan disputa en Smackdown un último gran combate que demuestra esa calidad. Recuerda un poco a la última lucha en Smackdown que tuvo Kurt Angle ante el campeón del momento, Rey Mysterio, poco antes, precisamente, de debutar en TNA. En este caso, Bryan no se toma el match a la ligera por ser el último, sino que entra al ring como un loco, atacando con velocidad, muy stiff, e intentando conseguir una rendición rápida, consciente de la diferencia de fuerza existente entre él y su rival.

Dentro del kayfabe, está en juego, no sólo el Universal Title, sino también la carrera de Bryan en Smackdown. Y es interesante que esta regla se limite a Smackdown, y no a WWE: está claro que WWE todavía esperaba su renovación, en cuyo caso, habría acabado en RAW. Su gran acometida inicial, finalmente, es frenada por la fuerza sobrehumana de Reigns, que destroza al American Dragon con sus clotheslines.

Presenciamos, pues, una lucha de tipo David vs Goliat. Bryan intenta muchas cosas, pero acaba comiéndose Power Bombs asesinas. Roman lo tortura, pero, para su sorpresa, el barbudo pequeñajo no se rinde. Convierte un intento de Superplex en un gran Back Suplex desde el esquinero, y se dispone a romperle el brazo a Roman. Y es más, no ataca el izquierdo, como es norma en la disciplina, sino el derecho, precisamente, para evitar sus Spears, sus Superman Punchs, sus Clotheslines...

Ese dolor aumenta mucho cuando el medio samoano se lanza sobre él en ringside, y atraviesa las barricadas con su hombro derecho. Daniel está cerca de ganar en varias ocasiones, con paquetitos, y con Running Knee, sin éxito. Consigue aplicar su Yes! Lock en más de una ocasión, retorciendo especialmente el brazo del campeón, pero este tampoco se rinde. En algunos momentos, da la sensación de que la victoria puede ir de lado del retador, dada la intensidad de su llave, pero no hay suerte.  Posteriormente, Roman demuestra el poder de su brazo, y el poco éxito del castigo de Bryan, pegando muchos codazos, y aplicando varias Power Bombs, para terminar ganando con su llave de rendición, su Guillotina. Si bien Bryan bloquea su uso con el brazo derecho, legitimizando su trabajo sobre él, finalmente, Roman cambia de brazo y lo pone a dormir con el izquierdo.

La lucha es realmente buena. Quizás el selling de Roman es el problema. Salvo ese último movimiento, en el que se muestra incapaz de usar la Guillotina, hace lo que quiere con su brazo. Quizás hubiera sido mejor que Daniel atacara el brazo izquierdo, dado que Roman no pretendía ceñirse a la seriedad de este al luchar. Más allá de eso, es una gran lucha titular, con un hombre pequeño buscando maneras de ganar a través de su mayor conocimiento, y un hombre grande que viene de otro planeta.

Puntuación: ****

miércoles, 25 de agosto de 2021

Edge vs Roman Reigns vs Daniel Bryan, WWE WrestleMania 37


Especial WrestleMania 37

Acabamos, al fin, el especial sobre WrestleMania 37 que comenzamos ya hace tiempo. Hoy, vamos a charlar sobre el Main Event de este evento, esa Triple Amenaza que enfrenta a Roman Reigns con Edge y Daniel Bryan, con el Campeonato Universal en juego.

Edge, después de su lesión, volvió para ganar el Royal Rumble 2021, y finalizar, en el transcurso de la batalla, con su rivalidad frente a Randy Orton, que marcó su regreso en 2020. Entonces, supimos que el main event de WrestleMania sería Roman Reigns vs Edge, lo que, sobre el papel, no suena mal, en tanto que son dos personajes muy poderosos, mas deja algunas dudas sobre el resultado arriba del ring.

