Uno de los momentos más sorprendetes de los últimos años en WWE ha tenido lugar en el evento de Smackdown, Backlash 2017. En él, el indio Jinder Mahal se ha convertido en Campeón Mundial de WWE al derrotar a Randy Orton. Es algo que nadie hubiera esperado, ni un loco, hace un mes, y no se puede decir que sea muy justo en términos de méritos deportivos, pero ha ocurrido.
Jinder Mahal debutó en WWE hace unos años, en una storyline en la que intentaba llevar al lado oscuro a The Great Khali. Después de fracasar en ese intento, no tuvo demasiado protagonismo, hasta que entró a formar parte de la divertida tripleta de jobbers 3MB, junto a Drew McIntyre y Heath Slater. Finalmente, tanto el indio como el británico acabaron despedidos, mientras Slater tuvo, de vez en cuando, alguna que otra storyline jocosa.
Después de la división de marcas de WWE, en 2016, la empresa volvió a contratar a Jinder, para la marca Raw. No debieron hacerle grandes promesas, porque nada más llegar, fue a los programas de Main Event. Su firma tan solo servía para que el roster no pareciera demasiado corto. Así estuvo, hasta que a principios de 2017, cuando tuvo una pequeña historia como compañero de maldades de Rusev. Nada importante.
Sin embargo, si que empezó a evidenciar una mejora en su físico enorme. El tío se ha puesto cachas, y eso a Vince le pone mucho.
En WrestleMania 33, tuvo un papel extrañamente protagonista en la Andre the Giant Battle Royal. Fue el rival de la pelea con el jugador de la NFL
Rob Gronkowski y debió gustar su actuación.
Eso, junto a la necesidad de expandir la empresa por otros países, para vender la Network, parece ser un buen motivo para darle un buen push a Mahal. No obstante, como decía Ryback hace unos días, en la India, aunque haya una población muy grande, hay mucha miseria, y es raro conseguir ventas masivas de una cosa tan poco importante. En cualquier caso, el push de Jinder Mahal es un hecho, y ha conseguido lo que muchos, con carreras muy superiores, no han hecho nunca: ganar el WWE World Heavyweight Championship.
WWE usó una técnica muy buena para dar un push a un rudo: montarle un stable. Cogió a dos chicos que tenía por ahí sin hacer mucho, los Bollywood Boyz, también Indios, y los puso como vasallos de Mahal. Con su ayuda, consiguió convertirse en retador número 1, para enfrentarse al campeón Randy Orton en WWE Backlash.
Los indios amargaron la vida de Randy durante las semanas previas al evento, y por eso, comienza la lucha con mucha energía. De hecho, no deja que se hagan las presentaciones, ataca sin parar a Jinder, tirándolo contra las mesas. Precisamente, la falta de intensidad y psicología es, muchas veces, el gran problema de Randy. Pero cuando arregla ese problema, da buenos combates.
Por cierto, durante la lucha, trata con mucho respeto el sombrero de JBL, cuando está luchando en la zona de las mesas. Parece que Orton, de esta manera, lanza un mensaje a favor del comentarista, en una época en la que ha recibido muchas críticas por presuntos casos de bullying. Aunque quizás sea un trato normal, y hasta ahora no me había fijado.
Orton le pega una paliza a Mahal. Suena la campana, y busca el RKO, pero Jinder huye a ringside. Huye varias veces, enfriando la ira de Orton, y le empuja contra el ring, haciéndole daño en el hombro izquierdo.
Esto es perfecto para él, porque su finisher incide especialmente en el hombro izquierdo. Lleva a cabo un trabajo de vieja escuela bastante insistente sobre el hombro y el brazo, y Orton lo vende bastante bien. No obstante, lleva a cabo algún comeback bueno, con Superplex incluido.
Orton se acerca a la victoria, pero entran en juego los hermanos Singh Brothers. No llegan a golpear a Orton, pero sí le amenazan, así que se llevan una paliza. The Viper conecta un RKO, pero los lacayos de Mahal le sacan del ring, impidiendo la segura victoria del campeón.
Ahora sí que Orton destruye a los dos pequeños indios, rematándolos con un duble DDT desde la segunda. Pero Jinder llega por la espalda, y aplica el Arm Trap Neckbreaker, para ganar el combate y el WWE World Heavyweight Championship.
La lucha es bastante buena, quizás la primera importante en la carrera de Mahal. No ha debido tener muchos combates single en PPV desde que llegó a WWE. Pero aquí rinde bien, con un modelo de lucha old school. Veremos, hasta dónde llega esto.
Puntuación: ***1/2