Vamos a ver una lucha más de Goldberg, en este especial sobre el Hall of Fame de WWE. Hoy toca su combate frente a Chris Jericho en Bad Blood 2003.
Goldberg pasará a la historia por su trabajo en WCW, y no por el añito que pasó en WWE. A pesar de reconocer su poder, y aprovecharse de su capacidad para vender entradas, Vince siempre pondrá a las estrellas creadas por él mismo por delante de cualquier otro luchador de fama mundial. Aunque no los pondrá por delante de las estrellas de cine, MMA o boxeo.
Pero, si nos ceñimos al trabajo in-ring, en WWE se lucha mejor que en la WCW de finales de los 90. Al menos, se hace un buen trabajo con los personajes. Cuando Goldberg sale al ring, siempre es Goldberg, no se pone a luchar con llaves de MMA ni tonterías de esas. Es un animal. Lo demostró en la Elimination Chamber que comentamos en el post anterior, y lo demuestra en la lucha de la que hablamos hoy.
En esta lucha, Goldberg hace de Goldberg, y Jericho hace de Jericho. No tenemos ataques aleatorios llevados a cabo para parecer guays, y que no aportan nada a la historia, que es algo que inhunda el wrestling hoy en día. Pero, ¿por qué se enfrentan Jericho y Goldberg en Bad Blood 2003?
Goldberg llegó a WWE como una estrella, venciendo a The Rock, que se iba para dedicarse por completo a su carrera como actor. Poco después de eso, estuvo presente en uno de los Highlight Reel de Jericho. Jericho le atacó, afirmando que nadie quería a Goldberg en WWE. Ni él, ni nadie. En realidad, escondía una gran envidia, puesto que, según comentaba, por culpa de Goldberg él nunca pudo avanzar en su carrera en WCW, y tuvo que irse a WWE para ser la gran estrella que demostró ser en la empresa de Vince. La llegada de Bill pone en peligro su estatus.
Tuvo lugar, entonces, una de esas historia extrañas que ejecuta, de vez en cuando, WWE. Cuando Goldberg estaba sentado en su limusina, con una puerta abierta, pasó otro coche, y se llevó la puerta por delante, quizás con la intención de atropellar al excampeón de WCW. El coche fue reconocido como el de Lance Storm, el gran amigo de toda la vida de Jericho. Tras una paliza de Goldberg, Lance confesó que todo había sido idea de Chris. Así llegamos a esta lucha en Bad Blood.
Una lucha muy buena, bien realizada. Simple en su desempeño, básica y old school, pero cumpliendo su proposito al 100%. Goldberg es una bestia imparable, 100 veces más fuerte que Jericho. Le pega una buena paliza al canadiense, pero comete un error grave, al lanzarse como un caballo desbocado sobre su rival. Jericho se aparta, y Goldberg atraviesa las barricadas, destrozándose el hombro en su camino.
Goldberg está herido y Jericho lo aprovecha con buenas llaves y candados sobre su brazo. Goldberg está manco, y lo vende muy bien. Cuando intenta realizar un comeback tras un Spear, es incapaz de llevar a cabo el Jackhammer, por el daño en su hombro. Jericho aprovecha un despiste del referee para pegarle un Fault a Goldberg, y volver a poner las cosas bien para él.
Jericho aplica sus Walls, pero Goldberg no se va a rendir. Jamás lo hizo, ni lo hará, me temo. No obstante, Bill pilla a Jericho con otro Spear, y de ese golpe ya no puede recuperarse el primer campeón indiscutido. Jackhammer y se acabó el combate.
Puntuación: ***1/2