martes, 4 de febrero de 2020

AJ Styles vs Jeff Jarrett, NWA-TNA PPV #33




En el anterior artículo dedicado a los 70 años de existencia de la NWA, señalamos que, durante los años 90, tanto WCW como ECW utilizaron a la NWA mientras les fue útil, para acabar rompiendo relaciones con la organización, de una forma, casi, humillante. Sin embargo, al comenzar la siguiente década, y el siguiente siglo, ambas empresas habían quebrado, mientras que la NWA seguía ahí.

WWE compró WCW y ECW, pero no tenía sitio para todos los trabajadores de ambas empresas. Y tampoco todos querían trabajar en la WWE. Así, surgieron varias alternativas, llevadas a cabo por aquellos que querían cubrir el hueco dejado por las promotras difuntas.

Así, nació la WWA (World Wrestling All-Stars), empresa que realizó varios tours por Australia, Reino Unido y Europa, y tres PPVs. Sirvió de puente entre WCW y TNA, pues mezclo algunas de las grandes estrellas que quedaron libres tras el fin de la primera, y algunos de los jóvenes perfiles que destacarían en la segunda. Así, en sus eventos estuvieron hombres como Lex Luger, Jeff Jarrett, Sting, Psicosis, Juventud Guerrera, Los Steiners, Sabu, AJ Styles, Christopher Daniels o Low Ki. 

TNA nació antes de que esta empresa cerrara. Durante un tiempo, compartieron talento. Jeff Jarrett, uno de los fundadores, era miembro del roster de la WWA. Él llegó a un acuerdo con NWA, y, a partir de junio de 2002, comenzaron a emitirse PPVs semanales bajo las siglas NWA-TNA.

Entonces, la empresa no tenía un acuerdo televisivo. Sin embargo, realizar el programa semanal, que funcionaba como tal, con sus promos y sus segmentos, bajo el modelo PPV, permitía llevar a cabo los shows, financiados, directamente, por los seguidores que lo compraban. Era una especie de proto-Twitch, o proto-patreon, aunque la pasta había que ponerla por adelantado. 


En 2002, Dan Severn volvió a proclamarse Campeón Mundial, pero se negó a aparecer en TNA. Por tanto, el título le fue arrebatado. En el primer PPV de la historia de NWA-TNA, otro peleador de MMA, Ken Shamrock, se convirtió en NWA World Heavyweight Champion, título que le fue arrebatado por Ron Killings, hoy conocido como R-Truth en WWE, y que es, por tanto, el primer campeón negro de la historia de la NWA. Para finales de 2002, Jeff Jarrett obtuvo el título, el primero de muchos, lo que le convierte en el principal campeón de esta época.

En 2003, tanto ese título como los Campeonatos en parejas de la NWA se unificaron con los de WWA. Jarrett venció al Campeón Mundial de la WWA, Sting, que llegaría a ser una de las grandes estrellas de TNA. Los títulos de la NWA se defendieron varias veces en la WWA, antes de la desaparición de esta empresa.

Parece normal que Severn se negara a defender su título en TNA. La tónica del campeonato varió mucho, aunque también es posible que no quisiera perder frente a Shamrock. En TNA había dos rumbos creativos que chocaban un poco: por un lado, el de Jerry Jarrett, padre de Jeff, que quería llevar la empresa de una forma más clásica, pero con un nivel de acción arriba del ring mucho más moderno; y por otro, el de Vince Russo, que llegó a la empresa por mano de Jeff, y que quería poner especial incidencia en las promos, los segmentos y los storylines. Así, había muchos cambios titulares, propios de la época, lo que chocaba directamente con el estilo de la NWA.

Los Jarrett no tenían suficiente dinero como para competir con WWE y retener a sus luchadores, así que vendieron sus acciones a Panda Energy. Esta empresa, hizo evolucionar a TNA, la llevó a televisión, y acabó creando sus propios títulos, olvidándose de la NWA, que, una vez más, había sido utilizada mientras había resultado de utilidad, para ser despreciada posteriormente. La separación se produjo en el año 2007.

A partir de ahí, comienzan los 10 años previos a la llegada de Billy Corgan a la NWA. Estos 10 años pueden considerarse los más anodinos para la marca, pues se hundió, en territorios muy poco importantes. En 2007, se proclamó campeón por primera vez Adam Pearce, al que podemos considerar el principal campeón de estos últimos años, aunque ya hablaremos de él en el artículo dedicado a la década de 2010.

Adam Pearce se proclamó campeón tras ganar un torneo, en el que, en realidad, fue eliminado en semifinales, nada más y nada menos que por Bryan Danielson. Sin embargo, el American Dragon no pudo luchar en la final, por un desprendimiento de retina, así que fue Pearce el participante, y el ganador final. Eso indica que, probablemente, Bryan Danielson era el elegido para ser el Campeón de la NWA. Habría sido genial, porque Danielson es el hombre perfecto para recorrer el mundo, defendiendo la correa, de nuevo, con un estilo shoot.

Hay que destacar también el año y medio en el que la correa estuvo en México. Blue Demon Jr fundó la NWA México, y se hizo con el campeonato. Por desgracia, la aventura empresarial no dio buenos resultados, y la empresa acabó cerrando.

Como digo, dentro de esta primera década del Siglo XXI, en lo relativo a la NWA, tenemos que destacar esos años en los que los títulos de La Alianza fueron manejados por TNA. Jarrett fue el máximo campeón, con 6 reinados, y un total de 1005 días portando el campeonato, lo que le coloca en el octavo lugar dentro del ranking de campeones en la historia de la NWA. Vamos a ver una lucha suya por este título.

Jarrett tuvo en AJ Styles a un gran rival por el campeonato. El aún joven AJ se enfrentó muchas veces a él, y acabó siendo también 3 veces Campeón Mundial de la NWA. Una lucha entre ambos, por tanto, me pareció una buena elección para este especial. En concreto, he elegido una que tuvieron en el PPV semanal número 33 de la NWA-TNA, en febrero de 2003.

Elegí esta lucha, porque Meltzer le puso una muy buena nota, aunque ya deberíamos saber, a estas alturas, que eso no es indicativo de nada. Además, el WON ratea muy pocos combates, de cuantos se dan en realidad. En cualquier caso, este no es un mal producto, y sirve para ilustrar esta nueva fase que estaba viviendo la NWA.

La lucha está llena de acción, con buenos ataques por parte de ambos, sin mucho sentido, por lo general. Se nota la mano de Vince Russo, porque el combate es muy propio de la Era Attitude de la WWE: hay muchísimas interferencias, y referees golpeados. Eso sí, el público tiene un nivel de agitación muy alto.

