El año 2010 toca a su fin. Sin duda alguna, no ha sido el mejor año en el mundo del wrestling, pero ha habido, como siempre, combates realmente buenos. Ejemplos de esto son Undertaker vs Shawn Michaels en Wrestlemania 26 o Davey Richards vs Tyler Black en Before Dishonor VIII.
Pero antes de acabar el año, Ring of Honor tenía algo interesante preparado. El último PPV del año nos traía la finalización de la mejor rivalidad de 2010: Kevin Steen vs El Genérico.
Kevin Steen y El Genérico han formado una de las mejores parejas de los territorios americanos independientes en los últimos años. Pasaran a la historia por ser un gordo muy ágil y un flacucho muy fuerte. Pero su relación se rompió en la edición del año pasado de Final Battle.
Kevin Steen se ha vuelto un verdadero enfermo mental, y eso lo notaréis claramente en su lucha. Durante todo el año, le ha hecho la vida imposible al Genérico, y han estado batallando en luchas tag (con Corino y Cabana) en diversas ocasiones. Mucha sangre ha corrido.
ROH nos guarda para el final del año la lucha entre ambos, una lucha en la que El Genérico pone su máscara en juego, mientras que Steen tendrá que dejar la empresa si cae derrotado. Es una lucha sin honor, todo vale.
Realmente, no esperen ver técnica ni psicología, esto es un combate de odio, han venido a matarse. Kevin Steen está loco perdido y su antiguo amigo está hasta los Huevos del él. Genérico comienza bien el combate, a base de sus famosas patadas. Rápidamente, hace sangrar a su rival, pero este demuestra estar enfermo y no importarle la sangre. De hecho lame y extiende por su cuerpo su sangre y la que hace emanar del Genérico.
Steen le pega una paliza realmente alarmante al Genérico, pero este lo aguanta TODO. EL gordito se vuelve cada vez más loco y se carga a dos o tres árbitros. Ni siquiera la intervención de Corino consigue acabar con el espíritu del luchador enmascarado.
El Genérico se rehace y destruye al Steen con un increíble Brainbuster en el esquinero. El final del combate es muy bueno. Kevin pide clemencia e intenta reavivar los sentimientos de amistad de su antiguo compañero de equipo, dándole su máscara. El Genérico parece vacilar, pero finalmente acaba con su rival con un silletazo.
Increíble forma de acabar un gran feudo. No se puede escenificar mejor el odio ni la locura de Steen.
Puntuación: *****
Pero antes de acabar el año, Ring of Honor tenía algo interesante preparado. El último PPV del año nos traía la finalización de la mejor rivalidad de 2010: Kevin Steen vs El Genérico.
Kevin Steen y El Genérico han formado una de las mejores parejas de los territorios americanos independientes en los últimos años. Pasaran a la historia por ser un gordo muy ágil y un flacucho muy fuerte. Pero su relación se rompió en la edición del año pasado de Final Battle.
Kevin Steen se ha vuelto un verdadero enfermo mental, y eso lo notaréis claramente en su lucha. Durante todo el año, le ha hecho la vida imposible al Genérico, y han estado batallando en luchas tag (con Corino y Cabana) en diversas ocasiones. Mucha sangre ha corrido.
ROH nos guarda para el final del año la lucha entre ambos, una lucha en la que El Genérico pone su máscara en juego, mientras que Steen tendrá que dejar la empresa si cae derrotado. Es una lucha sin honor, todo vale.
Realmente, no esperen ver técnica ni psicología, esto es un combate de odio, han venido a matarse. Kevin Steen está loco perdido y su antiguo amigo está hasta los Huevos del él. Genérico comienza bien el combate, a base de sus famosas patadas. Rápidamente, hace sangrar a su rival, pero este demuestra estar enfermo y no importarle la sangre. De hecho lame y extiende por su cuerpo su sangre y la que hace emanar del Genérico.
Steen le pega una paliza realmente alarmante al Genérico, pero este lo aguanta TODO. EL gordito se vuelve cada vez más loco y se carga a dos o tres árbitros. Ni siquiera la intervención de Corino consigue acabar con el espíritu del luchador enmascarado.
El Genérico se rehace y destruye al Steen con un increíble Brainbuster en el esquinero. El final del combate es muy bueno. Kevin pide clemencia e intenta reavivar los sentimientos de amistad de su antiguo compañero de equipo, dándole su máscara. El Genérico parece vacilar, pero finalmente acaba con su rival con un silletazo.
Increíble forma de acabar un gran feudo. No se puede escenificar mejor el odio ni la locura de Steen.
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