lunes, 10 de septiembre de 2018

Cody vs Nick Aldis, All In




En el anterior post, comentamos que All In fue un evento histórico, principalmente por la aceptación de los fans, y la superación de esa cifra de 10.000 espectadores, a la que no se había llegado en un show de wrestling que no fuera de WWE desde hace muchos años. Pero hay otro elemento que también puede considerarse histórico: la disputa del NWA World Heavyweight Championship.

Y es que, también por primera vez en muchos años, el campeonato histórico de la NWA vuelve a ser relevante. Quizás, la última vez que le importó a alguien, fue en los tiempos en los que se disputaba en TNA. Pero, en All In, Cody Rhodes derrotó a Nick Aldis y se convirtió en NWA World Heavyweight Champion, lo que también consiguió su padre en tres ocasiones. Aunque es muy típico en México que luchadores consigan los mismo títulos que sus padres, en Estados Unidos no es tan común, sobre todo si nos referimos a títulos mundiales, porque las empresas no tienen tanta estabilidad, y porque ganar un campeonato mundial no es sencillo.

Sé que hay mucha gente que no entiende muy bien en qué situación se encuentra el NWA Championship, a qué empresa pertenece, y por qué no pertenece a WWE si es dueña de casi todo. En breve, a finales de octubre, tendrá lugar un show en el que se celebrará el 70 Aniversario de la NWA. Intentaremos hacer un especial con algunas luchas de las distintas etapas de la marca, y entonces, explicaremos más detalladamente su evolución.

Resumidamente, podemos decir que la NWA era la organización que reglaba, de alguna manera, el wrestling en Estados Unidos. En realidad, trabajaba como una mafia, como el Cartel de Cali. Las distintas promotoras se dividían los territorios, y se aseguraban que ninguna otra se metiera en su terreno. Hulk Hogan ya habló en su momento de que Harley Race le apuntó con un arma por meterse en su territorio. Entonces, el wrestling no era como ahora, no era una interpretación artística de una lucha, sino que, realmente, se pretendía engañar a la gente, pintándo los combates como algo real. Es la forma natural en la que evolucionan los deportes de contacto y los concursos en Estados Unidos. La mayoría de ellos, de una manera u otra, se organizan de tal forma que los concursantes que más interés, y por tanto, dinero, generan entre el público, sean los que ganen, o los que tengan más oportunidades. El Wrestling es la forma definitiva de hacer eso.

Aunque todos los territorios tenían su propio título, sólo podía haber un campeón mundial, que era el de la NWA, el mismo título que ahora ha ganado Cody. Algunas empresas, en algunas épocas, como la WWWF o la AWA, se opusieron a esto, y se enfrentaron a la NWA. En los 80, con el negocio de Vince McMahon cambiando las reglas de la industria, casi todas las promotoras unidas a la NWA fueron desapareciendo, o dejando su posición. Para entonces, la Jim Crockett Promotions era la empresa más importante de la alianza, y la que se quedaba el título siempre. En el 92, ya convertida en WCW y comprada por Ted Turner, creó su propio título mundial, y se deshizo del NWA Championship, que durante una breve etapa, se disputó en New Japan Pro Wrestling.

A partir de ahí, y sufriendo varias reorganizaciones, la NWA ha estado formada por diversas empresas independientes, la mayoría de ellas muy pequeñas y con poca trascendencia. Aunque la alianza ya no significa nada para nadie, el título todavía resulta importante, todavía es reconocido como un verdadero campeonato mundial por la prensa especializada. Por eso, tanto primero ECW como después TNA, utilizaron los campeonatos de NWA para conseguir algo de prestigio para sus marcas. Tras conseguirlo, ambas, crearon sus propias correas, y de deshicieron del NWA Championship. 

NWA y TNA acabaron sus relaciones en 2007, cuando la segunda creó en TNA World Heavyweight Championship, siendo el gran Christian Cage el último campeón de la NWA dentro de TNA. Después de eso, el título ha deambulado mucho por el mundo, y se puede considerar a Adam Pearce el principal campeón de esta época. Tuvo algún paso por ROH, y por NJPW, hasta que en 2017, la marca fue comprada por Billy Corgan.

