The Beast in the East es un evento especial para WWE, que convirtió un house show en un programa para WWE Network gracias a la presencia de Brock Lesnar. Pero si la presencia de Brock era lo más interesante para el público masivo americano, los japoneses estaban mucho más interesados en ver a su ídolo Prince Devitt, ya que la leyenda japonesa Kenta esta lesionada.
Devitt luchaba en el especial contra Kevin Owens por el título de NXT. Owens es un tipo que genera odio más que cualquier otro, y no en vano está metido en tres rivalidades a la vez: John Cena, Samoa Joe y Finn Balor. La que tiene contra este último es la última que se ha presentado, posiblemente porque WWE ha visto con muy buenos ojos darle el título al ex de NJPW en tierras niponas.
Owens es un asesino, pero Balor no se deja intimidar. Kevin empieza con dominios y abusos, pero Devitt se revuelve, y comienza a pegar golpes en la cara por todos lados. La lucha se vuelve muy rápida y divertida, con un público muy metido. Aunque Balor tiene como objetivo principal la cara y el pecho de Owens, este ataca arbitrariamente, como en él es habitual, y caba convirtiéndo la lucha en una guerra de Big Moves.
Balor es más debil, pero tiene todo el poder del público japonés detrás, que le apoya, y le hace levantarse una y otra vez. Concatena un gran clothesline con patadas frontales de canguro, para acabar con un Coup de Grace, que le da la victoria.
Gran victoria de Balor, que en realidad puede significar que Owens se va al roster principal, mientras que él se queda en NXT. En realidad, veo un personaje más de WWE a Balor, con sus pinturas y su físico, puede cubrir el espacio de llenaba Jeff Hardy entre los adolescentes.
Puntuación: ***3/4