En principio, AJ es el rudo, y recibe la ayuda de varias leyendas y tag teams. Por suerte para Jarrett, llegan en su ayuda Dusty Rhodes y Vader, nada más y nada menos, que despejan la zona para él. La batalla continúa con finishers por parte de ambos, que no resultan definitivos, y con accidentes en los que los referees salen mal parados. AJ vuelve a recibir ayuda, aprovechando esos momentos, pero, finalmente, la rechaza. Sin embargo, se despista, y acaba siendo derrotado por Jeff. que retiene el cinturón.

La lucha no es mala, es entretenida, pero es un combate lleno de locuras made in Vince Russo, que no dejan mucho hueco al wrestling de calidad.

Puntuación: ***1/4

domingo, 2 de febrero de 2020

Dan Severn vs Steven Regal, NWA 50 Aniversario



  
  
Durante el año pasado, y tras la reforma de la NWA y la celebración de sus 70 años de vida, revisamos varias luchas de la historia de la marca. Entre otras cosas, comenzamos un especial, en el que comentamos un combate por el NWA World Heavyweight Championship por década, nombrando al campeón más representativo de cada época. Así, hablamos de Los 50, Los 60, Los 70 y Los 80, o sea, los años de bonanza para la NWA. Hoy, llegamos a Los 90, tiempos de decadencia para la alianza.
  
La década comienza con el Título de la NWA como campeonato principal de la WCW, aunque estos no eran los planes de la empresa de Turner. No pasó mucho tiempo hasta que, en dicha empresa, el campeonato cambió de nombre. La correa había dejado de ser la de los 10 pounds of gold muchos años atras, y ahora, era la denominación del portador lo que variaba. La empresa empezó a nombrar a su campeón, que era Ric Flair, como WCW World Heavyweight Champion.
  
En este sentido, hay que decir que aquí entran en conflicto los campeonatos reconocidos por la WCW, los campeonatos reconocidos por WWE, y los reconocidos por la NWA. El caso es que Flair, reconocido por WCW como su campeón, y por la NWA como su campeón, abandonó su empresa, y apareció en la WWF, con la correa, proclamándose como el verdadero campeón. Pronto, ganaría el Royal Rumble 1992, y se convertiría también en el Campeón de la empresa de Vince McMahon. Vaya carrera.
  
Con la salida del Nature Boy, los campeonatos de WCW y NWA quedaron vacantes, y empezaron a diferenciarse de verdad. Masa Chono se convirtió en NWA World Heavyweight Champion en Japón, como trofeo por ganar el G1 Climax, derrotando a Rick Rude en la final. Mientras tanto, el Campeonato Mundial de WCW seguía su propio curso. La correa de la NWA no volvió a USA hasta febrero del 93, en manos de Barry Windham. Ric Flair, ya de vuelta a WCW, volvió a ganarla. Entonces, se rompió la relación entre las dos entidades. Ric Flair pasó a ser considerado como el primer WCW International World Heavyweight Champion, y el último NWA World Heavyweight Champion, en la etapa WCW.
  
En 1994, la NWA, como alianza, se reformó. Pero WWF y WCW habían fagocitado los territorios americanos, y ya no existían empresas con verdadero dominio dentro de cada región. Las dos grandes compañías a nivel nacional llevaban a cabo funciones por todo el país.
  
La nueva NWA estaba formada por lo que ahora llamaríamos promotoras independientes. Este es un término que no se había aplicado hasta entonces, puesto que el trabajo de promoción de eventos en vivo no se ceñía a términos de grandes corporaciones, pero, sin duda, WWE se convirtió en una gran corporación, y WCW lo era, en tanto que pertenecía a Turner. Entonces, cualquier empresa de wrestling fuera de ese ámbito, a partir de los 90, se puede considerar independiente.

Aún bajo su alianza con WCW, NWA había exigido que el campeón defendiera el campeonato en el resto de territorios de la alianza, algo que en esa empresa no querían aceptar, puesto que no querían tener a grandes estrellas como Ric Flair, luchando en ínfimas funciones de promotoras, como CWA o ECW. Ese fue uno de los motivos que provocaron el cisma entre ambas entidades. Ahora, ese tipo de empresas, eran las más importantes dentro de la alianza.
  
En el año 1994, los Ten pounds of Gold volvieron a la cancha de juego. Entonces, el presidente de la Alianza era Denis Coraluzzo, dueño de CWA de New Jersey, un hombre que apenas llegaba a juntar unas pocas decenas de aficionados en sus funciones. Por contra, la ECW de Philadelphia, aún Eastern Championship Wrestling, cada vez tenía más éxito, lo que provocó la envidia del resto de promotores, así como algunas acciones en su contra que podrían considerarse bastante indecentes.
  
Pero Coraluzzo necesitaba a ECW, y quiso beneficiarse de su fama, mientras que Paul Heyman, director de esta promotora, veía a la NWA como un peso muerto al que no necesitaba. Así, todo confluyó para que el 27 de agosto, tras un año sin campeón, ECW organizara un torneo para determinar al nuevo portador de la correa. Shane Douglas se proclamó ganador, pero, acto seguido, tiró el cinturón, y dijo que no quería ser campeón de una empresa que había muerto hace 7 años. Así, sacó una nueva correa, la del ECW World Heavyweight Championship. La empresa empezó a llamarse, desde entonces, Extreme Championship Wrestling. La historia sobre esta empresa se separa, pues, de la de la NWA.
  
Porque Coraluzzo no tenía ni idea de que eso iba a pasar. De hecho, tras el gran segmento de Douglas, Heyman, conocido por todos como un gran mentiroso, aún convenció a Coraluzzo de que todo había sido un ángulo, que Douglass seguía siendo campeón de la NWA, y que perdería el campeonato ante uno de los chicos de Coraluzzo. Obviamente, no fue así.
  
Así continúa la errática historia de la NWA. Tras vender la WCW, Jim Crockett tuvo que cumplir una clausula de no competencia de 5 años, pero, para mediados de los 90, ya había vuelto al ruedo, ganando, de nuevo, poder sobre el campeonato. Asimismo, Jim Cornette llevó su empresa, Smokey Montain Wrestling, a la alianza. En febrero del 95, se proclamó campeón a una gran estrella de UFC, Dan Severn, quien tuvo la correa durante 4 años, y volvió a darle cierta entidad, a defenderla en combates de estilo shoot, y a recorrer el mundo, pues la NWA tenía miembros en Puerto Rico, Japón e Inglaterra.  
  
