viernes, 5 de abril de 2019

The Undertaker vs Shawn Michaels, Hell in a Cell, WWF Badd Blood 1997




Es hora de hablar de los protagonistas principales de la edición de 2019 del Salón de la Fama de WWE. El puesto principal de la noche, lo ocuparán los miembros de D-Generation X, Triple H, Shawn Michaels, Chyna, Road Dogg, Billy Gunn y X-Pac.

Esta es una edición de WrestleMania, y del Salón de la Fama, que suenan muy apáticos. Da la sensación de que en WWE no había muchas ganas de inducir a nadie. O, al menos, no encontraron a nadie con nivel como para ser headliner. Así, tiraron de gente muy cercana, y de muchos grupos. Si hasta ahora sólo había un hombre dos veces Hall of Famer, que era Ric Flair, ahora habrá tres más, puesto que Shawn Michaels entra como parte de DX; Booker T entra como parte de Harlem Heat; y Bret Hart entra como parte de The Hart Foundation.

Hay que continuar con el especial del WWE Hall of Fame 2019, aunque hacer la parte del especial sobre un stable que ha tenido tantas versiones a lo largo del tiempo, y que tiene tantos miembros, es un poco complicado. Vamos a intentar ir contando su historia poco a poco, a medida que vamos revisando luchas.

Hace años que se viene hablando de una posible inducción de la NWO al Salón de la Fama. Los problemas de Hulk Hogan complicaron la cosa, pero, en cualquier caso, hubiera sido raro que fueran inducidos antes que los DX, que nacieron en tiempo en los que Hogan y compañía hacían de las suyas en WCW, y Vince tuvo que olvidar todo su moralismo y su idea de lo que debe ser el entretenimiento deportivo, para poder ganar la guerra de audiencias. D-Generation X se levantó como un grupo de rudos que desafiaban al poder, y que se burlaban y humillaban a todo el mundo.

DX nació para enfrentar a The Hart Foundation, el Stable en el que estaba el gran rival de Michaels, Bret Hart. Y es que, los dos, habían tenido una carrera paralela, viéndose las caras en la división tag primero, en el midcard después, y en los main events, finalmente. Habían tenido un Iron Man Match en el main event de WrestleMania, y se enfrentarían, para acabar, en el Montreal Screwjob.

De hecho, el nombre de la agrupación tiene relación con Bret, porque, él, siempre se refirió a Michaels como un degenerado, tanto en kayfabe, como fuera de escena. Porque, en realidad, DX es una forma de dar vida frente al público al grupito de abusones sinvergüenzas que eran The Kliq en el mundo real.

The Kliq es el grupo de amigos que formaban Triple H, Shawn Michaels, Kevin Nash, Scott Hall y X-Pac, que hicieron y deshicieron todo lo que quisieron tras bastidores. Cuando los tres últimos se fueron a WCW, los dos primeros mantuvieron la tradición, y la pusieron en escena. El nombre final de la agrupación haría referencia a esos comentarios de Hart, introduciendo el concepto de Generación X, el grupo de personas nacidas entre los 70 y los 80, famosas por su apatía y vagancia. O sea, lo mismo que se dice de todas las generaciones de gente joven durante la historia. Hoy, las víctimas somos los milennials.

El grupo original estaba compuesto por Shawn Michaels, que era el líder y que, básicamente, utilizaba al resto para conseguir sus metas individuales; Triple H, su novia, la poderosa Chyna, y Rick Rude, que volvía de WCW para presentarse como guardaespaldas de Shawn.

Rude, que ya no luchaba entonces, no ha sido inducido como parte del grupo, a pesar de ser iniciador del mismo. Pero sería raro que él fuera dos veces Hall of Famer de WWE, sin ser una gran leyenda de la compañía, después de su inducción en 2017.

En realidad, Michaels y Hunter nunca formaron un gran tag. En esos primeros meses de existencia del grupo, previos a la gran lesión de Shawn que le dejó fuera de acción durante años, tan sólo tuvieron un puñado de combates en parejas. De hecho, si no tenemos en cuenta House Shows, sólo tuvieron dos luchas en tag, en RAW, y ambas las perdieron por descalificación. Fue a partir de 2006, cuando volvieron a hacer equipo de verdad, en esa versión edulcorada de DX que llevaron a cabo después.

