Se acerca Royal Rumble y, durante las semanas previas, hemos visto algunas ediciones antiguas. En concreto, últimamente hemos revisado la del 93 y la del 99, aunque hay unas cuantas más en el blog. Hoy, echamos un vistazo a la batalla correspondiente al año 2003.
En esta edición, el foco principal reside en la rivalidad entre Chris Jericho Y Shawn Michaels, que daría lugar a la pelea entre ambos en WrestleMania 19, mucho antes de su gran feudo del 2008. En los programas anteriores de Monday Night Raw, sus careos habían dado lugar a que Michaels y Jericho entraran, respectivamente, con los números 1 y 2 en el Rumble, así que son los primeros protagonistas de la contienda.
Pero Jericho es un malvado. Cuando suena su música, el que aparece es Christian, burlesco. Michaels no entiende nada, pero recibe un golpe bajo por detrás por parte de Jericho, que entraba por el lado opuesto del ring. Chris le abre la cabeza a Michaels con una silla, y lo elimina sin dificultad. Una ambulancia debe llevárselo, herido, con mucha sangre en su frente.
La primera mitad de la batalla transcurre con mucho dinamismo. Entran buenos luchadores, y muchos son eliminados, de tal manera que nunca hay mucho aburrimiento. Además, tipos como Rey Mysterio, Edge, Christian o el propio Jericho, luchan muy bien. Entran bastantes cruceros, y Tommy Dreamer, con palos de Kendo. Golpea a todo el mundo, incluido Jericho, al que le abre una ceja. Visiblemente enfadado, este se venga y le expulsa. Chris elimina a un montón de rivales. Mientras Christian y Edge pelean, los expulsa a ambos, y se queda, de nuevo, sólo en el ring, triunfante. El siguiente en entrar es Rob Van Dam, que tiene una buena participación también. Para empezar, le pega una buena paliza a Jericho.
En la siguiente parte de la lucha, hay menos eliminaciones, y un poco más de acumulación. Lo más interesante viene de los 3 Minutes Warning, que pelean bien, y tienen enfrentamientos con Rikishi. Tiene gracia, porque los comentaristas hispanos dicen que parecen familia de Rikishi... Lo son, obviamente, pero estos comentaristas no dan ni una. Por supuesto, Michaels vuelve a por Jericho, y, aunque este vuelve a librarse de él, Test aprovecha el momento para echar al canadiense.
También está bien la participación de Matt Hardy, que tiene un personaje rudo un poco capullo, y que va acompañado por Shannon Moore, que se lleva unos cuantos golpes por él. Matt tiene un buen enfrentamiento con su hermano Jeff. Pero, en las últimas posiciones, salen al ring Undertaker, Batista y Brock Lesnar, que junto a Kane, dejan el ring casi vacío. Maven intenta jugársela al Enterrador como hizo en 2002, con una patada voladora traicionera, pero esta vez lo paga caro y es expulsado. Shelton Benjamin y Charlie Haas hacen buen equipo, y eliminan a Goldust y Booker T, pero son destrozados por Lesnar. Kane y Rob Van Dam también hacen buen equipo, y eliminan a A-Train, que lleva toda la noche haciendo bombas. Kane, no obstante, traiciona a Rob y lo echa fuera.
La batalla entre los 4 finalistas está bastante bien. Undertaker consigue echar fuera a Kane y Batista, pero Lesnar, que había recibido un Tombstone, aprovecha la ocasión para eliminarlo a él, llevándose, así, un Royal Rumble Match para sus vitrinas.
Creo que es un buen Rumble, entretenido y con algunas historias trabajadas, sobre todo, la de Michaels y Jericho. Tampoco hay demasiado jobber, hay muchos luchadores con participación destacada.
Puntuación: ***1/2