sábado, 18 de septiembre de 2021

Paul Wight vs QT Marshall, AEW All Out 2021


En el anterior post publicado en el blog, hablamos del primer match de Cm Punk en años, que tuvo lugar en el evento All Out 2021 de AEW. Ese día, asimismo, se subió al ring otra leyenda de WWE que trabaja ahora para la competencia y que aún no había debutado. Se trata del Big Show, que como fue moda en WCW en su día, ahora lucha con su nombre real: Paul Wight.

Wight luchó como The Giant en WCW, y como Big Show en WWE. Es un gigante que, sin ser demasiado veloz, ni un luchador técnicamente sobresaliente, siempre ha cumplido cuando las empresas han necesitado un upper-midcard que un día suponga una amenaza para el campeón, y otra, sea el protagonista de una storyline secundaria. Nunca se ha confiado en él como un gran héroe en WWE, pero, gracias a su físico y su longevidad, ha acumulado un gran número de campeonatos y combates históricos.

También es un hombre de 49 años, que ha acumulado algunas lesiones serias en sus últimos años de carrera. Vince McMahon no le iba a dar más oportunidades, como no se las da a ninguna leyenda que no esté en el rango de los Cena - Taker - Lesnar - The Rock - Edge, así que, tras muchos años, y tal y como hizo Mark Henry, Wight abandonó WWE para ir a AEW e intentar aportar algo, y con suerte, tener el combate ante Shaquille O'Neal que su anterior jefe le negó. Desde su llegada, ha hecho labores de comentarista, hasta su debut en All Out.

Comprendo que este es el combate menos interesante del evento en términos de wrestling, pero tenía ganas de ver el estado en el que se encuentra un gigante al que llevo viendo pelear desde que era un niño. En su trabajo, se vio enfrentado a QT Marshall y su estable rudo, The Factory, que abusó de Tony Schiavone. Pensó que podía hacer lo propio con Paul, en tanto que se supone que es un luchador retirado que había tenido lesiones demasiado duras, sobre las que, además, aplicó castigos muy duros. Pero Big Show es un animal que se ha enfrentado a todo durante su enorme carrera, y no va a permitir que un desgraciado como Marshall, que, con todos los respetos, es un don nadie, se salga con la suya. Así, se enfrentan en All Out, en un squash.

Un squash en el que Wight se muestra muy superior, pero en el que te también se notan sus problemas de movilidad, lógicos teniendo en cuenta su inactividad. Marshall intenta atacar su pierna, y usar a sus lacayos a su favor. pero el gigante se libra de todos, y acaba llevándose la victoria con un ChokeSlam muy bien ejecutado por ambos.

El combate es poquita cosa. Sin embargo, creo que está bien que dentro de los programas semanales haya historias como esta, y que dentro de un PPV haya luchas cortitas que supongan un break en la intensidad.

Puntuación: *1/2

martes, 14 de septiembre de 2021

CM Punk vs Darby Allin, AEW All Out 2021


CM Punk dejó el wrestling a principios de 2014. Entonces, participó en el Royal Rumble match y fue destruido por Kane. Desde ese momento, los fans del wrestling han soñado con un regreso que, finalmente, 7 años y medio después, se ha dado en el evento All Out 2021 de AEW. Hoy vamos a hablar sobre este tema.

CM Punk era un luchador extraordinario. Sus combates en el mundo independiente dejaron huella, entre ellos, aquella gran trilogía ante Samoa Joe en Ring of Honor. E incluso llegó a triunfar en WWE, una empresa en la que hombres de su físico, no demasiado atlético, no tienen demasiadas oportunidades. Sin embargo, y después de muchos años ascendiendo poco a poco, consiguió convertirse en una de las grandes estrellas de la compañía, apoyado por su gran uso del micrófono, y su personaje enfrentado a la autoridad.

Alguna vez, WWE se llenó los bolsillos de forma ingente con un personaje que se enfrentaba a la dirección de la compañía en grandes storylines, como fue el caso de Stone Cold Steve Austin. En la era de Internet, sin embargo, la forma de enfrentarse a la empresa no podía ser a través de storylines, sino de manera real. CM Punk odiaba profundamente a WWE, a su producto, sus decisiones y sus calendarios de trabajo, y pudo expresarlo en un par de ocasiones en pantalla, llegando a conectar con el público de una forma muy intensa.

A Punk no le gustaba WWE, pero, como ocurre con todos los líderes revolucionarios, ya sean políticos de izquierdas o líderes de sectas, le gustaba muchísimo el dinero y la fama. Tenía un gran ego; decía de sí mismo que era el mejor del mundo, y quería estar en los main events de WrestleMania. Cuando comenzó 2014, su posición estaba lejos de eso, y el ataque de Kane en Royal Rumble presagiaba un irrelevante match ante el Monstruo Rojo en el mayor evento del año. Además, entonces, comenzaba a implementarse la idea de WWE Network, y la salida de WWE del concepto de PPV, lo que le hacía temer por sus ingresos. Así, agotado por el duro calendario de la empresa, decidió tomarse un tiempo libre, y esta acabó despidiéndolo, si no me equivoco, mandándole un mensaje el día de su boda, o algo así.

