En navidad, tienen lugar dos de las funciones especiales en los Super Viernes de Arena México: Sin salida y Sin Piedad. En estas navidades 2017-2018, hemos visto una máscara caer en Infierno en el ring, en Sin salida; y una cabellera cortada en el evento Sin Piedad. Vamos a revisar ambas luchas de apuestas.
Infierno en el Ring es un tipo de lucha que se lleva haciendo ya 10 años en el Consejo Mundial de Lucha Libre. Es un combate grupal dentro de una jaula, en el que un montón de luchadores ponen su máscara o su cabellera en juego. El objetivo es huir de la jaula, por la parte de arriba, hasta que solo quedan dos hombres, que disputan la final, con su máscara o cabellera respectiva en juego.
En las primeras ediciones, este tipo de lucha se llevó a cabo en la magna función de aniversario, con algunos de los principales wrestlers de la compañía dentro. Pero no son luchas, creo yo, en las que se debería vender una máscara importante. Las luchas de apuestas deben estar precedidas de grandes rivalidades, de mucho odio, de mucho miedo. Meter luchadores aleatorios en una jaula pudo ser llamativo en primera instancia, pero eso no vende nada, en comparación con una lucha de apuestas con una rivalidad llevada de forma correcta.
Después de esas primeras luchas, el Infierno en el Ring quedó relegado a otros eventos, en los que se ponen en juego máscaras muy secundarias. Al menos, se le saca partido a luchadores de segundo plano, para tener una velada un poco diferente. En Sin Salida 2017, tenemos una jaula con 10 enmascarados: Hijo del Signo, Star Jr, Starman, Fiero, Nitro, Raziel, Cancerbero, Pegasso, Oro Junior y Templario. La mayoría son buenos luchadores, a los que he visto en alguna lucha puntual, pero es cierto que pocos tienen posibilidades de destacar dentro de La Seria y Estable.
Hay otra regla, y es que los luchadores no pueden intentar escapar de la jaula en los tres primeros minutos. Varios lo intentan, pero tienen lugar pequeñas explosiones en la parte superior del ring para disuadirlos. La cifra de 3 minutos es rara, pero está bien para evitar que la gente se vaya directamente al empezar el combate. Yo pondría 5 minutos, porque tres se pasan muy rápido.
Los luchadores se matan en el ring, mientras, poco a poco, van abandonando la estructura por su parte superior. Al final, hay alguna traición. Los dos últimos rudos, Hijo del Signo y Cancerbero, le pegan una paliza a Star Jr y Starman. Cacerbero finge que va a utilizar un salto desde el esquinero, pero lo que hace es huir, dejando a su compañero sólo ante dos técnicos.
Los técnicos dominan ahora, pero Star Jr aprovecha para escapar. Los otros dos le siguen muy rápido y salen al mismo tiempo de la jaula, pero es tarde: tienen que luchar por las máscaras.
El Hijo del Signo es el hijo de toda una leyenda, un misionero de la muerte. Pero su carrera no puede compararse a la de su padre, y no parece tener mucho talento.
Starman es un veterano, conocido originalmente como Ultraman Jr. Tiene una carrera larga, incluso con giras por Japón, en la New Japan, pero lleva unos diez años atrapado en las luchas preliminares del Consejo.
El Hijo del Signo aprovecha que está fuera del ring para brawlear un poco. Le pega una paliza a su rival, usando el escenario en su favor. Los referees le regañan, porque tienen que pelear dentro de la jaula, pero es cierto que, si no ha podido haber una rivalidad previa, es necesario mostrar un poco de furia e intensidad en este momento. Signo lo hace bien.
Los luchadores vuelven a la jaula. Signo domina, y le rompe la máscara a su oponente, pero acaba siendo derrotado por un comeback del veterano, bastante normalito.
La lucha no es gran cosa. Los luchadores escapan de la jaula sin demasiada repercusión, y los dos últimos, que se juegan la incógnita, no tienen muchos minutos, y tampoco le importan, la verdad, a nadie. Starman consigue un bonito premio para una carrera larga y leal, mientras que Signo quizás puede tener aquí un cambio en su personaje que le haga ser más reconocido. Recordemos que su padre destacó mucho más sin máscara. Él, por su parte, ataca a su rival, y muestra mucha mala leche. No está mal. Dice tener 38 años y llevar 10 luchando. La verdad es que es una edad un poco avanzada para empezar.
Puntuación: **3/4
No hay comentarios:
Publicar un comentario