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martes, 2 de agosto de 2022

Mr McMahon vs Pat McAfee, WWE WrestleMania 38 Sunday


Comentamos en el último post la reciente dimisión de Vince McMahon como presidente y principal creativo de WWE, labores que lleva ejecutando desde hace unos 50 años. Se trata este de un hito histórico sin precedentes, porque él es la figura más importante en la historia del wrestling, y el hombre que ha dado forma a la industria que hoy conocemos y que sobrevive como entretenimiento a pesar de que todo el mundo conoce ya el secreto que en otra época justificaba su interés. Tendremos, pues, que desarrollar algún tipo de serie especial en el blog en la que repasemos los momentos más destacados en su trabajo como promotor, empresario, booker, comentarista, personaje y luchador. Eso me parece muy interesante.

Por ahora, estamos comentando la última vez que se subió al ring, algo que ocurrió sólo unos meses antes de que llegara el supuesto final de su carrera, quizás de forma premonitoria (quizás se olía la tostada y quiso despedirse así, y quizás por eso su hija dimitió de sus cargos en esa misma época, para poder regresar como sustituta desde una posición alejada de él). La última lucha de Vince McMahon en WWE la mantuvo frente a la leyenda de la NFL Pat McAfee, actual comentarista de WWE y luchador ocasional.

Ya comentamos en el último post que la rivalidad surgió a partir de una entrevista que Pat mantuvo con Vince en su Talk Show, y que esa conversación, dada la buena relación legítima que existe entre ambas personas, les condujo a una rivalidad dentro del universo de ficción de WWE. Vince eligió al tramposo Austin Theory como rival de Pat, pero este no fue capaz de cumplir con los deseos de su señor: Pat McAfee derrotó a Austin Theory en WrestleMania 38 Sunday, ante la mirada de Vince, que estaba junto a los comentaristas.

Ante este final, ni corto ni perezoso, el anciano se quitó la americana y se dispuso a enfrentarse a su odiado oponente. Vince es el típico culturista que ha sido alcanzado por la vejez a traición: sigue estando muy fuerte, pero raro: sus músculos están mal. Como diría Héctor Del Mar, "se le ha caído el pecho". Aún así, ante la expectación de todos, se sube al ring y domina a su cansado oponente de una forma muy poco verosímil.

Repito que hay algo raro en este match, y que eso me lleva a pensar que se trata de una especie de despedida. Porque no tiene sentido que a los 76 años, después de haber abandonado tanto tiempo el protagonismo en pantalla, se ponga a pelear, olvide su obsesión por no exponer el negocio, y se saque la chorra de esta manera. El caso es que Pat se lanza contra él, pero impacta contra los clotheslines lentos que consigue aplicar con sus musculosos pero ancianos brazos. Vince intenta enfadar a la grada, pero esta no puede sino aclamarle. McAfee se levanta para cargar contra su jefe, pero es atacado por la espalda por Theory, ante lo que el referee no puede decir nada, porque aquí manda Vince. Austin le da a McMahon un balón de fútbol americano para que lo patee al público, como hace Pat, pero obviamente es todo ironía. Vince no se lo pasa al público, sino que dispara contra McAfee, dejándolo KO, y consiguiendo una victoria extraña y sin demasiada resistencia.

En fin, más que lucha, es un momento en el que Vince trolea a todo el mundo por última vez en su carrera. Tras lo ocurrido y para rematar la función, momentos antes del main event, llega Steve Austin, que en la noche previa había derrotado a Kevin Owens, y por última vez en la historia, comparte cervezas y Stunner con el Chairman. Primero golpea a Theory, que hace un overselling propio de The Rock; y después, bebiendo con su antiguo rival, golpea al anciano, que casi se cae solo, demostrando que no está en condiciones para hacer estas cosas. Entretenido.

Puntuación: -

viernes, 28 de junio de 2019

Eric Bischoff vs Vince McMahon, WWE Raw 23/02/2004



Pocas horas antes de escribir este artículo, WWE realizó un anuncio muy interesante, que me ha impelido a publicar algo rápidamente. Por el formato del blog, he tenido que elegir una lucha que sirva de excusa para ello. Pero, obviamente, la cuestión principal no es el combate en sí mismo.

