martes, 27 de julio de 2021

Roddy Piper vs Paul Orndorff, WWF MSG 13/07/1985


Especial Paul Orndorff

Hace unos días, comentamos el fallecimiento de Mr Wonderful, Paul Orndorff, exluchador de NWA, WWF y WCW. Entonces, vimos una lucha que formó parte de su histórica rivalidad frente al Campeón de WWF, Hulk Hogan. Hoy, charlaremos sobre otra lucha suya, enmarcada en la misma época. Pero, en este caso, hacer el rol de babyface.

Porque a Vince le encanta que todos los tipos que tienen pinta de Power House se conviertan en héroes. Debía coleccionar las musculosas figuras de los Másters del Universo. El caso es que, como ya comentamos en su día y como todo el mundo sabrá, Orndorff y aquel que, gracias a su uso del micro, lo había hecho grande, Roddy Piper, estuvieron en el main event del primer WrestleMania, en el que se enfrentaron a dos verdaderas estrellas: Hulk Hogan y Mr T, que habían, además, coincidido en la película Rocky 3, en la que ambos se enfrentaban a Rocky Balboa, y que también coincidirían en un capítulo de El Equipo A. 

Todos recordarán el final de ese mediocre pero histórico match: el aliado de los rudos, Bob Orton Jr, se lanzó a atacar a Hogan, para golpearle con el yeso que llevaba en el brazo, y sin embargo, fue Orndorff el que se llevó el golpe, siendo derrotado por Hulk gracias a ello. La escisión entre la alianza Heel se confirmó poco después, en un capítulo de Saturday Night Main Event, en el que Piper y Orton atacaron al derrotado Orndorff. Tras eso, el recientemente fallecido Mr Wonderful se pasó al lado técnico.

Un paso que, en realidad, duró poco, porque un año después, Piper se convirtió en face, y Orndorff en heel de nuevo. No obstante, en ese momento, el gaitero tenía un pop negativo increíble, y eso lo aprovechó en su favor Orndorff. El 13 de julio del 85, se enfrentaron en el Madison Square Garden, rodeados de un público muy violentado, que deseaba, más que nada en el mundo, que Orndorff se vengara de Piper.

Mantienen una lucha basada en el ambiente atronador. No es muy buena, técnicamente (ninguno de los participantes es muy agraciado en ese aspecto), pero tiene energía. Orndorff desea reventar la cabeza del "escocés", y le golpea de mil maneras, incluyendo muchos cabezazos contra la lona, esperando poder usar el Piledriver contra él. Roddy, por su lado, utiliza piquetes de ojos y otros golpes sucios, mientras la gente le tira objetos, para huir de la superioridad de su oponente. Aunque obtiene ventaja al tirarlo contra objetos en ringside, la ventaja del héroe parece muy grande, y sus golpes en la cabeza, muy fuertes. Sólo Orton, atacando de nuevo con su brazo enyesado, consigue salvar al gaitero. Ambos golpean salvajemente a nuestro protagonista, tras la descalificación, hasta que llegan los British Bulldogs para salvarlo.

No está mal la lucha, si bien el final es un poco triste.

Puntuación: ***

domingo, 25 de julio de 2021

Paul Orndorff vs Hulk Hogan, WWF MSG 20/02/1984



Especial Paul Orndorff

Recientemente, conocimos el fallecimiento de Mr Wonderful, Paul Orndorff, a los 71 años de edad. Su hijo anunció su muerte, sin dar demasiados detalles sobre los motivos de esta, pero con una gran expresión de cariño paternofilial. Vamos a dedicar un par de posts a este luchador, para recordar su legado.

Paul Orndorff es uno de esos muchos luchadores que pelearon durante años en NWA y otras promociones americanas, pero que todo el mundo recordará por su paso por WWF. Estuvo en la empresa de Vince McMahon durante la década de los 80, llegando como una megamusculosa amenaza para el flamante nuevo campeón de la compañía, The Incredible Hulk Hogan. Se alió con Roddy Pipper, que, con su gran trabajo con el micrófono, supo situarlo como un heel importante, llegando, ambos, a enfrentarse a Hogan y Mr T en el main event del primer WrestleMania.

Durante la década de los 90, Orndorff luchó en WCW, ganando sus primeros títulos de importancia (Tag y TV). En el 95 se retiró, mas volvió en el 99 como un gran veterano que hacía apariciones eventuales. No debió hacerlo, pues en una lucha grupal, aplicó un Piledriver y cayó mal sobre su cuello, quedando tendido sobre el ring, inmóvil. El referee, Charles Robinson, tuvo que parar el match, porque la cosa pintaba mal. Orndorff se retiró y pasó a entrenar en el WCW Power Plant. En 2005 fue inducido al Hall of Fame de WWE, y en 2017 tuvo una última lucha en un evento de CWE.

Veamos, pues, un par de luchas de este hombre. La primera que he visionado, que es la que comentamos hoy, es un match titular que mantuvo frente a Hogan en el Madison Sqaure Garden el 20 de febrero de 1984. Es una lucha clásica de Face vs Heel al estilo Hogan, pero creo que no está mal.

Hablamos de dos Power Houses, dos hombres de gran musculatura, mas la diferencia de tamaño es clara a favor del campeón; Hogan es muy alto. Hay muchas pruebas de fuerza, pero van todas a favor del héroe. Hulk domina y aplica buenos headlocks, aunque Orndorff aprovecha cada oportunidad para hacer alguna pequeña trampa y atacar con mucha fuerza al gigante. Pronto, Hulk se lo quita de encima, y vuelve a dominar, aplicando buenos headlocks.