Punk se enemistó profundamente con WWE, incluyendo graves denuncias cruzadas. Desde luego, el calendario de esta es muy perjudicial para la salud de un hombre, puesto que un luchador de su roster pelea en unos 180 combates anuales, y eso es una locura. Cualquier deportista de competición requiere de tiempos de descanso suficientes para que su físico recupere, y si estos no existen, su agotamiento va en aumento, así como su dolor, hasta que llega el día en el que no puede levantarse de la cama, pues le duelen todos los músculos y articulaciones del cuerpo. Eso le pasó a Punk, que además, siempre ha defendido sufrir en aquel momento una infección de estafilococos en su espalda que podría haber puesto fin a su vida, algo que no parece confirmarse por ningún lado. El caso es que el tío, agotado, amargado por el booking y preocupado por el dinero, se fue, y expresó durante mucho tiempo un gran odio hacia el wrestling.

A mí me gusta mucho la manera de luchar de CM Punk, pero como ser humano, en este tiempo, ha demostrado ser tremendamente desleal. Quiso luchar en MMA, y para hacerlo, ratificó los clásicos insultos que desde ese deporte se expresan hacia la lucha, definiéndola como algo infantil e irreal. Es más, cuando tuvo que pelear, hizo totalmente el ridículo, permitiendo que aparecieran los típicos comentarios en contra del wrestling: "mira lo que hace un luchador de WWE cuando pelea en UFC", que olvidan la carrera de Lesnar o Lashley.

Era obvio que Punk no está hecho para las MMA. Es un inútil en ese campo. Así pues, debía volver al wrestling para seguir ganando ese dinero que tanto le gusta. Él siempre defendió que estaba involucrado en muchos proyectos, pero todos eran tonterías sin valor, como un cómic de mierda (hay muchos luchadores en activo con cómics, y no definen su carrera a través de ellos). Fox lo fichó para presentar un programa sobre WWE, pero este acabó cancelado, pues su presencia no fue tan llamativa como se pretendía. Y, cuando AEW le ofreció un contrato, Punk se mostró humillante, publicando en redes que la oferta se había realizado a través de mensajes. Es un cabrito.

Pero estamos en 2021. AEW sigue creciendo, y sigue fichando leyendas de WWE. Es la nueva WCW, y como pasó con WCW, las leyendas de WWE se van a aprovechar de eso, sacándole todo el dinero que puedan. Así, Punk llega a AEW, y tiene su primer match en muchos años, ante un rival casi aleatorio: Darby Allen.

No es tan aleatorio: es un luchador muy pequeño, y muy fácil de manejar incluso para un tipo que lleva mil años sin luchar. Ya sabemos que Allin se ha convertido en el protegido de Sting, y estaría bien que esta lucha derivara en un match entre Punk y The Icon. Quizás no sería muy bueno, pero es un choque de leyendas sobre el papel increíble. Allin, aunque interpreta un personaje parecido al de su mentor, tiene el handicap de ser un ínfimo underdog. Por un motivo los personajes serios y monstruosos suelen ser gigantes: el personaje debe concordar con la forma de luchar, y no es el caso. Allin, incluso ganando, sale a paliza por match, así que su misticismo no es creíble, a no ser que se dirija a un público que no quiere creerse nada.

Y el problema que yo observo en el match entre Allin y Punk es similar al de ese personaje. Porque la lucha no es mala; Punk interpreta un rol técnico del que carece AEW, y lo hace bien ante un highflyer, rememorando los matches clásicos en RAW entre Bret Har y 123 Kid. La diferencia es que esto no es un match de RAW entre dos luchadores de plantilla que pelean todas las semanas. Es el combate más esperado de la última década, el del regreso de CM Punk, y se bookea como un combate semanal más. Así no se hacen las cosas.

Lo digo mil veces: esa es la gran diferencia entre el producto de Vince McMahon y su competencia: la consciencia sobre lo que se está contando, y sobre cómo contarlo, para ejercer en el público la reacción esperada. La gente ha venido al estadio en manada para ver un combate de CM Punk... y ve un combate de Darby Allin.

En el combate de regreso del luchador más añorado del mundo, hay que hacer otras cosas. Este debe demostrar que sigue siendo tan bueno como siempre; usar sus movimientos de marca; levantarse ante la adversidad ante un rival malvado y tramposo; y terminar ganando con la primera ejecución del GTS, el finisher soñado por todos los fans. Pero el combate se bookea como si fuera uno más; siendo Punk el goliat, y Darby el David que se repone sobre la diferencia de tamaño. Punk consigue usar el GTS, pero Darby cae fuera del ring, y esta es una clásica secuencia de match titular en la que el héroe debe aplicar su finisher para ganar varias veces. Pero esto no es un match titular, es el primer GTS en muchos años, y debía suponer un momento fantástico, no formar parte de una secuencia recurrente.

El público está un poco parado en la mayor parte del enfrentamiento, porque esperaba ver a Punk triunfar, y sólo lo ve usar movimientos de agarre físico. El final del encuentro mejora, con muchos intentos de GTS, y Darby escurriéndose de mil formas. Finalmente, el de Chicago se lleva la victoria con su mítico finisher, ahora sí, ante un público extasiado.

Puntuación: ***

sábado, 11 de septiembre de 2021

Daniel Bryan vs Roman Reigns, WWE Smackdown 30/04/2021


Recientemente, y tal y como era de esperar, Daniel Bryan hizo su debut en AEW. Lo hizo con su nombre clásico, Bryan Danielson, ese que le hizo famoso entre los fans del wrestling de calidad, y que tanto echábamos de menos. Una vez más, AEW da un paso adelante para generar interés por encima de una WWE pasiva que deja escapar a todas sus estrellas, en una situación que recuerda un poco a la guerra con WCW de los 90.

Vamos a recordar, pues, la última lucha que tuvo en la empresa de McMahon. En realidad, ya pretendía hacer tal cosa, porque quería ver todos los combates especiales por el Universal Championship de Roman Reigns, hasta encontrarse con Cena en SummerSlam. Lo aprovechamos doblemente.