WWE ha anunciado oficialmente la contratación de Paul Heyman y Eric Bischoff como directores ejecutivos de los programas RAW y Smackdown, respectivamente. Quizás sea la mejor noticia para la empresa en muchos años, por encima de las firmas de cualquier luchador. Porque, independientemente de que estos dos tipos sean los más adecuados o no, WWE necesita un cambio creativo ya, o muere.

Quizás muchos piensen que Heyman y Bischoff son dinosaurios, gente del pasado. Pero hay que tener en cuenta que los puestos para los que se les ha firmado no son los de simples guionistas o bookers, sino que son directivos de la empresa, y tratarán con las cadenas de televisión de forma directa. Para eso, hacía falta alguien con experiencia, y en ese contexto, son ellos, o Dixie Carter. 

Por otro lado, tendrán pleno poder sobre los programas, teniendo que rendir cuentas, tan solo, ante Vince McMahon. Este seguirá introduciendo muchas restricciones, pero esperemos que respete cierta libertad creativa para estos dos hombres. Porque, los productos que ambos encabezaron en sus etapas dentro del negocio, pueden gustar más o menos, pero nunca fueron conservadores. Y lo que necesita WWE, precisamente, es que pasen cosas, porque, ahora mismo, no hay nada que ver ahí.

Recordemos que Bischoff fue presidente de WCW durante su etapa de gloria en los 90. Él inventó la NWO, llevó a muchas estrellas a los rings, a luchadores de todo el planeta, y estableció storylines para todos los gustos, aunque acabó siendo derrotado por Vince, y los excesivos gastos que había hecho para mantener a la WCW en la lucha, provocaron que la empresa cerrara cuando las audiencias cayeron. 10 años después, fue llevado a TNA para volver a intentar ser competencia de WWE. De nuevo, los gastos fueron demasiado grandes para los resultados obtenidos, aunque, en este caso, el rol de Eric no era tan importante. De todos modos, si algo tenían WCW y TNA, es que siempre había storylines estrambóticas y, en un contexto de depresión como el que sufre la actual WWE, hasta eso sería mejor.

Entre una etapa y otra, Eric pasó una época en WWE, pero su contrato fue de intérprete; no tomó una sola decisión.

El talento de Heyman es mucho más obvio que el de su nuevo compañero. Como Bischoff, a nivel empresarial, Heyman pasará a la historia por ser un gran mentiroso. Sería difícil decidir cuál de los dos ha contado más mentiras en su carrera. Pero, como creativo, Heyman es considerado un genio. Innovó con la ECW, que también se fue a la quiebra, pero dejó momentos inolvidables, y marcó el futuro de la lucha libre. Después de eso, llegó a ser creativo principal de Smackdown durante una época que también es recordada como la mejor en la historia de la marca azul. Tras eso, cuando se creó la nueva ECW, intentó hacer algo bueno, pero Vince no le dejó, y acabaron peleados, hasta el punto de que Heyman dejó la empresa.

No volvió hasta 2012, para acompañar a Brock Lesnar (y a otros, como CM Punk). En estos años, ha sido personaje frente a las cámaras, pero se sabe que ha ayudado a escribir combates, y a escribir promos con gente como Ronda Rousey. Él creó la rivalidad entre Lesnar y Goldberg, que tan buen resultado dio. Hace tiempo que la empresa quería que tomara un rol mayor, y, ahora, ha aceptado. No me cabe duda que, con un puesto directivo, va a ganar un buen dinero.

Hay dos personas nuevas dirigiendo los programas principales de WWE, y, con suerte, les darán un carácter claramente diferenciado. Se dice que su rol será similar al que juega Triple H en NXT. The Game, por cierto, de pronto, se ve por debajo de estos dos hombres. No sé si se lo habrá tomado bien. Su caso recuerda al de Shane McMahon, que tuvo que dejar la empresa cuando se dio cuenta de que el cambio generacional que tanto esperaba, no se daría nunca.