Orndorff golpea de forma stiff y con buenas dropkicks a su rival, y remata con su finisher, el Piledriver, hasta que llega el momento del baile de San Vito. Hogan se vuelve loco, y protagoniza esa rutina en la que deja de vender los puñetazos de su rival, los para, y golpea sin parar, con el fin de rematar con un Leg Drop. Sin embargo, esta no es completada (no sé si para febrero de 1984 estaba ya inventada tal y como sería luego, pues sé que, en primera instancia, no remataba con Lep Drop, sino con Clothesline). En cualquier caso, Orndorff es proyectado fuera del ring, y pierde por Count Out después de una gran caída, lo que permite que el público sea feliz por la victoria de Hulk, y que el rudo no pierda push, de cara a esa rivalidad tan larga que llevaría a ambos al main event de WrestleMania en 1985.

Puntuación: ***1/4

domingo, 18 de julio de 2021

Sheamus vs Matt Riddle, WrestleMania 37


Especial WrestleMania 37

Seguimos hablando sobre el evento WrestleMania 37. Avanzamos en la noche 2 hasta el combate por el United States Championship. Este show tiene muy buenas combinaciones, y esta es una de ellas: se enfrentan Matt Riddle y Sheamus.

Un luchador de MMA se mide con un bruto super-stiff. Suena bien, aunque ya sabemos que el personaje de Matt, que siempre ha sido bastante payaso, lo es bajo la mano de Vince McMahon mucho más. Es cierto que los personajes cómicos pueden llegar a ser muy queridos en WWE, pero también es cierto que es muy raro que lleguen a posiciones importantes. No obstante, en la WWE actual, muy menguada, Riddle parece estar cada vez más arriba.

Pero en WrestleMania pierde el Campeonato de USA frente a Sheamus, un tipo que obtiene una merecida victoria, tras una trayectoria intachable; un luchador de gran nivel, que pocas veces es reconocido como tal. La historia que hay detrás es simplona. Riddle estaba por ahí, dando por culo con su patinete, y Sheamus se lo quitó y le pegó con él. Así comenzaron una rivalidad con el título USA de por medio, que finalmente, se juegan en el mayor evento del año.

En una lucha buena, stiff, muy física. Sheamus es más grande y más fuerte, así que empieza dominando con golpes muy duros, mientras que Riddle intenta engancharse a su cuello con sleepers. Contra la mayor fuerza de su rival, tiene que tirar de movimientos arriesgados como un Spanish Fly, en tanto que los golpes que recibe son demoledores.

Pero luchar en base a movimientos aéreos tiene riesgos, y no debería ser el estilo de un luchador de MMA. Sheamus caza varios movimientos de Matt con rodillazos o Brogue Kicks. El irlandés está a punto de aplicar un White Noise desde el esquinero, que podría haber sido increíble, pero comete un error, y cae, pero cae en pié, así que puede aplicarlo igualmente sobre la lona. No es tan increíble, pero funciona, y es continuado por un rodillazo desde la esquina. Finalmente, Sheamus aplica una Brogue Kick sobre Riddle mientras este vuela en el aire, y lo deja KO, para llevarse la victoria. Buena lucha, sin una gran historia detrás, pero con mucha fuerza.

Puntuación: ***1/2

martes, 13 de julio de 2021

Sami Zayn vs Kevin Owens, WWE WrestleMania 37


Especial WrestleMania 37

Seguimos hablando sobre el evento WrestleMania 37. En la noche 2, tuvo lugar una lucha que, sobre el cartel, me emociona: se trata del enfrentamiento entre Kevin Owens y Sami Zayn, uno de los grandes clásicos del wrestling independiente, que ahora llega a WrestleMania. Sólo les queda estar en el main event.

Estos dos hombres, canadienses ambos, son grandes amigos. Son los Edge y Christian del Siglo XXI (como si Edge y Christian hubieran luchado en el Siglo XIX). Llevan peleando como aliados y como adversarios 20 años, ascendiendo desde las más sucias tascas hasta, ahora, el evento más importante que existe. Por eso esto me parece tan especial. En su momento, intenté iniciar un especial sobre su relación, que, recordemos, abrió este blog a finales de 2010, pero no llegué a avanzar mucho, por motivos de agenda. Quizás algún día retome esa labor.

Están en WrestleMania, eso sí, en un típico match de mitad de cartelera que resulta demasiado corto como para destacar. De igual manera que ocurre con la rivalidad entre Cesaro y Seth Rollins, alcanzaría mejores resultados durante los meses siguientes. De hecho, hace unos días tuvieron un gran Last Man Standing Match. Revisaremos durante los próximos días los respectivos mejores combates de esos dos feudos. Ahora, vamos a echar un vistazo al match que Kevin y Sami mantienen en WrestleMania, esperando que, algún día, la gran historia entre ellos los lleve al main event, algo que ahora mismo suena muy muy lejano.

Sami pasó a la historia en las indies como El Genérico, un grandísimo babyface, casi insuperable en esa labor. Kevin, entonces Steen, se convirtió en un enorme villano al enfrentarle. Hoy, los roles están cambiados: Sami es un ruin villano, y Owens se torna en una especie de Stone Cold moderno, un defensor del pueblo, gordo, barbudo, antihéroe, pero sin el éxito del anterior usuario del Stunner, entre otras cosas, por la falta de historias de calidad en las que ha participado desde que es face.

Pero Sami es muy bueno con el micro. Su papel de loco cobarde paranoico ha sido muy verosímil. Ha cogido peso, tiene barba, y se parece a Robin Williams; da un poco de risa, pero construye historias él solito.

Se metió en un cuento conspiranóico, según el cuál, todo el mundo estaba en su contra, incluyendo los referees, que arbitraban mal a posta, según su enferma cabeza. Buscó ayuda en su antiguo amigo, pero este pasó de su culo, y por ese motivo, se abalanzó sobre él. También tuvo palabras con un niñato influencer (creo) que, en WrestleMania, está en la mesa de comentaristas. Así llegamos a la lucha.