Como sabemos, a Vince nunca le ha gustado mucho Bryan. Sin embargo, en la temporada previa a WrestleMania 37, recibió un push inesperado, metiéndose en la rivalidad principal del show, entre Edge y Reigns. Obviamente, el objetivo fue convencerle de quedarse en la empresa, pues su contrato finalizaba poco después del magno evento. Ya sabemos que WWE no tuvo éxito en eso, pues Daniel ahora está en AEW, aunque espero que no se trate de un contrato de exclusividad, y que pueda luchar en otras partes.

Y es que Bryan es el mejor. Lo era antes de llegar a WWE, y lo es ahora, más de una década después. Y por eso quiero verlo en el mayor número de situaciones posibles. El Bryan de WWE estaba un poco maniatado, no tanto por esa tontería que dicen algunos de que Vince no permite a los luchadores dar el 100%, sino porque las posibilidades de dar grandes combates ahí se limitan a los momentos de push. Es cierto que en el caso de Bryan estos momentos no han sido pocos, pero podrían haber sido muchos más con un bookeo acertado. En cualquier caso, AEW todavía no ha demostrado que sea mejor que WWE organizando combates de calidad (de hecho, es muy inferior, pero todas las incorporaciones que está haciendo pueden dar mucho juego).

Bryan disputa en Smackdown un último gran combate que demuestra esa calidad. Recuerda un poco a la última lucha en Smackdown que tuvo Kurt Angle ante el campeón del momento, Rey Mysterio, poco antes, precisamente, de debutar en TNA. En este caso, Bryan no se toma el match a la ligera por ser el último, sino que entra al ring como un loco, atacando con velocidad, muy stiff, e intentando conseguir una rendición rápida, consciente de la diferencia de fuerza existente entre él y su rival.

Dentro del kayfabe, está en juego, no sólo el Universal Title, sino también la carrera de Bryan en Smackdown. Y es interesante que esta regla se limite a Smackdown, y no a WWE: está claro que WWE todavía esperaba su renovación, en cuyo caso, habría acabado en RAW. Su gran acometida inicial, finalmente, es frenada por la fuerza sobrehumana de Reigns, que destroza al American Dragon con sus clotheslines.

Presenciamos, pues, una lucha de tipo David vs Goliat. Bryan intenta muchas cosas, pero acaba comiéndose Power Bombs asesinas. Roman lo tortura, pero, para su sorpresa, el barbudo pequeñajo no se rinde. Convierte un intento de Superplex en un gran Back Suplex desde el esquinero, y se dispone a romperle el brazo a Roman. Y es más, no ataca el izquierdo, como es norma en la disciplina, sino el derecho, precisamente, para evitar sus Spears, sus Superman Punchs, sus Clotheslines...

Ese dolor aumenta mucho cuando el medio samoano se lanza sobre él en ringside, y atraviesa las barricadas con su hombro derecho. Daniel está cerca de ganar en varias ocasiones, con paquetitos, y con Running Knee, sin éxito. Consigue aplicar su Yes! Lock en más de una ocasión, retorciendo especialmente el brazo del campeón, pero este tampoco se rinde. En algunos momentos, da la sensación de que la victoria puede ir de lado del retador, dada la intensidad de su llave, pero no hay suerte.  Posteriormente, Roman demuestra el poder de su brazo, y el poco éxito del castigo de Bryan, pegando muchos codazos, y aplicando varias Power Bombs, para terminar ganando con su llave de rendición, su Guillotina. Si bien Bryan bloquea su uso con el brazo derecho, legitimizando su trabajo sobre él, finalmente, Roman cambia de brazo y lo pone a dormir con el izquierdo.

La lucha es realmente buena. Quizás el selling de Roman es el problema. Salvo ese último movimiento, en el que se muestra incapaz de usar la Guillotina, hace lo que quiere con su brazo. Quizás hubiera sido mejor que Daniel atacara el brazo izquierdo, dado que Roman no pretendía ceñirse a la seriedad de este al luchar. Más allá de eso, es una gran lucha titular, con un hombre pequeño buscando maneras de ganar a través de su mayor conocimiento, y un hombre grande que viene de otro planeta.

Puntuación: ****

domingo, 5 de septiembre de 2021

The Midnight Express vs The Fantastics, NWA Worldwide 28/04/1988

 

Especial fallecimiento de Bobby Eaton

Recientemente, hemos hablado de los fallecimientos de Brazo de Plata, y de Paul Orndorff. Hoy, tenemos que lamentar una nueva muerte en la industria del wrestling, y aunque tenemos prisa por tratar otros temas relacionados con SummerSlam, TripleManía o el próximo All out, es necesario pararnos a charlar un rato sobre él, por respeto. Porque tampoco hablamos de ningún manco.

Hoy lamentamos el fallecimiento de Bobby Eaton, tras años con problemas de salud y problemas cardíacos. Contaba con 62 años de edad, y había perdido a su mujer semanas antes de su muerte. No será casualidad. En el blog, como siempre, a modo de recuerdo, comentamos un par de combates suyos.

Eaton pasará a la historia como uno de los miembros del Tag Team The Midnight Express. De hecho, toda su carrera está marcada por la lucha tag team: es su especialidad. Entre los 70 y principios de los 80, formó parte del roster de varios territorios, pero no fue hasta el 83 cuando entró en Midnight Express, un grupo manejado por el gran Jim Cornette, un tipo que, con su carácter odioso, hacía de los equipos que lideraba el objetivo del público. El team se convirtió en un dúo, en el que, en primera instancia, Eaton, ahora apodado "beautiful" Bobby Eaton, hacía pareja con Dennis Condrey. No sería hasta el año 1987 cuando se consolidó el Midnight Express más conocido, aquel formado por Eaton y 'Sweet' Stan Lane.

