Thursday, November 8, 2018

The Dudley Boyz vs The Hardy Boyz vs Edge and Christian, WWF SummerSlam 2000




Encaramos ya el final del especial sobre los inducidos al Salón de la Fama de WWE en 2018. En el apartado de equipos, Los Dudley Boyz recibieron un merecido reconocimiento y, aunque aún están en activo (al menos Ray), se unieron al club de leyendas de la empresa más importante en la industria del deporte de entretenimiento.

Los Dudley Boyz, conocidos fuera de WWE como Team 3D, sin duda, forman una de las duplas más importantes de la historia, independientemente de que su estilo luchístico pueda gustar más o menos. Desde luego, no son los Steiner Brothers si nos referimos a la capacidad de dar grandes luchas. Pero su estilo no es ese.

Por una parte, pasarán a la historia por haber nacido, casi, en la ECW, por sus luchas extremas y su utilización de las mesas. Hoy, todavía, todo el mundo les pide mesas cuando aparecen. Pero, también, son famosos por haber estado juntos durante muchísimos años, por ser una pareja de hecho que se ha mantenido junta allá donde ha ido, por ser amigos de verdad. No es una pareja de esas que nace de forma impostada entre tipos que no se aguantan. Ya no hay parejas como esa.

Quizás eso justifica otro de los hechos que caracteriza a estos dos equipos: haber sido campeones en muchas empresas de muchas partes del mundo. Fueron 8 veces campeones en ECW, 10 veces campeones en WWE, 3 veces campeones en TNA (una de ellas de la NWA), y 2 veces campeones en New Japan. También han ganado otros títulos y torneos, entre ellos, el World Strongest Tag Determination League de All Japan. Tienen varios match of the year del Pro Wrestling Illustrated, y son parte del Hall of Fame de la WWE y de la TNA. 

En WWE, en concreto, siempre serán recordados por participar en los primeros combates del tipo TLC, que son de esas luchas que quedan en el subconsciente colectivo. En este especial, veremos las dos primeras que tuvieron ante Edge y Christian, y ante los Hardy.

Los Dudley llegaron a WWE en el 99, después de haber sido grandes protagonistas en la división Tag de  ECW y haber tenido rivalidades con lo mejorcito de esa empresa. WWF es una empresa que, en ese momento no podía pagar cantidades excesivamente altas, pero que tenía un acuerdo con Heyman para intercambio de talento. Los Dudley introdujeron el uso de mesas en el wrestling mainstream, que es algo que no había pasado hasta entonces. Esta innovación les hizo grandes.

En WWE, tuvieron rivalidades de todo tipo, incluyendo a los Hardy y a Edge y Christian, aparte de otras parejas de la época. En WrestleMania 2000, esos tres equipos históricos tuvieron una ladder. En SummerSlam, se introducirían las mesas y sillas para crear un nuevo tipo de combate: los TLC (Tables, Ladders and Chairs) matches. 

La lucha me gusta bastante. Me entretiene mucho. Porque es, a grandes rasgos, un spot fest, pero con significado y sentido. Porque era la primera vez que se metían mesas en este tipo de combates, y los Dudley aprovechan bien su superioridad en ese campo dominando al principio. Todo el mundo acaba comiendo madera. El dominio de los ECW originals acaba, no obstante, cuando Ray se estrella contra una estructura de mesas, cayendo desde una escalera. Buen golpe, que le deja fuera.

Ahora actúan los Hardy, que aplican sus mejores técnicas valiéndose de escaleras. Hay un Leg Drop desde una escalera, que resulta brillante por parte de Jeff. Pero intenta aplicar una Swantom Bomb sobre un rival que está tumbado en otra, y acaba destrozándola con su propia espalda cuando este se aparta. Otro gran golpe con sentido.

Edge y Christian tienen ahora ventaja, puesto que los otros dos equipos están en inferioridad numérica. Hay que decir que, aunque los ataques con escaleras se han depurado mucho desde entonces, los golpes en la cabeza que se daban en esos tiempos eran brutales. Hoy en día es imposible, por los estudios sobre conmociones cerebrales, hacer combates así.

Christian y Edge, cómo digo, están cerca de la victoria. Los dos suben por la escalera para coger las correas, pero aparece Lita, novia, entonces, de Matt, y los lanza, cayendo estos y golpeándose en sus partes con las cuerdas. Bonita metáfora.

Matt se cree ahora sólo con los títulos a su alcance, pero los rubitos vuelven al ring, y empujan la escalera en otra dirección, cayendo el mayor de los Hardy sobre otra estructura de mesas. Este cae de espalda, sin control, así que debe hacerse mucho daño. Es una caída muy peligrosa, ya que no está orientada. Edge aplica Spear sobre la que posteriormente sería su novia, Lita, que se golpea también la cabeza con una escalera. Una lucha muy peligrosa.

A pesar de la resistencia de Devon y un retornado Jeff, Christian y Edge se demuestran superiores, y alcanzan su objetivo. La primera victoria es para los canadienses.

Puntuación: ***3/4

Monday, November 5, 2018

AJ Styles vs Daniel Bryan, WWE Smackdown 30/10/2018



Daniel Bryan terminó la rivalidad que mantenía frente a The Miz. Era necesario que terminaran con la historia que ha estado latente durante tantos años. Ya comentamos la lucha que mantuvieron en SummerSlam, que estuvo muy bien. La cosa continuó con un Mixed Tag Team Match, con las esposas de ambos involucradas, en Hell in a Cell; y terminó en Super Show-Down.

En el evento australiano, estaba en juego una oportunidad por el WWE Championship, que debía cobrarse en Crown Jewel. Bryan ganó la lucha, aunque acabó siendo una cosita muy corta, sin mucho valor, no se sabe bien por qué. Hasta 3 días antes de Crown Jewel, la batalla entre AJ Styles y Daniel Bryan por el WWE Championship estaba anunciada para ese PPV, pero ya sabíamos que Daniel no quería ir a Arabia, por la polémica del asesinato del periodista del Washington Post en la embajada saudí de Estambul. Así, esa lucha se adelantó al programa previo de Smackdown.