Lucha que dura 7 minutos, y por eso, no hay mucho tiempo para hacer cosas. Así, el combate puede parecer un intercambio de Power Moves, pero hay que tener en cuenta que los luchadores miran el reloj, ven el poco tiempo que tienen, e intentan meter en el match el máximo número de cosas en el menor tiempo posible. Eso sí, desde el principio, los moves de Zayn tienen el mismo sentido: la nuca de su oponente. Empieza con un Brainbuster en el filo del ring, y continúa con movimientos similares, mientras que los de Owens son siempre respuestas in extremis al dominio de su rival. Son power moves, pero con un sentido. Se nota que tienen mucho entrenamiento juntos, porque son capaces de acertar movimientos muy complejos en espacios de tiempo muy cortos. Al final, cuando el rudo va a por el técnico, este le espera con varias Superkicks, que dan pie a que termine el match con un Stunner.

Tras la lucha, tenemos la típica secuencia del famosillo de turno, que en este caso, se lleva un Stunner, como todo el mundo esperaba.

Puntuación: ***1/4

miércoles, 7 de julio de 2021

Sting vs Ric Flair, WCW Monday Night Nitro 26/03/2001

 

Como nos recordó recientemente nuestro amigo Andrés Góngora, hace poco, se cumplieron 20 años desde la desaparición de WCW. El 26 de marzo de 2001, tuvo lugar el último programa de Monday Night Nitro en la cadena TNT, ya con Vince McMahon como dueño, presente en la función. Vamos a recordar esa noche.

En el especial sobre la NWO que estamos llevando a cabo en honor a la inducción del grupo al Hall of Fame de WWE, ya hablamos de las Monday Night Wars, y de la manera en la que WCW puso contra las cuerdas a WWF, gracias al trabajo realizado por Hulk Hogan y compañía. Pero la mala gestión de Eric Bischoff y la incapacidad de la empresa para estar a la altura creativa de Vince McMahon, llevó a que su audiencia, como vimos entonces, cayera en picado, de tal manera que los ingresos se hicieron incompatibles con la enormidad que se estaba pagando a una plantilla de más de 100 luchadores, muchos de los cuales, se habían firmado a golpe de talón, robandoselos a la competencia. Entonces, la empresa de lucha, que había sido comprada por Turner a Jim Crockett muchos años antes, se puso a la venta.

Ted Turner tenía mucha fe en el wrestling, pero su pequeño imperio había sido comprado por Warner en el 96, mas él seguía siendo el máximo accionista, motivo por el cuál, podía mantener a WCW en funcionamiento aún en el año 2000, cuando las pérdidas de la empresa se dispararon, y a pesar de que había una enorme oferta por ella de unos 500 millones. Pero, en 2001, AOL se fusionó con Warner, acabando con esa mayoría, y en ese momento, WCW perdió la protección de Turner.

 Aún a finales del año 2000, Bischoff encontró accionistas para comprar WCW por 70 kilos. La cosa pintaba bien, pero, cuando sus programas fueron cancelados, estos accionistas se echaron atrás. Sin televisión, la empresa no valía nada. Finalmente, Vince se la quedó por 3 ridículos millones de euros, gracias a los cuales, se aseguró la videoteca de WCW, que está aprovechando muy bien gracias a WWE Network, y los contratos de los luchadores. Se dice también que Vince ofreció a TNT la continuación del programa Nitro, recolocado en otra posición de la parrilla, y bajo su producción, pero esto no fue aceptado. Así pues, WCW se acabó tras el programa del 26 de marzo de 2001.

Ya sabemos, posteriormente, lo que hizo WWE con los luchadores y los títulos de WCW. Creó una storyline de invasión, que podría haber sido muy interesante si se hubiera hecho bien: habría sido maravilloso poder ver una guerra en la que gente como Sting, Flair, Hogan, Goldberg, Nash y Hall se enfrentaran a gente como The Rock, Austin, Taker, Angle, Jericho y Kane, pero la cosa no fue así. En la storyline de la invasión, participaron luchadores de WCW que no se correspondían con los verdaderos protagonistas de la década de los 90, siendo Booker T su principal exponente, y existiendo la necesidad de recibir refuerzos de la otra empresa que Vince compró en esa época: ECW, con RVD a la cabeza. Al final, la historia de la Invasión se convirtió en uno de tantos storylines de WWE en los que la familia McMahon y los luchadores de siempre, eran los protagonistas. No estaba mal, pero no tenía nada de especial. Durante los años siguientes, luchadores como Hogan, Flair y Goldberg, o incluso Sting 13 años después, acabaron trabajando para WWE; hubiera sido genial que se hubieran puesto de acuerdo para ir a la guerra de verdad.

 Ese último show de Nitro en TNT, como decíamos, es un programa protagonizado por Vince McMahon y su compra de la empresa, y conecta directamente con un programa de RAW en el que aparece Shane McMahon para robarle la propiedad de WCW y declararle la guerra. Unos días después, tendría lugar WrestleMania 17, un show realmente brillante con todas las grandes estrellas de WWF involucradas, mientras que WCW, y muchos de los luchadores que no harían el trasvase entre promotoras, se despedían con un Night of Champions en el que Booker T se convirtió en campeón de WCW, y en el que un Rey Mysterio que aparecía sin máscara por última vez en televisión, se convertía en Cruiserweight Tag Team Champion junto a Billy Kidman. En el main event de esa noche, la WCW ya bajo el control de Vince, ofrecía una lucha entre Sting y Ric Flair, rememorando algunos de los grandes clásicos de la historia de la compañía. No podía haber un final mejor.

