No quería terminar el especial del Salón de la Fama de WWE 2017 sin mencionar al no-wrestler exaltado: Teddy Long.
Teddy Long no es un luchador, pero ha tenido suficiente incidencia en la historia de WWE como para merecer estar en el Salón de la Fama. Los hay mucho menos importantes. Este hombre ha estado mucho tiempo vinculado al mundo del wrestling, y desde mucho antes de que se le empezara a reconocer. Empezó muy abajo, como chico de los recados de varios wrestlers, y como referee. Incluso estuvo metido en una storyline en la que hacía de árbitro tramposo en Jim Crocket Promotions. Posteriormente, comenzó a llevar a cabo roles de manager, acompañando a muchos luchadores, includio Mark Callous, que sería conocido posteriormente como The Undertaker. Su relación con el Deadman, posiblemente, facilitó el rol que cumpliría en Smackdown años después.
Después de 11 años en WCW, Teddy llegó a WWF, convirtiéndose en referee, una vez más. Y una vez más, tuvo la oportunidad de hacer de manager para varios luchadores. Posiblemente, el más recordado de esa época sea Mark Henry. Esto fue así hasta 2004, cuando recibió la oportunidad por parte de Eric Bischoff de ser General Manager invitado de Smackdown. Este fue el paso previo para que se convirtiera en GM definitivo, el más longevo y recordado de la marca azul de WWE.
Teddy no era un GM especialmente interesante. Casi siempre fue face, y le caía muy bien a la gente. Su baile y sus gritos característicos gustaban al público. Eso está bien, pero para las storylines, siempre viene bien alguien rudo. Los poderosos son fáciles de odiar, eso forma parte de la moral judeo-cristiana. Así, Teddy no daba mucho juego, pero siempre estaba ahí para hacer frente a los tramposos de la marca, ante el júbilo del respetable.
Teddy tuvo varias etapas como General Manager. En un momento dado, se hizo rudo, y tuvo una pequeña rivalidad con Undertaker, aunque no duró mucho la idea. En última instancia, de nuevo como face, comenzó un feudo frente al GM de Raw, el vicepresidente de relaciones con el personal, John Laurinaitis. En WrestleMania 28, se jugaron el puesto de doble General Manager. Teddy tenía consigo un equipo de luchadores faces de Smackdown, mientras que Johnny contaba con un montón de heels de Raw.
Por el equipo azul tenemos al divertido y de moda Santino Marella, que había llegado a protagonizar momentos memorables durante los meses previos en Smackdown, por la falta de héroes en la marca. También estaba Zack Ryder, que tras tirunfar con su webserie, recibía un pequeño push, y se había metido en una especie de relación personal con la bella Eve, que le acampaña hoy. También estaba Kofi Kingston, que en todos los WrestleMania tiene que estar en una lucha de relleno; el enorme Great Khali, R-Truth y Booker T, que dejaba la mesa de comentaristas para luchar, en la que creo que es su última batalla en WWE. Acompañan al equipo, además de Eve, Hornswoggle, Nikki Bella, Aksana y el propio Teddy Long.
Por parte del Team Johnny, tenemos a David Otunga, que era abogado de John, o algo así, además de malosos habituales como Drew McIntyre, The Miz, Dolph Ziggler, Jack Swagger y el poderoso Mark Henry. Junto a ellos están Vicky Guerrero y Brie Bella, además de Laurinaitis.
La lucha es un poco mejor de lo que recordaba. Es un buen entretenimiento para descansar de las grandes rivalidades de WrestleMania. Johnny Ace, más que odioso, es ridículo, pero todo el mundo quiere que pierda. Y teniendo a Santino y Ryder en su equipo, Smackdown tiene asegurados los aplausos.
Tenemos unos primeros minutos iniciales con los buenos entrando, uno detrás de otro, haciendo cada uno su parte. El legendario Booker T entra, y tiene unos buenos minutos de dominio, pero comete el error de atacar a todos los rivales a la vez. Al final, se lleva un golpe, y tenemos un buen rato de dominio heel, en busca del hot tag. Después de muchos minutos así, entra Henry para hacer un World Strongest Slam sobre el 6 veces campeón mundial, para que se líe la montonera, y todos tengan la oportunidad de lanzar grandes ataques. R-Truth, Zack Ryder y Kofi Kingston vuelan sobre sus rivales en ringside, mientras las mujeres se matan entre sí.
Santino Marella protagoniza un gran segmento frente a The Miz en el ring, Cobra incluida. Se mete Ziggler, se mete Ryder, y este resulta el protagonista de la parte final. Cuando va a finalizar con su patada en la esquina, hace sus gestos, y entra Eve para hacerlos junto a él en el ring. El referee la echa, lo que despista a Ryder, momento que aprovechan sus rivales para derrotarlo.
John Laurinaitis se convierte en doble General Manager, y Eve Traiciona a Zack después de la lucha. Todo malo para los chicos de Smackdown, en una lucha entretenida, que cumple su rol dentro del evento.
Puntuación: **3/4