domingo, 5 de agosto de 2018

Tommaso Ciampa vs Johnny Gargano, WWE NXT Takeover Chicago II



Anteriormente, comentamos la lucha por los Campeonatos en Parejas de NXT que se celebró en el evento Takeover: Chicago II, en el fin de semana de Money in the Bank 2018, Ahora, vamos a charlar un rato sobre el main event de la velada, la lucha que todo el mundo esperaba: Tommaso Ciampa se enfrenta a Johhny Gargano en un Chicago Street Fight.

Con motivo de la lucha entre ambos en New Orleans, ya comentamos su rivalidad. La amistad que tenían, la pareja que formaron, y la traición de Ciampa. Por la forma en la que el feudo ha continuado, esta historia se ha convertido en algo que mucha gente recordará durante años. Gargano es considerado uno de los mejores babyfaces de la actualidad, y Tommaso es uno de los tipos más odiados de la industria. Meltzer lo catalogó hace poco como el mejor heel del mundo.

En Takeover:New Orleans, estos antiguos amigos se enfrentaron en un Unsantioned Match. Este tipo de combates debería guardarse para el final de una rivalidad, pero el fin de semana de WrestleMania merecía algo así. A pesar de la gran historia que se contó, y la paliza que se llevó Ciampa, este volvió a por más, atacando a Johnny sin parar, y aplicando un mortal Over the Shoulder Piledriver, o como sea que lo hallan llamado en WWE, desde bastante altura. La rivalidad, incluso, ha estado a punto de costarle su matrimonio a Johnny Wrestling, pero su mujer, antes de la lucha en Chicago, aparece para desearle suerte, dejando claro que lo apoya.

En primera instancia, que esto sea un Street Fight no me cuadra mucho, creo que es un error de bookeo. Luego, en la lucha, no tendré mucho que objetar, pero creo que la elección no es buena para atraer gente. Porque un Street Fight no suma nada a un Unsantioned Match. De hecho, resta, porque en aquel, no había consecuencias legales. Normalmente, en una rivalidad, las batallas tienen que ir de menos a más. Por eso, un Unsantioned Match debe ser lo último, es la mayor expresión de violencia y odio. En un Street Fight, en realidad, las reglas para luchar son las mismas, y las diferencias suelen residir en el bookeo, y no en el formato.

Entonces, para hacer algo nuevo después del combate de New Orleans, se debería haber metido una regla nueva, que estuviera relacionada con el storyline que se construía. Podría haber sido un Iron Man, un Hell in a Cell, o un Last Man Standing. No son luchas que puedan considerarse necesariamente más duras que un Unsantioned Match, pero que sí pueden serlo con la historia correcta.

Dicho esto, lo único cierto es que Gargano y Ciampa se destrozaron en una lucha sin reglas en el fin de semana de WrestleMania, y ahora, en el siguiente Takeover, se pegan otra paliza, en la que se utiliza una mezcla de violencia y storytelling de muy buen nivel. De hecho, creo que, a mitad de la lucha, me sentía algo decepcionado con el enfrentamiento, pero acaba a unos niveles sobresalientes.

Los luchadores se matan por todo el estadio, utilizando los objetos que encuentran. Incluso un cartel con el emoticono de Johnny, que parecía estar bastante preparado para ser usado.

En el ring, se pegan muchos súplexs, y Johnny parece acabar muy dañado de su cuello, lo que aprovecha muy bien Tommaso, con sus ataques a esa altura. Sus rodillazos van haciendo mella.

Aunque en WWE está prohibido el uso de sangre deliberado, al final, después de tanto golpe peligroso, y tanto objeto usado, va apareciendo por un lado u otro, de manera natural. La gente disfruta mucho cuando ve a Gargano golpear a su enemigo con la correa, pero los golpes en la cabeza que se lleva el héroe son muy superiores. Tommaso aplica el primer Over the Shoulder Piledriver sobre las escaleras metálicas, y como eso no le vale para ganar, le quita las protecciones al ring para realizar su próximo ataque.

Con esto, en cierto sentido, Ciampa rompe la cuarta pared. Quita la lona del ring, y luego, le quita la pequeña capa de gomaespuma que, en amortiza un poco los costalazos y los golpes. Deja ver lo que hay detrás de un ring, que es algo que debaten mucho los aficionados interesados en hacer ver que los golpes son falsos y que los luchadores son actores. La idea es aplicar su finisher sobre la madera, desde la esquina, pero Gargano con sigueescapar, para contraatacar.

Johnny destroza la pierna de Ciampa, con golpes muy violentos, casi sádicos, con una silla de metal. Aún así, nada consigue, porque Ciampa lo atrapa con un crossface, y le deja en muy mal estado con un montón de codazos en la nuca, seguidos de un golpe con la muleta en el mismo lugar. Johnny tiene un pie en la tumba, pero la cuenta no llega a tres.

Los narradores están desesperados y preocupados por la salud de estos dos hombres. Ciampa se lleva a su rival. Le habla de lo que ha pasado entre ellos. Nadie sabe lo que ha sufrido, sólo él. Se lleva a su antiguo compañero a una posición elevada, para aplicarle, de nuevo, su finisher sobre unas mesas que están abajo. Le quita el anillo de casado del dedo, y escupe sobre él, antes de lanzarlo por los aires. Pero Johnny se libra, y es él quien aplica semejante golpe brutal sobre las mesas, desde una altura de unos 3 metros.

Es un golpe muy fuerte. Porque, normalmente, cuando los luchadores caen sobre mesas desde cierta altura, dibujan una parábola, y hay un par de niveles de mesas. Esta vez, no es así.  La caída es totalmente vertical, sobre el cuello del rudo, en un suelo no acolchado. Es un golpe demasiado peligroso.

Gargano observa, meditabundo, cómo se llevan a su rival en una camilla. Pero no lo va a permitir, después de todo lo que le ha hecho... Cuando mira su dedo desnudo, decide ir a por él, y darle su merecido.