En 1998, la NWA volvió al mainstream, con un pequeño storyline, en el que Severn y otros luchadores, invadían la WWF. Si alguien mira los programas de RAW de ese año, verá que siempre había una luchita de Severn. Pero eran tiempos de la Attitude Era; estaban pasando cosas muy llamativas en WWF, y el estilo de Severn no se adaptaba a eso, y no le interesaba a la gente. Por tanto, no duró mucho.
  
Así, durante esos 4 años de reinado, Severn devolvió un poco de seriedad al Campeonato de la NWA, aunque no le devolvió la trascendencia. Hoy, vamos a comentar una lucha suya en el show de 50 aniversario, en la que defiende el título ante el gran William Regal, entonces conocido como Steven Regal. El show que celebra los 50 años de existencia de una de las entidades más importantes de esta industria, ni siquiera se grabó, y apenas junta a 500 personas entre el público, entre las que hay borrachos que no paran de trolear el combate. No obstante, este es muy bueno, de estilo shoot, entre dos muy buenos luchadores.
  
  Son unos 30 minutos, o quizás un poco menos, de llaves y contrallaves, con un estilo más duro que bonito. Es muy realista, y no tan entretenido para el público de la época que sigue a la NWO o al Undertaker. Pocas veces los luchadores se levantan, y, cuando lo hacen, es para pegar muy fuerte. Regal usa Oppercuts, para continuar con sus headlocks y su STF.
  
Severn, luchador en activo de MMA, ganador de múltiples combates en UFC, demuestra su superioridad en este campo, y acaba rindiendo a Regal. Buena lucha, muy realista, enmarcada en un ámbito decadente un poco triste.
  
  Puntuación: ****1/4

viernes, 31 de enero de 2020

DIY vs Moustache Mountain, WWE Worlds Collide: NXT vs NXT UK



Hemos estado viendo luchas de WWE Worlds Collide: NXT vs NXT UK, show de WWE previo a Royal Rumble, en el que lo mejor de NXT se enfrentó a lo mejor de NXT UK, como el nombre indica. Tras ver la lucha entre Undisputed Era e Imperium, vamos a echarle un ojo al enfrentamiento entre los tag teams más importantes de cada marca, DIY (Johnny Gargano y Tommaso Ciampa) y Moustache Mountain (Tyler Bate y Tret Seven).

Son 4 hombres muy chiquititos, pero fuertes. Son de lo mejor de sus marcas, tanto en equipo como individualmente, así que tienen caché, han tenido batallas muy importantes en WWE. Y son algunos de los principales responsables de convertir NXT en un campo de spotfests.

Pero yo no diría que la lucha que mantienen los dos equipos en Worlds Collide es un spotfest como tal, aunque tiene sus momentos de reiterados "ohs" entre el público. Por lo general, es una lucha respetuosa entre dos equipos de babyfaces, muy igualados, que mantienen muchos intercambios chulos en los que demuestran esta igualdad. No obstante, estos intercambios parecen tan coreografiados, tan ensayados, que no acaban de dar como resultado un combate demasiado natural. 

Aparte de algún momento de dominio muy tranquilo por parte de uno u otro equipo, hay muchos de esos momentos que quedan muy bien, pero que parecen muy preparados, en los que se tira de simetría: cuando un luchador esquiva a un contrincante y su rival hace lo propio, o cuando los DIY consiguen, a la vez, poner a sus rivales en Crossface, pero los dos ingleses se rehacen al mismo tiempo, y usan el mismo ataque como respuesta. Ese tipo de cosas son divertidas, pero pasan muchas veces en el combate, lo que no es muy realista.  

Creo que la lucha tiene sus cosas buenas, pero da la espalda a la búsqueda de la verosimilitud de manera muy deliberada. Los DIY se llevan la victoria, como era de esperar.

Puntuación: ***

The Undisputed Era vs Imperium, WWE Worlds Collide: NXT vs NXT UK



En 2020, WWE no realizó un evento Takeover de NXT ligado a Royal Rumble, puesto que habrá uno a mediados de febrero, en Portland, Oregon. En su lugar, ofreció algo distinto, un Worlds Collide con choques de ensueño entre los luchadores de NXT y los de NXT UK.

Worlds Collide son eventos que está llevando a cabo la empresa en los WrestleMania Axxess y Royal Rumble Axes, esas ferias que los fans visitan los días previos a sus shows más importantes. En Worlds collide, los aficionados que pagaran un plus en esas visitas, podían presenciar luchas aleatorias entre luchadores de NXT, NXT UK y 205 Live.

En este caso, 205 Live ha desaparecido de la ecuación, pues ha perdido la categoría de marca propia que nunca debió tener. NXT y NXT UK chocan frontalmente, y evento se convierte en un show completo y singular, ubicado en una noche única. Pero, además, los enfrentamientos son entre lo mejor de cada casa. Destacan los combates entre los tags DIY y Moustache Mountain, y entre los stables Undisputed Era e Imperium. Es esta última la lucha que comentamos hoy.

Ya hablamos hace poco del ataque sufrido por Walter tras su lucha titular en Takeover: Blackpool 2. Con él, Unidsputed Era declaraba la guerra contra Imperium, la versión WWE del Ringkampf. Una guerra forzada, sólo para justificar este evento, pero ahí está. El resultado es un buen combate.

Un combate que ha gustado mucho a los amantes de Undisputed Era, y su estilo. Por eso, pensé que sería un spotfest, pero no es así, se trata de una lucha muy seria. La cosa empieza mal, pero ese problema se suma a la historia que se cuenta.

El caso es que, tras unos minutos de lucha, Alexander Wolfe queda legítimamente KO, o eso parece. La cosa ocurre después de una doble patada de Fish y O'reilly. Estos lo cubren, y el referee tiene que fingir que Wolfe ha levantado el hombro, para no acabar el combate. En realidad, Wolfe no se mueve, y tiene que ser retirado por los servicios médicos de la empresa. Tanto el referee como los servicios de ayuda reaccionan rápidamente, para atender la urgencia, de la que no ha transcendido nada, así que supongo que no ha sido grave.

La lucha continúa. Hay momentos de dominio de un equipo, con hot tag por parte del otro, y viceversa. Los turnos de Walter son impresionantes: machaca a sus rivales, y queda como un animal. Strong intenta hacerle frente, pero el austriaco resulta demasiado poderoso. Hay que librarse de él. 

Los americanos consiguen destruirlo, lanzándolo con un gran golpe contra las mesas de comentaristas. De esta manera, Marcel Barthel y Fabian Aichner se quedan solos frente a cuatro hombres. Están en problemas.

Pero el grupo más dominante de NXT no se conforma con un "4 vs 2". Quieren luchar todos contra uno. Así, mantienen KO fuera del ring a Aichner, mientras atacan con violencia a Marcel. Este resiste como un desgraciado, a espera de recibir refuerzos. Fabian consigue salvarlo en un par de ocasiones, pero el peligro persiste. Entonces, vuelve Walter. 

