Hace unos días tuvo lugar el evento Royal Rumble 2024, un PPV que vi en directo, después de mucho tiempo sin hacerlo. Antes de hablar de él, voy a hacerlo acerca de una de esas battle royals que suelo ver durante los días previos: enero es el mes de las batallas reales. Vamos rápido con eso para comenzar con lo que de verdad importa.
He visto la Battle Royal de Battlebowl 1993. No era mi intención, mas me saltó en Youtube y no me quedó otra opción. En fin; como sabe el lector, Royal Rumble es uno de los inventos que mejor han funcionado en la industria del wrestling, y por eso todo el mundo ha intentado imitarlo. Se han creado muchos tipos de batalla real, pero ninguna ha llegado a ese nivel de impacto, entre otras cosas porque el Rumble forma parte del camino a WrestleMania; y supone un momento de narrativa deportiva verdaderamente trascendente. El lector recordará la World War III de WCW, que también parecía interesante, pero que tan sólo sobrevivió tres años: entre el 95 y el 97. WWE tiene los derechos del concepto, y aun así, no lo ha puesto en práctica, porque, a la hora de la verdad, resultaba muy aburrido, más allá de que el nombre, pasado el 11S, resultó tabú. Pero, antes de inventar World War III, WCW lo intentó con Battlebowl.
El concepto se inventó para Starrcade 91 y Starrcade 92, y luego tuvo un evento propio en 1993. Consiste en una serie de luchas en parejas, cuyos ganadores se enfrentan en una battle royal individual final. Es este un concepto cuya última iteración se dio en Slamboree 1996. Si se fija el lector, es algo parecido a los torneos cibernéticos del Consejo Mundial de Lucha Libre, pero al revés.
Comentemos la edición de 1993, que ocurrió en el único evento de pago por visión de la historia que recibió el nombre del tipo de batalla: Battlebowl. Es, esa, una época en la que en WCW había buenas rivalidades y buenas batallas, y en ese "todos contra todos" están algunos de los grandes protagonistas de las mismas: Cactus Jack, Steve Austin, Sting, Vader, Dustin Rhodes, Rick Rude, Ric Flair... buen ganado.
En las batallas previas, Vader y Cactus Jack habían vencido a Charlie Norris y Kane; Brian Knobbs y Johnny B. Badd habían vencido a Erik Watts y Paul Roma; The Shockmaster y Paul Orndorff habían vencido a Ricky Steamboat y Steven Regal; King Kong y Dustin Rhodes habían derrotado a The Equalizer y Awesome Kong; Sting y Jerry Sags habían vencido a Ron Simmons y Keith Cole; Ric Flair y Steve Austin habían derrotado a 2 Cold Scorpio y Maxx Payne; Rick Rude y Shanghi Pierce habían eliminado a Tex Slazenger y Marcus Bagwell; y Road Warrior Hawk y Rip Rogers habían vencido a Davey Boy Smith y Kole. Como decía, todos esos ganadores, que como deducirá el lector, forman lo que también en México llaman "parejas increíbles", se clasifican para participar en la battle royal final. Sólo lamento la derrota de Ricky Steamboat... ¿quién preferiría tener al Shockmaster en la batalla en lugar de a él?
El Shockmaster es un tipo del que hablamos hace unos días al comentar el Royal Rumble 1991. Se trata del luchador que en WWE era conocido como Tugboat, que luego traicionó a Hulk Hogan para convertirse en Typhoon y formar parte de Natural Disasters. Su nombre es Fred Ottman y en WCW protagonizó uno de los momentos más ridículos de la historia. De cara al evento Fallbrawl 1993, Sting, Davey Boy Smith y Dustin Rhodes buscaban un compañero para confrontar a Sid, Vader y los Harlem Heat. Sting anunció que la identidad de su nuevo compañero sería un gran shock para el mundo, y así apareció por primera vez el Shockmaster. Ottman, con un casco de soldado imperial de Star Wars comprado en los chinos, surgió rompiendo la pared; tropezó con los restos y se calló. Su casco rodó, dejando ver su cabeza. Así, una gran entrada que debía haber causado impacto lo creó en términos de vergüenza ajena. No duró mucho, después de esa estupidez, en la empresa, aunque sí llegó a participar en la batalla anunciada, así como en esta que comentamos hoy.
La lucha es una batalla bastante normal, que cobra interés en su parte final. Hasta entonces no es gran cosa. Ric Flair, que había tenido que hacer equipo con Austin, pelea con él en ringside. Obviamente aún no es la estrella, Steve, que sería en WWE, pero ya vemos que no es un piernas: es un rudo muy odioso (y muy rubio). Lo que tiene de especial esta Battle Royal es que la rampa llega hasta el ring, y que caer sobre ella no se considera eliminación. La rampa es parte del ring.