El caso es que en WWE, hacía falta un cambio. Mientras que la nueva competencia, AEW, vende sus PPVs enteros en 15 minutos, el último gran evento de la empresa de los McMahon, Stomping Grounds, vendió unas 6000 entradas, que es la cantidad más baja en un PPV que yo recuerdo. Y las entradas a los programas semanales posteriores fue ridícula. Pero no me extraña. Yo tengo WWE Network, y no he visto ese PPV, ni gratis, ni voy a ver el programa de Smackdown. Vince se lo ha cargado todo con sus últimas decisiones, y esto no puede seguir así, porque el barco, ahora sí, se hunde.

El año pasado, WWE logro acuerdos millonarios que aseguraban el futuro de la empresa a largo plazo. Arabia Saudi le pagará millones por un par de visitas anuales, y la Fox le pagará más millones, por llevar Smackdown a la cadena. Esto, sumado a las ventas de WWE Network, y al contrato con USA Network para retransmitir RAW, eran señales de tiempos dorados para la compañía.

Lo que chocaba con su capacidad para crear. Ahora mismo, tiene muchas responsabilidades en muchos campos, y no tiene capacidad creativa para cubrirlos. Pero, realmente, ¿quién pagaría una entrada de 50 dólares para ver un Seth Rollins vs Baron Corbin, o un Dolph Ziggler vs Kofi Kingston?

Se habla de un problema a la hora de crear estrellas. Pero es una empresa que tiene a lo mejor del mundo. El roster de AEW es ridículo en comparación. WWE tiene a Seth Rollins y a Matt Riddle; a Triple H y a Walter; a Daniel Bryan y a Io Shirai; a Ronda Rousey y a AJ Styles; a Keith Lee y a Shinsuke Nakamura. Lo tiene todo, en múltiples estilos, nacionalidades y generaciones. Y, aún así, en Extreme Rules, tendremos, como combate por el título máximo, una lucha mixta para aprovechar que Rollins y Becky Lynch son novios en el mundo real. Si con un roster así, produces carteleras como esa, es que eres muy tonto.

No es un problema de nombres. Ya hemos visto que Jon Moxley causa locura en AEW o NJPW, mientras que en WWE, no hubiera vendido una sóla entrada, al menos en su últimos meses. Porque, aunque a la gente le guste un luchador, si saben que van a ver una versión minúscula de él, no van a ir a verle.

Los acuerdos millonarios de WWE no encajaron con la creatividad de la empresa. Las apariciones de leyendas como Undertaker o Goldberg, se guardaron para Arabia Saudi, lo que provocó que las audiencias de cara a WrestleMania no aumentaran como es habitual, y la empresa comenzara la primavera en un rango inferior al de otros años. Cuando esta comenzó, lo hizo con la regla de Wild Card, que, en la práctica, se cargó la división de marcas, por el miedo de Vince McMahon a no tener a Roman Reigns en los dos programas. Eso, arruinó tanto el programa azul, como los PPVs.

Smackdown siempre ha sido mi programa favorito. Pero lo ha sido, cuando ha tenido un roster separado al de Raw. Creo que el trabajo de Road Dogg no era malo, como líder de este show. Pero Vince le mandó a NXT, y puso a los niñatos que guionizan RAW al frente, esos que vienen de reality shows y no tienen el más mínimo interés en el wrestling. Con él a la cabeza, claro. Smackdown se convirtió, otra vez, en un show B, que redunda sobre todo lo contado en el RAW anterior. No hay el más mínimo motivo para verlo. Y no solo eso, sino que, mientras que, con los roster partidos, las dos marcas generaban varias rivalidades para rellenar los PPVs, juntas, generan la mitad, de tal manera que no hay material suficiente para tener una cartelera digna. No me cabe duda de que la calidad in ring en Stomping Grounds fue buena, porque hay buenos luchadores, pero no hay nada que me lleve a entrar en WWE Network a ver el evento.

Veremos si ahora cambia todo. O si cambia lo suficiente, porque, aunque Bischoff y Heyman son directores ejecutivos de las marcas, siempre van a tener que responder ante Vince. Raro será que no acabe todo en un Triple Thread Match. Asimismo, mientras que la elección de Heyman alegra a todo el mundo, la de Eric no está tan clara. Recordemos que ahora, en WWE, hay mucha gente de TNA, y no tienen buen recuerdo de él. 