Y se lo da. Pero la seguridad intenta impedírselo. Hay que llevar a ese hombre al hospital. No es buena idea moverlo después de semejante caída. Gargano aplica Crossface, y Ciampa se rinde, pero no hay referee, porque Johnny le ha golpeado. El héroe pone unas esposas a su oponente, le pega un montón de superkicks, y vuelve a aplicarle un crossface, estando maniatado. De nuevo, Tommaso se rinde, pero no hay nadie para dar la victoria a Johnny, que tiene que volver a librarse de 5 agentes de seguridad mucho más grandes que él.

Cuando va a rematar a Ciampa, este le pilla desprevenido mientras entra al ring, y le aplica un DDT sobre la madera desnuda. Gargano queda KO, y el referee hace la cuenta de 3.

El público queda totalmente frío, y con las manos en la cabeza. Nadie se puede creer que Gargano haya perdido. Esto es una muestra de lo bien que se ha trabajado la rivalidad. El público está consternado. Por su parte, Tommaso Ciampa se gana una oportunidad titular, que le permitirá convertirse en Campeón de NXT unas semanas después.

Gran espectáculo, que va de menos a más, acabando muy arriba.

Puntuación: ****1/2

viernes, 3 de agosto de 2018

Undisputed Era vs Danny Burch y Oney Lorcan, WWE Takeover Chicago II



Vamos a comentar las dos luchas más destacadas por la crítica del evento WWE NXT Takeover Chicago II. Además de la continuación de la inmensa rivalidad entre Johnny Gargano y Tommaso Ciampa, la lucha por el campeonato en parejas de NXT llamó mucho la atención. Empezamos por ahí.

El campeonato en parejas de NXT siempre ha soportado muy buenos combates, y esto a pesar de la constante rotación en su plantilla. Quizás, el secreto para esta calidad haya sido conseguir huir de la sempiterna rutina de Vince en sus combates en equipos.

Y es que, desde hace decenios, en WWE se han bookeado las luchas en pareja de la misma manera. Los buenos comienzan demostrando su superioridad, hasta que una trampa de los rudos los pone por delante. Durante muchos minutos, dominan a uno de sus rivales, mientras este intenta hacer el hot tag a la desesperada, lo que calienta mucho al público. En última instancia, se da este Hot Tag, y comienza la fiesta entre gritos de los fans. No es mala historia, pero cansa que siempre sea la misma.

Sin embargo, en NXT, las luchas en pareja funcionan de una forma más parecida a la de las ligas independientes americanas. Hay muchísima acción, y no mucha psicología, pero el público se lo pasa pipa.

En Takeover Chicago II, The Undisputed Era se enfrentan a Oney Lorcan y Danny Burch, en una lucha que sigue esta pauta, pero la sigue muy bien, quedando, en definitiva, un combate notable.

The Undisputed Era es el stable creado en NXT por Adam Cole, Bobby Fish y Kyle O'Reilly. En un principio, quisieron que Roderick Strong, que no estaba haciendo gran cosa en NXT, se uniera a ellos, pero este les enfrentó. De hecho, colisionaron en Wargames. No obstante, tras la lesión de Bobby, el grupo quedaba algo flojo, así que Roddy ocupó su lugar. Usando la norma de los Freebirds, cualquiera de los miembros del stable puede participar en una lucha titular, por lo que, ahora, normalmente, Strong hace equipo con Kyle.

Oney lorcan y Danny Burch debutan en un Takeover. Igual que Unidsputed Era, estos dos tipos tienen mucha experiencia en territorios independientes. Pero, mientras que aquellos estaban en las principales ligas, protagonizando batallas increíbles en Ring of Honor, New Japan y otras empresas, estos dos estaban en promociones más pequeñas y desconocidas. No tienen mucho pasado en común, pero pegan bien juntos. Luchadores muy clásicos, stiff, y fuertes.

Esta lucha mezcla un poco de los dos paradigmas comentados anteriormente. Un poco de lucha tag estilo WWE. que en un momento dado, se convierte en una locura indy. Strong y O'Reilly comienzan atacando con dureza a Danny, haciéndole daño en la espalda. Esto es así, hasta que ocurre el Hot Tag, y Oney aparece como un auténtico Badass. Queda realmente impresionante en esta lucha.

Poco después, los Undisputed lanzan a Lorcan fuera, golpeándose este duramente en la espalda con el borde del ring. Lorcan queda fuera de juego un rato, durante el cual, su compañero tiene que aguantar sólo de una forma muy heroica. Suporta el castigo, hasta que Oney se recupera, y vuelve como una bestia a por sus rivales. No obstante, y aunque Adam Cole es expulsado de ringside, Undisputed Era retiene el título, después de un montón de ataques poderosos por ambos bandos.

Puntuación: ***1/2

martes, 31 de julio de 2018

Pentagón Jr vs Sami Callihan, Impact Wrestling Slammiversary XVI



Hacía mucho tiempo que nadie hablaba de Impact Wrestling, pero Slammiversary 2018, al fin, ha llamado la atención de todos. 

Cómo sabéis, Anthem Media compró Impact Wrestling, y puso, de nuevo, a Jeff Jarret al mando. Pero este tenía problemas con el alcohol, y aceptó la oferta de WWE para tratar las adicciones de todos sus antiguos trabajadores. Así, Jarret salió de la ecuación, y posteriormente, Impact Wrestling fue trasladado a Canadá. También se libró de sus luchadores más reconocidos, y por tanto, más caros. Es una época Low Cost, aunque hay una buena mezcla de talento y veteranía. 

Durante mucho tiempo, Impact Wrestling no ha generado beneficios gracias a la venta de entradas, porque no realiza Live Shows, así que funciona como un simple programa de televisión, y no como una promotora de wrestling. Pero, con la intención de volver al ruedo, ha participado en varios shows de empresas indies. Y, ahora que ha llegado uno de sus principales eventos del año, Slammiversary, ha salido fuera de la Impact Zone, y ha llenado un estadio.

Esta edición del clásico PPV de Impact tuvo lugar en el Rebel Entertainment de Toronto. No es un gran estadio, pero sí que caben casi 2000 personas. La empresa vendió todas las entradas, y en el evento se nota una energía muy superior a la que se respira en los programas habituales, la de un público entusiasta que paga por ver lucha libre, porque adora la lucha libre. Y adora la lucha entre ami Callihan y Pentagón Jr.