Vader destroza a Foley, lanzándolo fuera con un clothesline. Dustin hace lo propio con Mr. Wonderful, en cuyo canal de Youtube se ha subido esta pelea; y asimismo son eliminados los dos obesos que estaban peleando entre sí: Shockmaster y King Kong, también conocido como Krusher Kong, que formaba parte de The Colossal Kongs. Su compañero era Awesome Kong, eliminado por él en la ronda previa, y al que no hay que confundir con la ex-campeona de TNA. Así continúa la batalla, con pocas cosas que destacar por ahora.
Dustin, al que después conoceríamos como Goldust, está en modo héroe. Austin le parte la cabeza; sangra sin parar y no obstante, elimina a los Nasty Boys. Mas cuando lo hace, el futuro Stone Cold lo echa fuera del ring. Asimismo son eliminados Rude y Hawk. Esto se despeja. Quedan arriba Sting, Rick Flair, Vader y Austin. Casi nada.
Entonces, entra en acción Harley Race, mánager de Vader y antiguo rival de Flair. Ataca a este, y recibe un Suplex en la rampa, mas Vader lo aprovecha para golpear al Nature Boy, y romperle algo. Este grita desesperado. A finales de año, Flair y Vader se enfrentarían en Starrcade 93, en una lucha que ya hemos comentado en el blog, pero ahora el padre de Charlotte se tiene que ir en camilla, mientras Vader, Race y Austin le hacen Bullying.
Sting se queda solo con los dos rudos. Estos le atacan sin parar, mientras él reacciona de vez en cuando con grandes spots que levantan al público. En uno de estos movimientos, consigue proyectar a Austin hacia la rampa, y este rueda como una croqueta hasta ser eliminado. No queda muy realista, pero es un error posible tanto fuera de la ficción como dentro de ella. Sting, ahora, se enfrenta al gigante en solitario, y consigue dominarlo después de mucho sufrimiento. Lo coloca en la esquina para aplicarle un Sting Splash, pero el rudo se quita a tiempo y Sting rebota contra las cuerdas, cayendo fuera. Victoria para Vader, que, además, era campeón del mundo.
Battle Royal normal y aburrida que se anima mucho en la parte final gracias al nivel de los participantes, que se encuentran entre los mejores de la empresa, y casi de la historia.
Puntuación: ***1/4
sábado, 3 de febrero de 2024
Battle Royal, WCW Battlebowl 1993
jueves, 5 de mayo de 2022
Razor Ramon vs Bret Hart, WWF Royal Rumble 1993
Especial fallecimiento de Scott Hall
Hace unas semanas, conocimos el fallecimiento del legendario miembro de la NWO Scott Hall. Esta muerte a mí me pilló un poco por sorpresa; no estaba muy al tanto de su estado de salud. Vamos a comentar un par de luchas en honor de su carrera.
Hall era un hombre relativamente joven (63 años), y muy activo. Si bien durante toda su carrera tuvo muchos problemas con el alcohol y las adicciones, lo que le llevó a vivir varias situaciones poco profesionales, se encontraba bien; tenía un contrato de leyenda en WWE, y hacía apariciones esporádicas junto a sus compañeros Hogan y Nash. En 2015, tuvo la oportunidad de participar en la lucha entre Sting y Triple H de WrestleMania, en la que se dio un icónico encontronazo entre la NWO y D-Generation X, que si bien no gustó a algunos, ha demostrado ser única en su especie, pues tras la muerte de Hall, nada parecido podrá volver a pasar. Además de eso, fue inducido en dos ocasiones al Salón de la Fama de WWE: primero, de manera individual, por su trabajo como Razor Ramon (2014) y segundo, como parte de la NWO (2020). Su muerte sobrevino de una manera totalmente inesperada: como consecuencia de una operación de cadera, que si bien es algo rutinario, incluye ciertos riesgos. Tras su finalización, un coágulo de sangre provocó varios infartos al luchador, resultando en su muerte. Descanse en paz.
Hall pasará a la historia por su trabajo durante la década de los 90; primero, en WWF, como el citado Razor, que llegó a ser uno de los principales main eventers de la compañía; y en segundo lugar, con su nombre real, en WCW, como parte de los Outsiders y de la NWO. Cuando la WCW cerró, llegó a WWE; donde tuvo una breve etapa reformulando la storyline de la NWO, y posteriormente, trabajó en TNA. En 2016 tuvo su última lucha, para la empresa independiente F1rst Wrestling, en la que derrotó a Chuck Taylor. Para este breve especial, me gustaría revisar dos luchas: una perteneciente a su primera etapa en WWF, y otra perteneciente a su última etapa en WCW, esto es, una por cada anillo.
