Seguimos repasando luchas del torneo G1 Climax de la New Japan en 2017. Veremos hoy la lucha entre Okada y Suzuki, en la noche 16 de competición, antes de afrontar, dentro de unos días, las tres principales batallas de la competición (lo que podríamos considerar semifinales y final).
El campeón, Okada, que está haciendo un gran torneo, con luchas muy buenas, se enfrenta al lider del Suzuki Gun, el señor Minoru Suzuki, que también lo está dando todo. Es el main event de la noche, y sin duda, una de las mejores peleas del campeonato.
Okada viene con una venda en la parte posterior del cuello, como consecuencia de las anteriores jornadas de competición. Obviamente, Suzuki no tarda mucho en aprovecharlo. Primero, el campeón comienza con fuerza, pero pronto le frenan los miembros del Gun que están en Ringside. Suzuki es el tipo más malo de la empresa, y tiene que dejarlo claro en cada combate. Después de esa ayuda, le quita las vendas a Okada, y aplica llaves al cuello, incluyendo una con la ayuda de las vallas metálicas. Luego intenta matar a su rival con una silla, pero el referee consigue frenarle.
Okada tampoco es un santo. NJPW no es muy estricta a la hora de mantener el papel de héroes y villanos en sus luchadores. En realidad, ese estatus depende mucho del contexto. Pero en una lucha frente a Suzuki, uno siempre es el bueno. Okada recibe una gran cantidad de castigo sobre su cuello, y el público está con él. Consigue tener su comeback, y golpear con sus típicos ataques frontales. Incluso conecta una Tombstone Piledriver. Pero cuando va a por la segunda, Suzuki la reversa, y es él quién la la usa.
El dolor en el cuello de Okada aumenta. Cada vez que recibe un candado, con brazos o piernas, o una sleeper, la gente se duele. El dolor está bien vendido. Suzuki busca otra piledriver en varias ocasiones, pero una y otra vez, Okada resiste antes de permitirle usarla. Recibirla sería fatal para él.
Kazuchika consigue sacarse de la nada un RainMaker. No suelta a su rival, aún en el suelo, y aplica un segundo finisher. Por desgracia para él, tarda mucho en cubrir a Suzuki, así que la cuenta no llega a tres.
Después de eso, el villano comienza a darle guantazos. Sus slaps son muy fuertes. Okada le responde con lo mismo, lo que es peor para él, porque enfada al mafioso. Los dos se matan, dándose slaps sin parar, que son claramente reales.
El reloj avanza. Hay varios avisos de que el tiempo límite de 30 minutos se acerca. Estos dos locos siguen matándose a hostia limpia, hasta que el campeón aplica otro RainMaker de la nada. Pero no le da tiempo a intentar la cuenta. De hecho, parecía, durante los últimos minutos, que estaba perdiendo tiempo, para conseguir un empate que podía beneficiarle si ganaba en la lucha final de la liguilla.
La lucha queda empatada, pero en este caso, el final no me parece malo, creo que queda genial así, porque en el modo liguilla, si que puede ser muy útil un empate. Además, de cara al futuro, las fuerzas de los dos wrestlers quedar muy igualadas.
Por lo demás, la lucha me ha encantando, hay pocas cosas que sobren, todo tiene un sentido, y el final, a hostia limpia, con todo el espíritu del mundo, es un gran remate.
Puntuación: ****1/2
Muy de acuerdo en lo de: contra Minoru Suzuki uno siempre es el bueno jajajajaja
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