Por supuesto, Bryan perdió. Y es probable que no vuelva a ganar el título nunca, si WWE observa que es alguien que pone sus ideales por encima de la empresa. Pero el combate, aunque es en Smackdown, y con pesados cortes publicitarios, es realmente bueno. Muy bueno, incluso. Vamos a comentarlo.

Styles y Bryan abren el programa, para hablar del anterior show, en el que hicieron pareja, y se llevaron tan mal que fueron derrotados por los hermanos Uso. Son dos de los mejores luchadores del mundo, y lo importante, más allá de rivalidades y odios, es ese cinturón que lleva AJ en la cintura. Los dos coinciden en no esperar a Crown Jewel, y pelear hoy mismo. Shane McMahon, comisionado de Smackdown aparece para señalar su aceptación. La lucha comienza ya.

Una lucha sorprendentemente buena para un programa semanal. Creo que estos dos tendrían un gran submission match, o un I Quit match, aunque para esto, uno de los dos tendría que ser rudo. El caso es que Daniel comienza muy stuff, fuerte, atacando el brazo de AJ con mucha maldad, y muchas patadas. También pone en práctica todas las llaves que conoce. Hace mucho que no lo vemos pelear de esta manera, se le echa mucho de menos. 

Pero, en un tope suicida, se hace daño en la rodilla, y a AJ se le aparece La Virgen. El Calf Crusher le viene a la cabeza.

El castigo del campeón sobre la pierna del barbudo es muy bueno. También patea como un cosaco, y aplica un montón de castigos muy técnicos. Quizás, Bryan falla un poco a la hora de vender ese daño en la pierna porque, aunque se duele bastante, siempre consigue correr y dar sus patadas. Le puede el ego.

Los castigos por ambos lados van subiendo de nivel. Styles le cae en la cabeza a Daniel, y los fantasmas de las conmociones cerebrales aparecen una vez más.  Bryan empieza a aplicar llaves a los brazos sin parar. Engancha hábilmente a su contrincante con un Arm Bar, y lo convierte en un Yes! Lock. AJ se revuelve, pero sigue recibiendo sobre su brazo un Triangle Shock. Sin embargo, ahora es él el que lo transforma en Styles Clash, para posteriormente atraparle con el Calf Crusher. Daniel se resiste, pero acaba rindiéndose. El daño recibido sobre la pierna ha sido ya excesivo.

Después del combate, Samoa Joe ataca a ambos, para consolidarse, de nuevo, como retador para Crown Jewel. Veremos si eso tiene consecuencias para el futuro. Estaría bien ver un Joe vs Bryan, también con muchos recuerdos del pasado.

Puntuación: ****1/4

Saturday, November 3, 2018

Brothers of Destruction vs D-Generation X, WWE Crown Jewel



Esta semana, hemos tenido dos PPVs de WWE. Por un lado, hemos tenido Evolution, evento sólo para mujeres, que debe ser uno de los mejores shows de la historia de la empresa; y por otro, Crown Jewel, sólo para hombres, que realmente, a pesar de todas las estrellas que ha tenido, carece de luchas realmente interesantes. Pero Shawn Michaels ha vuelto a luchar, y eso hay que comentarlo.

Pero Crown Jewel ha sido polémico por otras muchas cosas, y como creo que no voy a revisar más luchas del PPV, voy a resumir todo aquí.

Ya hablamos de ello cuando comentamos el evento The Greatest Royal Rumble. WWE llegó a un acuerdo con el gobierno de Arabia Saudita para producir eventos en el país de manera periódica durante 10 años. A cambio, le pagan un montón de millones, suficientes como para traer a todas las estrellas que haga falta, y retransmitir esos eventos en la Network como un PPV más.

Eso, sumado a los nuevos contratos televisivos para RAW, y sobre todo, Smackdown, sitúan a WWE en la mejor situación económica de su historia.

Pero fue un trato con el diablo. Porque, como parte del acuerdo, WWE tenía que dar un poco de publicidad al país, y hablar del proceso de modernización y de apertura en el que, supuestamente, se encuentra.

La realización de The Greatest Royal Rumble ya fue un poco polémica para WWE, por el hecho de no poder llevar a sus estrellas femeninas. Para prevenir eso, y para aprovechar una parte tan importante de su roster, en esta ocasión, la empresa ha organizado un PPV femenino, Evolution, que como decía antes, me ha gustado mucho. Ese sí que merece unos cuantos artículos.

Pero la polémica sobre aceptar esa actitud criminalmente machista se ha quedado pequeña en comparación con los hechos ocurridos en las semanas previas al nuevo evento en tierras saudíes, Crown Jewel. Un periodista de The Washington Post, Jamal Khashoggi, disidente del régimen saudí, fue asesinado en el consulado de Arabia en Estambul. Aunque su cuerpo no fue hallado, diversos servicios de inteligencia revelaron que eso ocurrió. Y Arabia lo admitió, comenzando una supuesta investigación de lo ocurrido. No obstante, la información que se maneja es que fue asesinado por orden del príncipe saudí, el mismo que pide a WWE que le lleve a Hulk Hogan y Shawn Michaels a los eventos.

Entonces, hubo cierta polémica sobre si WWE debía realizar el evento en tierras saudies o no. La empresa llegó a pensárselo, y a buscar otras sedes en Europa. Se realizó una consulta, incluso, al gobierno americano. Finalmente, lo que se decidió fue hacerlo en Arabia, pero eliminando toda la publicidad hacia el régimen, lo que me parece bastante correcto.