 Hay que decir que Vince, en RAW, estaba haciendo una encuesta entre los fans presentes sobre qué estrellas de la competencia querían ver en WWF, siendo, obviamente, Goldberg el más querido, tan sólo para asegurar después que todo WCW sería enterrada. Sting seguramente se sentiría muy ofendido por esa afirmación y seguro que fue vital para su decisión de no ir a WWF. Así pues, The Icon  continuaría su carrera luchando en otros proyectos que heredaron buena parte del trabajo hecho en WCW, como la WWA y la TNA.

 Su última lucha en WCW es un combate de despedida. Ante un buen número de espectadores, se enfrenta a aquel que lo llevó a la cima, Ric Flair, convertido ya en leyenda. Esa lucha dura 7 minutos y no es un gran clásico por su nivel puramente luchístico, y sin embargo, es muy querida, por lo que significa. Flair es Flair: se las sabe todas, y utiliza su infinita experiencia para intentar ganar, mientras que Sting es Sting: es más fuerte y más enérgico. Ambos utilizan sus movimientos y gestos clásicos, que la gente recibe con cariño, aún ilusionada de seguir viéndolos, eso sí, de alguna manera.

A pesar de la diferencia de fuerza, la experiencia de Flair le permite disputar el match de manera creíble. Consigue aplicar la Figura 4 y poner a Sting contra las cuerdas. Después de mucho sufrimiento, este se rehace, y consigue darle la vuelta. Flair rompe el candado al instante, porque tiene experiencia de sobra como para saber que su técnica puede costarle cara. Finalmente, sucumbe ante el Scorpio Deathlock, soportando mucho menos dolor que el héroe, pues precisamente en eso consiste la diferencia entre héroes y villanos.

 La lucha está bien construida, pero, como digo, es una lucha de exhibición, de despedida, sin demasiadas posibilidades para ir a más.

 Puntuación: ***

martes, 29 de junio de 2021

Roman Reigns vs Rey Mysterio, WWE Smackdown 18/06/2021



Hace unos días, tuvimos la suerte de disfrutar del primer combate del tipo Hell in a Cell en un programa de televisión de WWE, y eso es algo histórico. A pesar de estar prevista para el evento Hell in a Cell, la lucha entre Rey Mysterio y Roman Reigns por el Universal Championship de este, tuvo lugar en el programa de Smackdown previo al PPV, porque ya sabemos que Fox paga un dineral a la empresa, y en tanto que tal, esta tiene que proponer cosas importantes para no perder audiencia. Ahora mismo, es más urgente, creo yo, frenar la pérdida de audiencia de los programas semanales que guardar cosas para un PPV sin público.

Roman Reigns, en su modo heel, se ha convertido en lo mejorcito de WWE. Puede dar rienda a su brutalidad, y no necesita intentar caer bien a nadie, algo en lo que WWE insistió durante años sin resultados. En última instancia, la familia Mysterio ha sido la víctima de Roman, y eso es interesante, porque Rey, después de estar metido en algunas de las historias más importantes para WWE en 2020, quedó fuera de WrestleMania, porque, mientras AEW sigue nutriéndose de grandes leyendas para que estas vuelvan a hacer cosas de importancia, la compañía de Vince insiste en pisotear su propio legado. No obstante esto, el enmascarado al fin tiene una oportunidad relevante por un campeonato de renombre, y eso es genial, porque seguir viendo a Rey Mysterio dar grandes luchas en 2021, y pelear a primer nivel, es un gran privilegio.

Esto se convirtió en una guerra de castas. Los Mysterio eran campeones por parejas de Smackdown, y se enfrentaban a los Uso. Estos, a su vez, tenían una pequeña disputa interna, por el favor de su primo, Roman, como resultado de la cruenta rivalidad ocurrida entre Reigns y Jey cuando Jimmy aún estaba lesionado. Buscando el favor de sus primos y la hegemonía de su familia, Roman se metió en la rivalidad, atacando a los hispanos con gran brutalidad.

Ya sabemos que Dominik es un rookie. Es un chiquillo, así que los abusos sobre él generan una gran empatía por parte del público, y convierten a Rey en un "padre coraje". En un nuevo encontronazo, Roman pudo con ambos de nuevo, y lanzó a Dominik con una Power Bomb desde el ring a ringside, un golpe brutal que, obviamente, estaba producido: WWE aprovechó que no tiene público en los estadios, y que la gente que se presenta en las pantallas ve las mismas imágenes que los espectadores televisivos, para poner un colchón para que el chico cayera bien sin que se notara. 

Así pues, un enfadado Mysterio buscó venganza, y retó a Reigns a un Hell in a Cell Match, aprovechando que llegaba el PPV homónimo. En realidad, ni la rivalidad ni la lucha que tienen finalmente, son propias de un Hell in a Cell, pero ese PPV pide batallas de este tipo. La ejecución final recuerda más a un Street Fight, y cosas similares, pero aún así, me parece una muy buena lucha. Como decía antes, finalmente, se adelantó para emitirse en Smackdown.

Rey Mysterio es consciente de la diferencia de tamaño y fuerza, así que no piensa dar una oportunidad a Roman: desde el primer segundo, le ataca brutalmente con objetos. Es difícil recordar a Rey luchando de esta manera, pero la situación así lo pide. La verdad es que la presencia de su hijo ha aumentado mucho la intensidad de sus rivalidades. Golpea y golpea a Roman con sillas, palos de Kendo, y con la jaula. Pero comete el error de ser él mismo durante un sólo segundo, e intenta hacer unas tijeras. Entonces, Roman lo agarra y lo destroza contra el metal rojo de la jaula.

