Un año más, NJPW ofrece a sus fans el torneo Best of Super Jr, con lo mejor de los Junior Heavyweight de la empresa, así como algunos invitados: Bárbaro Cavernario y Máscara Dorada, del CMLL; Barreta, ex de WWE y luchador actual de la nueva empresa de Jeff Jarrett, Global Force Wrestling; Chase Owens, de la NWA; Bobby Fish, de ROH; Kyle O'Reilly, del circuito indy yankee, el joven hijo de Fit Finlay, David Finlay, y los habituales de NJPW: Jushin Thunder Liger, Gedo, Tyger Mask IV, Kushida, Alex Shelley, Taguchi, Rocky Romero, Nick Jackson y Yohei Komatsu.
Los Best of Super Jr no son como los clásicos Super J Cup (que más quisiera yo). Los torneos actuales funcionan en forma de liguilla, de manera que todos se enfrentan con todos, en luchas cortas y sin mucho valor e importancia. Tan solo tiene interés la final, que disputan los ganadores de los dos grupos en los que se divide la liga. En 2015, esos dos finalistas son Kushida y Kyle O'Reilly.
La final entre estos dos es realmente fantástica. Kushida es uno de los luchadores en mejor forma del circuito mundial, y Reilly es muy bueno, aunque sea menos conocido por no estar en ninguna gran liga. EL combate es una batalla de llaves al brazo. Los dos atacan a la misma zona, y se van haciendo daño poco a poco.
Arm Breaker, Kimura Lock, y todo tipo de llave al brazo vuela de aquí para allá, hasta que ambos parecen convencidos de que el rival no se va a rendir tan fácilmente, y empiezan a darse hostias de todo tipo. Varios facebusters y slams caen por todos lados, mientras que se siguen aplicando llaves a los brazos, y empiezana a hacer daño de verdad, a medida de que desgasta el espíritu de los contendientes.
La lucha es genial, muy creíble, y muy emocionante. El público japonés vibra, y los luchadores se matan entre ellos, con golpes en la cara muy fuertes. En este contexto, una última palanca al brazo de Kushida obliga a Kyle a rendirse en una lucha muy muy interesante.
Puntuación: ****1/2