A finales de 2017, WWE ha hecho un par de experimentos para resucitar dos de las grandes marcas de la extinta WCW y que ahora, obviamente, le pertenecen. Llevó a cabo una edición de Starrcade, que por desgracia, no se emitió por la Network; así como una lucha Wargames, que tuvo lugar en NXT, en el 30 aniversario de su creación. Puede que fuera una prueba con la intención de llevar ese tipo de combates al main roster, o quizás, que Triple H quiere aprovechar las licencias que a Vince no le gusta promocionar, por el odio que todavía siente hacia aquellos que le vencieron parcialmente, pero que acabaron arrodillados a sus pies.
WWE tiene una cantidad de talento excesiva. Y sigue firmando gente. No es que lo necesite, apenas usa a la mitad. Ya sabemos que sus programas principales giran en torno a unos 10 hombres, y el resto es relleno. Pero están haciendo todo lo posible porque New Japan y Ring of Honor no crezcan mucho. No creo que a Vince le preocupe este tipo de productos lo más mínimo, pero lleva lo del monopolio en la sangre.
Así, se han tenido que crear varios stables en NXT. Es la única forma de utilizar el máximo número de luchadores posible. Y estas agrupaciones han protagonizado el primer Wargame de WWE. Veamos quienes son.
Por un lado está Sanity, liderado por el ex-TNA Eric Young. Sabíamos que no es un luchador especialmente bueno, aunque tiene personalidad y manejo del micro. Le sirvió para formar su propio grupo.
Sanity nació en 2016, y tuvo varios miembros distintos en su inicio. Después de algunos despidos, Young pasó a liderar un equipo en el que están Killian Dain, el impresionante luchador irlandés conocido como Big Damo en el circuito indy; y Alexander Wolfe, otro enloquecido europeo, en este caso, alemán, de gran experiencia en WXW. Este es un grupo de gente que está regular de la cabeza, y en el que también colabora, poniendo el toque femenino, Nikki Cross.
También tenemos a The Undisputed Era, grupo formado por Adam Cole, Bobby Fish y Kyle 'Reilly. En 2017, WWE firmó más o menos al mismo tiempo a estas tres estrellas de Ring of Honor, y tuvo que juntarlas. Es cierto que Cole tiene un aura especial, pero es complicado ver un futuro en la empresa para los otros dos, ya que su característica principal es que son buenos wrestlers. No es suficiente en una plantilla de más de 100 tipos. Sin embargo, si hacen pareja, pueden tener su hueco. Por lo pronto, poco después del evento del que hablamos, han ganado los títulos tag de NXT.
En esta Wargame, participan tres tercias. La tercera está formada por los campeones en parejas, los inmensos The Authors of Pain, acompañados del brillante Roderick Strong. Y es que, después de debutar como equipo en NXT, The Undisputed Era atacó tanto a los locos de Sanity como a los grandullones. Y ofrecieron a Strong un puesto en el equipo. Al fin y al cabo, el perfil de Strong es parecido al de Cole, Fish y O'Really. Como ellos, ha disputado grandes batallas en Ring of Honor y el mundo indy, pero no parece tener un hueco definido en el main roster. Roderick fingió unirse a ellos, y ponerse su muñequera, pero en el último momento, les atacó, uniéndose, así, a los campeones. Después de varias confrontaciones entre los tres equipos, William Regal anunció que se enfrentarían en Wargames. Sorprendente noticia.
Como decimos, esta es una Wargames a tres bandas. Comienza luchando un miembro de cada equipo, mientras el resto permanece en una jaula. Posteriormente, de forma aleatoria, cada pocos minutos, se selecciona una jaula, y de ella salen los otros dos miembros, que se suman a la batalla. Es raro que salgan los dos al mismo tiempo, y no de uno en uno, como en las antiguas. Pero, posiblemente, esto haga la lucha más dinámica.
Hay que recordar que el mánager de Authors of Pain, Paul Ellering, luchó en la primera edición de Wargames. Sí, él ya era mánager, pero en esa rivalidad tan potente entre los Four Horsemen, Dusty Rhodes y los Road Warriors, todo valía. Entre el público, están
Dustin Rhodes y
Arn Anderson, otros dos tipos que lucharon en distintas ediciones. Comienzan luchando, en esta ocasión, los líderes: Roderick Strong, Adam Cole y Eric Young.
Los primeros minutos, con estos tres protagonistas, no son especialmente interesantes. No hay una expresión de odio demasiado clara. Pero cuando entran el resto de hombres, la cosa mejora. Los primeros en salir de su jaula y meterse en la celda son Undisputed Era. Gracias a su adición, Cole se repone de los ataques de sus enemigos, y el grupo de malosos domina en handicap match. En ese sentido, esto sí que parece un Wargames, porque ese formato era clave en su funcionamiento.
Pero después entran en la batalla los Authors of Pain. Y son unos animales sin igual. Asesinan a todo lo que ven. Incluso utilizan a su compi, Roddy, como proyectil. Gran momento, que se ve truncado por la entrada del resto de miembros de Sanity.
Tenemos un ring lleno de cadáveres, y a los
Authors of Pain esperando a los bárbaros europeos. Big Damo no se da ninguna prisa, pero Wolfe va corriendo a confrontar a sus enormes rivales. Resulta que escondía una porra de policía, parecida a la que usaba el
Big Bossman. Golpea sin parar a los campeones por parejas, mientras su compañero busca cosas debajo del ring. Así, se desata la guerra.
La última parte de la lucha es una verdadera batalla campal, con muchos objetos, uso de la jaula, y varios finishers y vuelos. El público canta y se divierte, lo que no es, en realidad, tan bueno. Las Wargames originales suponían la batalla final en rivalidades sangrientas y llenas de odio. Los aficionados, por tanto, estaban siempre enfervorecidos. Estos, sin embargo, vienen a divertirse viendo movimientos chulos, porque para eso son público indy. Y no es lo mismo.
Después de un millón de grandes ataques, Adam Cole consigue cubrir a uno de sus numerosos rivales, y le da la victoria a The Undisputed Era. Es una lucha que, como decía, no tiene ese ambiente de odio y violencia de una Wargames, pero es mucho más dinámica y entretenida. Una cosa compensa la otra. Creo que una en el main roster, con el público adecuado y los luchadores adecuados, podría incluir ambas cosas, y ser aún más buena.
Puntuación: ****1/4