Reigns se ha convertido en un monstruo. WWE se empeñó en imponerlo como un gran héroe, pero eso nunca funcionó, o no lo hizo al nivel que la gran estrella que la empresa requiere. Pero como rudo, puede sacar toda la potencia, la energía que lleva dentro y que ya demostró en sus tiempos como miembro de Shield. Por su parte, Edge es una gran leyenda, que lo ha hecho todo en su carrera. Sobre el papel, como digo, por nombres, no hay nada de malo en este combate, salvo el hecho de que no hay una gran historia entre ambos, y que es demasiado obvia la victoria de Reigns sobre la leyenda (una más). Así pues, era muy necesario meterle algo más a ese combate, y ese algo más es Daniel Bryan.

Me sorprendió mucho que WWE metiera a Bryan en el main event de WrestleMania. Es un luchador que, obviamente, no le interesa en absoluto a Vince, mas le viene bien tenerlo en su roster, sobre todo, para evitar que se vaya a otro sitio. Pero su contrato tocaba a su fin, así que se le intentó vender la idea de que habría cosas interesantes para él si se quedaba en la empresa. Es obvio, asimismo, que eso es mentira, y por eso, por ahora, no ha renovado, y no sería de extrañar que, el día menos pensado, apareciera en AEW, o, como él siempre ha dicho desear, volviera a luchar en México o Japón. Pero este intento de expresión falaz de amor nos regaló un main event muy apañado.

Main event marcado por el hecho de que Bryan hizo rendir a Roman en los programas previos, un hecho único en la historia, que yo recuerde. Roman se rindió cuando se le aplicaba un Yes! Lock, si bien, el referee (Edge) no lo vio, durante un combate por el Universal Championship en el que el barbudo estuvo involucrado gracias a ganar una Elimination Chamber. No he visto estas dos luchas, pero parecen tener nivel, por las notas que observo por ahí, para estar en el blog. El caso es que Bryan se merecía una oportunidad titular, y se le fue concedida, al introducirlo en el main event de WrestleMania, que pasaba a convertirse en una Triple Amenaza.

Como digo, esa rendición se convierte en un hecho importante dentro del storytelling que se desea transmitir durante el match. La pelea, en cualquier caso, empieza muy bien, pues, al ser una Triple Amenaza, no existe la descalificación, así que Roman aprovecha la presencia de su primo Jey Uso para atacar a todos con Superkicks. Se convierte en un arma poderosa, pues sus patadas llegan desde cualquier parte, y hacen mucho daño. Edge, no obstante, consigue sacarlo de la ecuación, al reventarlo contra los escalones de metal.

Esto es una Triple Amenaza, y en tanto que tal, muchas veces puede ser confundida con un conjunto de power moves sin demasiado criterio. Eso ocurre, por supuesto, pues todos tienen su momento para aplicar sus movimientos de marca. Esto no es lucha de arte y ensayo, pero es divertida, y a la gente presente, que se agradece mucho, le gusta. Creo que el público de WrestleMania 37 es más amable que en otras ocasiones; es de entender, después de tanto tiempo sin estar en un evento en vivo.

Como digo, después de esa rendición durante las semanas previas, la bestia Roman Reigns, que parecía invencible, ha demostrado una pequeña debilidad. Ahora es mucho más creíble que sea derrotado, así que podemos decir que WWE ha hecho un buen trabajo escribiendo esta historia. Bryan pisotea la cara de Roman con violencia, hasta marcársela legítimamente, y aplica su  candado, ante el clamor de Paul Heyman. Edge evita la rendición, pero no será la última oportunidad. Los grandes ataques continúan, por parte de los tres, produciendo momentos de gran interés, y gritos que dicen "This is Awesome", hasta que Edge coloca a Roman en un nuevo Crossface, ayudándose del metal que se ha desprendido de una silla. Roman no aguanta tanto dolor, y está a punto de rendirse, más su mano es frenada por Daniel, que no le permite ser derrotado. Lejos de eso, apoya la llave del canadiense, aplicando, por su parte, el Yes! Lock. El castigo es tremendo, pero se termina cuando Bryan y Edge se pelean entre ellos. Daniel busca la Running Knee, pero se traga un Spear. Y lo mismo le pasa a Roman cuando busca un Superman Punch.