Pentagón Jr está hasta en la sopa. Y con roles muy protagónicos. Está en Lucha Underground, Impact, CMLL, Triple A, The Crash, All-In, el crucero de Jericho, y muchas indies importantes. Junto a su hermano Fénix, es el tipo más demandado del momento. Ambos se aprovechan de su relación con Konnan, que es un hombre de negocios muy dúctil.

Sami Callihan estuvo un tiempo en WWE, pero no llegó, apenas, a tener combates importantes en NXT. Así como otros muchos luchadores independientes han gozado de gran éxito, a Sami no le fue muy bien. Dejó la empresa, y empezó a resonar, de nuevo, en el mundo independiente. De entre todas las opciones que hay hoy en día en el wrestling mundial, fue a parar a Impact Wrestling, lo que no parecía la decisión más ambiciosa posible. No obstante, ha demostrado una fiereza muy grande, y esa imagen se reforzó cuando le reventó un ojo a Eddie Edwards en la empresa de Anthem Media, a principios de 2018. Aunque fue muy criticado por este error, él utilizó lo sucedido para seguir trabajando su personaje de rudo por redes sociales, lo que le valió más críticas. Así, se ganó un odio real, que es lo que quiere cualquier heel, y no es fácil conseguirlo en 2018. Buen trabajo.

Sami se metió en una rivalidad con Pentagon Jr, que durante unos pocos programas, había conseguido convertirse en Campeón Mundial de Impact Wrestling. Sami ya no sale de casa sin su bate de beisbol, y después de su espectacular combate con Vampiro en LU, Pentagón se ha convertido en un tipo muy interesante para una lucha hardcore. La rivalidad se calentó, y hubo escenas en backstage duras, relacionadas con los secuestros, y esas cosas. Finalmente, ambos luchadores colisionan en Slammiversary XVI, en un combate de máscara vs cabellera muy duro.

Es obvio que Pentagón no va a perder su máscara en Impact Wrestling, y frente a Sami Callihan. De hecho, sabemos que la pondrá en juego en el próximo TripleManía, en una lucha de 4 esquinas frente a LA Park, Hijo del Fantasma y Psicho Clown, mientras que en el Consejo Mundial de Lucha Libre se está cuajando otra rivalidad a 4 bandas, con Carístico, Dragon Lee y Místico que, espero, acabe en otra batalla de apuestas. No creo, en cualquier caso, que Pentagon pierda su incógnita en ninguno de estos matches, dado que no pertenece a ninguna de las empresas que está haciendo ricas.

Almmiversary llamó la atención por su ambiente luchístico, y también por la calidad de la lucha entre Sami y Penta, que va de la mano con ese ambiente.En este máscara contra cabellera, los dos luchadores se dan de lindo. Todo se lo devuelven el uno al otro. Se destrozan las manos, pegándose chops. Los dos se pegan en la mano contra el poste. Y ambos acaban sangrando mucho, clavándose punzones, y rompiéndose las cabezas con sillas. Sami ciega a su oponente tirándole unos polvos, y este, sin ver nada, ataca al referer, y le parte el brazo, pensando que era su odiado rival.

Los dos conectan sus finishers sin que hubiera un referee para contar. Llegamos al final, ya con otro árbitro presente, y el enmacarado obtiene ventaja. Con un montón de superkicks, deja en mal lugar a Callihan, le rompe el brazo con su clásica palanca, y lo derrota con un definitivo Fear Factor. Callihan se opone a ser rapado, pero al final no le queda otra opción. Aunque tiene a sus secuaces con él, Fénix, hermano de Pentagón Jr, aparece para ayudarle a hacer justicia.

No está nada mal la lucha. Igualada, stiff, con sangre y con buen público. No se respira el aire de una lucha de apuestas, pero sí el de un hardcore match.

Puntuación: ***1/2

domingo, 29 de julio de 2018

Tina Ferrari vs Attache, GLOW Season 2




Como decía en el anterior post de este especial sobre el Salón de la Fama de WWE en 2018, Ivory fue la mujer inducida de este año. En ese post comenté una lucha suya en WWE, pero quería, hoy, pararme a hablar un rato del programa que le dio la fama: Gorgeous Ladies of Wrestling.

En los últimos años, con tantas plataformas digitales, hemos visto varios experimentos alrededor del concepto de wrestling. Pero en el 86, ya apareció un programa televisivo bastante llamativo, una liga de wrestling femenina llamada GLOW, que por algún motivo, está muy olvidada. Por suerte, Netflix ha producido una serie de televisión basada en esta liga, que está muy bien, y que nos ha recordado lo que era aquel programa, en el que estuvo presente nuestra protagonista, Ivory, con el nombre de Tina Ferrari.

Recientemente, en verano de 2018, se ha estrenado la segunda temporada de la serie GLOW, de Netflix. Aún no la he visto, pero la primera temporada me gustó mucho. Esa serie está centrada en un grupo de mujeres de vida gris y anodina, sin más futuro que ser esposas y madres, y eso en el caso en que consigan tener un marido, que en un momento dado, encuentran un sueño y una pasión en algo que no respeta nadie: el wrestling. Tras presentarse a un casting para un programa sin mucho presupuesto, consiguen llevar a cabo un programa realmente bueno, pese a todas las adversidades y tonterías que se presentan durante la producción.

Es, más o menos, y con un gran nivel de teatralización, lo que se esconde detrás del verdadero programa GLOW, que fue creado por David B McLane, y fue emitido en la televisión americana, y de otros 6 paises, a partir del año 1986, contando con la madre de Silvester Stallone, jackie Stallone, como figura de autoridad en la ficción. Un total de 4 temporadas y 106 episodios se emitieron entre el año 86 y el año 90.

En 2012, se estrenó un documental muy premiado sobre el programa, lo que dio el empujó para crear esa serie que, finalmente, compró Netflix, y que recomiendo a cualquiera.