Entonces, ME ya estaba en las grandes ligas. En concreto, luchaban en Jim Crockett Promotions, que después se convertiría en WCW. Eaton y Lane se consolidaron con una enorme pareja que protagonizó algunas de las rivalidades Tag más interesantes de la historia del wrestling americano, así como combates estratosféricos. Sus rivales más sonados son los Rock & Roll Express, pero no debemos olvidarnos de The Fantastics, equipo formado por Bobby Fulton y Tommy Rogers. Con estos últimos, tuvieron luchas que son consideradas de 5 estrellas, alguna de las cuales vamos a comentar hoy. En el próximo post, hablaremos de los últimos años de Eaton en WCW, y comentaremos alguna lucha suya en esa etapa.

El combate que reviso en este post tuvo lugar el 28 de abril de 1988, en el programa Worldwide de la NWA. Este era un show de wrestling muy clásico, que empezó en 1975 y se mantuvo en antena hasta el fin de la WCW, en 2001, siendo, en ese momento, el programa de wrestling más longevo de la historia de la televisión americana.  Fue un invento de Jim Crockett Promotions que heredó el conjunto de la NWA y posteriormente la WCW bajo el imperio del monopolio de Ted Turner. Cuando yo conocí este programa, en la segunda mitad de la década de los 90, este era un show, no secundario, sino terciario, algo así como el actual Main Event de WWE: un show compuesto por luchas sueltas sin historia, que eran grabadas a mansalva en diferido, en un estudio y con público falso o gratuito. Porque, en esos momentos, WCW tenía programas más importantes, como Nitro y Thunder. Pero, en los 80, tenía mucha más relevancia, y en él ocurrieron luchas como la que hoy comentamos: un combate calificado con 5 estrellas por el Wrestling Observer Newsletter, en el que está en juego un título: el NWA United States Tag Team Title en manos de nuestros malvados protagonistas, los Midnight Express.

Sus rivales son The Fantástics, un equipo muy querido por el publico. La lucha es muy larga, y goza de un ambiente brutal durante toda su extensión. Por desgracia, esta se ve cortada en múltiples ocasiones por las pausas publicitarias constantes propias de la tele yanqui, que deja en pañales a Antena 3.

La lucha realmente es notable. No sé si es para 5 estrellas; en el momento de escribir esta línea, aún estoy pensando en la nota que le daré. En cualquier caso, es una lucha de buenos contra malos en la que los primeros demuestran ser muy superiores. Golpean y humillan a sus oponentes, con una forma de luchar muy estética, mientras que Lane y Eaton parecen no poder hacer nada. Cornette, fuera del ring, se vuelve loco mientras The Fantastics celebran su buen hacer.

Tommy Rogers utiliza una llave con las piernas muy eficaz, que aplica subiendo sobre los hombros del rival, y llevándolo a la lona. En uno de estos movimientos, el luchador que recibe la llave, que en este caso es nuestro amigo Eaton, mil veces humillado durante el match, lo sostiene sobre sus hombros, mientras recibe la ayuda de Lane que impulsa a Rogers contra las cuerdas, en forma de guillotina. Así, los rudos cambian el rumbo del combate, y pasan a dominar, dañando el cuello y la cabeza del técnico que ha sido víctima de sus trampas. En concreto, Lane, es bueno dando patadas en la cabeza.

El castigo de los rudos es constante, y sempiterno. El público aguanta muchos minutos, sin perder el interés del match, deseando que se de el Hot Tag. Este llega por fin tras un buen rato, después de un movimiento afortunado de Rogers. Fulton entra al ring como un ciclón, y sin embargo, cae como lo hizo su compañero, cuando Cornette entretiene al referee para que Lane le aplique de manera tramposa una nueva guillotina, esta vez sobre las vallas de ringside. El pobre Fulton se lleva incluso un violento raquetazo del malvado Cornette, que enciende aún más a las gradas.

Fulton, pues, es ahora el que recibe el constante y tedioso dominio de los Midnight. Acaba herido, y sangrando por la frente, lo que provoca las dudas del referee sobre su continuidad. Quiere finalizar el match y dar la victoria a los campeones, pero Rogers lo impide. Mientras el referee discute con Cornette, Rogers vuela con unas patadas de canguro desde la esquina, haciendo caer a Eaton de culo, lo que aprovecha Fulton para llevárselo con un paquetito. Con este truco tan bien realizado, los Fantastics se convierten en US Tag Team Champions, y el público se vuelve loco.

Esta es una gran lucha de estilo clásico tag. Es muy buena, está realizada casi a la perfección, aunque es cierto que es un estilo que hemos visto tantas veces en condiciones similares, que hoy en día, no resulta impactante. Muy buena, pero muy poco innovadora.

Puntuación: ****1/2

lunes, 30 de agosto de 2021

Chris Jericho vs MJF, AEW Dynamite 18/08/2021

En anteriores entregas, hemos comentado los 5 trabajos de Jericho, la aventura a la que MJF sometió al legendario luchador canadiense de AEW previo match frente a él. Hablamos en los últimos días de sus dos rivales más originales: Juventud Guerrera y Nick Gage. Así pues, no estaría completo el repaso si no revisáramos la lucha definitiva de la serie, la que mantiene frente a MJF en el programa del 18 de agosto de 2021 de Dynamite.