Porque llevar a cabo un espectáculo deportivo o artístico en un país no tiene nada que ver con apoyar al régimen de ese país. Es un espectáculo, como otros muchos que se dan allí, sin que tengan ninguna repercusión política. Al menos, se lleva un poco de alegría a los niños y jóvenes que ni se enteran de las noticias sobre asesinatos, porque no existe la libertad de información. WWE ya ha ido a China, Cuba y otros muchos países en los que no se respetan los derechos humanos, sin que se de ninguna publicidad ni ninguna connotación política. En este caso, el problema era precisamente ese acuerdo de hablar bien de un gobierno como ese.

A partir de un momento dado, WWE eliminó las menciones a Arabia en sus rivalidades y promos. Como hace con los PPVs normalmente, no se suele hablar mucho del lugar en el que se realizan. Se ha dicho que eso se ha hecho para esconder el hecho de que el evento se lleve a cabo allí, pero como digo, yo lo entiendo como un cambio en su política con respecto a Arabia. Hacer espectáculos para su pueblo no es algo necesariamente malo, pero dar publicidad al régimen sí, y eso es lo que se ha eliminado. 

Hulk Hogan hace de anfitrión del PPV. Los jeques tenían muchas ganas de verlo. Eso sí que se tapó bastante, porque, dada la polémica sobre sus comentarios racistas, iba a ser mucha mierda junta. En su presentación del evento, Hogan no menciona en ningún momento a sus anfitriones. Es una presentación fría, muy distinta del discurso de Cena en el anterior evento saudita. 

Por otro lado, hay que destacar la presencia de Renee Young en la mesa de comentaristas. Hay que tener valor, estando de espaldas al público sin saber cómo va a reaccionar. Dean Ambrose, su marido, la acompañó en el viaje, aunque no estaba programado para el evento y no apareció. Es la única mujer que trabajó, al menos, ante las cámaras.

Daniel Bryan y John Cena se negaron a aparecer en el show. El primero se había ganado la oportunidad de luchar por el WWE Championship ante Styles, pero, finalmente, gastó su opción en Smackdown, y fue sustituido en Crown Jewel por Samoa Joe. Cena estaba programado para participar en la World Cup, y su posición la ocupó Bobby Lashley, con la excusa de que había sido Baron Corbin el que le había quitado el sitio por no habérselo ganado.

La World Cup también tiene tela. Ya sabemos que WWE nunca se toma en serio los torneos eliminatorios. Vince McMahon está traumatizado desde WrestleMania IV. Primero, vimos a Kurt Angle perder frente a Ziggler en una lucha sin significado ninguno. Esta empresa es experta en aniquilar a sus propias leyendas. Vimos llegar a dos rudos a la final, The Miz y Ziggler. Cuesta imaginar que sean los dos mejores del mundo. Y, desde luego, supuso un bajón para el público. Luego, antes de comenzar la batalla, The Miz atacó a su rival, y se lesionó al hacerlo (kayfabe). Shane McMahon estaba obsesionado con que Smackdown ganara el torneo, así que se negó a aceptar el resultado y le sustituyó. Estando Ziggler malherido (o esa era la historia, aunque él no supiera venderlo), Shane ocupó el sitio del Miz, ganó, y se proclamó como el mejor del mundo. Aunque la gente se entretuvo, es un poco insultante que una copa supuéstamente tan importante se la quede un tío que no participaba. Claro, esto será parte de un storyline, que ya iremos viendo.

En el combate por el Campeonato Universal, parecía claro que Braun Strowman se convertiría en campeón para consolidarse como gran estrella. Pero fue atacado por Baron Corbin antes de la lucha, para tener una excusa que convirtiera a Lesnar, de nuevo, en campeón. Ya está anunciado para enfrentar a AJ Styles en Survivor Series, igual que el año pasado. Esta bien saber que Lesnar seguirá apareciendo cada vez que le pongan un fajo de billetes en la mano, aunque ya vemos que este evento está consumido por las futuras storylines.

Y vamos al main event, en el que tenemos la lucha entre señores mayores. Shawn Michaels vuelve a la acción gracias al dinerín saudí. Según él, era demasiada presión organizar un retorno de cara a WrestleMania, porque en ese evento tiene que seguir demostrando un gran nivel. Aquí, en cualquier caso, da la sensación de que nunca ha dejado de luchar.

Michaels se ha rapado la cabeza, porque, en estos 8 años que han pasado desde su retiro, su frente a retrocedido mucho. Sus ojos también se han escondido un poco. Hace poco revisé una lucha suya ante Jeff Jarrett del 93, y la verdad es que las comparaciones son odiosas. Pero, por lo demás, se encuentra en un gran estado de forma. No se sabe si volverá a luchar, pero supongo que, una vez que ha dado este paso, no hay nada que le cierre las puertas para siempre.

Triple H, Shawn Michaels, Kane y Undertaker han estado muchos años en WWE. Deben ser los tipos más leales que ha tenida la empresa. Pero nunca se han enfrentado ambos stables. Y, por suerte, no morirán sin hacerlo. Creo que el combate no es peor que uno que pudieran haber tenido en la Era Attitude, tiempo en el que ninguno de los dos grupos daba buenas luchas. El hecho de ser una lucha por equipos les permite descansar sin que se note tanto la falta de cardio.

Sobre todo, en esta lucha destaca el cambio en las gradas. La gente explota, y se convierte, a pesar de la diferencia de culturas, en un verdadero público de wrestling. Discutimos mucho, en este blog, sobre los aspectos que convierten a una lucha en algo bueno, y siempre hablo de la importancia de un buen público. Después de ver el último capítulo semanal de Ring of Honor, en el que parece que a los fans no les importa nada lo que pasa, a pesar de tener a gente como Jushin Thunder Liger y Kushida en el ring, me reafirmo en que el ambiente es una pieza clave.

La lucha empieza con Kane sobre el ring. Me gusta mucho el intercambio de miradas entre Michaels y Undertaker cuando se va a dar el primer tag para El Enterrador. Los fantasmas vuelven a acosar al HBK. 