Los programas de GLOW se producían de una forma similar a como funcionan hoy en día los de Lucha Underground o Impact Wrestling. No había Live Shows como en WWE, sino que todo eran grabaciones para televisión, que originalmente se llevaban a cabo en un casino. Pero el estilo del programa sí que era mucho más parecido a lo que hacía Vince en la época que al producto de la NWA. Los personajes eran muy llamativos, muy extremos, y de nacionalidades marcadas. Las rudas eran tramposas y se hacían odiar, y había una gran heroína, rubia y guapa, que ocupaba ese puesto gracias a su físico. En esto se pone mucho énfasis en la serie de Netflix, que refleja cómo el talento y la dedicación quedan en un segundo plano, mientras que la fama se la lleva la chica guapa.

Ivory luchó en WWE y en otras muchas empresas, pero es en GLOW donde fue entrenada, nada menos que por Mando Guerrero, miembro de la famosa dinastía, y hermano de Eddie. Realmente, antes de la audición, estás chicas no tenían ningún entrenamiento, pero a diferencia de las divas de WWE de principios del 2000, intentaban llevar a cabo buenas luchas en el ring, y conectaban con el público. Realmente, hicieron muchos fans, de manera que ha habido muchos shows especiales después del fin del programa. Ivory comentó en una entrevista que es un ídolo para los gays que veían el programa de pequeños.

Ivory encarnaba el personaje de Tina Ferrari, que llegó a ser campeona de la empresa. Si alguien ha visto la serie, yo creo que su personaje viene a ser una de las protagonistas de esta, la chica guapa que se convierte en la gran heroína del programa. Pero la prota principal de la serie, la chica más feucha a la que nadie presta atención, pero que se esfuerza muchísimo por currarse un personaje y buenos movimientos, debe ser aquella que se hacía llamar Attache.

Como resulta obvio, vi la primera temporada de la serie hace casi un año, así que no la tengo muy clara en la memoria. Pero recuerdo que, en la serie, el marido de la rubia la engaña, y se acuesta con esta chica feucha, que es la mejor amiga de la primera. Así, cuando se ven en el ring, saltan las chispas. Por eso, cuando he visto en YouTube la lucha original en GLOW entre Tina Ferrari y Attache, he decidido comentarla. Se trata de un submission match.

No sé si había algún problema personal entre ellas en la vida real, como ocurría en la serie. Por lo demás, se nota que hacen un esfuerzo por llevar a cabo un buen combate. Está claro que todavía no tienen una gran precisión al llevar a cabo algunos movimientos, pero Mando les ha enseñado bien la psicología de la lucha técnica.

Tina utiliza buenas llaves a las piernas, hasta que Attache se recupera, y utiliza una cuerda para atarle las manos en la espalda. El público se enfada mucho por semejante artimaña, hasta que el referee se da cuenta, y la obliga a soltar.

La ruda utiliza buenos movimientos para dañar el brazo de su oponente, pero esta también responde con llaves dolorosas. Finalmente, Tina aplica una especie de Tombstone invertido, y aplica una figura 4. Attache se defiende como una fiera, y nunca mejor dicho, porque muerde la pierna de su oponente hasta hacerla sangrar. Pero se rinde ante el siguiente movimiento: un Sharpshooter.

No está nada mal la lucha, buen submission match.

Puntuación: ***1/4

viernes, 27 de julio de 2018

Ivory y Jacqueline vs Jazz y Molly Holly, WWE Heat 25/05/2003




Recuperamos el especial sobre el Salón de la Fama de la WWE, y sus exaltados en la edición de 2018. En su momento, pudimos hablar sobre el gran protagonista de dicha edición, Goldberg, y de otro de los que recibieron su anillo: Hillbilly Jim. Pero queda gente muy interesante de la que hablar. Mark Henry, Jeff Jarret y los Dudley merecen, al menos, un par de luchas comentadas.

La mujer exaltada este año fue Ivory, que no tiene tanto material para revisar estos tipos, pero que tiene varias cosas interesantes que comentar. Vamos a hacerlo hoy.

Ivory llegó a WWF en 1999, a una empresa tremendamente sexualizada en lo respectivo a las mujeres. No existía una división femenina como tal, y la mayoría de las chicas que aparecían en los programas de televisión eran coristas o modelos. Pero Ivory era una luchadora de verdad, que había luchado en la década de los 80 como Tina Ferrary. Esta chica fue una de las principales protagonistas del programa GLOW, que da nombre a la fantástica serie que ahora se puede ver en Netflix. En el siguiente post de este especial, veremos alguna lucha suya en ese programa, y así aprovechamos también para hablar de la serie, que, sin duda, es parte de la historia del wrestling.

Pero empecemos por el final. Porque esto es un especial sobre el Salón de la Fama de WWE, así que vamos a comentar su paso por esta empresa, en la que fue 3 veces campeona de mujeres.

Muchas personas se están otorgando el mérito de la revolución de las mujeres en WWE. Por mucho que digan, lo único cierto es que, para que las mujeres tuvieran un poco más de protagonismo en WWE, lo que hacía falta es que unos pocos directivos ancianos, machistas y millonarios, pensaran que se podía ganar dinero con ello. Vamos, como todas las revoluciones de la historia.

Si nos centramos en las mujeres que, de facto, han hecho algo para que la situación cambiase, seguramente la primera que llamó la atención en este aspecto fue Ivory. Y es que, la primera vez que apareció en la WWF, lo hizo como una de las chicas que acompañaban al Grandfather. Y cuando llegó a los camerinos, los tipos rudos que los ocupaban querían negarse a dejarle un hueco. intentaron enviarla con el resto de las modelos, que estaban en un rango inferior. Sin embargo, ella era una luchadora de verdad, y como tal consiguió que la trataran. Tuvo que luchar desde el primer día.

Ivory se presentó como una alternativa ante el tipo de luchas femeninas que se realizaban en la empresa en ese momento. Había peleas de barro, luchas en bikini... Ivory se reveló ante esto, protestó, y por primera vez en toda la Era Attitude, una historia tuvo sentido.

