En 2023, WWE llevará a cabo un PPV en Puerto Rico. El 6 de mayo de este año, la empresa viajará hasta San Juan, al Coliseo de Puerto Rico, para desarrollar Backlash, el evento de pago por visión que da rienda suelta a las consecuencias de lo acontecido en WrestleMania. Tenemos que remontarnos 18 años para encontrar un show de estas características en esa tierra: el 9 de enero de 2005, tuvo lugar en el mismo recinto, ante más de 15.000 personas, WWE New Year Revolution, un show exclusivo de la marca Raw que abría el año de hostilidades en la empresa. Me alegró mucho saber que WWE volvía a Puerto Rico, pues es esa tierra un lugar de rancio abolengo luchístico, un poco abandonado quizás en la última década. Volveremos a escuchar los conteos en español desde las gradas. Me gustaría, pues, reivindicar este hecho histórico, revisando brevemente el main event de ese último PPV ocurrido en San Juan: en una Elimination Chamber, se enfrentaban Triple H, Batista, Randy Orton, Edge, Chris Benoit y Chris Jericho; seis luchadores que ahora podríamos considerar leyendas. Pero contextualicemos un poco.
En esa época, el título principal de Raw era el World Heavyweight Championship. En WrestleMania 2004, vimos al fin a Chris Benoit hacerse con la correa más importante del mundo, mas su reinado no pasaría de SummerSlam, donde fue derrotado por Randy Orton, que se convirtió en el Campeón Mundial más joven de la historia.
Entonces, la storyline de Evolution dominaba la narrativa de Raw. Triple H, Batista, Randy Orton y Ric Flair formaban un gran equipo que aunaba el pasado, el presente y el futuro del wrestling. Sin embargo, comenzaron los problemas, pues ese futuro tendía a convertirse en presente. El primero en excederse en sus ambiciones fue Randy; al convertirse en Campeón, fue observado como un traidor en el grupo, y este lo atacó violentamente. En Unforgiven 2004, Triple H recuperó lo que estimaba suyo, después de recibir ayuda de... todo el mundo. La primera de las muchas rivalidades que han tenido estos dos en su carrera se saldó con victoria, por extraño que parezca, del narizotas.
Ese reinado en realidad duró poco. Quizás para justificar la necesidad de realizar una Elimination Chamber en New Year Revolution, o quizás para contar dos reinados a Triple H por el precio de uno, el título quedó vacante a principios de diciembre, tan sólo para que Hunter lo volviera a ganar en dicha batalla. El 29 de noviembre, Randy Orton asumió el rol puntual de General Manager de Raw, y dispuso una batalla titular. Nada más comenzar el Show, se disputó una battle royal cuyo fin era encontrar un retador, y que acabó con Edge y Benoit cayendo al mismo tiempo fuera del ring. Así pues, fue una Triple Amenaza lo que vivimos en el main event de esa velada: Triple H vs Edge vs Benoit, y tampoco entonces hubo un ganador claro, porque la lucha acabó, de nuevo, con ambigüedad entre los dos canadienses: Benoit aplicaba un candado al cuello con la espalda plana, de tal manera que, al mismo tiempo que Edge se rendía, el referee decretaba el pinfall. Un árbitro le daba la correa a uno mientras el otro se la quitaba para entregársela a su rival. La semana siguiente, aparecería Vince McMahon con el trofeo, declarándolo vacante. La solución: una Elimination Chamber con Hunter, Benoit, Edge, Batista, Orton y Jericho involucrados. Durante las semanas previas a la batalla, se disputó un Beat the clock challenge para dictaminar el luchador que saldría en última posición en esa contienda, y el ganador fue Batista.
Esto es importante. Triple H temía que ocurriera lo mismo que había pasado con Orton: que Batista se le subiera a las barbas. Y tenía motivos para temerlo, porque en esa época el Animal honraba su mote. Se mostraba casi imbatible: dama miedo el poder que era capaz de expresar. WWE lo observaba como a una futura estrella, y su paso al estrellato de hecho no tardaría mucho en llegar: a finales de enero de 2005, pocas semanas después del Chamber, se proclamaría ganador de Royal Rumble, para retar a Triple H en WrestleMania y salir triunfante. Sí, Triple H era un abusón, pero consiguió poner over a todos sus compañeros de Evolution, primero liderando una agrupación que les dio protagonismo, y después manteniendo grandes rivalidades con todos ellos. Pero, ¿Qué pasó en la Elimination Chamber de New Year Revolution?