En general, los Brothers of Destruction dominan el combate, aprovechando su diferencia de tamaño. Taker utiliza sus mejores ataques, incluidos Old Shool, Snakes Eyes, Big Boot, Leg Drop, o el Leg Drop en el borde del ring. Estos ataques los realiza perfectamente sobre Michaels, un hombre de mucho menos tamaño. Creo que Taker podría tener buenos combates frente a gente que no sea muy pesada, como Jericho, Bryan o Styles. Por sus problemas físicos, una de las cosas que más le cuesta hacer es levantar a hombres grandes.

Los luchadores brawlean en ringside, y Kane aplica un ChokeSlam sobre Triple H en una mesa. El ataque queda muy bien, aunque parece que Hunter podría haberse hecho daño de verdad. Está mucho tiempo fuera de acción.

Mientras tanto, Undertaker castiga a HBK. Hace el papel de rudo, y aplica buenos candados y ataques sobre la cara que difieren un poco de su estilo habitual. Pero Michaels demuestra que todavía está en buen estado, arranca la máscara de Kane, y vuela con Moonsault sobre ambos, dándose con la cara en el suelo. Sangra, pero queda bien.

Sobre lo de la máscara, hay que decir que tanto Mysterio como kane la perdieron en sus enfrentamientos, y no creo que sea casualidad. No sé si habrá algún tipo de simbología en ello, o si tiene que ver con alguna extraña ley local.

Los gigantes siguen dominando, y buscan el doble Tombstone. Pero, estando sostenido por Taker, HBK aplica un piquete de ojos sobre Kane, que tiene en sus hombros al Triple H. Con esto, los DX se sueltan, HBK aplica Sweet Chin Music a ambos rivales, y Triple H remata a Kane con un Pedegree para darle la victoria a su equipo.

Así, los DX se vengan de las humillaciones recibidas en el pasado, con estas dos victorias consecutivas frente a Deadman. Pero es correcto que Shawn gane en su retorno. Creo que es un espectáculo muy entretenido, y da la imagen real de pelea entre dos equipos legendarios, si bien, compuestos por gente que está mayor.

Puntuación: ***1/2

Friday, November 2, 2018

Dick Slater y The Great Muta vs Ric Flair y Sting, WCW Clash of the Champions VIII: Fall Brawl



Recientemente, conocimos el fallecimiento de un nuevo luchador. En este caso, fue Dick Slater, hombre que luchó en montones de territorios de la NWA, y que estuvo, finalmente, en WWF y WCW. No es el luchador más conocido o más recordado, pero era un buen luchador, así que merece, al menos, un post. 

Al ser uno de esos luchadores que llegaron ya veteranos al mundo de la televisión, cuando uno busca luchas suyas, suele encontrar residuos del luchador que en realidad fue. Cualquier cosa que ocurriera en un programa semanal de WCW va a tener más repercusión que increíbles combates de los años 70 u 80, que, quizás, nunca se grabaron. Pero es lo que hay.

En la época de los territorios, Slater ganó títulos en Florida y Georgia. Era un tipo que sabía hacerse odiar, hacía un buen trabajo gesticulador en el ring. En WWF, como todo el mundo, recibió un gimnick rarito, de "rebelde", un tío que apoyaba la causa confederada, y llegaba al ring con la bandera apropiada. Es el tipo de personajes que hoy en día, por temas raciales, no se podrían dar, pero en ese tiempo, en la casa de Vince, cada luchador tenía que cumplir un estereotipo.

Después de eso, estuvo en WCW, empresa en la que se retiró en el año 1996, debido a una lesión. Durante un tiempo, se mantuvo en buen lugar en el midcard, teniendo buenas rivalidades. También estuvo activo en Japón, en la All Japan, participando, sobre todo, en la división de parejas. En ese tiempo, coincidió en el ring con gente como Misawa, Kawada, Tsuruta o Steve Williams, así que ahí tenemos una buena fuente de combates suyos.

Con todo esto, no es un luchador que tenga highlights recordados hoy en día. Quizás lo que mejor recuerda la gente es la puñalada que le pegó a su pareja en 2004, motivo por el cual, estuvo un año cumpliendo condena en forma de arresto domiciliario. Por lo visto, llevaba un colocón de miedo como producto del consumo desmesurado de painkillers que llevaba a cabo para combatir el dolor que le causaban las lesiones que acumuló en su carrera luchística. En otoño de 2018, falleció por causas naturales.

He decidido ver una lucha de Dick Slater, porque, aunque apenas le conozco, tengo la sensación de que debió ser un buen luchador. He estado echando un vistazo al único combate puntuado por el Wrestling Observer que tiene. Se trata de una lucha del año 89, en la que hace pareja con The Great Muta para enfrentar a Sting y Ric Flair. A este combate, Meltzer le dio 4 estrellas y un cuarto.

Es una época muy interesante para la recien estrenada WCW. Ric Flair es el World Heavyweight Champion, y casi lo ha sido durante toda la década. Le acompaña Sting, al que está protegiendo y poniendo over, después de haber empatado en el primer Clash of the Champions, para darle el relevo en la lucha que tendrían en Starrcade 89. Aparte de esa increíble rivalidad, Flair era perseguido por Terry Funk, con el que tendría que verse las caras en un I Quit Match antes de su enfrentamiento definitivo con The Icon. Nunca ha habido un mejor luchador en el mundo que el Ric Flair de esta época.

Los dos héroes hacen pareja en el main event de Fall Brawl, y sus rivales son Dick Slater y The Great Muta. El primero, nuestro protagonista de hoy, en realidad sólo está aquí para cubrir la lesión de Terry Funk, pero bueno, eso que se lleva. Por supuesto, esta lucha sirve, sobre todo, para calentar las rivalidades principales de Flair, pero el combate en sí mismo está muy bien. No me gusta tanto como a Meltzer en su día, pero me gusta la lucha.

