Como ya hemos comentado en otros posts, el mundo se ha dado cuenta, casi al unísono, de que el virus COVID-19 es un peligro real. Así, de un día para otro, todo el mundo se ha tenido que encerrar en casa, y, como una de las muchas consecuencias, se han prohibido los espectáculos, y se han cerrado las arenas de lucha libre.
No vamos a ver muchos shows próximamente, al menos con público. Las empresas que tienen programas de televisión en el aire, tienen que seguir cumpliendo con sus obligaciones contractuales; algunas, como Impact Wrestling, Ring of Honor o MLW, tienen programas grabados para las próximas semanas (de hecho, MLW acaba de grabar en Tijuana, junto a The Crash, aprovechando que en algunas partes de México, los gobernantes todavía son muy laxos con respecto al virus, inconscientes de que ese tipo de eventos masificados son causa de graves brotes), pero las empresas que emiten en directo, o las que se queden sin material grabado, tienen que inventarse algo para cumplir con sus obligaciones.
La formula que van a seguir muchas de ellas, es la de grabar sus programas sin público. Así lo empezó a hacer WWE para sus programas semanales. Fue un experimento raro, en el que las luchas se vieron algo sosas, puesto que el sonido de las gradas es muy importante para un show de wrestling. AEW, por su parte, tuvo un poco más de éxito en ese sentido, al tener a varios luchadores en ringside y en las gradas, que animaron los combates. Algo parecido ocurrió en una grabación de la empresa mexicana IWRG, que emitió en directo por Youtube un show sin público, en el que, sin embargo, había algunas personas, familiares de los luchadores, y trabajadores de la Arena Neucalpan, que le daban un poco de vida a la cosa. Lo raro de estos eventos que planea emitir IWRG es que no responden a ningún modelo de negocio, así que el promotor debe perder dinero.
Quizás lo haga por amor al arte. Por entretener a los fans encerrados en casa. Muchas propuestas de este tipo se han ofrecido en Internet en las últimas horas. ¿Será por eso que Vince McMahon ha decidido llevar a cabo WrestleMania en su fecha original, sin público?
Poco a poco, nos damos cuenta del estado de excepción en el que vivimos ahora mismo. Si incluso ha afectado al producto de WWE, es que es realmente grave. Porque, durante los últimos 40 años, han pasado muchas cosas en el mundo. Ha habido muchos momentos preocupantes, pero lo que no ha fallado nunca, ha sido WWE. Como dijo Triple H en el primer episodio de Smackdown emitido desde el Performance Center, sin público, Vince siempre nos ha dado la oportunidad de olvidar nuestros problemas durante un par de horas, y ver su producto. Sin vacaciones de verano, sin parón navideño, sin nada: WWE siempre ha estado ahí.
Y el 4 y el 5 de abril, volverá a estar ahí. WWE llevará a cabo WrestleMania en dos fechas, desde el Performance Center, y quizás, desde alguna otra sede. La empresa podría haber pospuesto el show, hacerlo en verano, una vez, presumiblemente, haya remitido la amenaza, y asegurar los ingresos del show más importante del año, que supone una inyección económica vital para la compañía. Y, sin embargo, Vince nunca ha dudado, nunca ha parado ninguna de las rivalidades importantes que tiene previstas para esas jornadas: John Cena, Undertaker, Randy Orton, Kevin Owens, Goldberg, Seth Rollins, Ron Gronkowski, Becky Lynch, Edge, Charlotte Flair, Bray Wyatt, AJ Styles, Roman Reigns y el resto de estrellas de WWE, tendrán las luchas que se habían planeado durante meses.
La pregunta es: ¿por qué? ¿es porque Vince tiene los huevos más gordos que nadie, y se ha empeñado en que ni un puto virus va a conseguir que él cambie sus planes? Puede ser que sea por eso. También puede ser que piense que, cuanoo más miedo haya en la población, más importante es su labor de entretenerla. Este es un punto de vista altruista, que posiblemente ninguno de los detractores del chairman tendrá en cuenta. Quizás, por otro lado, Vince piense que emitir WrestleMania en esta situación, va a provocar un gran aumento en las suscripciones a WWE Network, o quizás esté negociando con Amazon para emitir el show a través de esa plataforma de Streaming. Quién sabe.