Gracias a eso y al trabajo de otras chicas, las mujeres empezaron a tener luchas de verdad. De vez en cuando, al menos, y sobre todo, con Lita o Trish Stratus relacionadas. Con todo su trabajo, sus historias y sus títulos, la mayoría de las luchas de Ivory que se pueden encontrar de su época en WWE son terriblemente cortas. Para ilustrar estos comentarios, he tenido que recurrir a un combate del programa Heat, la versión de aquella época de Main Event o WWE Superstars. En estos programas, siempre se han podido encontrar luchas interesantes con wrestlers que no tienen mucho espacio en los shows principales de la empresa. Ivory y Jacqueline se enfrentan a Jazz y Molly Holly, en mayo de 2003.

Una lucha que no esta mal. Las 4 son buenas luchadoras, de lo mejorcito de su generación. Por supuesto, es un tag team match de WWE, y sigue la misma estructura que han tenido todas las luchas en parejas de los últimos 50 años en la compañía. Jazz es campeona, y está acompañada por Teddy Long. Ivory tiene buenos intercambios con sus dos oponentes, pero acaba siendo dominada, y recibiendo de lo lindo. 

La entrada de Jackie, que es muy querida por el público, aumenta la intensidad de la contienda. Ivory le ayuda a librarse del STF de Jazz, y le permite acabar ganando con una hurracarrana.

Lucha normalita, de calidad, con cuatro mujeres que demuestran que el wrestling femenino no lo inventó Charlotte. También había talento antes, aunque no oportunidades.

Puntuación: **3/4

martes, 24 de julio de 2018

Bruno Sammartino vs Randy Savage, WWF Boston Garden 03/01/1987




Me apetecía, dentro de este especial sobre Bruno Sammartino, detenerme un momento en la parte final de su carrera.

En el año 1981, se terminó la carrera a tiempo completo de Bruno. No obstante, en el 84, volvió a la WWF. El luchador italiano había tenido problemas con McMahon Sr, al que acusaba de deberle dinero por el rendimiento en venta de entradas de su segundo reinado como campeón. Pero, al morir el promotor, su hijo, Vince K, un tipo que siempre ha sabido hacer lo mejor para los negocios, llegó a un acuerdo con él, y lo trajo de vuelta en un papel de comentarista.

Como parte de su acuerdo con la empresa, Bruno hizo de mánager de su hijo, David, que tuvo una lucha individual, con el excampeón en su esquina, en el primer WrestleMania, frente a Brutush Beefcake. La cosa acabó en doble descalificación, con Bruno metiéndose en una brawl con el Barbero. Después de eso, tendría varias luchas en equipo junto a su hijo, pero el push a David no acabó de cuajar.

Durante esta etapa, el principal rival de Bruno fue Randy Savage. Y por eso he elegido una lucha entre ellos para revisar. Y es que, me encanta la idea de tener a un maravilloso personaje rudo, uno de los grandes protagonistas de la década de los 90 en el wrestling americano, y gran contador de historias como villano; frente a un gran héroe, aquél que fue el campeón mundial durante casi toda la década de los 60, y también un gran contador de historias, aunque desde el punto de vista de un baby face en toda regla.

Randy estaba metido en su famosa rivalidad frente a Ricky "The Dragon" Steamboat, y como parte de la misma, lo lesionó. Por supuesto, era sólo una storyline, que les llevaría a su lucha de WrestleMania 3. En una entrevista de Bruno a Randy, el italiano, al conocer la noticia, estalló en ira, atacando al Campeón Intercontinental con furia.

Bruno y Randy tuvieron varios enfrentamientos en los meses previos a WrestleMania 3, evento en el que el Macho Man tendría su recordado combate con Steamboat. La batalla de la que hablamos en este post tiene lugar en enero del 87, en el Boston Garden de Boston. Aunque Sammartino tiene ya una imagen bastante envejecida, sobre todo por lo que ha nevado en el tejado, a nivel físico se encuentra tan bien como siempre. Savage no se va a arriesgar a pelear con el de tú a tú, así que huye en todo momento, y utiliza a Miss Elizabeth como escudo en más de una ocasión. Todo un hombre.

Este es un combate por el título Intercontinental. Al ponerlo, ya sabía que sería cortito, y que tendría un final regulero, porque una leyenda como Sammartino no va a perder limpiamente con un rudo como Randy Savage, pero tampoco se le va a otorgar el valioso Campeonato Intercontinental. Aún así, es muy entretenido ver a estos dos juntos, llevar a cabo su rutina de storytelling respectiva, separadas por décadas.

Sammartino sigue siento muy querido. Hay que tener en cuenta que esta rivalidad había salido, ya, en televisión nacional. No es como las del Madison Square Garden. Sammartino y Savage habían realizado promos en el programa Superstars of Wrestling de la WWF. Además, Boston siempre fue buen feudo para el italiano. cuando la campana suena y comienza a pegarle la paliza de su vida al Macho King, el público se vuelve loco.

Los aficionados disfrutan de lo lindo con los golpes de Bruno sobre Randy. Pero el rudo vuelve a utilizar a su mánager como escudo, y aprovecha para atacar por la espalda a su oponente, buscando la victoria por count-out. Le pega con la barandilla de las escaleras, y vuela sobre él con sus habituales golpes en la cabeza. 

Para alegría de la gente, Bruno vuelve a la carga, pero de nuevo en ringside, Randy pega un sillazo a su enemigo, provocando, ahora sí, el count-out. Savage gana y retiene el campeonato.

Lo mejor viene después del mismo. Qué lástima que no cuente para la puntuación de la contienda. Sammartino entra al ring, furioso, y ataca al campeón. Lo agarra con su Bear Hug legendario, y lo deja KO. Pero no lo suelta. Nunca he visto una mejor forma de poner over a un finisher. Entre tres árbitros intentan hacer que Sammartino suelte, pero parece que sus brazos están pegados. Jamás soltará a su víctima. Tienen que entrar 5 wrestlers, y después de un rato, entre los 8, consiguen hacer que Sammartino suelte al pobre Randy Savage. Me gusta mucho este segmento.

Puntuación: **3/4

sábado, 21 de julio de 2018

Bruno Sammartino vs Superstar Billy Graham, WWWF 30/04/1977




Volvemos al especial que iniciamos hace unas semanas sobre Bruno Sammartino, que falleció en primavera de 2018. Es una de las figuras más importantes en la historia de WWE, y por tanto, en la historia del wrestling, así que merece un especial de 5 combates. Vamos a por el tercero.