Slater parece un showman absoluto. Está protestando e insultando a la gente desde el momento en el que ve el apoyo que le presta a la llegada de los héroes. Además, lleva una mano vendada, lo que ya sabemos que va a aprovechar para hacer trampas. A Keiji Mutoh, por otro lado, ya lo conocemos. Es un gran luchador, y uno de los japoneses con más éxito en las divisiones de peso completo de Estados Unidos. Aquí, su cara pintada, su escupitajo de pintura roja y su estilo de artes marciales le marcan como alguien muy diferenciable. Es obvio que el Tajiri de WWE bebe mucho de aquí.

Los Faces dominan en los primeros minutos, con llaves a los brazos. Slater se muestra como un perdedor bastante cómico, y es, casi, humillado por Ric Flair. Hay saltos de todos a ringside, y el público se vuelve más loco de lo que estaba, que no es poco. La técnica de los malos, en primera instancia, es buscar el dos contra uno, pero no les vale de nada, porque los rivales son demasiado grandes.

No obstante, entre ambos, consiguen dañar la cabeza del Nature Boy. La venda de la mano de Slater ayuda. También le pegan contra las vallas de metal. Cuando se produce el Hot Tag para Sting, la lucha enloquece y también el público, pero mientras el referee se fija en lo que pasa en ringside, el manager de los malos le rompe algo en la cabeza a la joven estrella, que pasa a ser el que recibe los ataques de los rudos en la cocorota. 

En la parte final de la batalla, Muta escupe su líquido al Stinger, y el referee es lanzado fuera del ring. Los malos son descalificados, pero no le importa a nadie. El caso es que llega el lesionado Terry Funk, e intenta ahogar a Flair con una bolsa de plástico. Con este intento de asesinato, se prepara ese genial I Quit Match que ya revisamos en su momento.

Puntuación: ***1/2

Thursday, November 1, 2018

Doug Williams vs Trent Seven, PROGRESS Chapter 76: Hello Wembley



Toca hablar de nuevo de PROGRESS Chapter 76: Hello Wembley, el evento más grande en el wrestling inglés de los últimos 30 años, si no tenemos en cuenta los shows producidos por WWE en el Reino Unido. En el anterior post, revisamos la lucha entre Walter y Tyler Bate por el World Heavyweight Championship. Hoy, comentamos la lucha por el PROGRESS Atlas Championship, que supone el retiro de todo un veterano: Doug Williams.

Williams es un luchador independiente que ha recorrido el mundo luchando. Se hizo famoso a nivel main stream gracias a su paso por TNA, empresa a la que llegó en el año 2009 como parte de la British Invasion, tag team que formada junto a Magnus, actualmente conocido como Nick Aldis. En esa época, TNA era la empresa más seguida en Inglaterra, y aprovechó ese tirón introduciendo en su elenco a esta buena pareja. 

Doug estuvo en TNA hasta 2014. Ganó el título tag team un par de veces, el título de la X Division un par de veces, y el título de Televisión. Formó parte de British Invasión, y de un grupo más internacional conocido como World Elite. También estuvo en el Stable Fortune, así que, en general, tuvo una buena carrera en la empresa de Dixie Carter. Finalmente, estuvo trabajando en OVW, que había dejado de ser territorio de desarrollo de WWE, y pasó a ser territorio de desarrollo de TNA. Fue profesor allí, y también fue World Heavyweight Champion de la promotora. A partir de 2014, volvió a centrarse en el wrestling independiente, ahora, mucho más potente en el Reino Unido.

En mayo de 2018, Williams se convirtió en Campeón Atlas de PROGRESS, un título creado exclusivamente para luchadores con más de 205 libras de peso. Lo que me parece maravilloso. Porque, en la historia del wrestling, se han creado campeonatos con límite de peso superiores. 205 libras, históricamente, es el peso límite para un luchador de peso crucero. Y en tiempos de la Old School, cuando se suponía que el wrestling era algo para hombres grandes y rudos, los campeonatos de peso crucero existían para presentar otro tipo de luchadores, que no podían competir de una forma creíble con los peleadores clásicos. Pero, hoy en día, la cosa ha cambiado mucho, y ya no se defiende en exceso la credibilidad en el wrestling, por lo que cada vez hay más luchadores pequeños, y, casi, lo que faltan son luchadores grandes. Por eso, es tan interesante que se haga un título sólo para ellos, en cuyos combates se pelee de otra manera. No en vano, Matt Riddle y Walter han sostenido esa correa.

En Hello Wembley, Williams defiende el título ante Trent Seven, luchador que no da el perfil de peso completo, pero que ha echado barriga. No sólo el campeonato está en juego, también la carrera de Doug está sobre la mesa. Por la reacción del público ante el anuncio previo al combate, creo que nadie lo sabía, y eso aporta bastante dramatismo al encuentro.

Por lo demás, la lucha es muy old shool, con muchos golpes y lanzamientos sobre la lona. Creo que se adapta bien a lo que se pretende para este campeonato. Hay muchas llaves de manos al principio, y súplexs y piledrivers posteriormente. La diferencia de musculatura y tamaño del veterano de 46 años se hace patente, pero Trent, con la mitad de edad, sobrevive a todos sus súplexs. Finalmente, aplica un Crossbody veloz y le agarra bien para que la cuenta llegue a 3. Seven abraza a Doug en el suelo. La gente se lleva un chasco, porque Williams es considerado toda una leyenda en Inglaterra, y en este día, se acaba su carrera.

La lucha es buena, sin una gran historia, de corte clásica.

Puntuación: ***1/4

Wednesday, October 31, 2018

Tyler Bate vs Walter, PROGRESS Chapter 76: Hello Wembley



Se rompen muchos records hoy en día en el mundo del wrestling. Tiempos ajetreados en el negocio. Vimos, hace poco, el evento indy más grande en la historia del wrestling americano, All In. Hoy, hablamos del evento indy más grande en el Reino Unido en 30 años: PROGRESS Chapter 76: Hello Wembley.