Edge, desesperado tras no poder vencer a ninguno de sus rivales con su Spear, va a por sillas. Pretende destrozar a ambos, poniendo sus cabezas sobre una silla, y golpeándolos con otra silla. Lo ejecuta correctamente en el caso de Daniel, mas Jey Uso evita que haga lo propio con su primo. Aunque Uso es apalizado, permite a Roman acabar con Edge. Le pega un sillazo tal y como el que él debía recibir, y de esa manera, se lleva la batalla, al colocar el cadáver de Edge sobre el de Bryan, y cubrir a ambos.

Como digo, en muchas ocasiones, esta batalla es un compendio de ataques de poder, lo que es muy divertido, pero no muy virtuoso. No obstante, es obvio, aquí, que cada uno tenía una estrategia, y todos la usan para ganar: Bryan tenía sus Crossfaces, que ya habían demostrado su poder para derrotar al campeón; Edge tenía sus sillas y Roman tenía a su primo. La familia resulta, finalmente, ser lo más poderoso.

Puntuación: ****

martes, 29 de junio de 2021

Roman Reigns vs Rey Mysterio, WWE Smackdown 18/06/2021



Hace unos días, tuvimos la suerte de disfrutar del primer combate del tipo Hell in a Cell en un programa de televisión de WWE, y eso es algo histórico. A pesar de estar prevista para el evento Hell in a Cell, la lucha entre Rey Mysterio y Roman Reigns por el Universal Championship de este, tuvo lugar en el programa de Smackdown previo al PPV, porque ya sabemos que Fox paga un dineral a la empresa, y en tanto que tal, esta tiene que proponer cosas importantes para no perder audiencia. Ahora mismo, es más urgente, creo yo, frenar la pérdida de audiencia de los programas semanales que guardar cosas para un PPV sin público.

Roman Reigns, en su modo heel, se ha convertido en lo mejorcito de WWE. Puede dar rienda a su brutalidad, y no necesita intentar caer bien a nadie, algo en lo que WWE insistió durante años sin resultados. En última instancia, la familia Mysterio ha sido la víctima de Roman, y eso es interesante, porque Rey, después de estar metido en algunas de las historias más importantes para WWE en 2020, quedó fuera de WrestleMania, porque, mientras AEW sigue nutriéndose de grandes leyendas para que estas vuelvan a hacer cosas de importancia, la compañía de Vince insiste en pisotear su propio legado. No obstante esto, el enmascarado al fin tiene una oportunidad relevante por un campeonato de renombre, y eso es genial, porque seguir viendo a Rey Mysterio dar grandes luchas en 2021, y pelear a primer nivel, es un gran privilegio.

Esto se convirtió en una guerra de castas. Los Mysterio eran campeones por parejas de Smackdown, y se enfrentaban a los Uso. Estos, a su vez, tenían una pequeña disputa interna, por el favor de su primo, Roman, como resultado de la cruenta rivalidad ocurrida entre Reigns y Jey cuando Jimmy aún estaba lesionado. Buscando el favor de sus primos y la hegemonía de su familia, Roman se metió en la rivalidad, atacando a los hispanos con gran brutalidad.

Ya sabemos que Dominik es un rookie. Es un chiquillo, así que los abusos sobre él generan una gran empatía por parte del público, y convierten a Rey en un "padre coraje". En un nuevo encontronazo, Roman pudo con ambos de nuevo, y lanzó a Dominik con una Power Bomb desde el ring a ringside, un golpe brutal que, obviamente, estaba producido: WWE aprovechó que no tiene público en los estadios, y que la gente que se presenta en las pantallas ve las mismas imágenes que los espectadores televisivos, para poner un colchón para que el chico cayera bien sin que se notara. 