Ya hemos dicho que AEW está haciendo cosas muy interesantes. Quedan pocos días, de hecho, en el momento de escribir esto, para All Out, evento en el que debutará sobre el ring CM Punk, y en el que muchos esperan ver a Daniel Bryan. Pero hay una cosa que ni AEW ni en su día WCW han sido nunca capaces de igualar a WWE, que es el storytelling de combate. Hace unos días reflejábamos este talento de Vince McMahon y sus bookers, demostrado en la rivalidad entre Daniel Bryan, Edge y Roman Reigns, y la manera en la que una rendición durante los meses previos a WrestleMania, marcaba el main event del mayor evento del año. Pues bien, en AEW, después de que MJF haya obligado a Chris Jericho a luchar en 4 combates muy locos, estas 4 luchas no tienen una gran incidencia sobre el match final. Es cierto que MJF ataca el brazo Chris tras su lucha contra Wardlow, reflejando sus problemas ahí, pero realmente estos no se explicitan demasiado en la mayor parte de la serie. Ni Juvi, Ni Gage ni Wardlow parecen conocer la lesión, si es que puede considerarse tal.

La lucha es buena, eso sí. Pero es una lucha normal. Jericho debería haber llegado a ella agotado por esos 4 combates, lesionado por alguno de ellos, o herido, quizás por la lucha violenta ante Gage. Eso, además, podría haber servido para justificar su derrota. Pero llega como si nada, sin ningún problema aparente, más allá de su codera. Esta lucha puede verse sin haber visto nada de los 5 Trabajos de Jericho.

En sus primeros instantes, vemos un poco de brawl fuera del ring, con uso de las cámaras incluido, previo al comienzo del dominio del rudo. MJF aplica un buen trabajo sobre el brazo de Jericho durante todo el match. No es muy técnico, pero es constante, y nunca olvida su objetivo.

Jericho está viejo y gordo, pero consigue meter al público en el match, cuando aplica de forma correcta algunos movimientos clásicos aéreos, como el Lion Sault y la Hurracarrana. Sin embargo, MJF, que es un muy buen rudo, consigue sacarse palancas al brazo de la manga en cualquier situación. También copia sus Walls of Jericho, que los narradores nombran como Lion Timer, supongo que por derechos de autor.

MJF quiere pegar a Chris con su anillo, pero cuando la referee se lo quita, se lleva un golpe del canadiense con el bate. Jericho va a rematar con el Judas Effect, pero recuerda que está prohibido en este match, según la regla impuesta por su rival (es raro que le pegue con el bate, que está prohibido en cualquier match, pero no con el Judas Effect, siendo la ilegalidad similar). En la confusión, el rudo aprovecha para aplicarlo él, y atrapar a su oponente con una palanca que resulta definitiva. Jericho se rinde, y MJF gana.

Buena lucha en términos generales, y buen trabajo al brazo de MJF. En All Out, la carrera de Y2J estará en juego.

Puntuación: ***1/2

viernes, 27 de agosto de 2021

Chris Jericho vs Nick Gage, AEW Fight for the Fallen 2021


Recientemente, comentamos la lucha entre Chris Jericho y Juventud Guerrera que tuvo lugar en AEW hace unas semanas. Este match en el que dos antiguos rivales se encontraban en TNT 25 años después, formaba parte de los "5 trabajos de Jericho", el conjunto de tareas que propuso MJF a la leyenda canadiense antes de enfrentarse a él. Estos trabajos, que toman el nombre, estimo, por aquellos 12 de Hércules, a día de hoy, ya han finalizado. Han sido, finalmente, los siguientes:

1. Jericho vs Shawn Spears

2. Jericho vs Nick Gage

3. Jericho vs Juventud Guerrera

4. Jericho vs Wardlow

5. Jericho vs MJF

Es, pues, esta serie, una manera de MJF de convocar a Chris a la batalla en las condiciones más propicias para vencerle, tras mucho desgaste, y marcando las reglas. De estos 5 matches, a mí me gustaría ver, además de aquel que comentamos en el que se enfrentó Jericho a The Juice, el que mantuvo en Fight for the Fallen frente a Gage. Creo que es importante hacerlo, porque, como aquél, este es un match que nunca pensé ver en una empresa relevante, y por tanto, es una prueba más de que en AEW hay un espacio para la cultura del wrestling que en WWE, empresa que durante muchos años incluso prohibió ese término, tal y como recordó CM Punk hace poco, es imposible. 

AEW demostró esto mismo hace unos meses, al organizar un Exploding Barbed Wire Deathmach. Hoy, nos trae a uno de los hombres más locos y violentos de la primera década de este sigo, Nick Gage, un tipo que se hizo relativamente famoso en los buenos tiempos de la ultraviolenta CZW, y que se especializó en la lucha extrema, convirtiéndose en The King of the Deatchmatch

Gage no tiene pinta de luchador. Como todos los especialistas en este tipo de combates, parece un borracho que mataría a su madre por una cerveza. Pero, además de por su aspecto y por su estilo de combate violento, hay otro motivo por el que yo no esperaba verlo en televisión: es un delincuente; un ladrón de bancos que ha violado la justicia en varias ocasiones y que ha pasado 5 años en prisión por ello. 

Es, por eso, tan especial verlo aquí, enfrentarse a una estrella de rock como Jericho, que hace unos años despreciaba a todas las empresas de wrestling que no fueran WWE, y no les otorgaba el más mínimo valor. Cómo han cambiado las cosas. Tras salir de la cárcel, Gage encontró reacomodo en GCW, esa gran indy a la que debemos dedicarle un conjunto de artículos en breve, para volver al circuito y acabar en AEW, una empresa que demuestra que, en ella, todo es posible.

