lunes, 10 de abril de 2017

George Steele vs Randy Savage, WWF Saturday Night Main Event 21/02/1987




Hemos visto las trampas de George Steele como rudo. Pero tuvo una última etapa como face en WWF en la que se ganó el amor del público, y ayudó mucho a ello la gran historia que tuvo con Randy Savage y Miss Elizabeth.

George Steele era un tipo muy inteligente, a pesar de su personaje, y era capaz de hacer promos como los mejores. Hay que tener en cuenta que tenía una licenciatura en ciencias. Pero Vince opinó que eso no era lógico, que un personaje de hombre-animal no podía hablar de forma inteligente. En una promo, frustrado, acabó diciendo algo así como "Duh dah dahh", que encantó a todo el mundo, y se convirtió en parte de su personaje, así como gritos de "You! You Go!".

Steele interpretaba muy bien a ese personaje, y con los años, se situó como uno de los más queridos. Posteriormente, llegó la gran rivalidad de su carrera, la que mantuvo con Randy Savage.

Savage y Steele pelearon en el fatídico WrestleMania 2, con el título Intercontinental en juego, saliendo Savage ganador. No fue una gran lucha, pero Steele tuvo su gran momento en WM, porque además, había mucho interés en esa rivalidad. Y, aunque acabó pronto, el público aún la exigía, así que continuó durante los años 87 y 88.

De la rivalidad entre Savage y George no salieron grandes luchas, pero la historia era bonita. Era un cuento de hadas, La Bella y la Bestia. Y es que, Steele se encaprichó de Elizabeth, y quería que fuera su mánager. Esta le veía con dulzura, sabía que era un buen chico, mientra que Savage era un cabrito.Esta historia causaba sensación.

Miss Elizabeth no era un mánager cualquiera. No era como ahora, que pueden poner a Alicia Fox con cualquiera, y eso no significa nada. No, en esos tiempos, Savage y su mujer formaban un dúo genial, y protagonizaron muchas historias en las que su relación era muy importante. Muy buenas momentos se crearon gracias a eso.

Savage se enfrentaría a Ricky Steamboat en WrestleMania 3, con George en la esquina del babyface. Pero, durante los meses anteriores, Savage siguió peleando con Steele, que contaba con el apoyo de Ricky. Pelearon en varios especiales de Saturday Night Main Event. Tuvieron una lucha de Lumberjacks, y la lucha de la que hablamos hoy.

Porque Steele llegó a secuestrar a Elizabeth. Se la llevó, y esta no puso mala cara. Por eso, se decidió llevar a cabo una lucha del tipo "Winner gets Miss Elizabeth", o sea, que el ganador se lleva a la chica. En este caso, se la lleva como mánager, no penséis cosas raras. Steele la quería junto a él, y la chica no se mostraba muy disgustada con el posible cambio. Randy quería negarse a esto, pero tuvo que aceptar la lucha.

A pesar del gran ambiente y la gran historia, la lucha es poca cosa, como todas las de la rivalidad. Elizabeth se sienta en una silla alta, y George va a admirarla, lo que aprovecha el Macho Man para atacarle por la espalda, y llevarse a la chica. Pero aparece Steamboat y bloquea la salida. Obliga al rudo a volver al ring, donde recibe los ataques en la cabeza del Animal.

Sttele le parte la cabeza contra el esquinero varias veces, y procede a romperlo, como siempre. Randy le ataca por la espalda. Savage domina, pero recibe bocados y ahorcamientos, y también come espuma del esquinero.

Steele va a por Elizabeth, y es atacado por la espalda por su rival, que le tira la silla gigante encima, aplastándolo. La cuenta llega a 10, y Randy resulta vencedor, llevándose a la chica. El Animal le ataca tras la lucha, pero ha perdido.

Bonita historia que recrea el cuento clásico de La Bella y la Bestia, años antes de que Disney hiciera su magnífica versión. Unas cuantas semanas después, Savage se enfrentaría a Steamboat en un gran encuentro en WrestleMania 3, y Steele le vería perder con alegría.

Steele se retiraría en el año 88 por una lesión, y trabajaría después como agente. En el año 1995, fue introducio en el Salón de la Fama de WWE.

Puntuación: **1/2

domingo, 9 de abril de 2017

George Steele vs Hulk Hogan, WWF 10/08/1984




Antes de WrestleMania, comenzamos un especial sobre George Steele, como homenaje póstumo al Animal. Vamos a hacer un pequeño parón en el análisis del gran evento de WWE para terminar ese especial, viendo un par de luchas más del Hall of Famer recientemente fallecido.

Ya lo vimos llegar a WWWF, y mostrarse como un personaje muy peculiar y amenazador, que quería robarle el título mundial al gran campeón de la época, Bruno Sammartino. No tuvo suerte  en ese intento, pero mantuvo su personaje el tiempo suficiente para poder enfrentarse a otros dos grandes héroes: Bob Backlund y Hulk Hogan.

Quizás el momento más importante de su carrera sea su victoria frente al Hulkster, en el año 1984, cuando comenzaba su reinado de 4 años como WWF Champion. Su divertidísimo papel en la película Rocky 3, en principio enfadó a Vince, pero lo cierto es que un tipo con ese carisma, ese tamaño y esos músculos, además de la fama que le había dado la película y el talento luchístico demostrado en Japón, le convertían en una mina de oro. En el 84 comenzó el mayor negocio de la industria, y Steele tuvo la suerte de formar parte de él.

