Alberto del Río salió el año pasado de WWE, muy contento porque ganaría mucho dinero en colaboraciones eventuales. Pero año y pico después, vuelve al confort del sueldo fijo que le paga Vince, y habiendo tenido bastantes problemas con los promotores. En la WXW de Alemania, le acusaron de haber pasado totalmente del evento para el que estaba anunciado, aunque él se quejó de los promotores no habían cumplido su parte. En la WWL de Puerto rico, comentan que Alberto aceptó un adelanto de 5.000 dólares por unas labores de promoción que nunca llevó a cabo, y que ese dinero no se ha devuelto. Y de la Triple A mexicana, directamente, se ha ido sin perder el título mundial que tenía en sus manos de forma digna para la empresa.
Triple A le defendió, diciendo que la WWE no le había permitido acudir a perder ese título, pero el responde que es culpa de la empresa mexicana, y su desorganización. Y es cierto que Triple A es un KOs, tiene luchadores sin contrato, como él o Carístico, que un día aparecen en otras empresas sin previo aviso. Y encima, pocos días antes de la realización del evento Guerra de Titanes 2015, la promotora canceló el evento, algo nunca visto en una empresa seria. Pero Alberto no puede culpar a estas cancelaciones de su no aparición, puesto que se había negado a hacerlo mucho antes.
Una fecha que sí ha cumplido es su aparición en el evento Lockout de la WWC puertoriqueña, empresa de Carlos Colon, buen amigo de la WWE, y promotor de la empresa de Vince en Puerto Rico (y padre y tío de los Matadores). Alberto estaba anunciado para una lucha frente a Ray González, un clásico de la lucha del país, seguramente el luchador más importante de los últimos 20 años allí, junto a Ricky Banderas.
En una fantástica promo de WWC, vimos como El Patrón Alberto fue a visitar las instalaciones de TWA, la escuela de lucha de San Antonio que fundó Shawn Michaels, a la que fue enviado Ray González Jr, hijo de Mr Ray-tings. Alberto llegó donde estaban entrenando él y otros compañeros, y se burló de su peso, de su sangre boricúa, y de su padre, para acabar atacándole ferozmente. Alberto quiere vengarse de Ray Gonzalez, quien venciera a su amigo Ricardo Rodríguez, y así, le manda un mensaje.
Alberto es un maestro de hacerse odiar, por eso nunca debe ser técnico. Llega al ring el día del evento entre muchos abucheos de un público boricua que es tremendamente apasionado. Espera a Ray González con una silla, pero este aparece con una madera y le da una buena paliza. "Esto es lucha libre de Puerto Rico, pendejo mexicano", le dice. Alberto se humilla, pide perdón, y le ofrece su mano, pero ya es tarde para mentiras. Alberto huye, y es agredido por un aficionado del público, de forma legítima. Esto es lo que pasa cuando enfadas tanto a un público tan enloquecido como el de Puerto Rico.
La lucha continúa, hay buenos ataques por parte de Alberto, que domina. Aparece Ray Jr, quien le tira unos polvos en la cara. Ray Sr supera el arm-breaker, y atrapa a Alberto con una variante de Figura 4. Pero aparece el hermano del mexicano, Hijo de Dos Caras, quien salva al Patrón, y provoca la DQ. Seguramente, esta rivalidad familiar continuará, de cara al evento Euphoria, del 9 de enero.
La lucha no es muy allá, aunque hablan bien del main event entre Mr 450 y el Sensacional Carlitos, quizás la vea.
Puntuación: **3/4
