Seguimos con el especial del Hall of Fame 2017. En el anterior post, comenzamos a hablar sobre DDP, y repasamos esa buena lucha que tuvo frente a Randy Savage en The Great American Bash 1997. Hoy vamos a por otro combate con los mismos protagonistas, en Halloween Havoc 97.
Las trampas de la NWO le dieron la victoria al enloquecido Savage. En el siguiente PPV, Bash at the Beach, Page hizo pareja con Curt Hennig para enfrentar a los dos protagonistas de su derrota, Savage y Hall. Hennig apareció como gran sorpresa, pero acabó ayudando a la NWO al final de la lucha, provocando otra derrota de DDP con trampas. A estas alturas, ver cada semana la misma trampa de la NWO era exasperante.
En el siguiente PPV, Road Wild, la cosa no mejoró. Ahora fue Hennig quien derrotó a DDP, gracias a la interferencia de Ric Flair, que quería atraer a Mr Perfecto al grupo de los 4 Horsemen; y gracias, de nuevo, al KO de un árbitro que coincidía con el Diamond Cutter de Page. Siempre igual. Pero al fin, en el siguiente PPV, Fall Brawl, DDP se llevó una victoria, al hacer pareja con Lex Luger para derrotar al equipo formado por Randy Savage y Scott Hall. Eso sí, el final volvió a ser una estupidez, con árbitros muertos por todos lados, pero esta vez el resultado fue a favor de los buenos.
En Halloween Havoc, DDP y Randy Savage volvieron a encontrarse en combate singular. Es un momento en el que la storyline de la NWO estaba en su punto álgido. Todos los programas de la empresa están dominados por el stable, y en las gradas hay un montón de camisetas con sus siglas. En este momento, es imposible hacer una lucha que no esté llena de interferencias o trampas.
DDP vuelve a tener una venda alrededor de su cintura. En esta ocasión, llega sin Kimberly, pero Savage sí que tiene a su lado, como siempre a Miss Elizabeth, con su camiseta de la NWO. Debo decir que la veo más atractiva que en el año 90, más madura, aunque el rol de ruda no le pega nada, porque tiene cara de buena chica. Es una lástima que le quedaran pocos años de vida. Su final fue el mismo que el de tantas personalidades de este deporte: sobredosis.
La lucha es buena, tiene algunas partes interesantes, pero el bookeo de WCW vuelve a ser estúpido, y se la carga. Los luchadores tienen un intercambio normalito en el ring, hasta que vuelven a irse a luchar entre el público, y a brawlear entre las tumbas que forman la escenografía de Halloween. Hay que recordar que esto es un Las Vegas Sudden Death Match, que viene a ser un Last Man Standing Match.
Savage, que está como una cabra, le roba la cámara a un camarógrafo, e intenta golpear a DDP con ella, pero este le pega una patada desde el suelo, haciendo que sea Randy el que se golpee. La cámara queda rota, y cuando el referee va a comenzar con la cuenta de 10, llega Elizabeth desde atrás y le rompe un plato en la cabeza. La rubia aprovecha para ahorcar a DDP con un cable, hasta que aparece Kimberly y se la lleva.
Señalemos el hecho de que la manager de Savage ahorcó a DDP después de dejar KO al árbitro. No hacía falta, porque aquí no hay descalificaciones. Al final de la lucha, este error de bookeo habitual en WCW se hará aún más importante, y por tanto, estúpido.
DDP aplica facebuster sobre Savage, y va a por el Diamond Cutter, pero el macho se agarra a la cuerda, y DDP es el que cae. De una forma absurda y poco creíble, queda KO después de ese intento, lo que Randy aprovecha para aplicarle dos veces el Flying Elbow, aunque la cuenta no llega, aún, a 10. Randy busca un Body Slam para intentar un nuevo codazo aéreo, pero al agarrar a DDP, golpea al referee, que queda KO OTRA VEZ. Como consecuencia de esto, la cuenta no llega a 10.
Randy aplica un golpe bajo a DDP, que cae doliéndose a ringside. El referee va a llevar a cabo la cuenta, pero Savage le agarra para que no mire. Con el referee despistado, entra Sting (que resultaría ser un falso Sting, a favor del bando NWO), y golpea con el bate a DDP en su herido estómago. Savage suelta al referee, que cuenta hasta 10. Victoria para Randy.
Ojo, que Macho King estaba agarrando al referee para que no mirara mientras Sting golpeaba a DDP, pero eso es estúpido, porque en un Last Man Standing no hay DQ. Sting podría haber golpeado a Page con el referee delante, y no habría pasado nada. Es increíble que los guionistas cometan estos errores, aunque es un indicativo claro del producto que se hacía en los 90.
La lucha es buena, buen storytelling, pero hay mucha tontería, cosas que desprecian la inteligencia del espectador, y eso no me gusta.
Puntuación: ***