La situación en el Reino Unido es muy interesante, y muy entretenida. Es una tierra con gran tradición luchística, que ya comentamos cuando hablamos del programa clásico de World of Sport. Pero esa tradición se paró después de que ese show saliera de televisión. Ahora, no obstante, la moda ha vuelto muy fuerte.

World of Sport vuelve a estar en antena, aunque no he visto mucho como para saber si hay algo interesante. Nada he escuchado sobre grandes luchas. Pero que haya un show de wrestling en la televisión en abierto siempre es interesante. WWE contraprogramó con su NXT UK, programa del que también tenemos que hablar. En un principio, cuando pareció que World of Sport no tiraba para adelante, el señor Vince McMahon se olvidó un tiempo del proyecto, pero ahora que el nuevo programa está en antena, tenemos en la WWE Network este show que promete muchísimo.

Por otro lado, las ligas indies crecen cada vez más, y cada vez son más interesantes. Dentro de poco comentaremos alguna lucha de Defiant Wrestling. Pero el show Hello Wembley de PROGRESS es lo más grande que se ha hecho en este ámbito en el archipiélago, así que tenemos que hablar de ello un rato. Unas 4500 personas se juntaron en el Wembley Arena, para presenciar una velada de wrestling notable. En el main event, Walter defendía su Campeonato Mundial ante Tyler Bate. Esta va a ser la lucha que vamos a comentar hoy.

Bate es un luchador muy joven, de 21 años, al que ya hemos visto hacer cosas muy interesantes en WWE. Su rivalidad frente a Dunne es de lo mejor del 2017. También en el mundo indy ha tenido grandes momentos, formando parte de Moustache Mountain y de British Strong Style. Es un hombre pequeño, pero de gran fuerza y forma física. Es la persona adecuada para presentarse en un match del estilo David vs Goliat ante el campeón, el enorme y poderoso austriaco Walter, que llega hoy entre violines, pues su tema de entrada, parte de la Sinfonía 9 de Dvorak, es tocada en directo por dos violinistas, y queda bastante guay.

Durante la primera parte del combate, Walter destroza a Bate. Toda la preparación física de este se queda en nada ante la diferencia de tamaño que hay entre ambos. Walter golpea la cabeza del retador, y la aprieta bien. Y cada vez que este quiere hacer algo, se come un Chop que le quita la vida.

Bate vende bien los headlocks y los codazos en la cabeza. Parece estar realmente en mal estado. También le da pisotones y rodillazos que son de otro nivel. Pero el rubito consigue presentar oposición finalmente, y tenemos unos minutos de Strong Style, más desordenados, en el que ambos se dan muy fuerte.

Aparecen los miembros de British Strong Style para animar a su compañero, mientras que Timothy Thatcher, miembro de RingKampf, también llega para apoyar a Walter. Bate intenta hacerle rendir con una Sleeper Hold, técnica matagigantes clásica, pero este gigante no se deja matar. Tyler está a punto de ganar, con Superplex, y con Power Bomb, pero Walter esquiva su vuelo definitivo, y le engancha con una Sleeper.

Bate es fortísimo, y consigue levantar al gigante para arrojarlo. Pero este le vuelve a agarrar con su Read Naked Choke. Bate se resiste todo lo que puede, se retuerce, y vuelve a soltarse, pero por tecera vez consecutiva, Walter le atrapa. Ha recibido mucho daño en la cabeza durante el match, pero su fuerza de voluntad es inhumana. Cuando consigue, una vez más, recobrar fuerzas, Walter decide acabar con la tontería con un piledriver asesino del que no se levanta ni Dios.

Gran lucha, con un buen final.

Puntuación: ****1/4

Tuesday, October 30, 2018

AJ Styles vs Samoa Joe, WWE Super Show-Down




Vamos a cerrar el especial sobre el Super Show-Down de WWE en Australia, con la que, probablemente, sea la mejor lucha de la noche: el enfrentamiento entre Samoa Joe y AJ Styles por el WWE Championship.

Hace poco, comentamos una lucha entre ellos de 2005, cuando ambos estaban en TNA. Decía, entonces, que era muy sorprendente verlos, 13 años después, luchando por el título máximo de la industria. Y no porque no tuvieran calidad para estar aquí, sino porque ha pasado, quizás, demasiado tiempo desde que empezaron a despuntar. Han superado ya los 40 años, pero quien tuvo, retuvo.

Las rivalidades por el título de la WWE están siendo largas este año. AJ tuvo una frente a Nakamura, viejo rival de su tiempo en New Japan; y ahora la tiene frente a Joe, gran rival de tiempos de TNA. En ambos casos, las rivalidades han sido muy largas, con luchas inacabadas, que las han estropeado un poco, hasta el combate final, que en ambos casos, ha sido muy bueno.

La rivalidad entre Joe y AJ ha sido una de esas storylines de índole personal que WWE hace de vez en cuando, que a mí no me interesan mucho, pero que están bien si generan un odio que se propague hasta el combate definitivo. En este caso, Joe se ha comportado como un acosador, presentándose en la casa de Styles, hostigando a su bella familia, hablando de llevar a cabo el papel de padre que AJ no realiza de manera correcta. AJ está que arde, y por eso, va a poner toda la carne en el asador en este combate, que es sin descalificación.

Y es bastante bueno. Styles comienza con mucha energía, lanzándose contra el samoano, pero la diferencia de tamaño y brutalidad se hace patente pronto. Joe le pega una buena paliza al campeón, con golpes muy stiff y una actitud de asesino que recuerda a sus buenos tiempos. De hecho, este combate, al menos en esta primera parte, recuerda mucho a aquel de TNA de 2005 del que ya hablamos.