Porque, después de comprarle la empresa a su padre y comenzar a robar todos los grandes talentos de los diversos territorios de Estados Unidos, Vince era imparable, y con Hogan como campeón, destruyó a casi toda la competencia. Imaginaos, por tanto, lo importante que era derrotarlo. El 10 de agosto de 1984, el campeón se enfrentó al Animal, George Steele, acompañado de su manager, el malvado Mr Fuji. George no tiene una pinta amenazadora, de hecho, da penilla, parece un señor mayor al que se le ha ido un poco la cabeza. Llega haciendo sus gestos animalescos, y mordiendo el protector del esquinero.

Y, por otro lado, entra al ring Hulk Hogan, ante una reacción del público inmensa. La lucha es por el título, aunque nadie cree en las posibilidades de George. De hecho, cuando empieza el enfrentamiento, se pone a hacer cosas raras, y Hulk Hogan responde mostrando músculos. Tal es el poder del héroe, que el Animal huye a ringside, ante las risas del público.

La verdad es que la lucha es muy propia de la época. Me gusta, porque es puro storytelling. Tenemos un personaje extraño, con sus peculiaridades luchísticas y su estrategia para ganar, y un gran héroe al que todo el mundo quiere, que es muy bueno contando historias y vendiendo los ataques del rival. Aunque Hogan comienza pegando contra las mesas en ringside, pronto Steele le hace un piquete de ojos, y comienza a golpearle en la frente, mordiéndole como un animal, y rompiendo del todo el protector para acabar de destrozarle la cabeza a su rival.

Pero es él el que se lleva el golpe contra el esquinero desprotegido, y recibe otros buenos ataques del Inmortal. Eso hace que Steele vuelva a buscar sus trampas habituales, sacando un objeto de su pantalón, y golpeando la frente de Hulk cada vez que el referee no mira. El público está que trina.

Hogan se recupera, tiene su habitual baile de San Vito, y comienza a golpear al retador con furia. Le propina una quebradora, y va contra las cuerdas para buscar su Leg Drop. Pero Mr Fuji le hace la zancadilla, y el Animal golpea a Hulk por la espalda. Mientras el rudo discute con el referee, Fuji le tira arena en los ojos al campeón, que cae fuera del ring, ciego. No puede ver, no puede subir al ring, y Steele gana la lucha por Count Out, mientras caen objetos desde el público, que está muy enfadado.

Gran victoria para George, en un espectáculo muy entretenido, y que nos muestra como era el wrestling en esa época, y lo importante que era para el público.

Puntuación: ***

sábado, 8 de abril de 2017

Goldberg vs Brock Lesnar, WWE WrestleMania 33




En otoño de 2016, Goldberg volvió a WWE. Su acuerdo con 2K Sports para aparecer en el juego WWE 2K17 allanó el camino, y el recibimiento por parte de los fans fue muy bueno.

Los videojuegos deportivos anuales cambian poco de un año a otro. Así que es importante inventar cosas que hagan que los usuarios se gasten la pasta en una nueva edición de lo mismo. Y, si además, pueden gastársela antes de que el juego se ponga a la venta, reservándolo, mejor, porque así no hay peligro de que la crítica de los medios especializados eche a la gente atrás.

Por eso, Take Two y 2K Sports han intentado dar grandes premios a los jugadores que hacen reserva de los juegos por anticipado, dándoles, por ejemplo, personajes atractivos. En 2014, el personaje jugable descargable exclusivo para el pre-order fue Ultimate Warrior, mientras que en 2015, se incluían las versiones NWO y moderna de Hulk Hogan, además de dos versiones de Sting. En 2016, el personaje exclusivo de pre-oder fue Terminator, y en 2017, Goldberg.

Las relaciones de WWE con personajes con una personalidad tan marcada como Ultimate Warrior, Sting, Hulk Hogan y Goldberg, no siempre han sido buenas. Pero, a veces, sentarse juntos en una mesa a comer lo arregla todo. Todos estos tipos, desde Twitter o en entrevistas, habían dicho cosas muy desagradables sobre la empresa, pero, ahora, la aman. Porque, a veces, la opinión depende de un punto de vista que no es sano, debido a problemas personales o profesionales que han surgido en un momento dado.

Y Goldberg trató al wrestling y a la WWE con desprecio durante muchos años. Salió de allí muy enfadado en 2004. Ahora, en su vuelta en 2017, ha vuelto a disfrutar del mundo de felicidad que es esto del wrestling, un negocio en el que decenas de miles de personas se reunen en un estadio a cantar, gritar y animar a tíos que fingen que se pegan.

Bill quería que su hijo y su mujer le vieran haciendo el papel de superhéroe. El niño ni siquiera había nacido cuando él peleaba, así que se perdió esa parte tan guay de la vida de su padre. Ahora ha podido vivirla, en cierta medida.

Después del acuerdo con 2K Sports, Goldberg retomó su relación con WWE, y se pensó que una vuelta para una lucha en Survivor Series podía ser muy interesante económicamente, tanto para el luchador como para hacer publicidad del juego y para vender suscripciones a WWE Network. Y los ratings también subieron, así como las reproducciones en Youtube. Todo era ventajoso.

Entonces, comenzó una rivalidad entre Bill Goldberg y Brock Lesnar, cuando Paul Heyman, en nombre de su representado, retó a través de redes sociales a Goldberg. Y es que, la lucha final de ambos en su primera etapa en la empresa fue aquella tan horrible de WrestleMania XX, en la que Goldberg venció a Lesnar. Y Lesnar, que lo ha conseguido todo en la vida, no podía olvidarlo.

Entonces, se cerró la lucha entre Goldberg y Lesnar en Survivor Series 2016. Goldberg, en una gran promo de persona real, muy diferente de los guiones genéricos y llenos de palabras clave que usan el resto de los personajes, se presentó de nuevo junto a los fans, declarando que Lesnar sería el próximo... y el último.