Aunque eso no quiere decir que el resultado sea un combate de gran calidad. De hecho, creo que ese es el problema hasta ahora de AEW: puede hacer muchas cosas guay, pero por ahora no tiene matches que realmente sean interesante arriba del ring. Esta pelea callejera, sin reglas, entre el pobre Jericho y el loco de Gage es una sucesión de ataques violentos usando objetos, sin demasiada historia, como en el género es habitual.

Pero hay un hecho en el match que ha llamado mucho la atención y que pasará a la historia como anécdota: Gage usó como arma, algo relativamente habitual en la lucha extrema, un cortador de pizza. Y justo cuando estaba cortando a Jericho con él, entró un anuncio de Domino's Pizza, en el que se usaba una herramienta similar. ¿Será casualidad?

Se ha montado un pequeño pollo con eso, e incluso la empresa pizzera ha tenido que salir a desmarcarse del asunto, hasta el punto de amenazar con eliminar su publicidad del producto. Ahora sabemos por qué tipos como Nick Gage no tienen oportunidades en el munso main stream. No obstante, sabemos que los aficionados al wrestling son buenos clientes de las empresas de comida basura, así que no creo que la amenaza de Domino's se cumpla.

Así pues, Gage tortura a Jericho con el cortador de pizzas y con los también habituales fluorescentes. Finalmente,a  pesar de su dominio, Chris le pega con un conjunto de cuatro focos, justo antes de aplicar el Judas Effect, y llevarse la victoria. No es un gran match, y desde luego no lo es por parte de Jericho, pero su imagen ensangrentada, tirado en el ring al terminar el combate, da fuerza a la historia y a la estrategia de MJF.

Puntuación: **3/4

miércoles, 25 de agosto de 2021

Edge vs Roman Reigns vs Daniel Bryan, WWE WrestleMania 37


Especial WrestleMania 37

Acabamos, al fin, el especial sobre WrestleMania 37 que comenzamos ya hace tiempo. Hoy, vamos a charlar sobre el Main Event de este evento, esa Triple Amenaza que enfrenta a Roman Reigns con Edge y Daniel Bryan, con el Campeonato Universal en juego.

Edge, después de su lesión, volvió para ganar el Royal Rumble 2021, y finalizar, en el transcurso de la batalla, con su rivalidad frente a Randy Orton, que marcó su regreso en 2020. Entonces, supimos que el main event de WrestleMania sería Roman Reigns vs Edge, lo que, sobre el papel, no suena mal, en tanto que son dos personajes muy poderosos, mas deja algunas dudas sobre el resultado arriba del ring.

Reigns se ha convertido en un monstruo. WWE se empeñó en imponerlo como un gran héroe, pero eso nunca funcionó, o no lo hizo al nivel que la gran estrella que la empresa requiere. Pero como rudo, puede sacar toda la potencia, la energía que lleva dentro y que ya demostró en sus tiempos como miembro de Shield. Por su parte, Edge es una gran leyenda, que lo ha hecho todo en su carrera. Sobre el papel, como digo, por nombres, no hay nada de malo en este combate, salvo el hecho de que no hay una gran historia entre ambos, y que es demasiado obvia la victoria de Reigns sobre la leyenda (una más). Así pues, era muy necesario meterle algo más a ese combate, y ese algo más es Daniel Bryan.

Me sorprendió mucho que WWE metiera a Bryan en el main event de WrestleMania. Es un luchador que, obviamente, no le interesa en absoluto a Vince, mas le viene bien tenerlo en su roster, sobre todo, para evitar que se vaya a otro sitio. Pero su contrato tocaba a su fin, así que se le intentó vender la idea de que habría cosas interesantes para él si se quedaba en la empresa. Es obvio, asimismo, que eso es mentira, y por eso, por ahora, no ha renovado, y no sería de extrañar que, el día menos pensado, apareciera en AEW, o, como él siempre ha dicho desear, volviera a luchar en México o Japón. Pero este intento de expresión falaz de amor nos regaló un main event muy apañado.

Main event marcado por el hecho de que Bryan hizo rendir a Roman en los programas previos, un hecho único en la historia, que yo recuerde. Roman se rindió cuando se le aplicaba un Yes! Lock, si bien, el referee (Edge) no lo vio, durante un combate por el Universal Championship en el que el barbudo estuvo involucrado gracias a ganar una Elimination Chamber. No he visto estas dos luchas, pero parecen tener nivel, por las notas que observo por ahí, para estar en el blog. El caso es que Bryan se merecía una oportunidad titular, y se le fue concedida, al introducirlo en el main event de WrestleMania, que pasaba a convertirse en una Triple Amenaza.

Como digo, esa rendición se convierte en un hecho importante dentro del storytelling que se desea transmitir durante el match. La pelea, en cualquier caso, empieza muy bien, pues, al ser una Triple Amenaza, no existe la descalificación, así que Roman aprovecha la presencia de su primo Jey Uso para atacar a todos con Superkicks. Se convierte en un arma poderosa, pues sus patadas llegan desde cualquier parte, y hacen mucho daño. Edge, no obstante, consigue sacarlo de la ecuación, al reventarlo contra los escalones de metal.

Esto es una Triple Amenaza, y en tanto que tal, muchas veces puede ser confundida con un conjunto de power moves sin demasiado criterio. Eso ocurre, por supuesto, pues todos tienen su momento para aplicar sus movimientos de marca. Esto no es lucha de arte y ensayo, pero es divertida, y a la gente presente, que se agradece mucho, le gusta. Creo que el público de WrestleMania 37 es más amable que en otras ocasiones; es de entender, después de tanto tiempo sin estar en un evento en vivo.

