El torneo WWE Cruiserweight Classic resultó ser todo un éxito, al menos de crítica, y seguramente fue un producto que atrajo a más de un abonado al WWE Network. Tras ese éxito, WWE creó una división crucero para la marca Raw, de la que forman parte varios participantes del torneo, y, ahora, va a empezar a emitir un nuevo programa semanal especial para cruceros, que será exclusivo de su plataforma de pago. Su nombre será WWE 205 Live, y se emitirá justo despues de Smackdown, con una duración de 1 hora.
WWE ha traído a la palestra a los luchadores de peso crucero 9 años después de eliminar la división, que acabó fatídicamente, cuando Hornswoggle ganó la correa de campeón. Pero claro, ya entonces, la división era una broma, y ninguno de los luchadores que formaban parte de la misma tenía la más mínima credibilidad. Su existencia daba un poco de vergüenza, y era mejor darla por cerrada.
Y es que, a Vince nunca le gustaron los luchadores pequeños, y nunca se tomó en serio el Cruiserweight Championship. Durante 20 años, entre el 65 y el 85, existió un campeonato WWF Junior Heavyweight Championship, que Tatsumi Fujinami se llevó a la New Japan en el 78, dónde se disputó hasta el 85, hasta el fin de la relación entre la empresa japonesa y WWF. Para entonces, Vince ya mandaba en WWF, y no tuvo ningún interés en que el cinturón volviera a New York.
Pero WWF tenía por ahí otro título rondando por México, el WWF Light Heavyweight Championship, creado en el 81. En los 90, ese título llegó a Japón y, en el 97, y con el fin de rivalizar con el WCW World Cruiserweight Championship, la WWF trajo a casa su título. Pero ni se acercó a lo que hacía la competencia, que tenía a los mejores del mundo en ese peso. El título fue desactivado cuando WWF compró la WCW, y su campeonato crucero, que era mucho más valioso. Pero, poco a poco, fue perdiendo valor, hasta desaparecer en 2007.
Gracias a la Network, WWE, buscando nuevos conceptos de programa, realizó el torneo WWE Cruiserweight Classic, con gran aceptación. El ganador del torneo, TJ Perkins, se llevó el nuevo título crucero a la nueva división que se estableció bajo la marca Raw. En un programa de 3 horas, se desea que los luchadores de peso crucero cumplan un papel similar al que cumplían en la extinta WCW.
Pero la empresa que dirigía Bischoff, como decía, tenía a algunos de los mejores luchadores del mundo en esa división: Rey Mysterio, Dean Malenko, Eddie Guerrero, Jushin Thunder Liger, LA Park, Juventud Guerrera, Chris Jericho... Mientras que en WWE, ahora, están teniendo protagonismo Brian Kendrick, Tj Perkins, Rich Swann... luchadores de muy poca incidencia internacional. Y los combates por el título que ha habido hasta ahora son realmente irrelevantes. Para llegar al nivel de la WCW, WWE debería fichar a gente como Kota Ibushi, Kushida, Ricochet, Zack Sabre Jr, Pentagon Junior o Will Ospreay.
Sin embargo, si WWE da protagonismo en esta división a Máscara Dorada, Drew Gulak o Cedric Alexander, y une a luchadores que tiene bajo contrato como Kalisto, Neville, La Sombra o Hideo Itami, sí que puede tener madera para que salgan cosas muy buenas de ahí. Veremos qué tal está el programa 205 Live.
Vamos a recordar varias luchas de la división crucero de WCW, para conmemorar este momento. Empezamos por un combate por el Cruiserweight Championship en Bash at the Beach 1997, entre Chris Jericho y Último Dragón.
Es una lucha muy considerada, en general. A mi me parece notable, pero no la barbaridad de la que se habla. Es, al fin y al cabo, una lucha de principio de cartelera, con todo el mundo pensando en los main events.
Está muy bien ejecutada, en realidad. Chris Jericho, desde el principio, ataca la espalda del enmascarado, sin parar, mientras este intenta tener pequeños comebacks. No goza, el canadiense, del arsenal de ataques y llaveo a la espalda que puso en juego Eddie Guerrero en su legendaria pelea con Rey Mysterio, pero aplica buenas bombas y slams. También recibe Último Dragón buenos ataques en ringside.
Chris Jericho falla un vuelo, y se da un golpe importante contra el suelo, fuera del ring. Hay, posteriormente, momentos en los que ambos aplican intentos de conteo extremadamente veloces, y resulta muy emocionante. Casitas y paquetitos aparecen por todos lados. Luego, Jericho intenta más ataques a la espalda, y hay buenas maniobras aéreas. Finalmente, el canadiense se lleva la victoria en uno de los intentos de conteo, al revertir el que le estaaba aplicando su rival.
Notable lucha, muy bien llevada a cabo, con un obvio olor a mitad de cartelera.
Puntuación: ***1/2