Se suponía que la vuelta del ex-WCW sería para una sola lucha, pero tuvo mucho éxito, y su paso por la empresa llegó hasta WrestleMania 33, y quizás vaya más allá. En SS, Lesnar, mucho más joven y fuerte que el hombre de 50 años, se confió, y en un momento en el que miraba hacia otro lugar, se tragó un spear, seguido de un Jackhammer. Goldberg ganó en segundos.

Aunque, como lucha, eso no valía nada, la historia alrededor de esa forma de luchar ha llegado a ser muy buena. Goldberg luchó en el Royal Rumble Match, y se enfrentó a Kevin Owens por el Título Universal. Nada más comenzar ese combate, una distracción de Chris Jericho provocó que Kevin perdiera de vista a Goldberg un segundo, y esa, de nuevo, fue su perdición.

De esta manera, aunque las luchas de Goldberg no pueden tener un buen rating, sí que son semánticamente lógicas, y dan pie a una buena historia. Además, para un tipo que fue conocido por llevar a cabo cientos de squashes, hacer esto así no sorprende a nadie, aunque en realidad trata de enmascarar el hecho de que no puede dar un combate largo, por su falta de formación luchística, por su edad, y por su tiempo fuera del negocio.

Goldberg se convirtió en lo único que Lesnar no ha podido vencer, así que La Bestia exigió tener su revancha en WrestleMania. Y le alegró que esta fuera por el Campeonato Universal. En un programa anterior al magno evento, al fin, pudo propinarle el F5 a Goldberg. Un duro golpe para un hombre tan mayor.

Así llegamos a WrestleMania, un evento que, quizás, tiene una cartelera demasiado grande. Hay demasiadas luchas importantes, y eso hace que algunas de ellas no mantengan el nivel de interés del público. El caso más claro es el de Orton y Bray. Pero aquí sí que tenemos mucha intensidad, porque la lucha en sí es explosiva. Son menos de 5 minutos, pero esta vez no es un squash.

Posiblemente, esta sea la mejor lucha que se puede dar en menos de 5 minutos. Y es muy difícil darle un rating, porque no hay muchos precedentes, a estos niveles, de luchas así. La forma de pelear de Goldberg es muy rápida y peligrosa, pero Lesnar ya la ha estado estudiando. ¿Qué pasará?

Empieza la lucha, y Lesnar frena a Goldberg. Pega tres suplexs muy seguidos, sin dejarle respirar, porque sabe que un segundo de despiste puede ser demasiado. Pero después de un súplex, hace un gesto de furia,  y se traga un Spear.

Ese es un momento increíble, sobre todo para el que lo vea desde casa. Porque la cámara estaba enfocando a Lesnar desde abajo, y aparece Goldberg de la nada con su Spear, solo un segundo después de haber recibido el tercer súplex. Es fantástico.

Segundo Spear, y Lesnar huye a ringside, porque sabe que el tiempo que va a tardar en recuperarse va a ser demasiado largo como para sobrevivir. Pero Bill le sigue a ringside y le mete otro Spear contra la barricada, hundiéndola. Los dos quedan tendidos, Lesnar con una herida en el brazo, y Goldberg con un buen golpe en la cabeza, que le va a resultar fatal.

Vuelven al ring. Lesnar busca el F5, pero el campeón universal se libra, y se saca de la manga el cuarto Spear. Usa el Jackhammer para acabar... Pero no, Lesnar sobrevive milagrosamente. Goldberg vacila, porque no estaba preparado para esto.

Espera a que Brock se levante, y se lanza con otro Spear, pero Lesnar salta verticalmente, esquivándolo, lo que provoca que Bill se estrelle contra el esquinero, pegándose otro golpe importante en la cabeza. Brock vuelve a poner en práctica el Suplex City, y cuando lleva un buen puñado de golpes, aplica un F5 que le convierte en el cuarto campeón universal de la historia.

Goldberg solo conocía una forma de luchar, y durante poco tiempo. ¿Qué pasaría si alguien consiguiera sobrevivir? Pues esto. Muy buena lucha, con una historia genialmente contada, pero durante una cantidad de tiempo muy corta, y con un número de suplexes excesivamente grande. Valorarla es muy complicado, así que, en este caso, creo que la nota es lo de menos.

Puntuación: ***1/2

miércoles, 5 de abril de 2017

The Hardy Boyz vs Luke Gallows y Karl Anderson vs Cesaro y Sheamus vs Enzo Amore y Big Cass




Para WrestleMania 33, teníamos programada una triple amenaza por los campeonatos mundiales en pareja de Raw, mientras que los de Smackdown se quedaron en la Battle Royal. En realidad, parecía un combate que podía ocurrir, fácilmente, en el preshow, lo que no creo que hubiera sido especialmente malo, porque pienso que no hay diferencia práctica entre el preshow y el PPV posterior, y no entiendo a la gente que se escandaliza porque una lucha acabe ahí (sobre todo si es Baron Corbin vs Dean Ambrose, que jamás puede ser buena). Pero, para esta Ladder, había algo especial reservado.

Para mí, la aparición de los Hardy para participar en la batalla sí que fue una gran sorpresa. Aunque había habido algún rumor sobre ello, los rumores sobre regresos en WrestleMania siempre se quedan en nada, porque todos los billetes están vendidos ya, y porque para las storylines viene mejor empezar a partir del Raw siguiente. Además. los míticos hermanos habían tenido una gran batalla la noche anterior en Ring of Honor, y eso sí que es extremadamente novedoso: que dos luchadores que ha peleado en otra empresa 24 horas antes, luchen en WWE, sin pruebas médicas ni nada de por medio. Es algo muy raro. 