Walter entra al ring como un loco y acaba con todo el mundo. Hay vuelos por parte de sus compañeros, que, así, mantienen fuera a los Undisputed, mientras Walter acaba con  con sus rivales a base de Power Bombs. Victoria para los europeos.

Gran lucha, con una gran historia, con ciertas reminiscencias a las luchas tag clásicas de la escuela AJPW y NOAH. Se nota que Walter ha tenido un papel muy importante en la escritura de esta pelea.

Puntuación: ****1/4

miércoles, 29 de enero de 2020

30 women Royal Rumble Match, WWE Royal Rumble 2020



Por tercer año consecutivo, WWE nos ofrece un Royal Rumble Match femenino. Sasha Banks es baja por lesión, y Ronda Rousey no se deja ver por ahora. Aún así, podemos ver una batalla bastante buena, en la que se trabajan varias historias interesantes.

Las luchadoras que abren el combate son Alexa Bliss y Bianca Belair, de NXT. Las dos hacen un gran trabajo, y aguantan mucho tiempo. Belair supera el record de eliminaciones en un Rumble femenino, e interactúa muy bien con la pequeña rubita, que se agarra varias veces a su coleta para no ser eliminada.

Tenemos las apariciones sorpresa de Molly Holly, con el personaje de Mighty Molly, y de la bella Kelly Kelly, que vuelve loco a Jerry Lawler. También tenemos a varias parejas en la batalla, como la que forman Bliss y Cross, o la de Mandy Rose y Sonya Deville

Desde que Heyman y Prichard (en sustitución de Bischoff), se encargan de la creatividad de Raw y Smackdown, hay historias secundarias que, pueden ser más o menos buenas, pero que ayudan a reforzar los personajes. Dos de esas historias tienen consecuencias en este Rumble, lo que siempre es interesante. Una de ellas es el triángulo amoroso que forma la hermosa Mandy Rose con el gordito Otis, y con su compañera, Sonya Deville, que es lesbiana y, aunque eso no se haya usado en la historia, parece obviamente molesta por el coqueteo de la rubita con el entrañable obeso.

Me gusta que exista este tipo de historias. Cosas que atraen al público a ver un programa de televisión, y que ni siquiera van a tener consecuencias en PPV. El tipo de cosas que McMahon nunca trabaja.

Varias veces, Rose cae fuera del ring, pero ahí está Otts para evitar que sea eliminada. Hasta que, por error, es Deville quien la echa fuera. Otis la sostiene en sus brazos, pero Deville les cae encima, impulsada por otra luchadora. Las dos pierden, y siguen cimentando esta historia.

También se ven las caras Lana, que entra diciendo que es la mayor estrella de la historia, y Liv Morgan, que están metidas en esa larga y rara rivalidad con Bobby Lashley y Rusev. Acaban las dos fuera del ring, tirándose de los pelos.

Hay que destacar, asimismo, la participación de Mercedes Martínez, luchadora que no pertenece a la empresa, pero que ha participado en el Mae Young Classic. Después de un buen rato de lucha, Alexa y Bianca vuelven a quedarse solas. Luchan y, aunque la rubia se agarra a la coleta de su rival todo lo que puede, acaba fuera. Tras esto, llega Charlotte.

Flair se aproxima al ring, con la grandeza que la caracteriza. Sin embargo, no consigue expulsar a Bianca en primera instancia, sino que lo hace un poco después, quitándole fuerza al momento. 

Naomi regresa tras unos meses fuera, para tener su momento acrobático. Es propulsada fuera del ring, corre por las escaleras metálicas, y se engancha, como Spiderman, a las vallas protectoras. Es un spot muy complicado, y muy propenso a errores, Siempre me sorprende que estas cosas no salgan mal. Debe estar muy ensayado. La chica salta a las mesas de comentaristas, y espera su momento, para regresar al ring.

También tenemos a Beth Phoenix que, recordemos, es la mujer de Edge. A diferencia de otros años, y de lo que hacen las leyendas normalmente, no se limita a aparecer y ser derrotada con facilidad, sino que se queda en el ring hasta el final. Es posible que eso signifique que seguirá luchando un tiempo, como su esposo. El año pasado participó en WrestleMania, quizás lo haga una vez más.

Otro gran momento lo protagoniza Santina Marella, versión femenina de Santino Marella. Se trata de una personalidad que encarnó el luchador canadiense hace tiempo, y que dio buenos momentos, llegando a ganar una battle royal femenina en WrestleMania. Entonces, estaba bien que un hombre le robara el protagonismo a las mujeres en el único pequeño hueco que estas tenían, pero son otros tiempos. Santino, un tipo que aportaba a WWE algo que nadie más tiene, se encuentra con Beth y Natalya, antiguas amigas, y se aplica la Cobra a sí mismo, siendo, así, eliminado. Muy bueno, siempre pensé que sería una buena opción humorística para un Rumble femenino. Otra opción sería la de Jillian Hall, entonando una de sus canciones.

Con el número 20, llega la gran Shayna Baszler. El final, es parecido al de hombres: pasado vs presente vs futuro. Si en aquel, la final fue Edge vs Reigns vs McIntyre, en este, se enfrentan Beth Phoenix, Charlotte y Baszler, después de que Beth traicione a Natalya, y la elimine, rompiendo, así, su alianza. Igual que en el caso masculino, cualquiera de las tres puede considerarse una interesante ganadora, todo es posible. Pero, en esta ocasión, la empresa opta por el presente, y le da la victoria a Charlotte, que vuelve por la senda del éxito. 

Me alegro por ella, porque es alguien que siempre debería estar cerca de los main events, pero ya ha tenido importantes rivalidades con las actuales campeonas, Bayley y Lynch. Se habla de que podría luchar en WrestleMania contra la campeona de NXT, Rhea Ripley. Veremos.

Buena batalla, tiene un poco de todo.

Puntuación: ***1/2

lunes, 27 de enero de 2020

30 Men Royal Rumble Match, WWE Royal Rumble 2020



Un año más, WWE nos ofrece uno de los eventos más icónicos de cuantos ha creado en su historia. Como siempre, en 2020, hemos podido ver Royal Rumble a finales de enero, con sus respectivas battle royals de hombres, y mujeres. Si bien ninguna de las dos puede ser ajena a este blog, empezaremos por la masculina, pues es la que ha resultado más sorprendente. 

El rumor del regreso de Edge a los rings había sonado en los medios del mundillo, pero no acabábamos de creerlo. Ha resultado ser verídico.