Como decía, Bischoff estuvo en WWE, pero sin cargo ejecutivo, ni creativo. Hacía de personaje en televisión, rol que ya jugó en WCW. En este caso, su trabajo concreto fue el de General Manager de Raw, puesto que mantuvo entre 2002 y 2005, llegando a tener rivalidades importantes con Steve Austin, Shane McMahon, Theodore Long, y otros muchos.  

La lucha que comento hoy está protagonizada por el propio Bischoff. Desde luego, él no es luchador, pero hizo muchas tonterías en WCW, y se preparó, entrenando Karate. Aquí, se enfrenta a Vince McMahon. Es un sueño hecho realidad para el Chairman, coger al mequetrefe que casi le arruina el negocio, y darle una paliza.

La historia entre los dos era amplia. Y, en su tiempo como GM, Bischoff no había parado de pelearse con gente, incluido Shane, el hijo de Vince. También estuvieron involucradas con él su hija, Stephanie, y su mujer, Linda. Se había ganado una paliza. Y, ahora, WWE ponía a la venta un DVD sobre las Monday Night Wars, durante las que Bischoff insultó y retó a Vince montones de veces. Había que vender el DVD y, aunque estábamos en la ruta hacia WrestleMania XX (que, entonces, duraba meses), había tiempo para que estos dos señores se pelearan en un programa de RAW. Steve Austin, que ya no luchaba, pero aún estaba bajo contrato, les dio un empujoncito.

Esta lucha, en realidad, sirve para construir una de las luchas de WrestleMania XX. Goldberg y Lesnar se enfrentarían entonces, pero a WWE no le quedaban apariciones de Goldberg para montar la historia, así que había que buscar otros mecanismos. Austin apareció, para pedir la oportunidad de ser el referee especial en la lucha entre las dos bestias, y Vince aceptó, aunque también le pidió que fuera practicando, haciendo lo propio en la lucha de esa noche. 

Esta comienza, con un Vince, ya bastante viejo, pero fuerte y alto, y un Bischoff, enano y con un tinte de pelo excesivamente negro, vestido de karateka, e intentando pegar patadas altas. Vince siempre lo agarra con más fuerza y mucho odio, pegándole rodillazos, y ahorcándolo, mientras Austin se rie de todo. Vince empuja al referee, y se lleva un puñetazo, lo que anima a Eric para golpear a su jefe.

La lucha no dura nada, y no hay ningún movimieno de wrestling como tal, y, aún así, es mas creíble que los combates de muchos ídolos actuales del wrestling independiente. No obstante, no hay final, puesto que Lesnar aparece en el ring, a espaldas de Steve, y le aplica un F5, dejandolo KO, para terminar el programa.

Aunque Austin siempre dijo que la lesión en su cuello fue el motivo de su retiro, es obvio, por movimientos como este, que aún podía luchar. Por otro lado, es una pena la forma en la que se le usó en la lucha entre Brock y Goldberg, ya que no hizo absolutamente nada en ella, a pesar de recibir este ataque.

Puntuación: *1/2

lunes, 15 de enero de 2018

Royal Rumble match, WWF Royal Rumble 1999



Durante este mes de enero, estamos viendo algunas ediciones anteriores del Royal Rumble, y también, estamos viendo luchas femeninas de WWE en las que se ha utilizado una estipulación por primera vez. Sí, estamos viendo muchas tonterías, pero la actualidad así lo exige. No en vano, tendrá lugar, a finales de mes, el primer Royal Rumble match femenino.

Mezclando ambas cosas, vamos a revisar el Royal Rumble de 1999, que es el primero en el que participó una mujer, Chyna. También es un Royal Rumble famoso por ser aquél en el que salió victorioso Vince McMahon. Vamos a sentar precedentes.

Estamos en lo más calentito de la Era Attitude. Días extraños. En esa época, las storylines estaban centradas en tres stables distintos: 

- The Corporation, que era el grupo comandado por Vince McMahon, y que se ocupaba de que en la empresa se hicieran las cosas como mandaba el chairman. Vince quería poner en su sitio a luchadores rebeldes, como Steve austin. En tiempos del Rumble, formaban parte de La Corporación su hijo Shane, The Big Bossman, el campeón de WWE The Rock, Ken Shamrock, Test o Kane, entre otros currantes de la empresa.