Yo ni lo tenía en mente. Por eso, cuando New Day aparecieron para anunciar que otra pareja se uniría a la fiesta, yo caí en la trampa, y pensé que se referían a ellos mismos, que eran los hosts del show, e iban vestidos con ropa de Final Fantasy XIV. Cuando vacilaron un poco, me di cuenta de que se referían a otro equipo, y después de cavilar, pensé en los Hardy, justo antes de que sonara el tema musical de Jeff. Tuvimos entonces una gran reacción del pasivo público de WrestleMania.

Ya veremos si los Hardy llegan a usar los personajes del Universo Broken. En principio, no lo han hecho, pero tampoco han sido muy explícitos a la hora de hablar. Quizás, cuando los problemas legales con TNA se acaben, alguna storyline los lleve a transformarse. Y es que, como muchos sabrán, Impact Wrestling reclama el derecho intelectual sobre los personajes Broken de Matt y Jeff, y hay un lío ahí montado. No creo, en cualquier caso, que una empresa pueda impedir a trabajadores hacer su trabajo, más allá de usar nombres o logotipos, que es lo que se puede registrar.

Los Hardy aparecen en WrestleMania, y comienza la batalla con escaleras, bastante entretenida. Big Cass pega Big Boot a todo el mundo, y la pareja de Sheamus y Cesaro tienen algunos momentos muy buenos, como aquel en el que Cesaro está aplicando su ruleta, al mismo tiempo que Sheamus pega sus puñetazos en el pecho. Hay muchos golpes con escaleras, y algunos vuelos.

Matt Hardy consigue aplicar un doble Twist of Fate sobre los campeones, Gallows y Anderson, uno de ellos desde la escalera. Por su parte, Jeff ejecuta un nuevo salto suicida desde una escalera sobre Cesaro y Sheamus, que estaban sobre otra. De esta manera, los Hardy se quedan sin rivales, y Matt consigue agarrar las correas, para convertirse, después de mucho tiempo, en campeones en parejas de WWE (o en este caso, de Raw).

Puntuación: ***1/2

John Cena y Nikki Bella vs The Miz y Maryse, WWE WrestleMania 33




Seguimos con la revisión de WrestleMania 33. Es cierto que estoy empezando por luchas que no son muy importantes, pero por eso mismo, son aquellas que no necesito ver una segunda vez. Y es que, el grueso de la cartelera de WrestleMania, en realidad, es bastante decente, aunque todo el mundo está deprimido por la victoria de Roman Reigns sobre Undertaker, pero eso era evidente, no nos engañemos. 

Como he dicho varias veces, yo quería ver un Cena vs Taker en WrestleMania 33. Y no me hubiera importado que esa hubiera sido la última lucha del Enterrador. Creo que, a estas alturas, todos los haters de Cena ya reconocen lo bueno que es. Pero no, en WWE querían generar momentos. Y querían tener ese momento de John Cena pidiendo matrimonio a Bella, y el momento del paso dde antorcha de Undertaker a Reigns. Este último ya lo comentaremos cuando proceda.

En realidad, como la mayoría de las rivalidades de Smackdown, la de Cena/Bella y Miz/Maryse está muy bien trabajada. Y es que, The Miz es un genio con el micro, y me alegro de que tuviera una lucha más o menos importante en WrestleMania. Eso sí, la temática de la rivalidad es propia de Total Bellas / Total Divas.

La cuestión es que Maryse y Miz conforman un matrimonio muy unido, siempre están juntos. Sin embargo, John Cena aún no ha querido casarse  con Nikki, tal y como se ha visto en alguno de los realities anteriormente citados. Miz y Maryse hicieron muchas parodias de sus rivales, dejando ver que su amor no es real, que son egoístas y egocéntricos. Y después de algunos chistes, por ambos bandos, haciendo mención al tamaño de los genitales de los varones, Cena y Bella empezaron a hacer equipo, justo antes de retar a Miz y Maryse a luchar en WrestleMania.

Así llegamos a esta lucha. En ringside está la familia de los buenos. A cena le asombra mucho ver ahí a su madre, y lo deja claro con sus gestos. Es obvio que todos saben lo que va a pasar después de esta pelea. En su funcionamiento, es básicamente una lucha mixta de Smackdown, muy estándar.

Miz huye de Cena, y usa el truco clásico de atacarle cuando está entrando al ring. Después de eso, tenemos mil minutos de Miz castigando a su rival sin gracia ninguna. Parece una de esas luchas de antes de John, en las que no hacía más que recibir. El público no es muy efusivo, y no lo será en casi toda la noche. La verdad es que estropea varias de las luchas. En este caso, se levanta un poco cuando Miz pega las patadas en el pecho que le ha copiado a Daniel Bryan. 

 Al final, Cena consigue el hot tag para su novia, y se lían los mamporros, y llegan los ataques dobles: primero, el doble Five Knuckle Shuffle, y luego, el dobre AA. Victoria simple para Cena y Bella, tras lo cual, tenemos la petición de matrimonio esperada, con algunas reacciones en el público un poco emocionadas.

 Lucha sin más, decente, para un programa semanal, nada especial. Segunda lucha de WrestleMania 33 que comentamos, y segunda lucha que está pensada para generar un momentazo, sin interés en lo luchístico.

 Puntuación: **1/2

martes, 4 de abril de 2017

Andre the Giant Battle Royal, WWE WrestleMania 33




Ya ha tenido lugar WrestleMania 33, un evento... Raro, que deja muchas sensaciones extrañas, y algunas cosas que son difíciles de evaluar según el estándar Meltzer. Pero lo intentaremos, y comenzaremos por la parte más fácil, la battle royal en honor a André el Gigante.