El caso es que este será el WrestleMania más raro de la historia. Se emitirá sin público, y, por eso, se ha tenido que partir en dos días. Primero, porque soportar 6 horas de un show soso sin público, sería complicado, y, segundo, porque las reglas en lo respectivo a reuniones en estas circustancias son muy severas, así que la empresa va a dar forma a su producto en dos fechas, y en varias localizaciones, para que no haya demasiada gente en un mismo lugar, al mismo tiempo. Hay que tener en cuenta que, para realizar un show, tienen que estar todos los luchadores, pero también los productores, agentes, anunciadores, comentaristas, entrevistadores, camarógrafos, iluminadores, maquilladores, bookers, informáticos, técnicos de sonido, community managers... mucha gente. En lugar de renunciar a cosas, Vince opta por la clásica técnica del Divide y Vencerás.
Como digo, he visto algunas luchas sin público. Las de Smackdown no me convencieron mucho, pero sí que lo hizo la batalla que se ofreció en 205 Live, el programa de luchadores de peso crucero que se emite en directo por WWE Network, tras Smackdown. En esa batalla, se enfrentó un equipo de luchadores que han estado en 205 Live desde hace tiempo, frente a un equipo de NXT, lleno de gente de la marca amarilla de WWE, que ahora, aparece en los programas de 205, puesto que el Cruiserweight Championship pertenece a NXT desde hace poco. Los 205 Live originals se han revelado, y eso da lugar a este combate.
Lo bueno de esta lucha con respecto al sonido, es que hay mucha gente involucrada. Es una lucha de 5 vs 5, y, además, en la esquina de 205 Live, están los Singh Brothers, los ruidosos gemelos indios, así que hay bastante ambiente. En el combate, participan los siguientes hombres:
205 Live: The Brian Kendrick, Tony Nese, Mike Kanellis, Ariya Daivari y Jack Gallagher.
NXT: Isaiah Swerve Scott, Tyler Breeze, Danny Burch, Oney Lorcan y, como sorpresa, se presenta Kushida, que sustituye a Lio Rush.
Así, tenemos una lucha bastante entretenida, un Elimination Match de estilo Survivor Series. Comienzan dominando los chicos de NXT, hasta que las trampas de 205 Live provocan una brawl entre todos, incluyendo a los chicos indios, que despistan los suficiente a Burch para que Nese le ataque con la cámara de vídeo que llevan ellos siempre, y lo elimine.
Jack Gallagher da más ventaja a su equipo, al eliminar a Tyler Breeze. El inglés. que con su nuevo tatuaje en el pecho, su color blanco y sus calzoncillos de leopardo, parece una instagrammer otaku ex-obesa, será muy importante en esta batalla.
Principalmente, por las discusiones con sus compañeros. Estas polémicas provocan que Nese y Kanellis sean eliminados. Daivari y Kendrick, por su parte, dan mucha más guerra, en una lucha que es larga, y ocupa todo el programa.
Swerve pone toda su habilidad en juego, y elimina a Kendrick y Ariya, con embolsamientos sorpresivos. Estos no quedan tranquilos, y atacan violentamente a los tres miembros del equipo NXT que aún sobreviven, mientras Gallagher observa, como último integrante del equipo 205 que sigue en pie.
Gallagher elimina a Lorcan, con un gran codazo, y hace un esfuerzo improbo por reducir la ventaja de NXT, volando desde la esquina, y atacando a Swerve y Kushida. No es suficiente, no obstante, y sucumbe ante el ataque de los dos hombres. Ambos golpean en el esquinero, y ambos utilizan palancas al brazo muy dolorosas, que acaban con una necesaria rendición.
No está mal la lucha. Muy apreciable, incluso teniendo en cuenta la falta de ambiente, que en este caso no resulta tan grave. Espero que, de cara a WrestleMania, WWE haga algo parecido a lo que ha hecho AEW en sus programas, y ponga algunos luchadores u otras personas en ringside y en las gradas.
Puntuación: ***1/2