- D-Generation X, el stable formado originalmente por Shawn Michaels, que ahora estaba liderado por Triple H, junto a Chyna, X-Pack y los New Age Outlaws (Road Dogg y Billy Gunn).Últimamente, estaban rivalizando con The Corporation, y la mayor parte de las luchas previas del evento son DX vs Corporation. De hecho, Chyna se había ganado su puesto en la batalla en una lucha previa entre los dos grupos.

- The Ministry of Darkness, un grupo que no tiene participación en el Rumble, pero que aparecerá en un momento dado. Es el stable satánico de The Undertaker, con su mánager, Paul Bearer, además de bradshaw, Faaroq y Mideon.

Por supuesto, lo más importante en esta época es la rivalidad entre Vince y Austin. Vince puso a Steve en la posición 1, pero el Comisionado Shawn Michaels le dio a él el número dos. Así comienza la cosa, con Austin llegando entre aplausos, seguido de un Vince que sorprende a todo el mundo por su musculatura, ahora que entra sin camiseta. Por supuesto, Stone Cold le pega una paliza. McMahon huye por el estadio, mientras Austin le persigue. Pero le tiende una trampa en los baños, y varios miembros de The Corporation le dan una paliza. Una ambulancia se lleva a Austin.

Está bien que se intente contar una historia un poco diferente en un Rumble. Pero los minutos que siguen, con Austin y Vince fuera, son horribles. En esa época, WWF tenía interesantes main eventers, pero las estrellas secundarias era muy mediocres.

El ring se llena de gente poco interesante, hasta que vemos un ataque en Backstage. Mabel ha dejado KO a un luchador, y ha ocupado su sitio, volviendo a WWE después de un tiempo fuera. El obeso y enorme luchador negro entra al ring, y lo limpia, con ayuda de Road Dogg. Cuando sólo quedan estos dos luchadores, se apagan las luces, y suena la música del Undertaker.

Cuando se encienden las luces, los acólitos del Enterrador están golpeando y sacando fuera del ring a Mabel. Aparece Undertaker, con su estética luciferina, y le habla a Mabel, mientras este niega con la cabeza. Se llevan al luchador a base de golpes. Por supuesto, se unirá al Stable.

En los siguientes minutos, Road Dogg se libra de los luchadores que van saliendo. Me gustan los Royal Rumbles en los que el ring no se llena mucho, aunque es raro que alguien como Road Dogg juegue un papel tan importante. Llega Kane, y elimina a Road Dogg, Goldust, The Godfather, y otros luchadores mediocres que había en el cuadrilátero. Pero vienen un montón de loqueros, y se lo llevan. Vince vuelve al ring, y espera al próximo combatiente: Ken Shamrock, un miembro de The Corporation. Vince se va a comentar junto a Jerry Lawler y JR.

Llega al ring Billy Gunn, que ya se ha enfrentado a Shamrock en una lucha anteriormente, durante la noche. Gunn cojea debido al castigo en la pierna por parte del ex MMA. Tenemos, de nuevo, un DX vs Corporation. Test llega para poner ventaja en el bando de McMahon, pero en ese mismo momento, la ambulancia de Stone Cold vuelve a la arena. Austin ha resucitado, y persigue a Vince, aunque este es ayudado por sus acólitos. Austin elimina a Shamrock, pero es atacado por el nuevo combatiente: el Big Bossman, que es el líder del cuerpo de seguridad del jefe.

En la última parte de la batalla, se vuelven a acumular los luchadores. En último lugar, aparece Chyna, que no se corta, y va directa a por Mark Henry. Le pega una paliza al Sexual Chocolote, y le elimina, aunque Austin aprovecha el momento para expulsarla también a  ella del ring. Pero es interesante ver como una mujer derrota al hombre más fuerte del mundo.

Triple H elimina a Vel Venis, y Austin a Triple H. Además de McMahon, sólo quedan 4 hombres: Big Bossman, Owen Hart, D'Lo Brown y Austin. No es un gran Final Four. Austin sale ganador, y se va a por Vince, pero en última instancia, aparece el campeón, The Rock, y ayuda a McMahon a salir ganador de la batalla real. Por suerte, Austin conseguiría su lugar en WrestleMania para enfrentar a Johnson.

