Realmente, son pocos los casos en los que se revisan, en este blog, luchas seleccionadas de manera arbitraria. Por lo general, es la actualidad la que mueve la elección de matches, pero, cuando un amigo deja algún comentario en un post, con alguna recomendación, nos gusta hacer caso, porque nos da la excusa perfecta para ver un combate interesante.
Este es el motivo por el que comentamos hoy una lucha que no tiene relación con ningún tema abierto, pero que siempre es bueno ver, y supone una adición interesante para la base de datos del blog. Se trata del I Quit Match entre Mankind y The Rock, recomendado recientemente por un lector, que tuvo lugar en el evento Royal Rumble 1999.
Hay varias luchas entre estos dos hombres comentadas en el blog. Estamos en la época de las Monday Night Wars. WCW, durante meses, había puesto contra las cuerdas a WWF, lo que llevó a Vince a olvidar momentáneamente el concepto que él tenía de su producto, y a evolucionar, para crear algo más llamativo. Desde finales de 1998, y tirando de historias excesivas y de nuevos luchadores con carisma y personalidad, así como de un mayor nivel de violencia en el ring, WWF había vuelto a ponerse por delante en los ratings.
El año 1999 sería definitivo en esta guerra entre WWF y WCW, pues la diferencia de ratings entre una y otra nunca dejaría de aumentar. The Rock y Mick Foley eran dos de los grandes protagonistas en la empresa en esta época, y su rivalidad duró meses, siendo esta lucha en Royal Rumble la más recordada de cuantas tuvieron.
Los dos tenían personajes muy marcados, y por tanto, generaban grandes emociones. Mankind, con su triple personalidad, con su manera de sufrir sobre el ring, con sus míticas batallas, se había ganado el cariño del público, como un gran Underdog. Por su parte, The Rock, era un gran rudo, recibía el apoyo de The Corporation, el Stable de Vince McMahon, y usaba el micro como nadie lo había hecho antes. Si bien era muy odiado, su excesiva personalidad, sus frases y su forma de expresarse, atraía también a muchos seguidores.
Mick se había convertido en WWF Champion, en un programa de RAW, en diciembre. Fue el famoso lunes en el que Eric Bischoff aprovechó que su programa era en directo, mientras que RAW era grabado, para anunciar al público el cambio titular, de tal manera que no perdiera el tiempo viendo el programa de Vince. En contra de sus deseos, ese anunció provocó la gran migración de televidentes fuera de TNT.
Así, llegamos a Royal Rumble, evento en el que estos dos ídolos se enfrentan en un I Quit Match. La idea aquí es que Foley se ha enfrentado a todo en la vida, ha recibido palizas enormes, y nunca se ha rendido, así que jamás dirá "I Quit". Sin embargo, Rocky lo lleva en este combate a tal nivel de violencia, que tiene que rendirse.
En realidad, la mayor parte de la lucha no va mal para él. Es una brawl, en la que ambos se pegan por todo el estadio, buscando que uno de los dos se retire. Mankind pega muchos golpes en la cabeza, y le pone el micro en la boca a su oponente, que siempre lanza algún improperio.
Como digo, ambos luchadores tienen una personalidad muy marcada, y la usan durante la lucha. Rock intenta hacer un Rock Bottom sobre una de las mesas de comentaristas, pero esta se rompe antes de que pueda aplicarlo. La lucha se traslada al estadio, con golpes para ambos, pero la cosa se pone fea para Foley, cuando los dos se suben a una barandilla, y es él el que cae, proyectado sobre algunas cajas de aparatos eléctricos, que explotan, provocando un corte parcial de luz en el estadio (obviamente, preparado). El golpe resulta brutal, así que Shane McMahon pretende parar la lucha, porque el estado del enmascarado equivale a una rendición. Pero The Rock se niega, porque quiere escuchar las dos palabras de rigor.
El Más Grande pone unas esposas al campeón, para torturarle. Este, aún sin manos, consigue tener su comeback, pero, finalmente, Rocky coge una silla, y le revienta la cabeza un montón de veces con ella, haciéndole sangrar, con unos golpes que, según los estándares de hoy, son demasiado peligrosos. Al final, Mankind dice "I Quit", y The Rock recupera el Campeonato de WWF.
Esta lucha es una interesante brawl, y es paradigmática de la Era Attitude. Marcó el camino a seguir en la empresa.
Esta lucha es una interesante brawl, y es paradigmática de la Era Attitude. Marcó el camino a seguir en la empresa.
Puntuación: ****