El campeón domina sobre el ring con su brutalidad, hasta que Rey demuestra su gran habilidad para los combacks, y vuelve con ataques especiales. Aplica 619, y vuela con Frog Splash en varias ocasiones, incluyendo una con una silla por delante. Pero vuelve a fallar unas tijeras; comete el mismo error, y esta vez es definitivo: Roman lo asesina tirándolo contra la jaula desde el ring, con una Power Bomb. Roman sube a Rey al ring, y acaba el combate por rendición rápida.

Esta es una lucha propia de WWE y su técnica de adaptar los combates a los storylines. Quizás podría ser más espectacular si, simplemente, se permitiera luchar a Roman y Rey como ellos saben, y como ocurre en otras empresas (o en NXT), pero, no por espectacular, el resultado sería más recordable. En esta lucha, no hay nada al azar: el guión está claro, y la historia que se cuenta, también. No es una gran Hell in a Cell en lo respectivo al uso de la estipulación, pero es una buena lucha.


Puntuación: ***3/4

jueves, 24 de junio de 2021

Hulk Hogan vs Kevin Nash, WCW Nitro 04/01/1999


Especial Hall of Fame 2020

Continuamos hablando sobre la NWO en este especial del Salón de la Fama de WWE de 2020. Hoy no hay mucha lucha para comentar, pues tratamos un tema muy delicado: el Fingerpoke of Doom.

En el último post que publicamos, revisamos la lucha entre Sting y Hogan, aquel extraño momento en el que el de la cara pintada volvía a la acción después de un año de storyline, para quitarle el título al diabólico líder del movimiento. Ese podría haber sido un buen momento para el fin de la storyline de la NWO, o al menos, para el principio del fin, y sin embargo, esta se fue complicando, dividiéndose el equipo en facciones, y acogiendo, con el tiempo, prácticamente, a cualquier luchador de WCW que en el pasado le hubiera plantado cara al stable, de una forma casi autoparódica. 

Este Fingerpoke of Doom es el penúltimo disparate de la NWO. WCW ya había metido la pata al hacer perder su racha invicta a Goldberg en un combate irrelevante ante Kevin Nash, y eso tan sólo sirvió para que la historia volviera a comenzar de cero, porque Nash le regalaría a Hogan el título unas semanas después, en el primer show de Nitro de 1999, reconciliándose así con él, y demostrando su servilismo.

A mediados de 1998, Nash se había pasado al bando técnico, y había entrado en una rivalidad con Hogan, formando un nuevo stable: el NWO Wolfpac, al que se sumaron tipos buenos como Savage, Sting y Luger. Hogan se mantuvo como líder del equipo original, que pasó a llamarse NWO Hollywood, junto a gente como The Giant o Scott Hall. 

Nash, que como digo, era face, venció a Goldberg con trampas de su antiguo amigo Hall, así que le ofreció un rematch, pero este fue arrestado por acoso sexual sobre Ms Elizabeth, en otro arco argumental delirante y propio de Vince Russo. En tanto que Goldberg no estaba disponible, Nash ofreció la posibilidad de luchar por la correa a Hulk, y este la aceptó. Así, llegó un combate que, ahora sí, podemos decir que supuso la caída en picado definitiva de WCW.

Porque Eric Bischoff, durante la transmisión en vivo, hizo algo de lo que ya hemos hablado otras veces: anunció el resultado del programa de la competencia, WWF RAW, que se emitía en diferido. Anunció que Mankind se convertiría en campeón durante esa noche, para conseguir que los aficionados se centraran en ver su combate titular, el que enfrentaba a Nash y Hogan. Lo que consiguió, en su lugar, es que medio millón de personas cambiara de canal, dejara de ver Nitro en TNT para ver Raw is War en USA Network. El rating final de ambos programas fue de 5.0 para Nitro, y 5.7 para RAW.

Lo peor de todo es que, mientras que la lucha entre The Rock y Foley fue una pelea de verdad, la de WCW no. Nada más comenzar, Hogan tocó con su dedo a Nash, y este se lanzó sobre la lona, dejándose ganar. La NWO se volvía a juntar, y la gente sentía que ese gran reinado de Goldberg se había acabado para nada.

Tras la lucha, mientras la NWO y sus tres miembros originales celebran, Goldberg llega a por venganza, pero es traicionado por Lex Luger, que demuestra su posición en el reformado equipo. Aunque WWE había superado en ratings a WCW durante 1998, durante los meses previos a que esto ocurriera, la cosa estaba muy disputada, pero a partir de aquí, WCW fue en caída libre hasta su venta a WWE. Si ese 4 de enero de 1999 tenía un rating de 5.0, en 2001 había caído a 2.0. 

Puntuación: -

sábado, 19 de junio de 2021

Sting vs Hulk Hogan, WCW Starrcade 1997


Especial Hall of Fame 2020

Estamos desarrollando un especial sobre los exaltados al salón de la fama de WWE en el año 2020 y 2021. Comenzamos, en el artículo anterior, a hablar sobre el nacimiento de la NWO, ya que el grupo ha recibido el honor este año. Hoy, vamos a comentar un punto culminante en su enorme storyline; quizás uno de los combates más importantes en la historia del wrestling: Hollywood Hulk Hogan se enfrenta a Sting en Starrcade 1997.

Como comentamos el otro día, Hogan se presentó por sorpresa en Bash at the Beach 1996, para hacer equipo con los Outsiders y atacar a los héroes de WCW, Sting, Luger y Savage. Entonces nació la NWO, y la historia del wrestling cambió.