Así pues, un enfadado Mysterio buscó venganza, y retó a Reigns a un Hell in a Cell Match, aprovechando que llegaba el PPV homónimo. En realidad, ni la rivalidad ni la lucha que tienen finalmente, son propias de un Hell in a Cell, pero ese PPV pide batallas de este tipo. La ejecución final recuerda más a un Street Fight, y cosas similares, pero aún así, me parece una muy buena lucha. Como decía antes, finalmente, se adelantó para emitirse en Smackdown.

Rey Mysterio es consciente de la diferencia de tamaño y fuerza, así que no piensa dar una oportunidad a Roman: desde el primer segundo, le ataca brutalmente con objetos. Es difícil recordar a Rey luchando de esta manera, pero la situación así lo pide. La verdad es que la presencia de su hijo ha aumentado mucho la intensidad de sus rivalidades. Golpea y golpea a Roman con sillas, palos de Kendo, y con la jaula. Pero comete el error de ser él mismo durante un sólo segundo, e intenta hacer unas tijeras. Entonces, Roman lo agarra y lo destroza contra el metal rojo de la jaula.

El campeón domina sobre el ring con su brutalidad, hasta que Rey demuestra su gran habilidad para los combacks, y vuelve con ataques especiales. Aplica 619, y vuela con Frog Splash en varias ocasiones, incluyendo una con una silla por delante. Pero vuelve a fallar unas tijeras; comete el mismo error, y esta vez es definitivo: Roman lo asesina tirándolo contra la jaula desde el ring, con una Power Bomb. Roman sube a Rey al ring, y acaba el combate por rendición rápida.

Esta es una lucha propia de WWE y su técnica de adaptar los combates a los storylines. Quizás podría ser más espectacular si, simplemente, se permitiera luchar a Roman y Rey como ellos saben, y como ocurre en otras empresas (o en NXT), pero, no por espectacular, el resultado sería más recordable. En esta lucha, no hay nada al azar: el guión está claro, y la historia que se cuenta, también. No es una gran Hell in a Cell en lo respectivo al uso de la estipulación, pero es una buena lucha.


Puntuación: ***3/4

martes, 20 de octubre de 2020

Roman Reigns vs Jey Uso, WWE Clash of Champions 2020



Especial WWE Clash of Champions 2020

Volvemos a hablar sobre la actualidad de WWE. Recientemente, tuvo lugar Clash of Champions, evento en el que, en teoría, se ponen en juego todos los títulos del main roster de la empresa. En él, avanzó la historia más interesante que se está desarrollando actualmente en los programas semanales, que es la del turn heel de Roman Reigns, quizás, con un combate frente a su primo, The Rock, en la mira.

En tiempos de pandemia, WWE sufrió caídas importantes en la audiencia media de sus programas, así que intentó cosas. Entre ellas, se estrenaron dos conceptos que, creo, no han funcionado. Son los de Raw Underground y Retribution, historias cada vez con menos peso en los shows.

El primero, RAW Underground, partió como algo bastante interesante. Se trataba de una idea de Shane McMahon, que también hacía el papel de presentador en de esa especie de show paralelo, que intentaba imitar a El Club de la Lucha. Muchos hombres desconocidos se daban cita en un ring clandestino sin cuerdas, para tener luchas de estilo shoot, más técnicas y violentas que las que se dan en el ring oficial de WWE. Además, se pretendía que existiera un aire de ilegalidad, de inmoralidad, de falta de reglas.

Y eso estaba bien, pero se topó con una dura realidad: que WWE es una empresa que cotiza en bolsa, que realiza sus programas para una cadena de televisión, y que tiene que ceñirse a la moral subyacente, y a las normas de conducta actuales, para huir de las críticas en redes sociales. No estamos en los libres años 90, hoy en día, cualquier creador está sometido a la censura del ganado sin dignidad, y por eso, ese aire de ilegalidad pretendido, desapareció. Las bailarinas que, en el primer programa, animaban la velada, se eliminaron, porque se supone que el hecho de que las mujeres bailen es machista. También se eliminaron los incómodos juegos de cámara que se usaban en primera instancia, y todo se convirtió en algo muy estándar.