Hay que decir que el Referee especial de la contienda es Shawn Michaels; medida esta interpuesta para frenar las trampas de Evolution, pues Hunter y HBK no se llevaban muy bien en la época. Este tipo de combates siempre debe empezar con un enfrentamiento en single entre dos luchadores habilidosos, mientras los otros cuatro participantes esperan en una cápsula hasta que llegue su respectivo turno. La elección en este caso es obvia: Benoit y Jericho, dos hombres con química que se han enfrentado muchas veces en su carrera, comienzan la pelea, con una demostración técnica notable. Después de un Superplex de Benoit sobre Jericho, se escucha la cuenta de 10 en español. The Game hace acto de aparición para brawlear a sus rivales y estrenar el uso del metal, no aprovechado por estos en la fase inicial. El Wolverine comienza a sangrar después de ser lanzado sobre las rejas y HHH lo acentúa, golpeando aún más su cabeza. Posteriormente,Jericho le da al americano de su propia medicina, al lanzarlo en diversas ocasiones sobre el metal.
Entra en cuarta posición Edge, muy enérgico, como en el caso de Hunter, aplicando ataques sobre todos. Lanza con resorteras a sus rivales contra las rejas, extendiendo la sangre por doquier. La pelea se convierte en una Fatal Four Way, con opciones para todos, hasta que llega el turno de Randy Orton. El luchador de tercera generación aparece volando, pues entonces aplicaba unos crossbodies desde la esquina tremendos, y golpea con saña a su antiguo mentor, mientras Batista espera que se abra su celda impaciente. Jericho recibe Pedegree y RKO sobre su cabeza ensangrentada, pero se mantiene en batalla. Benoit atrapa a Randy con uno de sus candados, mientras Triple H se burla del jovencito. Ante esto, Benoit cambia su presa y aplica Sharpshooter sobre el yerno de McMahon. Por desgracia para él, su posición es perfecta para recibir el RKO por parte de Randy. Esto se está animando.
Edge busca Spear sobre Orton, pero este lo evita, y es el referee, Shawn, el que lo recibe. Vuelve a probar el canadiense con más éxito, pero HBK no está listo para contar, por motivos obvios. Cuando el Rated R Superstar le reclama, recibe una previsible Sweet Chin Music, que Jericho remata con Lion Sault. Así llega la cuenta de tres: Edge es el primer eliminado.
Benoit ataca a Triple H con tres Suplexs, y se lanza con un loquísimo Diving Head Butt desde la parte superior de una de las cabinas que encierran a los luchadores. Con semejante caída sobre su cabeza, no es de extrañar que al finalizar su vida, su cerebro estuviera en las condiciones en que estaba. Mientras Jericho aplica Walls of Jericho Sobre Hunter, su tocayo atrapa el brazo y la cabeza del líder de Evolution con un Crossface. El castigo es excesivo, pero un animal es liberado. Batista sale de su jaula para atacar a los canadienses y liberar a su jefe. Ante los gritos de los Puertorriqueños a su favor, Batista expresa su furia, con grandes problemas para contenerla cuando se topa con Triple H. Batista lanza a Jericho contra un cámara, que queda herido en el suelo. Nadie se libra de su fuerza bruta. La chamber es abierta para atender a este hombre, y eso tendrá consecuencias. Mientras eso ocurre, los luchadores pelean como si esto fuera una battle royal, sin contar nada concreto. Después de unos minutos, el dominio activo de Batista se reinicia, y este elimina a Benoit y Jericho de manera consecutiva. Al primero le aplica un Spinebuster, antes de lanzarle encima a Y2J con la misma técnica. Benoit queda fuera de la batalla, y poco después pasa lo mismo con el rockero, víctima de un PowerSlam seguido de una Batista Bomb. El Animal ha demostrado que está en un estado de forma imparable. Esto se decidirá entre los hombres de Evolution.