La NWO atacó WCW, y fue haciéndose con la empresa. El programa principal de la misma, Nitro, competía con el programa de WWF, RAW, en las conocidas Monday Night Wars. Si bien, en junio de 1996, McMahon estaba por encima de Turner, aunque no de forma muy clara, a partir de ese verano en el que nació la NWO, y casi durante dos años, WCW superó ampliamente a WWF. Quizás es el combate entre Hogan y Sting que comentamos hoy el que marca la recuperación de Raw, a través de su llamativa Era Attitude. El caso es que la guerra entre los dos programas y las extravagantes propuestas de ambos lados, llevaron al wrestling a una exposición realmente grande, de tal manera que, incluso el programa que estaba por detrás en los ratings, hacía buenos números.

Hogan pronto se convirtió, gracias a las trampas, en World Heavyweight Champion, y mancilló la dorada correa del campeonato con pintura negra en la que ponía "NWO". Muchos hombres se unieron a su causa, empezando por Ted Dibiase y su clásico criado de WWF, Virgil, que teóricamente corría con la financiación del movimiento, si bien estuvo en él muy poco tiempo. Eric Bischoff, con su ansía de protagonismo, se convirtió en miembro oficial, así como un montón de rudos, mientras que en el bando de la WCW apenas resistían unos pocos, como Lex Luger o el también exWWF Roddy Piper, que mantuvo una acalorada rivalidad con Hogan.

Pero algo raro pasó con Sting. El gran héroe de WCW cambió; se alió con NWO y ayudó al grupo a vencer en una Wargames, haciendo rendir a su amigo de toda la vida, Lex Luger, con un Scorpio Deathlock (quizás comentemos este combate en el especial, me apetece). Luger juró venganza, pero Sting se sintió contrariado: afirmó no ser él el que aparecía junto a Hogan y compañía. Debido a las dudas de Luger y el resto de la gente sobre su integridad , se declaró agente libre, y juró aparecer cuando lo estimara oportuno.

Así, asistimos a una temporada en la que Sting no tuvo ninguna lucha en un montón de meses. Cambió su aspecto, convirtiéndose en un vengador cuya imagen era similar a la de El Cuervo, protagonista de una película homónima de culto. El nuevo Sting destapó al falso, y atacó, bate en mano, a la NWO, apareciendo desde el cielo en los momentos menos esperados. Era una gran época en la que, si bien la cosa siempre acababa igual, había una historia subyacente detrás, una evolución y un fin que los espectadores esperaban alcanzar, algo muy distinto a los programas de WWE de hoy en día, en los que uno sabe que no va a pasar nada, y en los que da igual, en realidad, lo que pase, salvo por alguna aparición estelar eventual.

El día definitivo en el que Sting se vio las caras con Hollywood Hulk Hogan llegó. Ocurrió en el evento Starrcade 1997, con el Campeonato Mundial en juego. Por desgracia, todo fue un desastre, y marcó el inicio de la decadencia de la storyline de la NWO.

Semanas atrás, Bret Hart había llegado a WCW, tras el conocido por todos Screwjob de Montreal en WWF. Durante el show, veló por los intereses de WCW frente a NWO, y su papel en el combate definitivo fue determinante.

El combate en sí mismo es la nada más absoluta. Sting y Hogan pelean sin hacer nada que se pueda recordar mínimamente. Después de un inicio arrollador del de la cara pintada, el campeón domina y, aparentemente, lo derrota con facilidad, si no recuerdo mal, tras un simple codazo. La frialdad es total entre el público. 

Pero no hay toque de campana. En ringside, Bret Hart ha evitado que el encargado de la campana señale el final del match. En su lugar, él se viste de árbitro, expulsa al referee Nick patrick, afín a la NWO, y bajo su cargo, Sting derrota a Hogan para convertirse en World Heaviweight Champion, y anotar una victoria, al fin, al bando de los buenos. Todo el mundo sale de backstage para celebrar lo ocurrido.

Pero la realidad es que Le han robado el combate a Hulk. Los aficionados esperaron muchos meses para ver a un nuevo Sting vengar la causa de la justicia contra una alimaña tramposa que destrozaba todos los combates y todos los programas de la empresa, y al final, ese nuevo Sting, es derrotado de forma patética, y sólo es capaz de ganar gracias a las trampas. ¿Por qué WCW ha hecho esto?

Se suponía que no debía ocurrir así. Patrick era un referee rudo; debía contar muy rápido, de tal manera que fuera obvio que el resultado había sido injusto, y que la victoria de Hogan, era causa de las trampas. En tal situación, la actuación por parte de Hart habría sido legítima. Sin embargo, de la forma en la que se hicieron las cosas, la imagen fue la contraria a la pretendida.

Algunos defienden que fue un error de Patrick, y otros que este estaba conchabado con Hogan, fuera del kayfabe, para que así el Hulkster quedara bien. No está muy claro. Lo que sí ha trascendido por parte de Bischoff es que Sting no estaba en forma para tener el match; en todo el tiempo en que había estado sin pelear de manera regular, no había entrenado como debería. La verdad es que todas las luchas de Hulk Hogan de esta época eran de este tipo, así que tampoco se nota mucho la diferencia...

Puntuación: *

viernes, 11 de junio de 2021

Sting, Lex Luger y Randy Savage vs Kevin Nash, Scott Hall y Hulk Hogan, WCW The Bash at the Beach 1996


Especial Hall of Fame 2020

Estamos realizando un especial sobre el Salón de la Fama de WWE, y sus egresados en el año 2020 (o 2021, físicamente). Sólo nos falta hablar sobre la NWO, el stable más importante de la historia del wrestling, cuya storyline cambió el sentido de la industria e hizo que los programas de televisión de wrestling fueran seguidos por muchos millones de personas cada semana. Hacía tiempo que debíamos hablar sobre este tema en el blog, pero hemos esperado al momento oportuno: la ocasión la pintan calva.