Pero hay otros factores determinantes en este fracaso. El primero es que las audiencias de WWE, bajan mucho en los segmentos alejados del ring oficial, pues el aficionado da por sentado que es ahí donde ocurren las cosas relevantes. Y el segundo es que esta audiencia es asimismo proporcional a los nombres de las estrellas que están en antena. Por tanto, los luchadores desconocidos que se daban lugar en el ring de Shane, no atraían a nadie, así que fueron los mismos luchadores de siempre, los de RAW, los que se pusieron a pelear. Eso provocó que el estilo shoot fuera desapareciendo, hasta el punto de que Braun Strowman se subió a pelear en ese emplazamiento, un tipo que, probablemente, no conozca ese concepto. Pero quizás, lo peor del storyline de Raw Underground, fuera el hecho de que no existía storyline alguno.

Raw Underground fue cayendo por su propio peso, y, cuando tuvo lugar un importante brote de COVID en el Performance Center, se cerró ese ring. Ya veremos si es para siempre.

Por su parte, el storyline de Retribution, sí que es un storyline como tal, aunque tampoco parece que haya más detrás que el hecho de presentar un stable sin un objetivo concreto. Comenzó con ataques aislados realizados por grupos de encapuchados, que además, eran hombres y mujeres muy pequeños, así que resultaban ridículos, casi como berrinches de adolescentes.

WWE se hizo eco de esa sensación, y fue cambiando a las personas que se colocaban tras las capuchas. La historia, aunque, en sí misma no resultaba muy interesante, sí que provocaba curiosidad, por el hecho de desconocer la identidad de los autores intelectuales de los atentados. Restaba, pues, ver si la agrupación, en tanto que parecía guardar rencor a WWE, representaba a alguna personalidad, actual o antigua, de la empresa, que pudiera dar pie a una historia mejor. Y es que, independientemente de la calidad y originalidad de los segmentos, si el grupo hubiera estado relacionado con la figura de alguien como CM Punk, por supuesto, hubiera sido algo histórico.

Pero no fue así. EL grupo fue movido a RAW, lo que le hizo perder más fuerza, porque, si se trata de un grupo de delincuentes, ¿Por qué se ciñe a la división de marcas de la empresa? Y si es un grupo que quiere destruir todo en WWE, ¿Por qué no toca las pantallas del Thunderdome? Hubiera sido impresionante ver a un grupo de canallas destrozar las pantallas a través de las que se ven a los aficionados en tiempos de pandemia, pero no, porque no hay malicia real en el grupo, y por tanto, no resulta intimidante ni interesante.

Finalmente, se revelaron los miembros principales del grupo, que son luchadores de NXT, y un liderazgo que corre a cargo de Ali, un luchador que no importa a nadie. Así, esto tan solo servirá para tener a un stable en WWE, sin mucha historia, más allá de las que se puedan desarrollar a partir de ahora.

En definitiva, ninguna de estas historias ha funcionado bien. Parece ser que tan sólo aquellas que tienen relación con conflictos personales y familiares, como la de la familia de Rey Mysterio frente a Seth Rollins y Murphy, atrae al público de verdad. Quizás por eso, resulta interesante también la de Roman.

Tras muchos meses en cuarentena por el coronavirus, Roman Reighs volvió al ruedo, con un espíritu muy distinto, y con un nuevo mánager: Paul Heyman. Se metió en la rivalidad entre Braun Strowman y The Fiend, y se llevó el Campeonato Universal. Ahora, tiene que defenderlo, y su rival es... su primo, Jey Uso.