Cuando comenté la lucha entre Bret Hart y Stone Cold, decía que entonces WrestleMania no era el espectáculo que es hoy en día. pero que siempre había hueco para una gran lucha. Ahora creo que no, que el evento se ha convertido en una búsqueda constante de grandes momentos, de esos que pueden ponerse en un vídeo promocional o un vídeo de Youtube. Pero hay poco hueco al wrestling de verdad. Tampoco ayuda que la cartelera esté llena de semi-luchadores veteranos enfrentados a una generación muy mediocre.

Pero, centrándonos en la Andre the Giant Battle Royal, posiblemente estemos ante una de las BR menos trabajadas de la historia. Igual que pasó en el último Royal Rumble, da la sensación de que no hay booker que haya dirigido nada de lo que pasa aquí, y que todo es aleatorio.

The Big Show se había preparado con mucha ilusión para su lucha con Shaquille O'Neal, consiguiendo el mejor momento de forma de su carrera. Pero WWE no llegó a un acuerdo con el ex-NBA, así que Show se quedó sin su sueño. Por otro lado, entraba a esta batalla para poder enfrentarse al nuevo gigante de WWE, que le ha derrotado en varias ocasiones: Braun Strowman.

Podría haber quedado una gran batalla que girara en torno a estos dos gigantes. Se podría haber escrito algo fantástico. Pero esto es WWE. Show y Strowman comienzan eliminando a mucha gente (elegida aleatoriamente también), pero pronto, Braun echa fuera al otro gigante, sin ninguna épica, y luego es eliminado él también por el resto de los participantes. Sin más.

Llegados a este punto, tenemos a gente buena como Dolph Ziggler, Mark Henry, Luke Harper y Sami Zayn en la pelea. Pero observamos, de nuevo, que la eliminación de los luchadores no está relacionada con su rol en la empresa, sino que son expulsados porque sí. Así, aunque Henry y Ziggler estaban haciendo un buen combate, son eliminados por... cualquiera, como también lo es Harper.

El único luchador interesante que queda es Zayn, junto a un puñado de jobbers. Parece que es su  momento, que para eso se ha desarrollado esa historia de perdedor en Raw, que se clasifica en el último segundo para la Battle Royal. Pero... no, tampoco. Se quedan solos Big Damo, recientemente fichado para NXT, Mojo Rawley y Jinder Mahal.

Pero, por fin entendemos de que va esto. Mahal saca por debajo de la tercera a Mojo, y pelean a ringside. Entre el público está un buen amigo de Mojo, el enorme jugador de los New England Patriots, Rob Gronkowski. En ese spot tan repetido ya, Mahal se encara con Rob, le quita su refresco y se lo tira encima. Rob, por eso, tiene que meterse, y atacar a Jinder en el ring, con un gran topetazo. Después de esto, Mojo elimina a los dos rudos, y gana la batalla.

Pues sí, WWE ha usado la batalla para que un jugador de la NFL pueda hacer su aparición. El resto de la batalla no vale nada. Me hizo gracia que una chica de seguridad no conocía la entrada de Rob, y salió corriendo como una loca para intentar detenerlo, a pesar de que era el triple que ella. Los referees pronto la avisaron de que debía dejarlo entrar.

Puntuación: *

lunes, 3 de abril de 2017

Steve Austin vs Bret Hart, WWF WrestleMania 13



WrestleMania 33 está aquí. No me gusta hacer especiales con los mejores combates de WrestleMania, porque esto es un blog abierto, que debe durar años, y si lo hago en una edición, me quedo sin material para la siguiente. Prefiero comentar un par de cosas que sean especialmente interesantes para la edición en la que nos encontramos.

Tenía dos luchas preparadas para este fin de semana, pero me he quedado sin tiempo, y tendré que guardar una de ellas para dentro de unas semanas. Creo que, incluso entonces, será interesante comentarla, ya que está relacionada con el contexto geo-político actual. Para hoy, antes de que comience WrestleMania 33, vamos a ver una lucha que vamos a disfrutar: Steve Austin vs Bret Hart en un Submission Match, en WrestleMania 13.

Y es que, han pasado 20 años ya desde que tuviera lugar ese brillante enfrentamiento en el mejor escenario posible, el de WrestleMania, si bien es cierto que  no es el main event de la velada, porque ese honor quedó reservado para el enfrentamiento entre Sid y Undertaker, que fue muy malo. Pero WrestleMania 13 siempre será recordado por  la lucha de rendición entre Austin y Hart.

Que el espectador que se acerque a esta lucha no se espere el gran espectáculo que es hoy en día WrestleMania, con estadios inmensos y carteleras llenas de leyendas. En esa época, era casi un evento más, y la escenografía era la misma de siempre. De hecho, solo hay 18.000 espectadores en las gradas. Dicho esto, aún en esa época, lo mejor se guardaba siempre para WrestleMania, y este combate se creó para hacer historia. Como referee especial está Ken Shamrock, un gran luchador de MMA que, a raiz de esta aparición, comenzaría una carrera en WWE que dejaría algunas cosas buenas. Aquí hace el papel de árbitro, con unos brazos que asustan.

La rivalidad se había construido durante mucho tiempo. Steve Austin era un rudo muy odioso, y Bret Hart era el mejor luchador del mundo, un tipo que había subido desde lo más bajo en la empresa, hasta ser varias veces campeón, a base de dar buenas luchas. Hart ya había vencido a Austin en Survivor Series 1996, en una muy buena lucha, pero después de eso, la audiencia empezó a cogerle cariño a Austin.