Como digo, después de esa rendición durante las semanas previas, la bestia Roman Reigns, que parecía invencible, ha demostrado una pequeña debilidad. Ahora es mucho más creíble que sea derrotado, así que podemos decir que WWE ha hecho un buen trabajo escribiendo esta historia. Bryan pisotea la cara de Roman con violencia, hasta marcársela legítimamente, y aplica su  candado, ante el clamor de Paul Heyman. Edge evita la rendición, pero no será la última oportunidad. Los grandes ataques continúan, por parte de los tres, produciendo momentos de gran interés, y gritos que dicen "This is Awesome", hasta que Edge coloca a Roman en un nuevo Crossface, ayudándose del metal que se ha desprendido de una silla. Roman no aguanta tanto dolor, y está a punto de rendirse, más su mano es frenada por Daniel, que no le permite ser derrotado. Lejos de eso, apoya la llave del canadiense, aplicando, por su parte, el Yes! Lock. El castigo es tremendo, pero se termina cuando Bryan y Edge se pelean entre ellos. Daniel busca la Running Knee, pero se traga un Spear. Y lo mismo le pasa a Roman cuando busca un Superman Punch.

Edge, desesperado tras no poder vencer a ninguno de sus rivales con su Spear, va a por sillas. Pretende destrozar a ambos, poniendo sus cabezas sobre una silla, y golpeándolos con otra silla. Lo ejecuta correctamente en el caso de Daniel, mas Jey Uso evita que haga lo propio con su primo. Aunque Uso es apalizado, permite a Roman acabar con Edge. Le pega un sillazo tal y como el que él debía recibir, y de esa manera, se lleva la batalla, al colocar el cadáver de Edge sobre el de Bryan, y cubrir a ambos.

Como digo, en muchas ocasiones, esta batalla es un compendio de ataques de poder, lo que es muy divertido, pero no muy virtuoso. No obstante, es obvio, aquí, que cada uno tenía una estrategia, y todos la usan para ganar: Bryan tenía sus Crossfaces, que ya habían demostrado su poder para derrotar al campeón; Edge tenía sus sillas y Roman tenía a su primo. La familia resulta, finalmente, ser lo más poderoso.

Puntuación: ****

sábado, 21 de agosto de 2021

Asuka vs Rhea Ripley, WWE WrestleMania 37

Especial WrestleMania 37

Ya se ha confirmado el regreso de CM Punk al mundo del wrestling, de la mano de AEW, como era de esperar, que es el sitio donde, aparentemente, pasan todas las cosas buenas últimamente. En tanto que esta noche tiene lugar SummerSlam 2021, y no sabemos si WWE intentará contrarrestar esto de alguna manera, y que hace unos días se llevó a cabo TripleManía, con la aparición de Ric Flair, la verdad es que estoy empezando a interesarme de nuevo en el wrestling. Quizás eso me lleve a publicar con un ritmo similar al que alguna vez tuve.

Una de las cosas que tengo que hacer es terminar de repasar WrestleMania, en tanto que cometí el error de empeñarme en revisarlo entero. Sólo nos queda un par de luchas, así que no tardaremos mucho: hoy hablamos del Campeonato Femenino de RAW; Asuka defiende ante Rhea Ripley.

Parece que a Vince le gusta el trabajo de Rhea. Desde luego, es una tipa grande y con personalidad; es un campeón plausible, si bien es cierto que deja algunas dudas luchando. En WrestleMania 36, estuvo en la lucha que a mí me gustó más del evento, la que mantuvo con Charlotte Flair, así que, en cierto sentido, se merece una nueva oportunidad. 

Asuka era campeona, y vencía con gran superiorirdad a sus rivales en RAW. A veces, incluso, con demasiada violencia. Con Charlotte fuera por COVID; Rhea se convirtió en el plan B de WWE, y por eso, retó a la japonesa por su campeonato. Esta aceptó la propuesta, y eso nos lleva a la lucha definitiva en WrestleMania. 

En varias promos, así como en la firma de contratos, Rhea recordó su brutalidad, y aseguró que le llevaría a la victoria. Y así es, pues domina el match por completo, gracias a esa obvia superioridad física. Ataca mucho la espalda de su oponente, que, no obstante, y en tanto que es una crack, saca palancas de todas partes, ya sea a la pierna o al brazo, o ya sea el Asuka Lock. Eso no es suficiente ante la bestia, que sigue desgastando a su rival, incluyendo un Superplex bastante fuerte. Tras esa serie de ataques poderosos a la espalda, Ripley se lleva la victoria gracias a su Riptide.

La lucha no está mal; tiene bastante sentido en su lógica, pero no parece muy especial; está claro que a la rivalidad le faltaba historia, y eso se nota en la lucha, que es muy estándar, y basada en el trabajo en la espalda de Rhea, y en las llaves salidas de la nada de Asuka, sin más.

Puntuación: ***1/4

viernes, 20 de agosto de 2021

Apollo Crews vs Big E, WWE WrestleMania 37


Especial WrestleMania 37

Se acerca SummerSlam 2021. Cosas interesantes ocurrirán estos días. Mientras, por un lado, AEW parece planear los fichajes de CM Punk y Daniel Bryan, que le convertirían en un producto de gran interés, WWE despide a gente importante como Braun Strowman y Bray Wyatt, para traer de vuelta a John Cena, Edge y Goldberg, y quién sabe si The Rock. Para seguir todos estos eventos, tengo que ponerme al día con algunas de las cosas pendientes que tengo de ambas empresas. Voy a terminar de repasar las luchas de WrestleMania 37 que faltan en el blog, así como otros combates importantes en los últimos meses, antes de mirar esa gran fiesta del verano en WWE.