Un sangrante Styles, que se ha comido un buen clothesline, lucha de tú a tú con Joe, gracias a la introducción de sillas en la batalla, pero el tiro le sale por la culata, porque también es lanzado contra una de ellas de una manera brutal. Samoa Joe es un animal, pero ahora es él el que cae sobre una mesa. Y cae sobre su pierna izquierda, que lleva rodillera. Se hace muchísimo daño, y más daño que le hace AJ, que quiere hacerle rendir con el Calf Crusher. Pero tirar a Joe al suelo es un peligro, porque te puede pillar con el Coquina Clutch, y así lo hace en este caso.

Styles sigue atacando la pierna de su rival, e incluso vuela sobre ella con el 450 Splash. Joe busca Coquina a la desesperada, y AJ busca Calf Crusher a la desesperada. La pierna del rudo ya está muy dañada, así que es él quien tira la toalla. Victoria para Styles que retiene, una vez más, el WWE Championship.

Puntuación: ****

Sunday, October 28, 2018

The Shield vs Braun Strowman, Drew McIntyre y Dolph Ziggler, WWE Super Show-Down




Volvemos a charlar sobre WWE Super Show-Down, el mega evento que WWE celebró en Melbourne, Australia, en un inmenso estadio de fútbol. En ese show, se dio la última reunión de The Shield, que se enfrentaba al equipo formado por Braun Strowman, Drew McIntyre y Dolph Ziggler. Aunque es una buena lucha, no tenía pensado revisarla, por problemas de calendario. Pero la retirada de Roman Reigns debido a la Leucemia, me ha hecho cambiar de opinión.

En 2017, WWE reunió a The Shield. Con el título Universal en manos de Brock Lesnar y fuera de muchos PPVs, la empresa necesitaba buscar cosas llamativas que atrajeran al público en la difícil campaña otoñal. Pero, había otros motivos. Se pretendía llevar a cabo un turn heel de Dean Ambrose, para convertirlo en el gran rudo que todos vemos que lleva dentro.

para TLC 2017, estaba programada una lucha entre The Shield y un equipo capitaneado por Braun Strowman. Ambrose y Rollins habían hecho un buen equipo durante los meses previos, y tenían un muy buen apoyo por parte del público. Pero varios problemas impidieron esa storyline de guerra civil dentro del grupo. Para empezar, Roman enfermó, y quedó fuera de esa lucha de escaleras. Su sustituto fue Kurt Angle, en su primera lucha desde su regreso a WWE.

Y, cuando Roman volvió, fue Ambrose el que se lesionó. Y no fue cualquier cosa. El lunático estuvo fuera de circulación hasta hace un par de meses, así que esa historia se olvidó. Pero, en su regreso, WWE no dudó en reanudarla exactamente donde se quedó. Volvió a unir a Dean con Rollins, volvieron a convertirse en campeones en parejas, y volvió a unirse The Shield al completo. 

Durante este año, Braun Strowman ha sido claramente face. Dado su físico y su forma de luchar, hace un buen papel de tweener, en el sentido de que su brutalidad es tal que le hace susceptible de ser amado, aunque no haga nada explícitamente heroico. Pero WWE quería hacer las cosas como el año pasado, así que hizo que Braun se convirtiera, de nuevo, temporalmente, en alguien aparentemente malvado, uniéndose a Ziggler y McIntyre, que son una pareja muy interesante. 

Y, en el momento en el que Reigns anunció su retirada, todo volvió a la normalidad. Ambrose cerró su turn heel, atacando a Seth miserablemente, y Braun se confirmó como técnico al atacar a Ziggler y Drew. En el próximo PPV Crown Jewell, se enfrentará en solitario a Borck Lesnar por el Campeonato Universal, y es probable que lo gane. De esta manera, ahora sin Reigns, todo hace indicar que será promovido como principal estrella de la empresa, con Rollins en un escaño inferior, y Ambrose y McIntyre como plausibles némesis. 

Pero antes, tenemos esta lucha de equipos en Australia. The Shield entran enmascarados, entre un público que los recibe con gran cariño. La verdad es que el show queda muy completo, con un poco de todo, y luchas de buen nivel. Empieza la cosa bien, con mucho brawl fuera del ring, hasta que suena la campana, todos suben arriba, y se ordenan las acciones.

En los primeros minutos, Seth es castigado duramente por los rivales. Son muchos minutos, en realidad, en los que se va calentando el Hot Tag. Esta parte tiene dos fases, en realidad, porque primero hay un tag para Ambrose, que acaba en la misma situación que su compañero, y el segundo es ya para Reigns, que entra, con la explosión de júbilo de los aficionados, a acabar con todo.

La cosa vuelve a desordenarse, pero lo interesante es el storytelling sobre el Turn Heel de Ambrose. Porque, sin querer, el lunático se lleva un Super Man Punch de Roman, y vuelven los fantasmas sobre su salidad del grupo.

Porque, durante los programas anteriores, Braun le ha invitado a cambiar de equipo, e irse con los rudos. Drew, Dolph y el gigante rodean a Rollins y Reigns, ocupando tres lados del ring. Dean se coloca en el cuarto lado. Braun le espera con los brazos abiertos, pero lo que se lleva en un topetado suicida. Ambrose confirma su amor por The Shield.

Pero, sobre todo, lo confirman sus compañeros al final de la lucha. Braun empieza a correr alrededor del ring, como a él le gusta, aplastando a Rollins y Roman. Va a hacer lo mismo con Ambrose, pero el samoano le salva, aplastando a Strowman con un Spear, debido al cual, ambos atraviesan las barricadas. Y, cuando los otros dos rudos van a acabar con él encima del ring, aparece Seth para aplicar una SuperKick sobre Drew, aunque se lleva una de Dolph. Con el sacrificio de sus compañeros, Ambrose se ha quedado sólo en el ring con el rubito, y le derrota a través de un Dirty Deeds.