Y es que su actitud en contra de la autoridad atraía a la audiencia. Ya no eran tiempos de grandes super héroes, y eso lo había probado en la competencia la NWO, vendiendo muchísimas camisetas, a pesar de ser un grupo de rudos. Los niños que se habían acercado a la empresa para vibrar con Hulk Hogan y el Ultimate Warrior eran ahora adolescentes que veían en la relación entre Austin y Vince McMahon la misma que tenían ellos con sus padres. Steve Austin se convirtió en el anti-héroe perfecto.

El combate entre Austin y Hart en WrestleMania 13 cambió la historia de la empresa, y la salvó, porque, a partir de él, Steve Austin creció como el gran anti-héroe que los aficionados querían ver, mientras Bret, abandonaba la empresa. Y la forma de perder de Steve, sin rendirse y quedando KO por la pérdida de sangre, ayudó mucho a eso.

Pero hay que dejar claro que Austin es el malo aquí, y eso se nota. La lucha comienza con mucho brawl, con ambos peleando entre el público. Muy pegados, con una seguridad muy permisiva, de manera que es el propio Shamrock el que tiene que apartar a muchos aficionados.

Austin y Hart se pegan con las escaleras metálicas, y vuelven al ring. Hart conecta varios golpes en la cabeza muy buenos, y luego se centra en la pierna de su rival, que tiene un protector en la rodilla. El castigo enfocado de Bret es impecable, magnífico, como cabría esperar.

Austin apenas puede moverse. Recibe llaves y golpes de todo tipo. Bret aprovecha que aquí no hay descalificación para hacer una Figura 4 en el poste, que resulta muy dolorosa.

Austin no se rinde, y su rival recurre a los objetos. Quiere hacerle daño en la pierna con una silla, pero Austin le pega con ella en la cabeza. Y luego en la espalda, y comienza a llevar a cabo varios ataques ahí con el fin de hacerle rendir posteriormente con varias llaves. Austin conecta las Walls of Jericho, pero no consigue llevarse la victoria. Luego intenta el Sharpshooter, pero Bret le frena con un piquete de ojos.

Los luchadores vuelven al brawl, y Austin es lanzado contra las mesas, y golpeado con las vallas metálicas. Sangra profusamente, y pierde mucha sangre. Y Bret, que sabe más que nadie en este negoico, le golpea en la cabeza de una forma enfermiza.

Austin está desangrándose, pero no se rinde. Bret vuelve a por la pierna, usando sillas, pero Steve no permite que se cierre sobre él de nuevo el Escorpión. Intenta atacar con violencia y desprecio, y cortes de manga. Ahorca con los cables a su rival, pero Bret le pega con la campana en la cabeza, abriendo aún más su herida. Después de eso, aplica la Sharpshooter durante mucho tiempo, mientras la sangre cae desde la frente de Austin al ring. Austin, heroico, no se rinde, aguanta, se levanta con los brazos, y llega a desestabilizar a Bret. Pero este retoma de nuevo la posición correcta, y la llave continúa. Al final, Austin queda KO, ha perdido tanta sangre que no se mueve. Shamrock para la lucha, y aunque Stone Cold no se ha rendido, ha sido derrotado.

La lucha es muy grande, y hay poco que se le pueda achacar. Hart está perfecto, aunque es cierto que en ningún momento se siente que Austin pueda ganar. Sus ataques no están al nivel de los de su rival.

Puntuación: ****3/4 

sábado, 1 de abril de 2017

Randy Savage vs DDP, WCW Halloween Havoc 1997




Seguimos con el especial del Hall of Fame 2017. En el anterior post, comenzamos a hablar sobre DDP, y repasamos esa buena lucha que tuvo frente a Randy Savage en The Great American Bash 1997. Hoy vamos a por otro combate con los mismos protagonistas, en Halloween Havoc 97.

Las trampas de la NWO le dieron la victoria al enloquecido Savage. En el siguiente PPV, Bash at the Beach, Page hizo pareja con Curt Hennig para enfrentar a los dos protagonistas de su derrota, Savage y Hall. Hennig apareció como gran sorpresa, pero acabó ayudando a la NWO al final de la lucha, provocando otra derrota de DDP con trampas. A estas alturas, ver cada semana la misma trampa de la NWO era exasperante.

En el siguiente PPV, Road Wild, la cosa no mejoró. Ahora fue Hennig quien derrotó a DDP, gracias a la interferencia de Ric Flair, que quería atraer a Mr Perfecto al grupo de los 4 Horsemen; y gracias, de nuevo, al KO de un árbitro que coincidía con el Diamond Cutter de Page. Siempre igual. Pero al fin, en el siguiente PPV, Fall Brawl, DDP se llevó una victoria, al hacer pareja con Lex Luger para derrotar al equipo formado por Randy Savage y Scott Hall. Eso sí, el final volvió a ser una estupidez, con árbitros muertos por todos lados, pero esta vez el resultado fue a favor de los buenos.

En Halloween Havoc, DDP y Randy Savage volvieron a encontrarse en combate singular. Es un momento en el que la storyline de la NWO estaba en su punto álgido. Todos los programas de la empresa están dominados por el stable, y en las gradas hay un montón de camisetas con sus siglas. En este momento, es imposible hacer una lucha que no esté llena de interferencias o trampas.

DDP vuelve a tener una venda alrededor de su cintura. En esta ocasión, llega sin  Kimberly, pero Savage sí que tiene a su lado, como siempre a Miss Elizabeth, con su camiseta de la NWO. Debo decir que la veo más atractiva que en el año 90, más madura, aunque el rol de ruda no le pega nada,  porque tiene cara de buena chica. Es una lástima que le quedaran pocos años de vida. Su final fue el mismo que el de tantas personalidades de este deporte: sobredosis.

