Se ha hablado mucho últimamente sobre Fabulous Moolah. Es un tema que no se puede pasar por alto en un blog sobre historia del wrestling. Para comentarlo, he visto un combate de la mítica luchadora, y eso me da una escusa para tratar la polémica.
WWE está aprovechando el nombre de algunas de sus leyendas fallecidas para bautizar campeonatos o torneos, de tal manera que la esencia de ese luchador se transmita a los jóvenes que participan en dichas competiciones. Así, se creó para WrestleMania la André the Giant Memorial Battle Royal, una batalla campal anual cuyo ganador recibe un trofeo con la forma del inigualable gigante. En el Hall of Fame, está el Warrior Award, en honor a Ultimate Warrior, y que se concede a niños que luchan cada día contra graves enfermedades. Mae Young también ha dado nombre a un torneo femenino, y Dusty Rhodes a un torneo en parejas.
En ocasiones, se ha hablado de que algunas de esas personas no merecían ese reconocimiento. Sobre todo, eso ha pasado en el caso del Warrior, cuyos comentarios homófobos o racistas son conocidos por todos. Pero se da por sentado que ese trofeo no rinde honor a la persona, sino al personaje, que al fin y al cabo, es una creación intelectual de WWE, un personaje que protagonizó maravillosas historias. Al menos, en la ficción, esos 4 luchadores eran tipos muy grandes.
A la hora de crear una Battle Royal femenina para WrestleMania, WWE tuvo la idea de ponerle el nombre de The Fabulous Moolah, la luchadora más importante en la historia de la industria. Pero la polémica en Internet tardó segundos en comenzar. De nuevo, se da por sentado que ese trofeo se hace en honor a un personaje maravilloso. Pero la gente no lo ha entendido, porque no sabe diferenciar la ficción creada durante décadas, de las personas que estaban detrás de esa ficción. Y no les culpo, porque en esta industria, es muy difícil saber dónde están los límites entre de la verdad y la narrativa. Tengo que confesar que no tengo una opinión del todo formada sobre este asunto. Creo que no siempre todo es bueno o malo.
Moolah murió en 2007, y hasta poco antes de morir, aún seguía apareciendo, eventualmente, en programas de WWE, como una leyenda de la lucha femenil. Así terminó una carrera que había empezado a finales de los 40. Moolah es famosa por haber sido la gran campeona de su época... y de todas las épocas. Moolah ganó el NWA World Women Championship en 5 ocasiones, aunque en realidad fue la campeona siempre. Aunque lo perdía eventualmente, lo volvía a ganar días después, y sus reinados solían durar... 10 años.
Cuando Moolah firmó con WWF de forma exclusiva, en 1983-1984, su título pasó a llamarse WWF Women's Championship. De nuevo, Moolah lo tuvo en su cintura varias veces, aunque esta vez, sus reinados eran de un año o menos. Hay que decir que aquí, la luchadora ya estaba muy vieja. De todos modos, la imposibilidad de crear una liga competitiva femenina por el dominio de Moolah, llevó a WWF a retirar el campeonato en 1990.
Esa es una de las cosas que se le critican a esta luchadora. Durante 40 años, fue la dueña del wrestling femenino en Estados Unidos. Ella siempre era la campeona, y también la empresaria. Eso hacía que la cosa nunca evolucionara, y no se crearan estrellas femeninas.
Hay que decir que, por lo que he visto, las luchadoras de la antigüedad eran bastante buenas. No eran divas de WWE. Sabían luchar, no eran especialmente atractivas, ni jóvenes. Pero todas estaban siempre en segundo plano.
Hay otras críticas más graves. Se dice que Moolah se llevaba parte del dinero que ganaban todas las luchadoras. Pero en realidad eso es lógico, si era la promotora, o la que llegaba a acuerdos con las empresas de lucha libre, es normal que se llevara una comisión. Eso pasa en todas las profesiones liberales, aún hoy.