La NWO está en el Salón de la Fama, como stable, aunque no han sido convocados todos sus miembros, que fueron muchos. Los agraciados son Hulk Hogan, Scott Hall, Kevin Nash y Sean Waltman. A mí me parece correcto que sólo reciban el honor los miembros que, realmente, tengan relevancia dentro del grupo, aunque la selección de Waltman no me agrada mucho, pues no es tan relevante como otros. Ted DiBiase estuvo en NWO antes que él, pero es cierto que WCW pasó de su participación pronto. También Big Show (The Giant) tuvo un papel importante, pero es cierto que fue y vino en varias ocasiones, tal y como lo hizo Randy Savage. Quizás, el que realmente lo merecía es Eric Bischoff, y parece ser que WWE pensó en otorgarle el honor a él también, y por eso ha sido exaltado en 2021 en solitario. Así las cosas, yo hubiera dado la plaza sólo a los Outsiders y Hogan, porque meter ahí a Waltman es muy arbitrario. El tipo ya tiene dos anillos, y ninguno de ellos es individual.

Vamos a dedicar varios artículos a la NWO, empezando por la formación del grupo. Esta ocurrió en verano del ya lejano 1996. Un día, sin que nadie los esperara, apareció un tipo en ringside que no debía estar ahí. Se trataba de Razor Ramon, uno de los luchadores más importantes de WWF, que se presentaba allí con su verdadero nombre, Scott Hall, como un outsider, como un luchador de WWF que pretendía destruir WCW desde su interior. Obviamente, ya no luchaba en la empresa de Vince, pues Turner estaba pagando cantidades económicas enormes, así que abandonó la promotora en la que se hizo famoso para recalar en la competencia, pero dentro del Kayfabe, era un invasor.

Hoy en día, cuando un luchador deja una empresa, e incluso mucho antes, todo el mundo lo sabe con  antelación y detalle, gracias a Internet. Antes de que se haya ido, y por supuesto, antes de su debut en otro sitio, hay múltiples rumores, filtraciones, debates y teorías. Ya no hay lugar para las sorpresas de verdad. Pero, entonces, todo eso sonaba muy raro.

Hall amenazaba a Bischoff, hasta que Sting apareció para defender al director de WCW y comentarista de sus programas. Scott prometió una sorpresa muy grande, y fue grande, literalmente: a su misión se unió otro exWWF, el enorme Kevin Nash, que en la empresa de Vince había luchado con el nombre de Diesel. Mientras McMahon creaba versiones fake de estos dos luchadores en WWF, con los personajes que estos usaban originalmente, Nash y Hall comenzaban a contar la historia de sus vidas.

Hall y Nash, los outsiders, amenazaron a WCW. En The Bash at the Beach, evento veraniego de la compañía, se presentarían junto a un tercer miembro, uno que intentaría dinamitar a la empresa desde dentro. Así, Bischoff convocó a las fuerzas vivas de la misma para plantar cara a la amenaza. Con el héroe Hulk Hogan fuera por su trabajo grabando películas, los seleccionados para defender a WCW fueron Sting, Lex Luger y Macho Man Randy Savage. Los tres llegaron con la cara pintada, para enfrentarse a los Outisders en el main event del evento, al que, en primera instancia, no se presentó ese tercer miembro. La posibilidad de que el traidor fuera uno de los tres defensores estaba en el aire, y aumentó en el momento en que Luger quedó KO tras un Sting Splash de su propio amigo y compañero. Luger tuvo que ser retirado, y el match se convirtió en un 2 v 2, que, en términos de calidad, era muy aburrido, con un Nash dominando, en teoría, por su mayor tamaño, pero sin utilizar este en favor de la historia en ningún momento.

Con fuerza y trampas, Nash y Hall dominan, hasta que en un loco segmento, los cuatro luchadores quedan tendidos, siendo Savage el luchador vigente arriba del ring por parte de los técnicos. Entonces, llega su amigo de toda la vida, Hulk Hogan, ante la alegría del público. Si el lector se fija bien en el vídeo del evento, podrá observar que rodeando la rampa de llegada de Hulk, hay una cantidad de policías enorme. ¿Por qué es necesaria tanta seguridad? Pronto lo sabremos.

Hogan llega al ring, y los Outsiders huyen. En principio, ha venido a salvar a Savage de ellos. Y no obstante, sorprende al mundo entero lanzándose sobre él, y aplicándole un salvaje Leg Drop. Todo el mundo está estupefacto.

Hogan aplica varios Leg Drops, y expulsa al referee. Los Outsiders realizan, entre burlas, en conteo de tres, aunque, legalmente, el combate acaba sin resultado, porque ningún referee oficial ha determinado la victoria de los rudos. Sting y Savage abandonan la arena, con el rabo entre las piernas, mientras otro gran amigo de Hulk, Gene Okerlund, sube al ring para entrevistar al traidor.

Y llevan a cabo una entrevista que tiene lugar entre una enorme lluvia de basura y objetos que caen al ring, con cierto peligro. Ahora es obvia la razón de la presencia policial: frenar el furor del público. Okerlund hace un trabajo genial, tratando a Hogan como un traidor y, casi, un delincuente, mientras este explica los motivos de su histórico turn heel. Hulk habla sobre su carrera, sobre la manera en la que se ha relacionado históricamente con el público, y sobre su hartazgo. Así, declara el nacimiento del Nuevo Orden Mundial, The New World Order, con  el futuro de la lucha libre en sus filas, refiriéndose a Nash y Hall.