Royal Rumble tiene lugar en un estadio de béisbol. WWE anuncia una entrada de más de 42.000 personas, lo cual me parece una pasada. Otros años, cuando se ha presentado este evento en estadios grandes, la empresa ha procurado la presencia de gente como Undertaker o Goldberg, para atraer a la gente, pero,  esta vez, ha bastado con tener 2 Royal Rumbles, que no es poco, y a Brock Lesnar en la posición número 1 de la batalla masculina.

Y por supuesto, también vende la posibilidad de presenciar grandes sorpresas. Hay algunas bastante chulas en ambos combates, pero, sobre todo, es la de Edge la que hace feliz a todo el mundo. De no haber ocurrido, quizás todas estas decenas de miles de espectadores, no hubieran quedado contentas. De todos modos, hay que decir que el público de Houston, Texas, se comporta de una manera ejemplar durante todo el evento. Es increíble que en una época no especialmente interesante en la historia de esta empresa, esta esté vendiendo más entradas para Royal Rumble que las que vendía en tiempos de la Attitude Era para Wrestlemania. Pero, es que, el Rumble siempre crea una expectación especial.

Ya sabíamos que Brock entraría en primer lugar, pues es un reto que se ha marcado. Resulta muy interesante, no sabemos qué va a pasar con él. Recordemos que es el campeón.

Empieza la batalla, y Lesnar elimina a los primeros 13 participantes que le hacen frente. La mayoría de ellos, no oponen resistencia.

El primero en caer es Elias que, exactamente igual que el año pasado, llega cantando una canción. Se traga la guitarra, faltaría más.

Esta masacre de Lesnar se hace un poco lenta, pues elimina a sus rivales muy rápido, y pasa mucho tiempo esperando. Pero hay varias cosas buenas. Kofi Kingston, que perdió su título de la WWE ante La Bestia en cuestión de segundos, llega para vengarse, y, aunque no lo consigue, aguanta un poco más que la mayoría. Se junta con Big E y Rey Mysterio, y los tres aplican su respectivo finisher al campeón. Pero este se recupera, y los elimina a todos.

Otro buen segmento lo protagoniza Shelton Benjamin. En condiciones normales, no participaría en esta batalla, pero es la única persona en el roster a la que se puede denominar "amiga" de Brock. Este, ya un poco agotado, lo abraza, e imposta una alianza que acaba con el exmiembro de la Suzuki Gun fuera del ring.

La cosa se complica para Lesnar, cuando llega Keith Lee, un tipo tan grande y fuerte como él. Las dos moles chocan, sin que ninguno se imponga. Después, llega otro bicho, Braun Strowman. Por suerte para Lesnar, sus dos rivales deciden luchar entre sí, lo que le permite aprovechar la ocasión, y expulsarlos.

Keith Lee tiene un buen recibimiento. Mientras que el Rumble femenino está lleno de chicas de NXT, en el masculino sólo participan Lee y Riddle. Este último, que parece tener algún tipo de altercado legítimo en Backstage con Lesnar, no hace prácticamente nada, quizás como castigo por el incidente.

Presenciamos la participación de una antigua estrella, el gran MVP, un personaje realmente divertido, que ha tenido una buena carrera fuera de WWE, pero no ha tenido la oportunidad de aprovechar el talento con el micro que tiene. Lesnar lo derrota rápidamente, pero es bueno verle.

Con los dos monstruos fuera, Lesnar se ve ganador. Ya ha expulsado a 13. Llega Ricochet, que también quiere vengarse de él, por un golpe bajo recibido en un programa de Raw. Tras el luchador aéreo, aparece el gran Drew McIntyre, quién, sin abandonar su personaje de psicópata, parece estar virando, poco a poco, al lado de la luz. Aprovecha la venganza de Ricochet, que golpea a Lesnar con un Low Blow por detrás, para aplicar su Claymore, y elimina a Lesnar. El público se vuelve loco.

Durante minutos, Drew mira a un Lesnar caído. Parece que ya tenemos main event para WrestleMania, y parece que WWE está haciendo correctamente con McIntyre lo que no supo hacer con Reigns o Strowman. Está forjando una gran estrella poco a poco, sin forzarlo ni impostarlo. Mientras observa al rey caído, el escocés elimina a Ricochet y The Miz como si no valieran nada.

Sin Lesnar, hay espacio para que el ring se llene un poco, pero nunca llega a haber demasiados hombres. Con el número 21, llega Edge, para sorpresa increíble de todo el mundo, y comienza a aplicar Spears.

Edge elimina a AJ Styles, en lo que parece un error. AJ parece lesionarse el brazo, y por eso se suelta. De esta manera, se estropea la historia que se pretendía contar entre Randy Orton, posiblemente con la colaboración de Edge, y The Original Club.

Porque Orton llega poco después, y hace buenas migas con su antiguo amigo de Rated RKO. Entre los dos, eliminan a Anderson y Gallows. Llegan Reigns, Owens y Joe, mientras que el número 30 es para Seth Rollins, quien viene acompañado de los chicos de su nuevo stable.

Rollins y sus chicos la lían, y expulsan a Owens, Joe y Aleister Black, pero estos se revelan contra los acólitos de El Mesías. Este se queda sólo frente a Orton, Drew, Edge y Reigns, así que se va a la calle pronto.

Los Rated RKO parecen aliarse, aunque Randy hace un gesto de intentar traicionar al canadiense. Este le pilla, por lo que hace un The Viper parece decir algo como "Era bromita", que produce risas entre el público. Edge elimina a Orton.

Quedan Reigns, Edge y Drew. Es una buena final, porque cualquiera sería un ganador lógico. Tras mucha lucha, Roman elimina a Edge, y los fantasmas de los pitos del pasado reviven. WWE no aprende. No obstante, Drew lo derrota, y la gente se vuelve loca. Tenemos nueva estrella.

No está mal la batalla. Tiene varias fases aburridas, y otras de narrativa buena.

Puntuación: ***1/2

domingo, 26 de enero de 2020

Royal Rumble Match, WWF Royal Rumble 1996



En el momento de escribir esto, quedan unas horas para que tenga lugar Royal Rumble, el veterano evento de WWE en el que se da la mítica batalla real de 30 hombres. Desde pequeñito, ha sido mi batalla favorita, así que es tradición, cada año, previo a la celebración de cada nueva edición, ver unas cuantas peleas de este tipo.

Por lo general, es muy complicado que yo tenga hype, a estas alturas de la vida, por casi nada. Pero el Rumble siempre me produce ilusión, y quizás por eso, a lo largo de los años del blog, algunos de los posts más pesimistas han sido escritos tras ediciones del Royal Rumble. Posiblemente, esas mismas batallas, vistas en otro momento, no producirían esa sensación tan negativa.

