Tras comentar la lucha entre Okada e Ishii en semifinales del torneo New Japan Cup 2019, vamos a hablar de la final. El Rainmaker se enfrenta, en ella, al ingobernable Sanada. El ganador, irá a New York, al Madison Square Garden, para intentar convertirse en IWGP Heavyweight Champion.
Como decía en el anterior post, mucha gente amó el combate de semifinales entre Okada e Ishii. Pero, madre mía, creo que la final es muchísimo mejor. Si cuando hablé de esa pelea, dije que NJPW no es capaz de contar historias distintas sobre el ring, tan solo pasaron unos días hasta que demostró lo contrario, gracias a Sanada.
Sanada, quizás no sea el mejor luchador de New Japan, pero ha hecho sus pinitos en el extranjero. Ha luchado un tiempo en Estados Unidos, y ha hecho sus giras por México. Se le nota un interés por la imagen, por el personaje, y por el espectáculo en el ring.
Esta se puede considerar como una lucha de reversals, pues hay varios. Okada comienza dominando, con sus clásicos ataques frontales. Parece que será una lucha fácil, rutinaria, que acabará con un Tombstone, y un Rainmaker. Pero no tendrá tanta suerte.
Tras aplicar su clásico Big Boot en ringside, seguido de DDT, Missile Dropkick, Okada va a por un Tombstone, pero su rival se lo reversa. Lo reversan varias veces, el uno al otro, siendo Sanada, finalmente, el que lo aplica. Después de eso, coloca al estelarista en un montón de ocasiones en Skull End, pero sin cerrar la llave con las piernas. Okada necesita mucho más desgaste.
Incluso convierte un Rainmaker en Skull End, y luego esquiva otro, e intenta aplicar uno, que es reversado por Okada, también en un Skull End... que, otra vez, Sanada convierte en su llave de rendición, esta vez, con ruleta incluida. Ahora sí, la cierra con las piernas. Okada no se rinde, pero están así mucho rato. Cuando parece que está KO, Sanada intenta la cuenta de tres, pero el excampeón reacciona, casi por instinto.
Esa es una secuencia genial, seguida de un Moonsault fallido por parte del ingobernable. Aún así, consigue aplicar el KTO, y coloca a su rival para que reciba un nuevo moonsault. Este se arrastra, agarrándole de las piernas, desesperado. Sanada responde con un Skull End, que esta vez es reversado en Tombstone. Con dos Rainmakers, se acaba la contienda.
Buena victoria del tanto tiempo campeón, ante un Sanada que hace un muy buen combate, y le permite a Okada introducir algo de variedad en su rutina. Me ha gustado mucho la lucha.
Puntuación: ****1/2