Hay que tener en cuenta que el término New World Order estaba muy de moda. La Unión Soviética había caído y había nacido un Nuevo Orden Mundial en el que USA era la única gran fuerza que dominaba el planea a placer. Hogan se adueña de este término, para traicionar a la WCW, harto de hacer rico a Ted Turner y a mucha gente, harto de los fanáticos, a los que compara con la basura que ha caído al ring. Sin Hulk Hogan, no existiría la lucha libre, no existirían los fans ni los luchadores de segunda fila que pelean en la empresa y que se creen mejor que él. "Whatcha gonna do when the New Worl Organization runs wild on you?"

Así termina uno de los segmentos más importantes en la historia del wrestling, que incluyó el turn heel del luchador más importante de la historia del wrestling. A pesar de su maldad a la hora de narrar su promo (no muy ensayada, por las tonterías que dice), hay que decir que no fue, la suya y la del equipo una decisión fácil de tomar. Seguramente se especuló mucho con la identidad de ese tercer miembro, y hubo mucha resistencia a convertir a un hombre tan querido en un hombre tan odiado. Pero todo salió bien, como supimos. Seguiremos hablando del tema.

Puntuación: **3/4

domingo, 6 de junio de 2021

Darby Allin y Sting vs Ethan Page y Scorpio Sky, AEW Double Or Nothing 2021


Algo raro está pasando en WWE en los últimos meses. Está renunciando por completo a contratos de luchadores de bastante importancia, sin preocuparle que puedan acabar en la competencia, en este caso, en AEW, que ya se ha hecho con los servicios de Rusev, Christian, Mark Henry, Big Show, Sting o Jon Moxley. Quizás McMahon, después de librarse de sus principales directivos, piense que puede pasar algo similar a lo que ocurrió en los 90, cuando todas sus estrellas se fueron a WCW, y esa empresa acabó implosionando debido a los costes inmensos de su personal, pero hay que tener en cuenta que Turner compró WCW, tan sólo, pensando en la audiencia de televisión, sin tener ni idea de wrestling, mientras que AEW es un capricho de un gran multimillonario que puede permitirse un fracaso, al menos por un tiempo. En última instancia, ha sido Braun Strowman el que ha abandonado la WWE, y no sería de extrañar que acabara en la casa de los Khan.

Como lo hizo Sting, que ya suma su segundo combate en AEW. En 2015, tuvo una lucha en WWE frente a Seth Rollins, y sufrió una lesión que parecía definitiva. WWE no se atrevería a volver a ponerlo a luchar, después de que su espalda no aguantara un golpe básico de Rollins, así que nuestra ilusión de verlo en un ring junto a The Undertaker se esfumó. Pero Sting es uno de esos hombres adictos a la ovación del público, y nunca pensó en hacer caso a las recomendaciones de los médicos de WWE. Ahora, a los 62 años de edad, AEW le ha vuelto a dar la oportunidad de pelear ante la gente, y no lo ha hecho mal.

Sting ha tenido muy buenos combates en su carrera, sobre todo entre finales de los 80 y principios de los 90, coincidiendo con gente como Ric Flair, Vader y Mick Foley. Pero de eso ha pasado mucho tiempo. En general, nunca he creído que Sing fuera un gran luchador, pero rendía muy bien con los rivales oportunos. De hecho, a mí sus dos luchas en WWE me gustan bastante. Pero, claro, 62 años son muchos...

Pero el tío está siempre igual. O sea, no tiene los músculos que tenía en 1990, pero desde luego, su aspecto no es el de un anciano. La pintura facial ayuda y, además, su forma de andar y de moverse no se ha deformado como en el caso de otros luchadores y otras personas. Luchando en pareja, como lo ha hecho hasta ahora, está muy protegido, así que todo ha salido bien, y ya nadie recuerda su lesión en su match frente a Rollins.

Sting vuelve a TNT después de haber protagonizado un match frente a Ric Flair en el último episodio de Monday Night Nitro en 2001. Su compañero de aventuras está siendo Darby Allin, al que ha comparado consigo mismo, quizás por la pintura, porque no veo más parecidos. En cualquier caso, creo que la unión beneficia a ambos: pone a Allin en un nivel que no podría alcanzar solo, y protege a Sting de tener que luchar en solitario. Tras vencer a sus primeros rivales, el Team Taz, en Double or Nothing, uno de los principales shows anuales de la empresa, se ven las caras frente a Scorpio Sky y Ethan Page.

En una lucha entretenida, que no está mal. Como otras veces durante los últimos meses, el equipo protagoniza un vídeo de entrada en blanco y negro que no está nada mal: efectivamente, Allin parece convertirse en un mini-Sting. El pequeñalo comienza volando sobre sus rivales, lo que desemboca en un brawl en ringside que lleva a Sting a sorprender a todos, lanzándose con un crossbody desde el decorado sobre sus oponentes, aunque creo que esto no entra legalmente en la lucha. El veterano comienza como una moto, con sus Sting Splash, pero Allin es incapaz de seguir la racha, y acaba siendo dominado por los rudos que juegan al límite de la ley. Hacen bien su papel de brutos abusones, mientras que Darby ejerce su rol de underdog, e incluso es lanzado entre el público desde el ring por Page. Es de suponer que el público de esa zona es de mentira, porque, de lo contrario, tendríamos denuncias aseguradas.

Se produce el Hot Tag. Sting entra, de nuevo, con sus Sting Splashs sobre sus dos rivales, y counters realmente hábiles que sorprenden al público. Sus oponentes intentan atacarle las piernas, pero aplica un Scorpion Deathlock sobre Page, mientras Scorpio llavea la pierna de Allin. Finalmente, la leyenda alcanza un sorpresivo Scorpion Deathdrop sobre Sky para llevarse la victoria.

Lucha normalita, que sirve para que todos seamos felices viendo a Sting, sin más pretensión que esa.

Puntuación: ***