En The New Beginning in Osaka, ocurrió algo que no esperaba: Jay White derrotó a Hiroshi Tanahashi, y se convirtió en IWGP Heavyweight Champion. Fue bastante sorprendente, porque es un título que no ha portado cualquiera, y ahora, se lo dan a este chico, para reforzar la storyline del nuevo Bullet Club. Es muy impropio de la New Japan, aunque no necesariamente malo.
Prince Devitt abandonó New Japan, pero el Bullet Club continuó vivo, con AJ Styles como líder. Cuando este se fue, también, a WWE, junto a Luke Gallows y Arn Anderson, el Bullet club se mantuvo, de nuevo, en New Japan, con Kenny Omega como nuevo líder, y The Elite como avanzadilla de todo el grupo. Ahora que Kenny, los Young Bucks, Cody y Page se van también, para formar AEW, El Bullet Club vuelve a ser reformado.
El caso es que hay muchos miembros del equipo que siempre han estado ahí. Pero son dejados en un segundo plano, mientras americanos que van y vienen, se hacen con el poder.
A finales de 2018, Gedo traicionó a Kazuchika Okada, y se convirtió en miembro del Bullet Club. Ahora, el líder será Jay White, un hombre que nunca me ha hecho mucha gracia, y que me recuerda a Baron Corbin. No tengo el más mínimo interés por ver un combate de ninguno de los dos. Para reforzar ese papel dominante que no se ha ganado en el ring, White se convierte en campeón de un título que tantos otros han merecido, y que nunca han tenido. Así, el storyline puede ser más interesante... Pero es Jay White. ¿Será capaz de dar las grandes luchas que merece este título?
En New Beginning in Osaka, White tiene la lucha más importante de su carrera, en la que derrota a Hiroshi Tanahashi para ganar el título más prestigioso de la industria. Y no se puede decir que lo aproveche muy bien, en términos de calidad. Comienza dañando la pierna de su oponente, después de una mala caída de este a ringside. Sus ataques no le llevan a buen puerto, pero aplica varios drivers y slams bastante buenos. Es Tanahashi, posteriormente, el que consigue aplicar un Texas Cloverleaf, con el que tampoco se da una rendición, pero que es tranformado brillantemente en un Styles Clash.
Hay grandes ataques por ambos lados, y el combate se define a favor de White, tras utilizar su finisher, el Blade Runner, que es el Sister Abigail de Bray Wyatt. Ojo, que lo hace sin haber usado, prácticamente, ni un movimiento a la cabeza del rival en toda la lucha. Muy mediocre.
Puntuación: ***1/4