Corgan es famoso por ser parte de los Smashing Pumpkins, pero también es un gran amante del wrestling. Metió la cabeza en Impact Wrestling, pero su guerra por el poder con Dixie Carter casi lleva a la empresa a la ruina, antes de que fuera comprada por Anthem Media. Corgan perdió su sueño de manejar una promotora de wrestling, pero esto le gustaba demasiado, así que acabó poniendo su mira en la marca NWA.

Corgan compró NWA, lo que incluye todas sus marcas y logos, parte de los derechos de su videoteca, y sus títulos. Dejó vacantes todos los campeonatos, salvo el título mundial de peso completo, en manos del veterano Tim Storm, aunque en última instancia, se ha dicho que Jazz sigue siendo la campeona femenina. La NWA cuenta con 29 territorios actualmente, aunque la mayoría está en la zona de Texas y el medio-oeste.

Una de las primeras medidas de Corgan como gerente fue buscar un campeón que le diera un buen nombre a la empresa, y que pudiera defender el campeonato en ligas de mayor renombre. El elegido fue Nick Aldis, conocido como Magnus en TNA, un tipo de cierta fama, con buen físico, y que se puede desenvolver bien en el ring. Se convirtió en campeón en diciembre de 2017, al vencer e Storm en Cage of the Dead 19, evento de CZW, una liga con un poco más de nivel que las que pertenecen a la alianza. Luego, Aldis tuvo buenas defensas también en Ring of Honor, antes de meterse en esta interesante rivalidad frente a Cody, de cara a All In.

Hay que decir, para terminar con NWA, que la marca tiene un canal el Youtube en el que se van repasando todas las novedades alrededor del título. Es interesante, porque es un lugar en el que seguir lo que pasa, saber quién es el campeón y donde y cuando defiende el título. Está guay, y tiene combates completos, en los que se puede observar eso tan bonito que es el wrestling independiente de ciudades pequeñas.

Y si hay una forma de mejorar la posición del NWA World Heavyweight Championship, esa es dárselo a Cody. Porque, hoy en día, hay pocos rosters fijos, así que es más importante el nombre del campeón y lo solicitado que esté, que la empresa a la que pertenezca la correa. Cody es muy famoso por su paso por WWE, pero, además, puede llevar la correa de la NWA a la New Japan, a All In, a Ring of Honor, o a cualquier otra de las empresas en las que aparece con regularidad, en cualquier continente. Es una decisión buena.

Para Cody, como decía antes, es un honor tener el campeonato que portó su padre, uno de los hombres más queridos en la historia de la industria, por los fans y por sus compañeros. Aunque Cody es rudo en todas las empresas en las que aparece, aquí es claramente el bueno. Viene acompañado por su mujer, por su perro blanco, que siempre se lleva una ovación, por Tommy Dreamer y por DDP. 

El campeón, Nick Aldis, trae una cuadrilla también famosa, pero mucho más odiosa: Jeff Jarret y Daivari. El combate, por otro lado, no me resulta especialmente interesante. Es de vieja escuela, entre dos tipos que son buenos, pero no tanto. El mejor momento ocurre cuando Rhodes vuela a ringside, y se pega, teóricamente, con la mesa, haciéndose una raja en la cabeza. Mientras está tirado, y el referee, Earl Hebner, pide atenciones médicas, Daivari y DDP aparecen, y el primero, por supuesto, se lleva un Diamond Cutter del segundo.

Aldis no aprovecha en absoluto el golpe en la cabeza de Cody. Ambos aplican buenas llaves a las piernas, aunque ninguno vende el más mínimo dolor. Hay algunos movimientos buenos, y aunque los finishers no tienen el efecto deseado, Cody se lleva la victoria con un embolsamiento.

Hay mucha alegría por la victoria de Cody, pero la lucha resulta mediocre.

Puntuación: **3/4

No hay comentarios:

Publicar un comentario