La lucha tiene algunas partes de storyline buenas, pero es basntate aburrida en sí misma, y la mitad de los participantes, muy malos. Aunque está bien la rivalidad DX vs Corporation, lo cierto es que, si bien coinciden muchos miembros en el ring, casi nunca se les ve luchar en equipo.

Puntuación: ***

domingo, 21 de septiembre de 2014

Bret Hart vs Vince McMahon. No Hold Barred Match, Wrestlemania XXVI


Si alguien ha llegado hasta aquí leyendo, daré por sentado que conoce la historia de Bret Hart y Vince McMahon. Pero la resumiré un poquito. A finales de 1997, Bret Hart estaba a punto de dejar WWF para ir a WCW. Bret era el campeón mundial de la empresa y debía perder el título antes de irse. Vince quería que lo hiciera en el siguiente PPV, Survivor Series, pero Hart se negó porque este tendría lugar en su tierra, Montreal. Ambos acordaron que el combate acabara en DQ por la interferencia de otros luchadores y que Michaels ganara el título al día siguiente, en Raw.

Sin embargo, durante el combate en SS, Shawn Michaels aplicó una llave de rendición y el arbitro, Earl Hebner, decretó, por orden de McMahon, que Bret se había rendidosin este haberlo hecho. Bret se mosqueó bastante y escupió alli mismo al Chairman. Esto es lo que se llama la Traición de Montreal.

Acrecentada la furia de Bret Hart por la burlas de Michaels durante los siguientes programas de Raw, este nunca a vuelto a un ring de WWE. Hasta ahora. Ambas partes se han reconciliado y Bret volvió en la edición del 4 de enero de Raw, comenzando una rivalidad con Vince que lo ha llevado al combate de esta noche en Wrestlemania.

Vince McMahon siempre ha dicho que él no traicionó a Hart, que Hart traicionó a Hart. Después de salir Bret al ring, sin su traje típico de lucha, sale el dueño de la empresa y anuncia que el combate será un Lumberjack Match, en el que los leñadores, y también el referee, serán los miembros de la familia Hart, a los que él ha pagado. Vince recuerda que Hart traicionó a Hart.

La familia Hart entra, encabezada por al Hart Dinasty. Bret coge el micro y dice que, esta vez, Hart ha traicionado a Vince. Resulta que la familia está de parte de Bret.


Que nadie espere de esto un buen combate. Hart tiene el cuerpo destrozado, ni si quiera puede recibir golpes en la cabeza, por algún golpe que se dió. Difícil que pueda haber un intercambio así.

La lucha comienza con Bret golpeando a su rival, quien tiene que huir a ringside. Ahí, la familia Hart lo recibe con una paliza. El combate es entero así, una tortura entre muchos contra un anciano. Vince consigue agarrar una barra de metal y los leñadores se apartan, pero Bret se la arrebata y lo golpea 15 mil veces con él, Después de unos cuantos aburridos minutos de tortura, Bret amaga con aplicar el Sharpshooter, pero sigue golpeandolo. Le pasan una silla y le pega ooootros 15 mil porrazos.

Esto de la silla tiene su lectura. Recientemente, WWE ha prohibido los sillazos en la cabeza, después de los estudios que se han hecho sobre los daños que tienen en la cabeza los luchadores, y de que imágenes de seillazos son siempre utilizadas para criticar al deporte. Pero Vince, sin embargo, recibe montones de sillazos en la lucha, en la espalda, los brazos, las piernas, etc. Parece una forma de enseñar a los fans que las sillas seguirán estando presentes en WWE, sin necesidad de dar en la cabezas, y de mostrar a los críticos que no le hace a sus luchadores nada que no se haga a sí mismo.

Después de esta interminable tortura a un pobre anciano, Hart usa su llave de rendición y Vince se rinde. Podía haberlo hecho antes...

Esta lucha es muy importante, un momento histórico y el final da una rivalidad de 12 años. Quizás el personaje malvado de Mr McMahon que nació con la traición de Montreal haya visto su último combate. Pero la lucha es un coñazo, una tortura a un viejo durante 11 minutos. 

Puntuación: *