Dos maestros del ring, mucha técnica, mucho stiff, todo en uno de esos combates fantásticos que podemos ver a veces en programas semanales de Smackdown.
Finlay intenta reventarle la cara a Benoit de mil maneras y conoce montones de trucos sucios para hacerlo. Benoit es un maestro de la rendición y trata de dañar las partes vitales de su rival para poder aplicar alguna de sus grandes llaves (crippler crossface o Sharpshooter). Ninguno de los dos busca finishers supermágicos, por lo que el combate es largo y disputado.
No falta la ira de Finlay que observa como es imposible doblegar a Benoit, a pesar de hacerlo sangrar. El espíritu del guerrero del canadiense es evidente. Cuando este ca a por la victoria tras un come-back final, Finlay recurre a las sillas, el makelele y la estupidez del referee para ganar.
Muy buen combate, sobre todo para ser en un programa en abierto. Mucha técnica y dos estrategias muy claras.
Puntuación: ****