Ya hemos hablado de la manera en la que funcionó el campeonato de la WWWF en sus 2 primeras décadas de existencia. Siempre había un gran héroe que portaba el campeonato, y que lo defendía en los principales eventos de la promotora, ya fuera el en Madison Square Garden de Nueva York, en el Spectrum de Philadelphia, o en cualquier otro estadio en el que realizara sus shows. 

Si por el señor Vince McMahon Sr hubiera sido, Bruno Sammartino jamás hubiera perdido el campeonato. Vendía muchas entradas. Pero, en el 71, después de 8 años como campeón, necesitaba tomarse un descanso. Durante un par de años, el papel de héroe-campeón lo llevó a cabo Pedro Morales, quien, en realidad, tuvo un reinado muy sólido en cuanto a ventas de entradas en el Garden. Su media como main eventer es, incluso, superior a la de Bruno, con un reinado, obviamente, mucho más corto. Pero parece ser que fuera de Nueva York, su capacidad para vender boletos era mucho menor que la del italiano. Y es que, en el noreste americano, la población hispana era, por ese tiempo, pequeña. 

Bruno se convirtió en campeón por segunda vez en el 73, y su segundo reinado duró otros 3 años y medio. Finalmente, fue derrotado en abril del 77, en Baltimore, por Superstar Billy Graham, un tipo que tenía un físico de gran héroe, y que no supo encajar con el público sino como villano. Así, se convirtió en el primer heel en tener un reinado largo como campeón de la WWWF. Mantuvo su correa durante 10 meses, antes de ser derrotado por el siguiente gran ídolo del público: Bob Backlund.

Así acabó el tiempo como campeón de Bruno. Tenía el cuerpo lleno de lesiones, estaba muy cansado, y necesitaba alejarse, de nuevo, del estrés físico y mental que implica ser campeón. En el resto de su carrera, seguiría haciendo apariciones especiales, y teniendo algunos combates hasta finales de los 80. Después de 30 años de enfados con McMahon, entró al salón de la fama y, lo que por supuesto es más importante, los videojuegos de WWE, en 2015.

La lucha entre Billy Graham y Sammartino del 30 de abril de 1977 recibió la denominación de mejor combate del año según Pro Wrestling Illustrated, una revista que, recordemos, guarda el kayfabe (o lo hacía en su tiempo, ya que ahora es complicado). La lucha, en realidad, está muy bien hecha, pero según los estándares de la WWWF clásica, nada interesada en la calidad del combate. En esos momentos, todo el mundo pensaba que esto era real, montar una batalla muy intensa no tenía sentido para un público interesado, tan solo, en el resultado. 

Pero, como digo, las pocas cosas que pasan tienen mucho sentido. Bruno tiene que dejar el título por sus lesiones, y eso se mantiene en Kayfabe, ya que se muestra muy dolorido de su espalda, y Billy lo aprovecha desde el principio, tirándolo contra las esquinas con aviesas intenciones. Graham es más grande, y tiene una musculatura más marcada, así que hay mucha prueba de fuerza, para demostrar que supera al campeón. Este tira de habilidad, y le retuerce los brazos con sus llaves.

Graham golpea con puñetazos directos a la cara, a pesar de las indicaciones del referee. Ahorca a su contrincante, hasta que se lanza contra el esquinero, y se destroza la rodilla debido al movimiento de Bruno. El italiano le ataca en la pierna, y le golpea la cabeza contra el poste exterior. Billy sangra, y recibe muchos más puñetazos, hasta el punto de pedir clemencia.

Superstar vuelve a lanzar a Bruno contra el esquinero, haciéndole, de nuevo, daño en la espalda, y le aplica un poderoso Bear Hug. Por un momento, parece que el campeón se va a rendir, pero se libra, y le da al retador de su propia medicina. Lo tira contra el esquinero, le pega un montón de rodillazos en la espalda, y le aplica su propio y mítico abrazo de oso. La victoria está cerca.

Pero Billy Graham llega al esquinero, donde pone una zancadilla al campeón, y, apoyándose en las cuerdas, lo cubre. La cuenta llega a tres, de manera que Superstar Billy Graham se convierte en campeón de la WWWF, aún con trampas. Agarra la correa, y sale corriendo, ante la ira del público, que lanza cosas e intenta subir al ring.

Las luchas de estos tiempos en la WWWF no tenían grandes pretensiones, y sin embargo, esta está muy bien escrita, aunque a nivel formal sea muy básica.

Puntuación: ***1/2

viernes, 20 de julio de 2018

Kazuchika Okada vs Hiroshi Tanahashi, NJPW Wrestling Dontaku 2018



Vamos a echarle un vistazo a la 12ª defensa titular del reinado de Kazuchika Okada, que acabaría en Dominion 2018. Esta defensa ocurre en la noche 2 de Wrestling Dontaku, ante Hiroshi Tanahashi, clásico rival de Okada.

Aunque casi todo el mundo es un clásico rival de Okada ya. Se ha convertido en el campeón de esta época, y ha derrotado a todos, de tal manera que ya no quedan rivales. Por eso era tan importante que dejara el título en manos de alguien como Kenny Omega, que todavía puede tener rivalidades más frescas contra varios luchadores potentes. 

No es, este caso, tan grave para New Japan. Esto no es WWE, no existe esa necesidad de guardar grandes confrontaciones para momentos idóneos. Aquí, las luchas se repiten una y otra vez, ya que hay varios torneos importantes de peso completo durante el año. Quizás vendría bien un poco de márketing al respecto.

Okada derrotó a Zack Sabre Jr, y tras ese combate, apareció Tanahashi para presentarse como el próximo contendiente por el IWGP Heavyweight Championship. En los meses anteriores, tuvo maravillosas peleas ante Suzuki, por el Intercontinental Championship, y ante Sabre, en la final de la New Japan Cup. Pero, aunque los dos combates fueran muy buenos, los perdió ambos, así que no sé hasta qué punto merece su posición en la cartelera. No obstante, no hay nadie más para presentar un reto interesante ante el campeón, y Tanahashi siempre es un seguro de vida, tanto por la calidad de sus luchas, como por el cariño del público.