Randy Orton recibe una buena paliza por parte de los otros dos hombres. Estos le humillan, si bien este segmento de la batalla no resulta especialmente dinámico. Parece que Hunter y Dave compiten, pues ambos utilizan Spinebuster. Empatan, dado que ninguno acaba con la resistencia de Randy. El abuso continúa, mientras se respira una duda en el ambiente: qué pasará si Batista y Triple H se enfrentan al final? No tendrán ocasión, pues Randy protagoniza un comeback de la nada. Pega golpe bajo a Batista, antes de aplicarle el eficaz RKO. Batista es eliminado ante la decepción del público. En su enfrentamiento individual, Randy consigue aplicar asimismo RKO sobre Hunter, mas la "magia" de evolution actúa una vez más. Batista, aun en la jaula, agarra a Shawn mientras Ric Flair aprovecha que la celda había quedado mal cerrada para colarse. Cuando esto ocurre, Michaels y el Nature Boy pelean, al tiempo que Batista ataca a Randy. Cuando los que sobran se van, Triple H tiene ventaja: aplica Pedegree y se acabó. Victoria y nuevo reinado para él. Esto, como sabemos, no acaba aquí.
Buena batalla: storytelling con momentos de buena pelea. Tiene, eso sí, la pelea, algún que otro segmento más lento, y desde luego está lejos de las mejores chambers, pero sigue siendo muy buena.
Puntuación: ****1/4
sábado, 29 de abril de 2023
Triple H vs Batista vs Randy Orton vs Edge vs Chris Benoit vs Chris Jericho, WWE New Year Revolution 2005
sábado, 3 de abril de 2021
JBL vs John Cena, I quit match, WWE Judgement Day 2005
Terminamos la parte dedicada a John Bradshaw Layfield dentro de este especial sobre el Salón de la Fama de WWE, y los inducidos de 2020. En el primer artículo que comentamos sobre él, nos centramos en su carrera como luchador de equipo, en APA. Hoy, hablamos de esa segunda parte de su carrera, en la que se convirtió en el cabrón al que conocemos como JBL, y en la que llegó a los main events de WWE.
Esto ocurrió en 2004, época de cambios en WWE, en la que gente como The Rock, Steve Austin, Brock Lesnar o Goldberg desaparecían, y se iniciaba la era Ruthless Agression. En Smackdown, en concreto, también se habían lesionado Kurt Angle y Big Show, así que había mucho margen para la creación de estrellas, y tras el retiro de Faarooq, un currante como Bradshaw merecía un push.
El personaje de JBL se fue construyendo a base de promos, con referencias anti-inmigración, un sombrero vaquero, un cochazo, y un fajo de billetes en la cartera. Comenzó, así, una rivalidad con el hispano Eddie Guerrero, Campeón de WWE, al que quitó la correa, en un Texas Bull Rope Match que ya comentamos en su momento, y que estuvo muy bien. Durante ese año, fue creciendo su personaje, saliendo victorioso de rivalidades con Guerrero, Undertaker y JBL, confirmándose como un buen campeón, al menos a nivel de storylines, y formando un stable, The Cabinet, con el que consiguió salir victorioso de muchos malos momentos.
Pero el final de Royal Rumble 2005 dejó claro lo que iba a ser esta nueva era. Dos nuevas estrellas se presentaban, llegando a la accidentada final de la competición. Tras el error que todos conocemos, Batista venció a John Cena, aunque si el error hubiera producido un cambio en el resultado, no hubiera pasado nada, porque ambos fueron contendientes a títulos mundiales en WrestleMania. Entonces, Batista venció a Triple H para ganar el World Heavy Weight Championship, y John venció a JBL, para ganar el WWE Championship, tras un gran reinado de este.
Smackdown, y posteriormente WWE, tendrían una nueva estrella, el ahora legendario John Cena. En el siguiente evento de la marca azul, tendría lugar un rematch titular entre ambos, un I Quit Match, que es la lucha que comentamos hoy.
Una lucha muy buena, y muy recordada. Muchas veces, cuando en esa época se querían defender las habilidades de John, siempre en duda, se nombraba este combate, que efectivamente, es bueno, una brawl muy sangrienta, muy dura.
La primera parte de la batalla es dominada por JBL, con un John Cena que, como solía pasar en sus años de superhéroe, se dejaba hacer, y vendía muy bien la ofensiva del rival, creando una gran tensión entre el público, que esperaba siempre su recuperación, pero también provocando cierta sensación de inacción. Aquí no hay descalificaciones, así que JBL le tortura, ahorcándolo con distintas cosas.
