En los últimos días, hemos comentado un par de luchas recomendadas por lectores a través de la sección de comentarios, que es algo que todo hijo de vecino puede hacer si así lo estima oportuno. Hoy continuamos con esa misión, pues un fiel lector, The Comedian, refirió en su día la lucha entre John Cena y Shawn Michaels en el main event de WrestleMania 23. Es un combate muy conocido, así que no creo que sorprenda a nadie su presencia aquí. El el tipo de luchas que deben estar, sí o sí, en el blog, así que, hoy, cubrimos esa carencia.
Los primeros meses del año 2007 en WWE fueron bastante buenos. En el Road to WrestleMania, presenciamos el devenir de dos rivalidades titulares muy simétricas. Dos leyendas atemporales como Undertaker y Shawn Michaels, se enfrentarían en el magno evento del show más grande del año a las dos grandes superestrellas del momento: Batista (Smackdown) y John Cena (RAW). Las dos eran rivalidades entre Faces, así que estamos en un WrestleMania sin heels en los combates principales. Todo muy raro, y genial.
Undertaker ganó el Royal Rumble Match, eliminando a Shawn Michaels en último lugar. La verdad es que nada hubiera cambiado de cara a WrestleMania si hubiera habido un final en el último momento que hubiera alterado la identidad del ganador, puesto que el perdedor, Shawn, también luchó por un título en el magno evento. De hecho, creo que esa circunstancia se ha dado muchas veces, y no creo que sea casualidad. Pero Michaels ya había ganado dos veces la batalla real en sus años mozos, así que era el turno del Enterrador, quién, además, conseguiría su respectivo campeonato en el mayor evento del año. HBK, pues, se conformó con conseguir una oportunidad titular al derrotar a Edge y Randy Orton en una triple amenaza por la posición de Number One Contender. No es tan evocador, pero el resultado es el mismo.
Como digo, fueron dos rivalidades simultaneas entre faces, muy interesantes, pues se trabajaron los caracteres sin recurrir a nada sucio. Batista y Undertaker hicieron equipo varias veces, pero acabaron peleándose, pues había demasiada testosterona acumulada. Mientras que los dos tops de Smackdown se enfrentaban a dos rudos jóvenes pero bien posicionados como Mr Kennedy y MVP, Cena y Michaels se veían las caras con Edge y Orton, quitándoles los veteranos World Tag Team Championships.
En No Way Out 2007, Batista y Taker se enfrentaron a Cena y Michaels. Los de Smackdown no mantuvieron la compostura, mientras que los de RAW supieron mantener la calma, y gracias a eso, se llevaron la victoria, a pesar de haber estado contra las cuerdas, gracias a la traición de Batista sobre su compañero. En lo relativo a RAW, aunque existía cierta tensión, por el momento, los contendientes se comportaban como caballeros.
Pero la batalla entre los cuatro legendarios guerreros se repitió en el programa de RAW previo a WrestleMania 23, un show en el que todas las rivalidades se prepararon de cara al PPV, incluyendo el Money in the Bank, y el enfrentamiento de millonarios entre Donald Trump y Vince McMahon. En el main event, los dos equipos se vieron una vez más las caras y en esta ocasión, fue Taker el que traicionó al Animal. Pero la cosa no acabó ahí. Al fin, Michaels sacó lo que llevaba dentro, y le pegó una Sweet Chin Music al Campeón de WWE, con un desprecio que concuerda con la actitud que demuestra en la lucha que mantienen en WrestleMania 23.
Una buena lucha, en la que Shawn se muestra muy superior la mayor parte del tiempo. Cena, que había entrado al estadio conduciendo un coche deportivo, de una manera muy espectacular, está a merced del veterano, que lo mira como si no valiera nada. John es el campeón, pero es el campeón de una era menor, de una categoría que no le llega ni a la suela de los zapatos a los tiempos en los que HBK batalló. O eso parece pensar este, que lo trata como a un niñato.
Shawn casi se ríe de él mientras aplica algunas llaves, y esquiva todo lo que lanza el musculado héroe. La fuerza de este es muy superior, pero Shawn elimina esa diferencia con su mayor conocimiento. E incluso se permite aplicar un Springboard Moonsault desde la segunda cuerda a la mesa de comentaristas.
Shawn le da una clase de wrestling a John, y este no consigue hacer prácticamente nada en buena parte de la batalla. Michaels se estrella contra el esquinero, y se abre la cabeza, así que, por primera vez, tiene un objetivo en la batalla.
Esta es una lucha entre un bruto que pega Clotheslines muy fuertes, y un veterano con mucho más conocimiento, pero también más soberbia. Es una pelea entre un perro y un gato. El félido consigue dañar la pierna del can, y disminuir su velocidad, pero tras sufrir esa herida, la cosa se complica para él.
El referee, que es Chioda, el veterano despedido en marzo de 2020, recibe una Sweet Chin Music, y queda fuera de juego. Cena empieza a buscar sus finishers sin parar, pero falla una y otra vez. Recibe un fuerte DDT, y un Piledriver asesino sobre los escalones de metal. Ahora también él tiene una herida en la parte posterior de la cabeza.
Pero Michaels tiene un problema: Cena tiene dos armas mortales que hacen demasiado daño como para soportarlas: el FU y el STF. Huye sin parar de ambos, pero acaba soportándolos. Tras varios STFs, se tiene que rendir, no hay otra. El público lo lamenta, porque estaba muy a favor del veterano. Cena retiene, en un muy buen main event.
Puntuación: ****