Esta lucha no está nada mal, aunque creo que se queda lejos de la que tuvieron en Wrestle Kingdom 10. Le cuesta mucho arrancar. Parece que Tana quiere aprovechar el dolor en las piernas de Okada, infringido en su día por Sabre Jr, y ataca varias veces ahí, pero no se decide a continuar. En general, hay muchos ataques frontales por parte de ambos, pero sin una historia concreta.

Creo que la cosa mejora a partir de que Tanahashi aplica su precioso Cross Body desde el esquinero a ringside. Okada le devuelve el dolor, con un Tombstone en ringside que casi le hace ganar por countout. Pero Tanahashi regresa antes de que la cuenta llegue a 20.

Hay una guerra por aplicar Tombstone. Tanahashi siempre ha sido el Ace de New Japan, pero ahora ha perdido el puesto claramente, en favor del Rainmaker. Ahora, quiere demostrar que es capaz de hacer todo lo que Okada hace. Así, después de mucha lucha, Tanahashi aplica un gran Tombstone sobre su rival. Es muy dañino, porque no lo coge bien, y su cabeza queda muy abajo. Se nota que Tanahashi intenta subirlo, pero cuando ve que no puede ponerlo más arriba, lo aplica igualmente.

Tanhashi empieza a saltar. Aplica Frog Splash en la espalda de su rival, y va a por el ataque definitivo, el Splash sobre el estómago. El público realmente cree en su victoria. Pero Okada lo recibe con las rodillas.

Ahora hay guerra por el Rainmaker, y es, de nuevo, Tanahashi el que lo aplica. Pero Okada se levanta a la cuenta de uno, muy consciente de lo que hace. No basta con que alguien haga el Rainmaker: sólo él sabe darle ese poder sobrenatural que tiene. Okada acaba venciendo con su finisher.

La lucha empieza de una forma muy irrelevante, aunque en la parte en la que he puesto mayor énfasis, está muy bien. Sí que es llamativa la forma en la que gana Okada, con su primer Rainmaker. Suena a lección para Tanahashi.

Puntuación: ***3/4

miércoles, 18 de julio de 2018

Kazuchika Okada vs Zack Sabre Jr, NJPW Sakura Genesis 2018



Sakura Genesis es un evento ya famoso en New Japan, gracias al hecho de que el ganador de la New Japan Cup cobra su oportunidad titular en el mismo. Si el año pasado vimos a Katsuyori Shibata dar una increíble lucha que le costó su carrera frente a Kazuchika Okada, este año, 2018, es Zack Sabre Jr el que tiene la oportunidad de hacer historia.

Como vimos en su momento, Zack Sabre Jr subió como la espuma en la división de peso completo de la empresa japonesa, ganándose un contrato de tiempo completo en la misma. Abusó de sus rivales en la Cup, gracias a su extraordinaria capacidad técnica, y derrotó en la final a Tanahashi en el que, creo, es su mejor combate hasta el momento en tierras niponas.

Así, el inglés llega a Sakura Genesis, en el Ruogoku Kokugikan de Tokyo, ante, casi, 10.000 personas. Como en cada una de sus grandes luchas, pone en práctica una cantidad de llaves distintas impresionante, que anulan por completo a su rival.

Okada intenta igualar a Sabre Jr en su campo. Y sorprende al público con un conocimiento que normalmente no pone en práctica en sus combates. Pero, no nos engañemos, la diferencia de habilidad es muy grande, y Sabre consigue hacer mucho daño en las piernas del campeón. Este se deja de tonterías, e intentar llevar la lucha a un campo en el que tiene ventaja: el de los grandes movimientos.

Y ahí, Sabre vuelve a poner sus armas en marcha, al destrozarle el brazo, de mil maneras posibles, a Kazuchika. Así, no será capaz de utilizar el Rain Maker. Pero ahora el japonés atacas con buenas dropkicks. Y, aunque no consigue poner en práctica su finisher en sus primeros 5 o 6 intentos, sí que conecta varios Tombstone Piledrivers.

Con esos golpes, Okada va abriéndose camino, a pesar de que recibe llaves por todos lados que lo frenan. Por supuesto, al final, aún con dolor en el brazo, golpea con varios Rainmakers, y se lleva la victoria.

Muy buena lucha, de nuevo, aunque bajo el mismo formato que suelen tener todas las luchas de Sabre Jr en New Japan. En esa empresa, todo gran combate tiene que tener spots, finishers y power moves, que, al final, conducen a la sensación que todo el dominio del inglés no ha tenido sentido, ya que, al fin y al cabo, le ha destrozado el brazo a Okada, pero este ha ganado con Rainmaker. Pero bueno, aparte de esta pequeña sensación, la lucha es genial.

Puntuación: ****

martes, 17 de julio de 2018

The Undertaker, Braun Strowman y Roman Reigns vs Kevin Owens, Elias y Baron Corbin, WWE Madison Square Garden 07/07/2018



Recientemente, Undertaker volvió a aparecer en un Live Show de WWE en el Madison Square Garden, después de muchos años sin hacerlo. Hay varias cosas interesantes que comentar relacionadas con esto, así que me gustaría dedicarle el post de hoy a la cuestión.

The Undertaker tiene ya 53 años. Durante muchos años, se ha hablado de un posible retiro, pero este no acaba de darse nunca. Cuando uno tiene una gran pasión, es muy difícil olvidarse de ella, y pasar a hacer otra cosa.

Dada su carrera y el gran heat que supone para vender entradas, WWE siempre le ha dejado hacer lo que él quiera. En 2017, tras una humillante derrota en WrestleMania ante Roman Reigns, parecía claro que Undertaker se retiraría. Después de ese combate, el Enterrador dejó la ropa clásica de su personaje sobre el ring, y abandonó el edificio. Nada más se dijo, oficialmente, en todo el resto del año.

Parecía obvio que se había retirado. Pero, en su lugar, el Deadman se sometió a una importante cirugía para remediar algunos de los males que acarreaba como consecuencia de una tan dilatada carrera. Y parece que se sintió satisfecho por el resultado de la intervención, ya que 2018 está resultando un año mucho más atareado de lo que en él viene siendo habitual.