Cuando era pequeño, esta Battle Royal, y casi cualquiera, me encantaba, por poder ver a tantos personajes distintos, luchar entre sí, mezclarse, y por el hecho de que ganar implicaba derrotar a muchos rivales. Son cosas de niños. Hoy en día, no hay personajes como aquellos, y, desde la consciencia adulta, las posibilidades de que un luchador resulte ganador, se reducen a un pequeño grupo de hombres, de tal manera que casi todas los participantes resultan decepcionantes. Hoy en día, el Royal Rumble produce ilusión por las sorpresas y apariciones nostálgicas que puede tener.

La edición de 2020 se presenta con rumores de vuelta de Edge, de Sting o de CM Punk, con Hulk Hogan entrenando para volver a luchar, con Caín Velasquez y John Cena insinuando una aparición, y con la duda del regreso de Ronda Rousey, entre otras cosas. Hay muchos rumores, y eso mola... siempre que se cumpla alguno. Porque este es el día en el que uno no habla en términos de calidad, sino en términos de apariciones sorpresa, algo que sólo WWE puede promover a estos niveles.

Y es especialmente posible este año, porque Rumble tiene lugar en un estadio de béisbol, más grande de lo habitual, y porque en febrero hay evento en Arabia. Eso quiere decir que puede ser un buen negocio acordar con una estrella unas pocas apariciones para preparar una rivalidad que englobe Rumble - Arabia y WrestleMania. Incluso hay entre medias un Live Show en el Madison Square Garden, que siempre requiere un plus para vender entradas, y que ya tiene a los DX confirmados para aparecer. Son muchos eventos especiales, así que el roster necesita refuerzos.

Como digo, antes de ver Royal Rumble 2020, me he puesto algunas ediciones antiguas. Además, últimamente, se ha hablado de un tema interesante, que vale la pena tratar: los errores en las batallas reales.

Por lo general, independientemente del bookeo, WWE mantiene un nivel muy alto en la realización de sus batallas. Hay muy pocos errores, y eso, en una empresa que lo graba todo en HD, y con mil móviles mirando desde las gradas, tiene su mérito. Pero, cuando uno ve un Royal Rumble, observa muchas acciones que realmente son propensas a errores. De verdad, ¿no hay errores nunca? ¿Nadie se suelta y cae cuando no debía, y destroza todos los planes? Pues bien, sí que pasa.

El caso del Royal Rumble Match de 2005 es conocido por todos. Batista y John Cena eran los dos finalistas, y cometieron un error. Cuando Dave pretendía aplicar una Power Bomb sobre Cena, por la inercia al cogerlo, cayó hacia atrás, y los dos se escurrieron fuera del ring. Por suerte, cayeron justo al mismo tiempo, y es, efectivamente, imposible dilucidar quién era el ganador, por lo que Vince McMahon apareció para determinar que la batalla volviera a reanudarse. Incluso en ese caso, todo fue muy realista, tanto luchadores como referees actuaron con total credibilidad.

Esa mezcla entre realidad y ficción es básica para que todo salga bien. No hace falta actuar, sólo meterse en el rol. En los últimos días, hemos conocido un par de casos nuevos en los que ha habido errores de estos, que pasamos a comentar.

La primera en comentar algo así fue Kaytlin, mujer que ganó una battle royal por el number 1 contender al Divas Championship, que no le correspondía ganar. Eran tiempos oscuros para la división femenina (2012), tiempos en los que Layla, nada más y nada menos, era la campeona. De esta batalla real, salía su retadora, y en ella, participaban joyitas como Rosa Méndez, Alicia Fox o Aksana. Son pocas mujeres, y muy malas. Cómo ha cambiado la cosa.

El caso es que, en un momento dado, Kaytlin utiliza varios clotheslines sobre Eve Torres, quién debía ganar, y acaba tirándola fuera. La autora del error, así, se lleva la victoria en la batalla. Tanto Eve como Layla parecen perplejas, pero no más de lo que lo estarían en la ficción. La verdad es que el error pasa inadvertido, así es el nivel de la puesta en escena de WWE.

Kaytlin, que llevaba poco tiempo en el main roster, se asustó mucho, porque había cometido un error garrafal. Pero la verdad es que se encontró a Vince McMahon muriéndose de la risa. Nunca se tomó a las mujeres muy en serio. Posteriormente, la empresa se las arregló para que los planes volvieran a su cauce.

Me daba mucha pereza dedicar un post a esa batalla. La puntuación que le hubiera puesto sería de unas 2 estrellas, y no me gusta inundar el blog con cosas tan mediocres. Por suerte, en última instancia, Steve Austin ha nombrado una edición de Royal Rumble en la que a él le pasó algo parecido. Es la edición de 19996, una que no tengo muy vista, así que esta es la lucha que comentamos hoy.

La batalla empieza con un Triple H primigenio, aquel tipo que tenía un personaje muy esnob. Empieza luchando frente a Henry O. Godwinn, un tipo enorme con personaje de granjero, sin mucho futuro en la empresa, pero que divertía a la gente. Sin que pase nada relevante, el ring se va llenando de estrellas, incluyendo la presencia, al mismo tiempo, de leyendas de las décadas anteriores, como Jerry Lawler, Bob Backlund, Dory Funk Jr y Jake Roberts. Este llega con una gran serpiente, que hace a todos huir.

La batalla es un poco aburrida. No hay muchas eliminaciones, hasta que llega Vader, el MVP de la pelea. Coincide en el ring con Yokozuna, y entre ambos, destruyen a casi todo el mundo. Esto es así, hasta que hace acto de aparición el favorito de todos, Shawn Michaels, que aprovecha que los dos obesos están luchando entre sí, para empujarlos fuera del ring. La ira de Vader es tal, que vuelve al ring y expulsa a todo el mundo. Por algún extraño motivo, se determina que estas expulsiones no son válidas, porque Vader ya había sido eliminado. Eso no vale.

En la lucha, además de esas leyendas citadas, podemos ver a muchos prototipos de los luchadores que harán un poco de historia en la empresa. Hunter tiene ese personaje raro, que aún no es Triple H, sino Hunter Hearst Helmsley. Viscera es Mabel, The Goodfather es Kama, Kane es Isaac Yankem, Hardcore Holly es Bob Holly, y tiene pelazo, Rikishi es Fatu, y no tiene el culo tan gordo, Sean Waltman es 1-2-3 Kid, Kevin Nash es Diesel y Steve Austin es The Ringmaster.