En estos meses, DX tuvo rivalidades con Mankind, con Undertaker, y con la Hart Foundation. Michaels y su grupo humillaron a Hart con sus burlas y promos, y protagonizaron el Montreal Screwjob, tras el cuál, Bret partió hacia WCW. Así acabó ese gran duelo, aunque los DX tuvieron, todavía, tiempo de burlarse, escenificando lo ocurrido en Montreal, con enanitos, y dándole una buena paliza a Jim Neidhart, tras engañarle, haciéndole creer que era parte del grupo.

Pero, en esta época, Michaels, junto a sus compinches, tuvo una de las grandes rivalidades de la historia de WWE, y fue frente a Undertaker. Juntos, los dos longevos wrestlers tendrían el primer Hell in a Cell Match, en Badd Blood 1997, al que el Wrestling Observer Newsletter le dio 5 estrellas, y que es un gran trozo de la historia. Tiempo después, en enero de 2018, tuvieron otra muy buena lucha, un Casket Match en Royal Rumble, en el que Shawn sufrió esa famosa lesión, de tal manera que en WrestleMania, en presencia de otro miembro temporal de DX, Mike Tyson, fue derrotado por Steve Austin, a quién pasó la antorcha del liderazgo de WWE.

De esta época, me he quedado con una lucha para revisar en este especial, que es el primer Hell in a Cell entre Shawn Michaels y Undertaker. Aprovecho, porque un amigo del blog me sugirió hacerlo, y estaba esperando la ocasión perfecta para hacerlo. Y la han pintado calva con esta inducción de DX. Vamos a ello.

Undertaker se enfrentó a Bret Hart en SummerSlam 1997, con Michaels como referee special. Cuando Shawn intentó atacar con una silla al canadiense, erró, y acabó pegándole al Enterrador, lo que inició la rivalidad entre ellos.

Durante las semanas previas al combate, hubo muchos sillazos, mucho abuso de DX, y no sólo contra el Deadman. En esa época, la figura de poder de la empresa era el Sargento Slaughter, que era Comisionado, y acabaría luchando contra Triple H en el evento especial del stable, D-X Generation: In Your House, en el Shawn derrotó a Ken Shamrock. También la Hart Fundation empezaba a sufrir las consecuencias de la creación de este grupo: Michaels venció a Dave Boy Smith, para ganar el WWF European Championship.

El caso es que, ante todos los ataques, la ira de Undertaker era grande, y encerró, junto a él, a Michaels, en la estructura definitiva en la industria del wrestling: la jaula del Hell in a Cell. Slaughter se asegura antes de bajar la jaula, de que no hay nada raro bajo el ring.

Esta lucha es famosa también por suponer el debut de Kane en WWE. En realidad, el hoy alcalde de Knoxville, Tennessee, Glen Jacobs, ya habia luchado en WWE, con el personaje de Isaac Yankem, un dentista loco, y, posteriormente, el no menos indigno Diesel, que sustituyó a Nash cuando este se fue a WCW; pero WWE siempre olvida estas personalidades del Monstruo Rojo, dado que ninguna de ellas está a la altura de la llegada que tuvo en este evento.

Había habido muchos problemas entre Undertaker y su mánager clásico, Paul Bearer. En estos tiempos, comenzó la bizarra historia de la familia de Undertaker, puesto que Bearer le acusó de haber incendiado su casa de pequeño, con su hermano, Kane, dentro. Aunque, supuestamente, había muerto en ese incendio, Bearer anunció que no era así, que había sobrevivido. Su llegada a WWF en busca de venganza estaba próxima.

Tiempo después, se sabría que el pirómano había sido, en realidad, Kane, pero esa es otra historia...

Esta lucha es seminal, y es una gran brawl. Viéndola hoy, en 2019, no puedo decir que sea de 5 estrellas. Aunque no me sorprende que alguien pueda ponérselas, sí que creo que es una nota que es hija de la fecha en la que ocurre. Jamás había habido una lucha como esta, y, en ella, hay una serie de acciones que, por tanto, nadie había visto jamás, por lo que las reacciones son muy grandes. Pero  yo le tengo que poner la nota propia del momento en que la publico, como hago con todos los combates.