No es muy habitual que, en el wrestling, y sobre todo, en las grandes ligas, un luchador de la división tag team, salte de pronto a los main events, y a las historias principales. Generalmente, cuando uno de los hermanos Uso se lesiona, el otro queda en dique seco. Sin embargo, Jey ganó una pelea con varios adversarios sobre el ring, para convertirse en Number One Contender para el título de Roman. Es algo que, posiblemente, no hubiera pasado nunca, si los creativos de WWE no pensaran que introducir un enfoque personal, ayudará a que el turn heel de la gran estrella de la compañía en esta época, resulte aún más impactante. Y si eso lleva a algo más, mejor aún.

Los Uso forman un gran tag, uno de los mejores en las últimas décadas, en toda la industria. Han dado muchas peleas buenas, y se han ganado un hueco en el corazón de los aficionados. Eso sí, individualmente, no han hecho casi nada. Por eso, Jey realizará un papel muy digno como underdog, será masacrado por su primo, y quizás, eso de pie a que otro primo, The Rock, haga acto de aparición, y rete a Roman para una lucha soñada en WrestleMania. Es algo rarísimo, pero el hecho de que se trate de una historia familiar, puede resultar determinante para que Rocky decida volver al ring por penúltima vez.

Así, tenemos a Jey Uso en un combate por el Unversal Championship, algo que jamás esperamos ver. Tras unas semanas de tensión familiar, llegamos a esta lucha, que es puro storytelling. Es un match de David contra Goliat, reforzado por el aumento de masa muscular que ha ocurrido en el cuerpo de Roman Reigns durante la cuarentena, que, al fin, le da la imagen de power house que siempre ha pretendido ser.

Roman le pega un buen palizón a Uso. Este, protagoniza varios comebacks, que le llevan, casi, a la victoria. Cuando Roman está a punto de ganar, Jey se lo lleva con un paquetito, y le pega un buen susto. Demasiado para su ego.

Finalmente, Roman, que parece estar introduciendo movimientos en su arsenal, aplica su conocido Spear, y deja tieso a Uso. Pero no lo cubre. Decide torturarlo. Le habla, le recuerda cómo se hacen las cosas, y quién es el jefe. Lo golpea con otra Spear, pero no realiza el conteo. Lo golpea, lo golpea, lo golpea.

El hermano de Jey, Jimmy, lesionado y cojeando, llega a la arena. Critica a Roman, e intenta convencer al moribundo Jey de tirar la toalla. Este se niega, así que tiene que ser él mismo el que la tira en su nombre. Roman retiene.

La lucha es buena. Aunque es del estilo "David vs Goliat", y en buena parte del match, parece un squash, la actitud de Roman, que recuerda al tipo que algún día fue en Shield, y aún va más allá, es realmente buena. Uso hace un buen trabajo como underdog, aunque nunca parece tener la más mínima opción.

Puntuación: ***1/2

domingo, 6 de septiembre de 2020

The Fiend vs Braun Strowman vs Roman Reigns, WWE Payback 2020


Roman Reigns ha regresado a la acción, y ha puesto patas arriba las principales storylines de Smackdown, convirtiéndose, de la noche a la mañana, en Universal Champion. Vamos a charlar sobre esto un rato.

En marzo, el planeta entero dejó de obviar lo obvio: que hay una pandemia que afecta a todo el mundo, y que es incontenible. Las limitaciones en eventos públicos pusieron al wrestling en jaque, pocas semanas antes de WrestleMania, show que supone el principal empuje anual para la industria, acabando con buena parte de esta.

WWE pasó a desarrollar sus programas a puerta cerrada, y emitió un WrestleMania en su Network rodeado de tristeza. Varios luchadores, entonces, desaparecieron de la programación, ya fuera por motivos relacionados con las nuevas limitaciones introducidas en las fronteras entre países; ya fuera por decisión moral, como es el caso de Sami Zayn; o ya fuera por motivos médicos. Roman Reigns, por haber sufrido Leucemia, es considerado persona de riesgo, por tener su sistema inmune desprotegido, y en base a eso, como decisión personal, decidió ausentarse de su trabajo, de tal manera que la lucha que debía tener en WrestleMania ante Goldberg, por el Universal Championship, se fue al limbo.