La lucha es buena, tiene algunas partes interesantes, pero el bookeo de WCW vuelve a ser estúpido, y se la carga. Los luchadores tienen un intercambio normalito en el ring, hasta que vuelven a irse a luchar entre el público, y a brawlear entre las tumbas que forman la escenografía de Halloween. Hay que recordar que esto es un Las Vegas Sudden Death Match, que viene a ser un Last Man Standing Match. 

Savage, que está como una cabra, le roba la cámara a un camarógrafo, e intenta golpear a DDP con ella, pero este le pega una patada desde el suelo, haciendo que sea Randy el que se golpee. La cámara queda rota, y cuando el referee va a comenzar con la cuenta de 10, llega Elizabeth desde atrás y le rompe un plato en la cabeza. La rubia aprovecha para ahorcar a DDP con un cable, hasta que aparece Kimberly y se la lleva.

Señalemos el hecho de que la manager de Savage ahorcó a DDP después de dejar KO al árbitro. No hacía falta, porque aquí no hay descalificaciones. Al final de la lucha, este error de bookeo habitual en WCW se hará aún más importante, y por tanto, estúpido.

DDP aplica facebuster sobre Savage, y va a por el Diamond Cutter, pero el macho se agarra a la cuerda, y DDP es el que cae. De una forma absurda y poco creíble, queda KO después de ese intento, lo que Randy aprovecha para aplicarle dos veces el Flying Elbow, aunque la cuenta no llega, aún, a 10. Randy busca un Body Slam para intentar un nuevo codazo aéreo, pero al agarrar a DDP, golpea al referee, que queda KO OTRA VEZ. Como consecuencia de esto, la cuenta no llega a 10.

Randy aplica un golpe bajo a DDP, que cae doliéndose a ringside. El referee va a llevar a cabo la cuenta, pero Savage le agarra para que no mire. Con el referee despistado, entra Sting (que resultaría ser un falso Sting, a favor del bando NWO), y golpea con el bate a DDP en su herido estómago. Savage suelta al referee, que cuenta hasta 10. Victoria para Randy.

Ojo, que Macho King estaba agarrando al referee para que no mirara mientras Sting golpeaba a DDP, pero eso es estúpido, porque en un Last Man Standing no hay DQ. Sting podría haber golpeado a Page con el referee delante, y no habría pasado nada. Es increíble que los guionistas cometan estos errores, aunque es un indicativo claro del producto que se hacía en los 90. 

La lucha es buena, buen storytelling, pero hay mucha tontería, cosas que desprecian la inteligencia del espectador, y eso no me gusta. 

Puntuación: ***

viernes, 31 de marzo de 2017

Randy Savage vs DDP, WCW The Great American Bash 1997




Después de dedicar unas palabras a Kurt Angle y a Beth Phoenix, vamos a ver un par de luchas de otro exaltado al Hall of Fame de WWE en 2017, el gran Diamond Dallas Page.

Es muy complicado decir algo malo de DDP. Es un tipo bastante respetable, en general, no ha hecho ningún enemigo nunca. Tuvo una carrera no muy larga, pero un poco intensa. En una época en la que WCW vivía de leyendas o luchadores que sacaba de otras ligas, DDP se fue abriendo paso, desde el midcard, poco a poco, hacia los main events, enfrentándose a la NWO, y luego, formando parte del stable, como todo el mundo.

Posteriormente tuvo pequeños pasos por WWE y TNA, sin nada destacable. No es que fuera un luchador excelente, ni que su carrera fuera inmensa, pero durante unos años se ganó el cariño del público, siendo considerado el primer campeón del pueblo. Además, su finisher, el Diamond Cutter, es el precursor del RKO de Randy orton.

En última instancia, DDP, una vez retirado, creó un programa de Yoga, el DDP Yoga, con el que ha ayudado a mucha gente a salir de adicciones, problemas psicológicos o problemas físicos. Incluso WWE ha mandado a gente a usar este sistema. Sus relaciones con la empresa son buenas, así que últimamente le hemos podido ver en un Royal Rumble y en un Andre the Giant Battle Royal. Ahora, le toca entrar al Salón de la Fama.

Tenemos un par de luchas famosas de DDP en el blog, como la que tuvo con Sting, o aquella en la que se enfrentó a Goldberg. Las dos son muy interesantes. Y en este especial, incluiré dos luchas suyas frente a Randy Savage, un tipo con el que tuvo una rivalidad en el 97, cuando estaba en la NWO.

DDP mantenía una rivalidad importante con Eddie Guerrero, cuando la NWO se hizo fuerte, y sus antiguos amigos, Kevin Nash y Scott Hall, intentaban ayudarle a ganar. Page no quería su ayuda, y esto provocó una rivalidad con el grupo. Cuando la NWO le ofreció un puesto en el stable, DDP respondió con Diamond Cutters.

DDP se convirtió en face en ese momento, y su rivalidad con la NWO se concretó con Randy Savage, que escribió la palabra 'NWO' sobre su cuerpo. La rivalidad fue creciendo, y los dos luchadores se vieron las caras en varias ocasiones, incluida la que comentamos hoy, en The Great American Bash 97, en un Falls Count Anywhere Match, que fue el main event de la velada.

Savage es acompañado por Miss Elizabeth, mientras que DDP tiene la suerte de contar en su esquina con su mujer, Kimberly. El feudo está caldeado, y el odio se respira en el ambiente. Pronto, se monta el brawl, y los protagonistas pelean entre el público como dos locos. DDP llega, por cierto, con una venda en el estómago, fruto de los ataques recibidos con anterioridad.