Hoy en día, no es un combate de 5 estrellas, pero sigue siendo un gran combate, una gran brawl. Triple H, Rick Rude y Chyna acompañan a Shawn al ring, pero, por suerte para el espectáculo, no intervienen. La jaula se cierra, y nadie puede escapar de ella.

El combate comienza con muchos puñetazos, y muchos golpes en la cabeza. Los finishers de ambos luchadores implican grandes ataques ahí, así que tiene cierto sentido, aunque a la cosa le falta un poco de ritmo en primera instancia. Los golpes de HBK son un poco mejores, muy veraces. 

Pero es Undertaker el que acaba dominando la mayor parte del combate. Entran en juego el poste, las sillas, el metal de la jaula, y los escalones del ring. Los golpes en la cabeza por parte de ambos lados son fortísimos, y Shawn acaba bañado en sangre.

Se respira la violencia y el odio. Tras un golpe, Michaels cae sobre un camarógrafo, y le pega una paliza. Aunque no se expresa muy bien en el combate, puede que sea parte de una estrategia, porque le da pánico estar ahí metido, con el Hombre Muerto en plan violento. Sargento Slaughter se ve obligado a abrir la jaula para sacar al trabajador, y acaban saliendo los luchadores también, a brawlear por ahí.

Es posible que parte del público pensara que Shawn había ganado al salir antes. Recordemos que esta es la primera Hell in a Cell de la historia, y que, hasta ahora, podía confundirse con una Steel Cage. Pero no, la brawl se intensifica. Undertaker tortura a Michaels lanzándolo sin parar contra el metal, porque desde la parte de fuera, tiene más espacio para impulsarse.

Shawn tiene que huir hacia la parte de arriba de la estructura. La gente alucina, al ver a ambas futuras leyendas pegándose ahí. Pero Michaels sigue perdiendo, así que intenta huir hacia abajo. Cuando está colgado de la jaula, su rival consigue provocar que se suelte, cayendo con un golpe tremendo contra una de las mesas de comentaristas. No es la caída de Mankind del año siguiente, pero es un gran golpe también, por entonces, único en su especie.

Undertaker es un monstruo. Sigue tirando a su oponente contra mesas, y en el ring, lo lanza con un ChokeSlam desde el esquinero. Con el cuerpo destrozado por las caídas, y con la cabeza llena de sangre, el Rompe Corazones no tiene la más mínima intención de presentar batalla. Pero suena una música extraña. Aparece Paul bearer, acompañado de un enorme hombre enmascarado, el hermano de Undertaker, Kane. El monstruo aplica un gran Tombstone Piledriver sobre el Enterrador, y coloca encima de su hermano a Shawn, para que se lleve la victoria. Triple H y Chyna vienen corriendo, para sacar a su amigo de semejante infierno.

No creo que la lucha sea de 5 estrellas, pero tampoco se queda muy lejos. Ojalá los luchadores de hoy en día supieran usar una jaula como estos dos maestros. La violencia es dura y sentida, e incluso la interferencia es buena, por la forma en la que ocurre, y el nacimiento de un personaje. 

Puntuación: ****1/2

2 comentarios:

  1. Esta lucha tan icónica faltaba en este blog.

    Esto si fue un hell in a cell en toda regla, recuerdo cuando los feudos llegaban hasta estos limites, quieran dar un broche de oro a rivalidades bien trabajadas, ahora la celda infernal se usa en cualquier rivalidad y su uso es mero adorno, la quitas y obtienes la misma lucha simple.

    Un saludo.

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    1. Hola! Sí, me gusta guardar luchas icónicas para el futuro, por si se acaban, pero al ritmo que va ahora la industria, siempre habrá algo...

      El problema, hoy en día, es el PPV Hell in a Cell, que obliga a que una lucha se lleve a cabo dentro de la jaula, sin que un storyline vaya necesariamente en esa dirección. Al mismo tiempo, al ser en él los Hell in a Cell, no hay opciones de que, en otro momento del año, una gran rivalidad, acabe en jaula.

      De todos modos, tampoco es que haya grandes rivalidades como esa hoy en día, ni como la próxima que subiré, que es el Batista vs Triple H en Hell in a Cell.

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