Austin no es muy reconocible. Es un rudo odioso, acompañado por Ted DiBiase, dado que es el Million Dolar Champion, y no se rapa la cabeza, así que sólo es un tipo medio calvito. No es muy impresionante. No lucha mal, pero es eliminado tras un clothesline de Fatu. Según comenta él mismo, eso no debía ser así, así que buscó a Shawn Michaels con la mirada, avisando de que la historia se tenía que reescribir. Es probable que el resultado previsto fuera que él eliminara a Fatu, porque, sólo un segundo después, la versión dentista de Kane elimina al samoano.

En el ring va quedando poca gente. Michaels se vuelve a encontrar con Davey Boy Smith, tras el final del año anterior, en el que este se creyó ganador. Shawn lo expulsa, esta vez, sin dudas, y, finalmente, echa fuera a Diesel, para llevarse la victoria.

Esta no me parece muy buena batalla. La mayor parte del rato, me aburro mucho, salvo por 4 o 5 cosas que la hacen entretenida.

Puntuación: ***

sábado, 25 de enero de 2020

Nicho El Millonario vs Psicosis, AAA TripleManía 13



Recientemente, y dado el fallecimiento de La Parka, hemos tenido tiempo de comentar la polémica que existió debido a la duplicidad del personaje. Este, fue creado en Triple A, y, cuando el intérprete que lo ejecutaba, Adolfo Tapia, salió de la empresa y se fue a USA, esta se lo dio a otro hombre, el fallecido José Antonio Huerta. Al regreso de Tapia a México, esté insistió en seguir usando el personaje fuera de la empresa, lo que tuvo consecuencias legales.

Esto es un problema muy habitual en AAA. Luchadores se hacen famosos utilizando una máscara, un nombre, y una equipación, y no quieren dejar se usarlos, porque la gente los conoce por ellos, y los promotores les dan trabajo por ellos. Es un tema difícil de tratar, porque no existen muchos casos similares fuera de la lucha libre mexicana.

Nadie se plantea la posibilidad de que un actor que interprete a el Joker con gran talento en el cine o la televisión, mantenga el personaje en otros espectáculos, porque lo ha hecho bien. El personaje pertenece a DC. Si que ha habido casos en que humoristas que han interpretado personajes con atino, han querido seguir usándolos. En México, ocurrió esto, por ejemplo, con varios actores de programas de Chespirito y en concreto, personajes de El Chavo del 8. Estos, como muchos luchadores, defienden que ellos crearon a los personajes, aunque las historias fueran de las empresas, porque la puesta en escena, y por tanto, el éxito y el mérito es suyo. Y es cierto, pero, en cualquier trabajo creativo, normalmente, uno firma un contrato según el cual, cede los derechos de las creaciones que lleva a cabo a la empresa que les está pagando por crearlas. Forma parte del hecho de trabajar para alguien.

Es un caso complicado. Lo mejor sería que un luchador creara su personaje, y no vistiera ninguno cedido por una empresa. Las polémicas son muchas. El caso de La Parka es muy famoso, pero también lo es el de Psicosis que, además, en los últimos días, ha ganado fuerza, dado un suceso ocurrido entre el segundo Psicosis, y Konnan.

Psicosis es un personaje creado en AAA a principios de los 90. Entonces, Konnan, un tipo que siempre ha manejado muchos hilos, se llevó a muchos luchadores de la empresa a Estados Unidos, y con algunos, hizo muy buenas migas, porque él estaba en activo, y salía mucho con ellos. En este grupito, estaban Psicosis, Rey Mysterio o Juventud Guerrera.

Como en el caso de La Parka, cuando Psicosis se fue de AAA para asombrar al mundo con sus duelos frente a su amigo Rey Mysterio, la empresa le dio el personaje a otro luchador, al que llamaremos Psicosis II. Muchos años después, ya sin máscara, el Psicosis original, que fue conocido como tal también en WWE, volvió a México, y no tuvo muchos problemas para cambiar su nombre, y empezar a pelear como Nicho el Millonario. En la propia AAA, convivió con Psicosis II, y formó una interesante pareja con Joe Lider.

Pero parece ser que hay algún tipo de problema personal entre Psicosis II y Konnan. Tras varios años en el Consejo Mundial de Lucha Libre, Psicosis II volvió a AAA, coincidiendo con la salida del cubano. En este caso, llegó a un acuerdo con Dorian Roldan, para trabajar como independiente, con apariciones puntuales. Pero, tras la vuelta de Konnan a la parte creativa de la empresa, recibió muy pocas fechas, y desapareció de las grabaciones para televisión.

Su enfado con Konnan se disparó, cuando este se llevó a Nicho a giras por Canadá, usando el nombre de Psicosis. Obviamente, todo el mundo, a nivel internacional, conoce al Psicosis original con ese nombre, por sus pasos por WCW y WWE, y no tiene ni idea de las polémicas de personajes en México. Pero al actual Psicosis, eso le da igual, se enfadó, y criticó a través de redes sociales. Konnan le respondió, preguntado que, si era tan buen luchador, cómo es que no estaba en ninguna empresa.

Días después, Psicosis II se presentó en unas grabaciones de AAA e Impact Wrestling, para las que no estaba convocado. Esperó a Konnan en el aparcamiento, y le recriminó sus palabras y su trato. Finalmente, le pegó una bofetada muy fuerte, a la que el cubano no respondió.

Psicosis II lo grabó todo, y lo colgó en Internet. Hay quién podría pensar que es una storyline, pero no es así, la hostia fue real. Después de eso, el luchador enmascarado estuvo en el podcast Enmascarados de +LuchaTV, sin el más mínimo arrepentimiento. En su mundo, México, el salvaje oeste, el malo es Konnan, por no haber sido lo suficientemente hombre como para responderle. Escucharle hablar implica retroceder muchos años en el tiempo.

Psicosis afirma que muchos compañeros le han felicitado. Algunos, como Fuerza Guerrera, lo han hecho públicamente. Porque Konnan tiene fama de ser un mal bicho, no le cae bien a nadie. Pero usar la violencia de una forma tan mezquina y gratuita, resulta ridículo, y propio de una tierra como México que, en muchas cosas, no avanza, y que choca con el mundo globalizado a través de Internet, en el que viven los fanáticos de la lucha libre. En ese podcast, ninguno de los chiquillos de +LuchaTV se atrevió a condenar el uso de la violencia, entre otras cosas, porque debían ser conscientes de que tenían delante a una persona que vive en un mundo muy lejano, de hombres machistas, violentos y analfabetos, y que es incapaz de entender por qué no puede ir pegándo a la gente por ahí.