Continúo con la noche 2 de WM 37. La siguiente pelea en la lista es la que mantuvieron Apollo Crews y Big E por el Intercontinental Championship. Quizás esta es una de las luchas de WrestleMania que generan menos interés, y sin embargo, creo que WWE la vendió bien, por un lado, por tener como campeón a un luchador local, Big E, que es oriundo de Florida, el lugar en el que se celebra el evento; y por otro, por la evolución del personaje heel, Apollo, que, por primera vez en muchos años, parece tener un poco de personalidad.

Porque Apollo lleva muchos años siendo el típico luchador aéreo, de gran capacidad física, pero sin el más mínimo carisma; sin ninguna conexión con el público, en tanto que las habilidades físicas, si bien pueden ser muy entretenidas arriba del ring, no son suficientes como para atraer a las masas y llevarles a amar o a odiar a un hombre. El personaje está muy por encima de las habilidades, a este respecto, nos guste o no.

Tras ganar el Campeonato Intercontinental, Big E fue atacado por Crews, que ahora interpreta a un guerrero nigeriano, un hombre cuyos ancestros proceden de ese peligroso y tribal país, y que representa sus colores, en base a cuatro tópicos baratos. Esto es, WWE ha recurrido a su técnica de hace 30 años, de conformar un personaje a partir de unos pocos estereotipos trasnochados sobre una nacionalidad. Es una tontería, pero funciona. Siempre ha funcionado, y lo sigue haciendo. Los estereotipos siempre hacen gracia.

Apollo reta a Big E a un Nigerian Drum Fight, un street fight que incluye tambores verdes y un gon, que son las cosas que Vince McMahon ha debido encontrar sobre Nigeria en las ofertas de Amazon. Durante la rivalidad, el rudo atacó de forma muy violenta al técnico, haciéndole caer las escalinatas metálicas encima, un golpe que no fue tal, ya que se realizó gracias a los típicos juegos de cámaras de WWE en tiempos de pandemia, pero que, dentro de la storyline, llevó al campeón al hospital. Ahora, en WrestleMania, los dos se enfrentan en una correcta lucha violenta, en la que usan esos mismos escalones de forma acertada, así como los palos de kendo.

Y poco más. Estamos en la casa de Big E, y eso, sumado a las ganas que el público tenía de ver wrestling en directo, hace que el ambiente del match sea bueno. No obstante, este dura poco. Big E aplica un Big Ending, y cuando va a cubrir a su oponente, es atacado por el enorme Babatunde, un luchador al que pudimos ver en RAW Underground, y que ahora interpreta al Commander Azzez, el lacayo de Apollo. Un rudo estereotipado + un mánager gigante, es una suma que ha funcionado en WWE desde hace milenios. Es una lástima que a Vince no se le haya ocurrido un formato nuevo en todo lo que llevamos de siglo. Apollo gana, y es campeón IC.

Puntuación: **3/4

jueves, 19 de agosto de 2021

Juventud Guerrera vs Chris Jericho, Mask vs Title Match, WCW SuperBrawl VIII


Hace unos días, comentaba yo en el blog la lucha que mantuvieron Juventud Guerrera y Chris Jericho recientemente en AEW. Me pareció menester, pues, y en tanto que esto es un blog de historia del wrestling, hablar de la lucha que mantuvieron 23 años antes, en WCW SuperBrawl VIII, en la que Chris le quitó la máscara a Juvi. ¿Qué menos?

Es obvio que el match que han mantenido hace poco tenía ciertas reminiscencias con respecto a sus rivalidades en la clásica división crucero de WCW. Entonces, en 1998, no sólo se jugaron el título de esa división, en manos del canadiense, sino también la máscara del mexicano.

Todos sabemos que una máscara en México vale oro. Lo vale, literalmente, en tanto que, cuando un luchador es desenmascarado, recibe mucho dinero por ello. En WCW, sin embargo, mandaba gente de televisión, a la que no le interesaba el honor ni el deporte; sólo la audiencia. Muchos luchadores mexicanos, como Juvi, Psicosis y Rey Mysterio, fueron destapados, por simple booking, en luchas no muy relevantes. Esta, la que mantiene Chris y Juventud, es de mitad de cartelera; no es una lucha de apuestas tal y como la conciben en México, pero, al menos, es una buena lucha.

Una lucha que, en comparativa con la de 2021, demuestra la importancia de la juventud en un luchador aéreo. Los movimientos de ambos son mucho más espectaculares. Hay mucha técnica, counters y movimientos rápidos. Chris quiere liarla, rompiendo la máscara de su rival, pero no lo consigue. El enmascarado se impone con sus mejores movimientos, y está a punto de ganar con el Juvi Driver. Jericho se agarra a la cuerda in extremis, pero la campana suena, por un error de los jueces. El referee indica que la lucha no ha acabado, pero Juvi está celebrando. Esto lo aprovecha Chris para atacarle en la pierna por sorpresa. De aquí saca ventaja, pues, cuando el mexicano aplica una Frankesteiner, se resiente de la extremidad, y cuando el canadiense lo agarra con un Lion Timer, el match se acaba rápido. 

Victoria para Chris en un buen combate. Juventud no quiere quitarse la máscara, pero finalmente lo hace, mostrando el rostro que hoy todos conocemos, y dejando ver más claramente la inmensa cabellera de la que hace gala.

Puntuación: ***1/2