Cena consigue lanzarlo contra una mesa, pero se lleva un sillazo en la cabeza muy loco, de esos que ahora tanto nos sorprenden, y tras lo cual, el nuevo campeón se desangra como un gorrino en una matanza. Tras eso, y redundando sobre el dolor. JBL aplica muchos Clotheslines con el brazo del enemigo agarrado, como el actual Rainmaker de Okada, pero sin fliparse. Aún así, Cena no se rinde, e inicia su Comeback.
La lucha se traslada a la zona en la que está el coche de JBL, que es usado sin piedad. Ambos luchadores reciben de lo lindo, pero es ahora JBL el que se lleva la peor parte, atravesando una televisión, recibiendo un Suplex sobre el coche, o tragándose las ventanillas. Los dos se machacan, llenos de sangre. La estrategia del rudo aún radica en intentar ahorcar a su oponente con cables.
Después de mucha paliza, Cena agarra un enorme tubo de metal. JBL, muy asustado, grita "I Quit", de la forma más indigna del mundo, por puro miedo, así que Cena es declarado ganador. Aún así, golpea a su rival, que atraviesa unas puertas de cristal.
Tras esta derrota, JBL pasaría un año centrado en el título de Estados Unidos, que aprovechó su personaje para darle un toque nacionalista. En 2006, fue derrotado humillantemente por Bobby Lashley, perdiendo su título, y su carrera. Después de eso, pasó a la labor de comentarista, que no se le da mal, hasta finales de 2007, cuando volvió a luchar, metiéndose en una rivalidad con el también regresado Chris Jericho. Tras un año y medio haciendo cosas interesantes, en 2009, en WrestleMania, volvió a abandonar su carrera, hasta ahora de manera definitiva, al ser derrotado por Rey Mysterio en un Squash, perdiendo el Intercontinental Championship.
Desde entonces, ha hecho trabajos como comentarista, y ha recibido muchas críticas, por supuestos casos de Bullying. En 2020, se anunció su entrada al Salón de la Fama de WWE, entrada que se llevará a cabo en este año 2021.
Puntuación: ****
miércoles, 26 de agosto de 2020
La Park, Místico y Dr Wagner vs Los Perro del Mal, CMLL 06/05/2005
En memoria de Armando "Mucha Crema" Gaytán
Hace unos meses, lamentábamos la partida a la Arena Celestial, como dicen en México, de Howard Finkel, esa gran voz histórica de WWE, que resonará por siempre en nuestros oídos, con reminiscencias luchísticas. Pues bien, hoy debemos lamentar el fallecimiento de un hombre que evoca esos mismos sentimientos para el aficionado de la lucha libre mexicana. Se trata de Armando Gaytán, alias Mucha Crema, anunciador de las funciones principales del Consejo Mundial de Lucha Libre durante unos 20 años. Debemos, al menos, pararnos un momento, para honrar su memoria y su aportación a la industria.
Que no es poca. En México, los anunciadores no se limitan a anunciar a un luchador por su nombre, su peso y su título, sino que lo introducen a través de una presentación bastante poética, en la que deben demostrar un conocimiento tanto sobre su carrera como sobre el personaje que portan. De hecho, este tipo de presentaciones es lo que hizo famoso a Gaytán, que recibe su mote, "Mucha Crema", precisamente por lo lírico y musical de su propuesta, así como la longitud de esas presentaciones, que posteriormente se tuvieron que reducir para televisión. Su voz formaba parte importante del espectáculo que tenía lugar en la Arena México, que es un conjunto de muchos factores, incluyendo al público, los vuelos, las máscaras y las edecanes y, sin duda, su forma de anunciar a los luchadores, que les daba un primer empujón que conseguía que conectaran con el público.