Undertaker venció a John Cena en WrestleMania, y a Rusev en Quatar. También está anunciado para un gran evento que WWE tendrá en Australia, en un estadio con capacidad para 100.000 aficionados. Allí, su rival será Triple H, y el combate se está vendiendo como el cierre de su histórica rivalidad. Además de todo esto, el 7 de julio de 2018 estuvo en un evento en vivo de WWE en el Madison Square Garden.

El MSG es uno de los estadios más importantes en la historia de WWE. Durante muchos años, supuso su principal fuente de ingresos. Así lo fue en la etapa pe-televisión, y pre-PPV. Todos los meses, WWWF o WWF presentaba sus shows mensuales, con su principal estrella en el main event, ya fuera Bruno Sammartino, Bob Backlund o Hulk Hogan. La capacidad de ese histórico centro es de unos 20.000 espectadores, así que, por la venta de entradas, la empresa conseguía unos ingresos similares a los que tiene hoy por hoy en un PPV.

Hace tiempo que WWE no lleva a cabo ningún gran evento en esa sede. Aún así, cada 3 o 4 meses tiene un Live Show en ella, al que siguen asistiendo entre 12.000 y 15.000 espectadores. Como digo, eso supone, más o menos, la misma venta de entradas que en un PPV normal de la empresa, y con costes de producción mucho menores. Eso significa que la compañía tiene que esforzarse por atraer a los fans, a pesar de que sólo se trata de un House Show.

Y, ahora mismo, WWE tiene problemas para encontrar grandes atractivos que vendan entradas. Porque sus dos principales estrellas, John Cena y Brock Lesnar, están muy ocupados con otras cosas. John está teniendo papeles cada vez más importantes en Hollywood, y Brock ya ha confirmado su regreso a UFC para enfrentar al campeón de peso completo, Daniel Cormier. No se sabe cuando volverá Cena a WWE, ni cuanto luchará Lesnar, que además, ahora cobra cantidades mucho más altas por cada aparición, y tiene el campeonato Universal secuestrado. En estas condiciones, WWE tiene que buscar otras atracciones para el respetable. Ronda Rousey luchó en el live show de marzo en en Garden, y en este de julio, lo hace Undertaker. Si en 2018 la empresa tiene que tirar del Enterrador para vender entradas, es que algo va mal en el cambio generacional.

Algo que parece una constante en el wrestling mundial. Recientemente, en un estadio de semejante capacidad, La Arena Mexico de la Ciudad de México, el Consejo Mundial de Lucha Libre consiguió una de las mejores entradas del año por una lucha en homenaje a Atlantis con 6 leyendas casi sexagenarias en el cuadrilátero: Atlantis, Octagón, Rayo de Jalisco Jr, vs Último Guerrero, Máscara Año 2000 y Fuerza Guerrera.

Con respecto al Garden, hay otro tema de actualidad muy interesante. El hecho de que ocurran eventos de otras empresas de wrestling. Hace un tiempo, se comentó que había una promotora que estaba intentando llevar a cabo un evento ahí, pero que WWE lo evitó, "con una llamada". Incluso se dijo que esa empresa era la mexicana Triple A. Porque los medios de wrestling mantienen una relación flexible con lo de decir la verdad. Finalmente, se supo lo que era previsible: que esa empresa es Ring of Honor. Ahora, se ha desbloqueado la situación y WWE ha dado permiso para que ROH, junto a New Japan Pro Wrestling, hagan un show conjunto en el Garden durante la semana de WrestleMania del próximo año 2019. Este evento tendrá lugar el día 6 de abril, la noche antes de WrestleMania.

Se ha criticado mucho a WWE por ejercer poder para evitar el crecimiento de otras empresas mediante acciones como esta. Pero lo cierto, hasta donde yo sé, es que WWE tiene un contrato con el Madison Square Garden para tener la exclusiva en lo respectivo a shows de wrestling en el edificio. De hecho, se cumplen 30 años desde que Vince llegó a un acuerdo con los directores del establecimiento. Por eso mismo, más que un boicot para que no se realice el evento, parece ser un detalle por parte de la empresa permitir hacerlo. Hubiera sido muy fácil para ella realizar el Takeover de ese día en el Garden. En cualquier caso, parece probable que Ring of Honor, ese día, supere los boletos vendidos por All In, que como sabrán los lectores, agotó sus 10.000 entradas en media hora, después de que se pusieran a la venta.

Y es que, parece haber cierto interés por parte de WWE por abrirse al mundo, y ofrecer en su network el producto de otras promotoras. Parece que Progress, Evolve o NOAH podrían haber negociado ya con Vince para hacerlo. Quizás, en esa compañía, se esté pensando que, mejor que tener el monopolio del wrestling, es tener el monopolio del streaming de wrestling, que sería interesante convertir a WWE Network en un verdadero Netflix de wrestling, con productos propios, y productos de Third Parties. En ese caso, potenciar otras empresas a lo mejor sería un buen negocio para WWE. Pero son especulaciones lejanas, y causadas por la aparente desidia de su propio producto.

En este Live Show de WWE en julio de 2018, Undertaker participa en una lucha de tríos. Hace equipo con las dos principales estrellas de la actualidad, Braun Strowman y Roman Reigns, para hacer frente a tres tramposos consumados: Kevin Owens, Elias y Baron Corbin.

Sobre Baron Corbin, hay que decir que ha abandonado el personaje de lobo solitario. Ahora resulta ser un contable. Cosas típicas de WWE. Qué horror.

La lucha es normalita, con Roman siendo el face que recibe el daño, y un Undertaker que protagoniza sus mejores movimientos ante Kevin Owens, demostrando que aún puede mover a su antojo a hombres muy pesados. Mediante el Tombstone, el Deadman da la victoria a su equipo.

Braun y Roman homenajean a Undertaker en el centro del ring. Este aprieta la mano del primero, y tras abandonar el ring el gigante, hace lo propio con Roman, a pesar de lo ocurrido en WrestleMania 32.

Puntuación: **1/2