Roman, Zayn y compañía debían pensar, como otros muchos ignorantes, que un virus que en cuestión de un mes, es capaz de pasar de no existir a afectar a millones de personas, podía desaparecer por el hecho de hacer una cuarentena de un par de meses. No es así, como ya sabemos: tendremos que vivir con esto durante años, así que la decisión tan digna de quedarse en casa, podía, en el caso de estos luchadores, ser definitiva. Con el rabo entre las piernas, Roman Reigns y Sami Zayn vuelven a Smackdown, coincidiendo con el fin del verano.

Pero la vuelta de Reigns ha resultado sorprendente. Aquello que jamás llegamos a ver en el caso de John Cena, ha ocurrido con el Big Dog. WWE le ha dado un inesperado giro al personaje de su principal estrella, convirtiéndolo en rudo, y uniéndolo a Paul Heyman.

Roman apareció en SummerSlam 2020, atacando a The Fiend y Braun Strowman, cuando el primero acababa de derrotar al segundo, para convertirse en Campeón. Vimos, entonces, a un Roman muy definido físicamente, fortalecido tras su descanso, y conducido hasta lo más alto, aprovechando el hecho de que el sonido del público es falso, así que no hay riesgo de revuelta en forma de pitos por parte de los aficionados.

Decía yo en el último post, que WWE tiene la manía de conducir hacia el título cualquier cosa interesante que hay en sus programas. Eso hizo con The Fiend, que es un campeón desastroso, pero no puede estar alejado del título mucho tiempo. Este es un personaje sobrenatural, muy entretenido, pero para historias secundarias y bizarras, no para la disputa de un campeonato deportivo. Este personaje no es bueno para eso, porque no puede ser derrotado de manera normal, porque no lucha en los shows semanales, porque tiene promos absurdas desde un decorado. Y porque no es muy buen luchador.

Sería genial tener a The Fiend protagonizando historias bizarras que formaran parte importante de los shows, pero lo tenemos en el main event siempre, y cansa. Braun suplió a Roman Reigns en WrestleMania, y consiguió ganar el Campeonato Universal, pero, en lugar de tener un reinado interesante como el de Drew McIntyre, venciendo a varios heels en buenos combates, y así, haciendo un papel de verdadero campeón, estuvo metido durante muchos meses en una historia absurda con Bray Wyatt.

Una historia rara y con altibajos, que tuvo que lidiar con el hecho de que ambos luchadores estuvieron de baja por cuarentena, aunque WWE nunca confirmó eso. Pero fue obvio; Wyatt desapareció unas semanas, coincidiendo con su paternidad, y Braun hizo lo propio, tras Extreme Rules, apareciendo alguna vez en pantalla, en una conexión pixelada de mala resolución. Si esa transmisión hubiera sido producida por WWE, no se vería un solo pixel, así que está claro que la llevó a cabo con sus propios medios, y eso sólo se justifica por una cuarentena.

Pero creo que la historia, en conjunto no fue tan mala. Simplemente, no es una historia titular. Porque Braun se enfrentó, primero, con el Bray Wyatt normal, el alegre, y así, tuvo la oportunidad de salir ganador de forma limpia; y después, de empatar con el Bray clásico, el de la Wyatt Family, con reminiscencias de la antigua relación entre los dos hombres, y con la dulce Alexa Bliss, amiga de Braun tras coincidir en el Mixed Match Challenge, haciendo un extraño papel de Sister Abigail, cuyas consecuencias aún no están claras. Tras mantener el título en la cintura de Strowman en estas difíciles condiciones, apareció The Fiend.