Otra cosa que se ha criticado de ella es que, presuntamente, obligaba a sus luchadoras a prostituirse. Aunque los testimonios al respecto son contradictorios, y hay que señalar que nadie dijo nada hasta que esta mujer murió. Pero se sabe que sí que había cierta costumbre entre promotores antiguos de incitar a sus luchadoras a mantener relaciones sexuales que ayudaran de una manera u otra a la empresa o a ellas mismas. Y seguramente, entre las chicas que trabajaban con moolah también pasaría, al menos, de manera implícita. Hay que entender que estamos hablando de otros tiempos. Si uno se acerca a obras de ficción como Mad Men, sabe que, en cierta época, cuando la mujer estaba introduciéndose en el mundo laboral, y en él, estaba subyugada por el hombre, era práctica habitual llevar a cabo este tipo de relaciones, que permitía medrar en una carrera profesional. También era normal que las mujeres estuvieran lideradas por otras mujeres, y que estas mandaran en su sección con puño de hierro. Ha habido casos famosos, incluso en tiempos cercanos, tanto en equipos de gimnasia como en equipos de natación sincronizada y ese tipo de disciplinas, en los que se ha acusado a una entrenadora o coordinadora de exigir esfuerzos a sus discípulas que podrían considerarse abusivos.
En general, la gente que habla de The Fabulous Moolah, lo hace de manera positiva. Si en alguna época de su carrera llevó a cabo prácticas de este tipo, no estoy seguro, pero, aún haciéndolas, entiendo que son fruto de una época, y que no se puede medir la historia en función de la moral vigente hoy en día. Pero bueno, debería haber estado ahí dentro para haberlo juzgado. En cualquier caso, la batalla real de WrestleMania perdió el nombre y el trofeo original, y pasó a llamarse "WrestleMania Women Battle Royal". Coñazo de nombre.
He estado viendo algunas luchas clásicas de mujeres, para ver el nivel que tenían. El material antiguo es complicado de encontrar, como siempre. Hay un combate del 79 que he encontrado entero, y que está bastante bien. Es el que da nombre al artículo.
La Campeona Mundial Femenina de la NWA, The Fabulous Moolah, hace equipo con su amiga Kitty Adams, para enfrentarse a Vivian St John y Joyce Grabel, en un combate perteneciente a una función de la WWF en su casa, el Madison Square Garden.
Aunque estamos en el 79, hay que decir que Moolah ya estaba muy vieja. Tampoco el resto de participantes son jóvenes o guapas, pero ella está demasiado mayor. Y, por supuesto, sigue siendo la campeona, como siempre.
Pero no es una gran heroína querida por el público. Su compañera y ella son rudas, y se pasan el combate haciendo trampas. Y también hay buenos momentos de humor. La lucha es al mejor de tres caídas.
Moolah y Adams aprovechan cualquier resquicio legal para llevar ventaja. Incluso ahorcan a una de sus oponentes con la cuerda de hacer el tag. Lo hacen durante mucho rato, pero el referee no es capaz de ver la cuerda. Se llevan la primera caída, por supuesto, haciendo trampas.
La gente apoya a las técnicas, y estas responden con wrestling del bueno. El llaveo al brazo de Moolah es bastante bueno. En la segunda caída, es Adams la que se lleva buenos estiramientos en las piernas, así como llaves y golpes. Moolah sale volando a ringside tras fallar un ataque, y su compañera es derrotada, vía paquetito. Nos vamos a la tercera caída.
Ahora, las dos chicas buenas cazan a sus contrincantes con sendos candados aplicados con las piernas sobre el estómago de la respectiva rival. En esta posición, pueden llevárselas con intentos de conteo, y también pueden aplicar unas sillitas eléctricas con las que le pegan un buen golpe en el culo a las malas. El público reacciona bien a esto. Moolah consigue librarse, agarrando al referee, que lo está pasando mal durante toda la lucha.
Una vez más, Moolah fuerza el error de sus rivales al hacer que se golpeen entre sí, y se lleva la victoria. La verdad es que la lucha resulta tremendamente entretenida, y de calidad. Me ha sorprendido gratamente.
Puntuación: ***3/4