Realmente, cuando uno piensa en los miembros de NWO, sólo puede recordar promos, intervenciones, palizas... Poca lucha. Y es cierto que, en cierta medida, se puede decir que la carrera in-ring de hombres como Hall y Nash, acabó cuando formaron los Outsiders, más allá de algunas honrosas excepciones, alguna de las cuales comentaremos por aquí. Sin embargo, hasta entonces, la opinión general sostenía que Hall era un muy buen luchador.
Y es que es un tipo que había luchado en la AWA y en la New Japan, dos promotoras con buenos estándares luchísticos. No era un saco de músculos sin conocimiento. Tras algunos años en la carretera, y después de varias pruebas, en 1992 consiguió firmar con WWE, tras interpretar un clásico rol de guaperas en WCW durante un tiempo. En la empresa de McMahon recibió el nombre de Razor Ramon, una especie de matón cubano basado en la película Scarface. La verdad es que no pasó mucho tiempo hasta que el luchador despegó; pues pronto empezó a ocupar lugares importantes en la cartelera. En WWF tendría sus míticas luchas de escaleras frente a Shawn Michaels, y varios buenos combates ante Bret Hart. Ramon llegó a ganar cuatro veces el Título Intercontinental.
Hay que tener en cuenta que, si bien la gente lo conoce por su rol como parte de NWO, detrás de bambalinas, en WWF, formaba parte de un stable mucho peor: The Kliq, un grupo de abusones y acaparadores en el que también estaban Shawn Michaels, Triple H, Sean Waltman y Kevin Nash. Posiblemente, buena parte del éxito de todos en WWE se debiera al poder en vestuarios que tenían, un poder que creaba un mal ambiente obvio que a Bret Hart no le gustaba nada. De todos modos, en 1997, la mayoría de ellos estaba ya en WCW, y Shawn acabaría lesionado, así que WWE pudo girar en otras direcciones sin las ataduras que luchadores con demasiado peso ejercían. Ese aumento en la elasticidad le favoreció a la hora de ganar las Monday Night Wars.
Ya hemos comentado en alguna ocasión luchas buenas de Hall. Su lucha de escaleras de WrestleMania ante Michaels está en el blog, aunque no me parece tan buena vista hoy en día. Para celebrar su vida, yo prefiero comentar un combate excelente que mantuvo frente a Bret Hart en Royal Rumble 1993, evento en el que fue el retador al WWF Championship, en manos del canadiense.
Pues sí; estábamos en enero de 1993, y Hall ya era retador. Hart, tras su rivalidad ante Ric Flair, se había consagrado como main eventer y como campeón, si bien aún tendría que ver, unos meses después, cómo su título acababa en manos de un regresado Hulk Hogan. No obstante, este enfrentamiento a principios del 93 parece un preludio de lo que serían los siguientes años en WWE. Razor Ramon perseguía el título que estaba en manos del hombre de rosa.
Esta es la lucha más importante en la carrera de Scott hasta el momento. Bret, por su parte, cuenta con la presencia de su familia, incluyendo al tío Stu, en las primeras filas. Bret le regala sus gafas a un niño, y Ramon trata de hacer lo propio, a su manera: le tira un palillo de dientes que lleva en la boca. Así, comienzan las acciones, con dominio de Razor, que es mucho más grande que su oponente. Sin embargo, el canadiense se revuelve y comienza a aplicar su clásica rutina contra la pierna del oponente, que incluye una Figura 4, aprovechando el fin de la carrera de Flair en la empresa de Vince (participaría en el Rumble la misma noche, y se jugaría su continuidad en la empresa en el RAW posterior frente a Mr Perfect, si bien ese programa había sido grabado ya).
Bret trabaja bien la pierna del retador, mas no consigue hacerlo rendir. Posteriormente es el falso cubano el que domina, atacando la espalda de Bret, de una manera asimismo notable. No es tan técnico como el canadiense, pero utiliza una serie de movimientos muy pragmáticos para conseguir su objetivo. Razor aprieta la cintura de Bret con un Bear Hug, que puede parecer un movimiento simple, pero que es perfecto para la clase de trabajo que está realizando. A pesar de eso, el campeón consigue librarse de su rival, lanzarlo a ringside, y volar sobre él.
A la lluvia de ataques frontales de Bret le sigue un intento de comeback del rudo, después de que el referee tropezara con los luchadores durante el intento del técnico por acabar el match mediante un Sharpshooter. El poderoso Ramon vuelve a utilizar su fuerza para dominar, y en ese contexto, a la desesperada, Bret tira de técnica. Aplica un par de counters que casi le dan la victoria, y cuando no lo hacen, consigue convertir uno de ellos en Sharpshooter. Esta vez Hall no puede escapar del castigo, y la correa se queda en la cintura del Hitman.
Muy buena lucha; ejecutada con rigor por ambas partes, con buenas reacciones del público. Match muy sólido, sobrio y técnico.
Puntuación: ****1/4