Es sólo un detalle de la intrahistoria de la lucha libre, que a veces es muy divertida de comentar. Psicosis, en principio, sigue trabajando con AAA, y no ha recibido ninguna comunicación que indique que no debe presentarse a sus próximas funciones. Sería muy raro que esto no tuviera ninguna consecuencia, pero, como digo, en México las cosas no funcionan como en el Primer Mundo.

Me parecía entretenido comentar esto. Más allá de ahí, tenemos que centrarnos en la lucha libre, que es lo que importa. Vamos a recordar la lucha en la que los dos Psicosis se jugaron el personaje.

Ya hemos hablado del combate entre las dos Parkas, también por el nombre. LA Park ganó a La Parka, pero AAA luego anuló el resultado. Es una empresa a la que no le importa lo más mínimo que los fans que han pagado una entrada se sientan estafados. Pues bien, la tontería en el enfrentamiento entre los dos Psicosis es mayor todavía.

Hubiera sido genial tener una lucha de verdad entre Nicho y Psicosis, que ambos demostraran sus habilidades, y se dilucidara cuál es mejor. Pero eso no tendría chicha suficiente en la mente de los creativos de AAA. En su lucha, que tiene lugar en TripleManía 13, participan en una especie de yincana, una lucha extrema, en la que tienen que pelear por toda la Plaza de Toros en la que se lleva a cabo el evento, salir del recinto, entrar en un ring con jaula de acero que hay fuera, recoger una llave, volver al ring, abrir una cajita, y sacar un contrato en el que consta que el nombre es para el ganador. Vaya tontería.

Por eso, hay poca lucha. Al principio, hay buenos ataques, pues Nicho usa bien las escaleras. Los luchadores se van pegando por las gradas, hasta que salen fuera, y se pegan en los baños. Entran en la jaula, que no sirve para absolutamente nada, porque, nada más entrar, Nicho hace un agujero en la lona, y saca la llave. No tengo ni idea de por qué sabía que estaba ahí.

En la vuelta de los luchadores al ring, se encuentran con Histeria, que viene a liarla. Pero, ¿quién es este tipo?

También con el nombre de histeria hay confusión. Cosas de AAA. El original Histeria, es el luchador que todos conocemos como Super Crazy. Él se fue en 1997 de AAA, para luchar para Promo Azteca. Así, nació un nuevo Histeria, que formó parte de los Vipers, legendaria agrupación en la que también estaba Psicosis. Los dos luchadores tuvieron alguna clase de altercado, lo que provoca esta aparición. Histeria ataca a Psicosis, para impedir que gane la batalla.

Pero, finalmente, también ataca a Nicho, haciéndole caer a ringside, con un golpe demencial, y quedándose, él, con la llave. Así, los dos primeros Psicosis se quedan sin su premio, y se lo lleva este tipo, que se convertiría en Psicohisteria, hibridando ambos personajes. Las cosas de AAA.

Sobre la lucha, si es que se puede llamar así, hay unos cuantos momentos que están bien, pero es muy rara.

Puntuación: **1/2

viernes, 24 de enero de 2020

Tyler Bate vs Jordan Devlin, WWE NXT UK Takeover Blackpool II



Seguimos hablando sobre NXT UK Takeover Blackpool II, el PPV de WWE en Reino Unido emitido durante los primeros días del año 2020 a través de WWE Network. En el último post, comentamos la lucha principal de la noche, el combate entre Walter y Joe Coffey por el UK Championship. Hoy, charlamos sobre el match que más ha gustado en Internet, el que mantuvieron Tyler Bate y Jordan Devlin.

No me voy a extender mucho en esta ocasión, porque el combate no me ha interesado en lo más mínimo. Me temía que así fuera, pero siempre intento ver las luchas con buenos ojos. En este caso, tenemos a dos hombres muy pequeños realizando movimientos más o menos buenos, de manera un poco aleatoria, por la diversión de todos. Bate intenta presumir de fuerza, pero levantar a un hombre tan pequeño como Devlin, no resulta muy meritorio. Podrían haber enfocado el match como un mini Goliat vs mini David, pero no se les ocurre, porque Bate es muy querido por el público inglés, mientras que Devlin es irlandés, así que no provoca muy buenas reacciones. Muy distinto es su recibimiento en OTT, empresa de su tierra, como veremos en unos días.

Bate realiza una ruleta muy larga, y poco más. Esto es una lucha entre pesos crucero, que si durara 10 minutos, podría considerarse un entretenimiento muy correcto, pero que, con 20, es un exceso.Después de muchos movimientos guay,  Bate se lleva la victoria.

Puntuación: **1/2

Walter vs Joe Coffey, NXT UK Takeover Blackpool II



WWE comienza el año con un Takeover especial en el Reino Unido, tal y como hizo en 2018. La cuarta marca de la empresa, NXT UK, vuelve a Blackpool.

Hay una lucha que ha gustado mucho a la gente, en este evento, que es la que mantienen Tyler Bate y Jordan Devlin. Tengo que verla de cara al próximo post, aunque me da pereza, porque tiene pinta de ser la típica lucha sobredimensionada de NXT. Creo que me da mucha pereza casi cualquier cosa de NXT.

La lucha que comentamos hoy es el main event de la velada, la lucha por el WWE United Kingdom Championship entre Walter y Joe Coffey. Por los protagonistas, no suena mal, aunque es también demasiado larga. Dura casi 30 minutos, un tiempo que en la WWE clásica jamás le daría a nada que no fuera una lucha entre grandes estrellas. Triple H se la da a todos los main events. Todo sea por impresionar a Meltzer.

La lucha es buena. Me da miedo que Walter se convierta en otro spotero, pero aquí lucha realmente bien. Pega unos mamporrazos enormes. Todos sus golpes duelen, ya sean chops, patadas, o STFs. Y todos tienen sentido, si lo que uno quiere es ganar a base de dormilonas.

Coffey tampoco es mal luchador, y también tiene sus momentos. Tenemos un clásico segmento de referee KO, tras unas patadas de canguro del austríaco bastante poderosas, en el que ambos aplican ataques que deberían ser definitivos, y en el que participan los miembros de sus respectivos estables (Imperium y Gallus). Tras esto, que es introducido, probablemente, para conseguir aumentar el tiempo y la épica de la lucha, vuelve el dominio de Walter, que, con ataques devastadores, consigue hacer rendir a su rival, a través de una Sleeper que más bien parece un Crossface. Queda genial que Walter gane con una llave que no es su finisher, pero tiene sentido, teniendo en cuenta los ataques frontales que ha recibido su rival.

Buena lucha. Irónicamente, con 10 minutos menos, sería un MOTYC.

Tras el combate, Walter es atacado por Undisputed Era. Parece ser que habrá una rivalidad entre stables.

Puntuación: ***3/4