Savage lanza arena en los ojos de DDP, y le rompe algo parecido a un plato en la cabeza. Luego, aprovecha para atacar su estómago y Page vende bastante bien el dolor ahí. Le patea como un enfermo, y posiblemente lo esté. A Savage se le va la cabeza, y asesina al referee, vía piledriver.

Y sigue haciéndolo con el resto de los árbitros que salen, e incluso con un cámara. Es pura maldad. Asimismo, los luchadores continúan con su brawl, utilizando varios objetos y decorados en la batalla.

Page se pone por delante. Aplica un facebuster, y busca del Diamond Cutter. Consigue conectarlo finalmente, gracias al tiempo que Savage pierde pegándole a la gente, incluido Nick patrick, el referee de la NWO. Pero cuando DDP aplica su finisher, ocurre lo que todo el mundo sabe que ocurrirá cuando hay una lucha de la NWO: llegan lo refuerzos.

Scott Hall está aquí, y evita la victora de DDP. Entre el Macho Man y Hall destruyen a Page, quedando la victoria en manos de Savage via Flying Elbow.

Una lucha bastante buena, con un Randy enloquecido. En una época en la que todos los main events de la NWO era basura, una pelea notable como esta se agradecía. Savage, tanto como face o como heel, sabía contar una historia.

Puntuación: ***1/2

miércoles, 29 de marzo de 2017

Adam Cole vs Christopher Daniels, ROH 15th Anniversary Show



En el primer show de la historia de Ring of Honor, se enfrentaron, en el main event, Low Ki, Bryan Danielson y Christopher Daniels, en una triple amenaza. Los dos primeros se convirtieron en campeones de la empresa durante los primeros años de vida de la misma, pero Daniels nunca lo consiguió.

Hasta ahora. En el aniversario número 15 de la empresa, el Ángel Caído se ha llevado el título, con 47 años de edad. El show es, casi, un homenaje a su carrera, y la lucha gira alrededor de ese aspecto.

En la previa al PPV de 15 Aniversario, vemos a Daniels hablando sobre los comienzos de su carrera, nada más y nada menos que en el año 1993, que es cuando él debutó. Y es que, aunque es conocido por la carrera que llevó a cabo a partir de la década del 2000, ya llevaba, entonces, unos cuantos años luchando, con pequeños pasos por WWF y WCW. Aunque formó parte de esa gran generación de luchadores indies en la que estaban AJ Styles, Bryan Danielson, Chris Hero o Samoa Joe, lo cierto es que era un poco mayor que todos ellos. 

Por su parte, Adam Cole, actual campeón de ROH y primer 3 veces campeón de la empresa, aparece también en ese previo, con imágenes de él mismo en ese año 93, cuando era un niño muy pequeño. Todo es una burla hacia la carrera fracasada de Daniels. Posteriormente, antes de la lucha, Christopher presta otras declaraciones, en las que prácticamente está llorando.

Aunque se cuenta una historia sobre la última oportunidad de conseguir algo que Chris nunca ha hecho, lo cierto es que tampoco se puede considerar que Daniels lleve toda la vida intentándolo, puesto que estuvo muchos años en TNA, empresa en la que hizo de todo, fue campeón mundial, y se puso la máscara de varios personajes, incluidos Suicide y Curry Man. Pero bueno, el storyline es bueno, aún así.

The Fallen Angel consiguió ganar un torneo para convertirse en retador número uno, lo que fue sorprendente. Llega aquí como underdog de la lucha, y de hecho, Cole le desprecia y maltrata durante la primera parte de la misma. Tiene algunas palabras hirientes hacia él, además.

El público está con Christopher... Pero no mucho. La verdad es que hay un público mayor que el de los inicios de ROH, pero mucho más tranquilo y callado. No parece muy interesado en el ganador, salvo unos pocos que cantan. Eso daña bastante una historia que debería ser emocionante.

Cole lleva ventaja, hasta que Daniels se harta. Golpea en la cara al campeón, lo lanza fuera del ring, y vuela encima de él. Pero después, se pega un porrazo contra el poste muy duro, y sangra mucho. Cole le vuelve a pegar contra el palo, y Daniels se desangra.

Adam golpea en la cabeza a su rival, que sangra tanto, que el campeón se restriega la sangre contra el pecho. El castigo continúa durante unos minutos, así como las palabras llenas de desprecio de Cole, que acaban provocando la furia de Daniels. El retador protagoniza un par de ataques muy buenos, y luego la cosa se vuelve una batalla entre los slams del veterano y los golpes en la cara del campeón. Esta parte es un poco larga, y no mantiene el interés de los aficionados. Estos se animan mucho cuando El Fallen Angel utiliza el Styles Clash de su gran amigo AJ para intentar ganar, sin éxito.

El referee obeso, Todd Sinclair, queda KO al tragarse una super kick de Cole. El rudo intenta ganar con un golpe bajo, pero claro, no hay referee para contar. Entonces, llega Frankie Kazarian, ex-compañero de tag de Daniels, recién unido al Bullet Club. Le pide a Cole el título para pegarle a Daniels en la cabeza con él, y destruir sus sueños.

Pero no lo hace, lanza el título fuera del ring, y rompe su camiseta del stable. Cole está muy sorprendido, y no ve venir el ataque de Daniels, que aplica 3 veces el Best Moonsault Ever, ante el canto de los comentaristas, y se convierte en Campeón Mundial de Ring of Honor por primera vez en su vida.

Gran momento, y muy buena historia, aunque la lucha no es lo suficientemente regular, ni el público lo suficientemente interesado, como para recibir una gran nota.

Puntuación: ***1/2