No puedo decir que Mucha Crema fuera el anunciador más importante en la historia de México, porque el Consejo es una empresa muy longeva, y por sus arenas han pasado muchos anunciadores que no hemos tenido la suerte de escuchar. Pero sin duda, su trabajo es icónico. Trabajó, si no me equivoco, en la Empresa Coliseina, entre 1989, y 2009. Entonces, dado su éxito por apariciones en películas y por sus trabajos en otro tipo de galas, como la de los premios de la MTV, estimó que merecía mejores regalías. Sus exigencias llegaron a sobrepasar lo que podía o quería ofrecerle el Consejo, puesto que incluían un porcentaje de ganancias por publicidad, y llevar a su hijo a las funciones de viernes, así que la relación profesional entre las dos partes se acabó. Desde entonces, Gaytán trabajó en múltiples eventos de toda la república, y, en última instancia, estableció una imagen en redes sociales, que incluyen un canal de Youtube en el que hay muchas presentaciones suyas, grabadas para que permanezcan ahí para siempre.
Como siempre, vamos a ver una lucha con la que honramos la memoria del fallecido. Esto no es WWE, el Consejo Mundial de Lucha Libre no subiría a un presentador a un ring, entre otras cosas, porque la Comisión de Lucha Libre no lo permitiría. No hay luchas de Armando Gaytán, pero podemos comentar un combate en el que hace de anunciador y tiene la oportunidad de presentar a algunos de los elementos a los que insufló una mayor energía gracias a su voz. Es un combate de tercias en el que Místico, Dr Wagner Jr y LA Park hacen equipo para enfrentarse a Los Perros del Mal, Perro Aguayo Jr, y Hector Garza, reforzados por Tarzan Boy.
La lucha tiene lugar en 2005. Es una época muy recordada, por rivalidades como las que mantuvo Perrito frente a Los Dinamita, y en el momento de este combate, ante Místico. Mientras que El Perro se convertía en el gran rudo de México, Místico se convertía en el gran héroe, un icono que volvía a llenar las arenas gracias a su innovador estilo aéreo y que, no obstante, era demasiado delgadito, una presa fácil para rudos de gran poder como Último Guerrero. Así, Dr Wagner, un hombre que estaba también en todo lo alto, se convirtió en su protector.
Estos eran buenos tiempos por las rivalidades, y también por las promos en backstage que se hacían antes de los combates. Eran shows pensados para televisión, así que se introducía, gracias a eso, un poco de contexto y se trabajaba la personalidad de los protagonistas. Hoy en día, por motivo de la pandemia, se están emitiendo combates de estos tiempos en México; espero que CMLL se dé cuenta del impacto que tienen, puesto que generan mucho más interés que los eventos actuales, pensados para un publico mucho menos conocedor, más casual, esto es, turistas, que requieren un producto rutinario que sea paradigmático, pero que no vaya a ningún lado.
Llegan los 6 protagonistas, con las presentaciones respectivas de Mucha Crema. Siempre me gustó especialmente la presentación de El Hijo del Perro Aguayo, porque, cuanto más largo era el nombre, mejor sonaba la voz de Gaytán. En cuanto a la lucha, es una maldita locura, un combate que acaba en dos caídas al hilo, puesto que en ambos casos, los rudos son descalificados por abusos del Perro contra Místico. Y, aún así, todo es entretenido, porque el Perrito vale oro.
La primera caída no es nada rutinaria. Tiene de todo, es una batalla que puede acabar en cualquier momento, pero nunca lo hace. Hay brawl en ringside, vuelos, y ataques en equipo. El Perro y Místico se quedan solos en el ring varias veces, y esos momentos son los más caldeados.
Hay muchos nearfalls, así como un momento en el que todos los luchadores fallan vuelos en el ring, para, posteriormente, acertar con vuelos a ringside. El aclamado Wagner, que ya era una estrella consagrada, tiene que salir en defensa de Místico varias veces, dada la violencia de Los Perros contra él.
Que acaban descalificados, después de romperle la máscara al nuevo ídolo. Místico tiene que ir a backstage durante unos minutos, hasta que consigue volver con una máscara azul. Mientras tanto, Park y Wagner sufren por la inferioridad, pero el regreso del Príncipe de Plata iguala las cosas de nuevo.
Wagner y Park, que, con el tiempo, se convertirían en grandes rivales, realizan un doble Frog Splash sobre Garza y Tarzán. Perro y Místico siguen teniendo duelos singulares, que acaban con un furioso Perro, temeroso de los counters de su rival, aplicando un Fault que da la victoria a los técnicos. Tras el match, tienen lugar los retos regulares, pero ya sabemos que la rivalidad entre Místico y Aguayo nunca acabó en combate de apuestas.
Puntuación: ***1/2