Como digo, esta no es una rivalidad para un título, sino para una historia secundaria. Pero es interesante por su formato, por el in crescendo en el poder de Wyatt en sus distintas transformaciones, que recuerdan a una trama de Dragon Ball. Después de un ataque de Braun en Smackdown, Bray se convirtió en The Fiend cuando se lo llevaban en ambulancia, en una escena muy buena, antes de enfrentarse, ambos, en SummerSlam.

No creo que las luchas entre ellos sean malas, sin ser tampoco excesivamente reseñables. Braun y Fiend se enfrentaron en SummerSlam en una brawl de monstruos muy física y muy potente, que a mí me agrada, porque el uso de hombres de este tamaño forma parte del ADN de WWE, de esa idea clásica de que en Nueva York, gustan los gigantes, y en un mundo en el que todo se está igualando, y en el que todo pierde su esencia, lo que implica la destrucción de la cultura, poder reconocer a un creador por su estilo, es muy importante.

Al fin, The Fiend logró batir a Braun y llevarse el campeonato, tan sólo para que ambos fueran atacados por la inesperada aparición de Roman Reigns. Vince McMahon estaba preparando algo grande para su vuelta, devolviendo la grandeza visual a su espectáculo, a través de la implementación del WWE Thunderdome, y colocando otro PPV una semana después de SummerSlam, solo para que las consecuencias del retorno del Big Dog tomaran forma con velocidad.

El programa de Smackdown entre ambos PPV, fue divertido. En un contexto de ausencia de figuras de autoridad públicas en WWE, son los agentes de la empresa, aquellos hombres que se dedican a bookear combates, los que tienen  que hacer este papel, y en Smackdown, está ganando fuerza el perfil de Adam Pierce, un luchador independiente de gran nivel, 5 veces Campeón Mundial de la NWA, que se ha convertido en uno de los hombres de confianza de Vince, junto a otros como Jamie Noble o Abyss (la gente que ha sobrevivido a la ola de despidos de marzo de 2020). En ese programa, Pierce tuvo que buscar a los tres monstruos que se enfrentan en Payback, para que firmaran el contrato.

Braun lo hizo tras darle una paliza a Drew Gulak, mientras que, para el caso de Wyatt, Pierce tuvo que disfrazarse de "Postman Pierce", para ir a la Firefly Fun House y llevarle el contrato al loco, que lo recibió con alegría. Por su parte, Roman Reigns se negó a firmar el contrato, pero anunció que estaría en el evento, y dijo que eso era un spoiler, en referencia a la frase de Paul Heyman, que estaba sentado a su lado. La nueva alianza había nacido.

Así, llegamos a la lucha de Payback, un No Holds Barred, que comienza antes de que suene la campana, sin Roman. Los dos monstruos, Braun y The Fiend, se enzarzan en una brawl violenta, con algunos spots muy fuertes, pegándose con objetos, tirándose contra las mesas, o cayendo desde la rampa de llegada. Vuelven al ring, y Fiend aplica un Superplex que acaba destruyendo el ring, para sorpresa de los aficionados que observan las acciones a través de las pantallas. Entonces, llega Roman Reigns junto a Heyman, firma el contrato, tira el boli, y busca la victoria.

No lo consigue en primera instancia. Pega un montón de sillazos sobre Braun, y se libra del Mandible Claw de Wyatt, gracias a un golpe bajo. Entonces, aplica un Spear sobre Strowman, y se lleva el Campeonato Universal.

Así pues, sigue la interesantes storyline de Roman, que incluirá una lucha contra su primo, uno de los Uso (no recuerdo cuál), por el título en Clash of the Champions. Eso puede ser muy interesante, porque la elección del nuevo rival sólo puede indicar un paliza que confirme la maldad del nuevo personaje de Roman.

La lucha no está mal. Está compuesta por unos pocos minutos locos de pelea entre monstruos, y una parte final, en la que llega Roman y consigue una victoria en una situación favorable. Es una buena historia, pero a esa brawl le faltan minutos para llegar a algo más.

Puntuación: ***1/4