La lucha es puro Storytelling, como le gusta a WWE. La historia que se cuenta está bastante bien. Victoria para The Shield en su última reunión en, posiblemente, mucho tiempo.

Puntuación: ***1/2

Saturday, October 27, 2018

Leakee vs Leo Kruger, FCW 12/02/2012



Como todo el mundo sabrá ya, Roman Reigns se retiró del mundo del wrestling en octubre de 2018 para luchar contra la Leucemia. Por eso, he parado un poco el calendario que tenía previsto para el blog, con el fin de charlar un rato sobre este hombre, que ha sido la máxima estrella en el negocio del wrestling durante los últimos 4 o 5 años.

Como decía en el post anterior, no voy a dedicarle un especial, porque casi todas sus grandes luchas están ya en el blog. Está su lucha frente a Brock Lesnar en WrestleMania 31, sus luchas ante Aj Styles, el Fatal Four-Way de SummerSlam 2017, sus mejores combates en The Shield... hay material para entretenerse.

Pero sí que me apetecía verle en sus primeros años de entrenamiento en Florida. En artículo previo, comentamos una triple amenaza frente a los que serían, tiempo después, sus compañeros en The Shield, una batalla que debería haberse dado, algún día, en un WrestleMania, pero que al menos pudimos disfrutar también en el main roster en Battleground 2016. En esta versión de febrero de 2012, en FCW, Roman, con el nombre de Leakee, derrotó a sus oponentes para ganarse una oportunidad por el título principal de la escuela de Florida.

El campeón era Leo Kruger, posteriormente conocido como Adam Rose. Aquí era un hombre muy distinto, mucho más serio e intimidante. Tenía mucha más experiencia que Roman, ya que luchaba en Sudáfrica desde 1995, debutando a los 15 años, y había trabajado como comentarista en FCW, durante una lesión de cuello, por lo que suponemos que era mejor también con el micro. Antes de la lucha que comentamos hoy, ya había estado, incluso, de Dark Matches de Smackdown. Y, viéndolo frente a Reigns, la verdad es que los dos tienen un tamaño similar, pelo y barbas similares, y un estilo de lucha parecido. Incluso se puede decir que el físico de Kruger está más definido que el de Leakee. Por eso es tan llamativo que uno acabara siendo la máxima estrella de la empresa, mientras que al otro se le dio un personaje ridículo, y cero oportunidades antes de su despido. 

Leakee reta a Kruger por el Florida Heavyweight Championship una semana después de haber salido triunfante de esa triple amenaza. Es una lucha de vieja escuela, con mucho golpe, mucho puñetazo, y, en general, con movimientos muy básicos. No hay grandes florituras, pero todo es correcto. Los luchadores golpean bien, son hombres muy rudos. Llegando al final, Leo intenta poner a dormir al retador a través de su Sleeper Hold en varias ocasiones, pero sin éxito, hasta que es Roman el que comienza a usarla, a pesar del enfado del campeón. Leakee engancha bien el cuello de Kruger, pero este se retuerce para poner la espalda plana de su oponente, de tal manera que la cuenta llega a tres. Roman no se percata de esto, y sigue aplicando la Sleeper hasta que Kruger se rinde, pero el combate ya se había acabado. Leakee piensa que ha ganado, y se lleva un chasco al escuchar la sintonía de Leo.

La lucha no es mala, pero sí muy simple. Roman todavía no usaba su Super Man Punch, ni su Spear. Le quedaba mucho por aprender.

Puntuación: ***

Friday, October 26, 2018

Seth Rollins vs Dean Ambrose vs Leakee, FCW 05/02/2012



En el programa del pasado lunes 22/10/2018 de Monday Night Raw, recibimos una noticia que resultó chocante. Roman Reigns, principal estrella de de la WWE y actual Campeón Universal, anunció su retiro, esperemos que temporal, de los encordados. El motivo: padece de Leucemia.

Parece ser que Roman Reigns ya había padecido esta enfermedad en su etapa como jugador de fútbol americano, y la había derrotado con éxito. Pero uno no sabe cuándo pueden volver estas cosas. Ahora, en el mejor momento de su carrera, una vez derrotado Brock Lesnar, con la correa en su cintura y con cada vez más apoyo por parte de los fans, tiene que hacer un parón profesional para retomar la batalla contra la enfermedad. Hablar de una fecha de regreso es precipitado, porque ni siquiera sabemos el estado en el que se encuentra el mal, ni el tipo de Leucemia que padece. Podría ser algo mortal, en el peor de los casos, así que no vale la pena hacer hipótesis al respecto.

No vamos a hacer un especial como tal sobre Roman Reigns, sobre todo, porque la vida útil del blog ha coincidido con la mayor parte de la carrera de Roman en WWE. Los principales highlights de su carrera ya están en el blog. Sin embargo, quería aprovechar la ocasión para ver un par de cosas suyas en FCW, antigua liga de desarrollo de WWE situada en Florida. No espero gran cosa, porque Roman empezó desde cero en FCW, por lo que, a diferencia de sus compañeros de The Shield, no tiene ninguna experiencia en las ligas independientes. Pero, para que conste como homenaje, veremos dos luchitas de FCW, y su último gran combate en WWE Super Show-Down, en la última reunión de The Shield.

En febrero de 2012, Roman estaba en FCW, junto a los que serían sus compañeros en The Shield, Ambrose y Rollins. Pero no se llamaba todavía Roman Reigns, era conocido como Leakee, pues tenía un personaje de samoano fortachón. En esta época, esos tres hombres, antes de que existiera The Shield, se enfrentaron en una triple amenaza, en busca del Number 1 Contender por el Florida Heavyweight Championship, el título más importante de la empresa. El campeón en esa época era Leo Kruger, que sería conocido en el main roster como Adam Rose.

Eran otros tiempos. FCW no se parecía a lo que ha acabado siendo NXT. El perfil de luchador que se contrataba entonces era muy distinto, al de ahora, de ahí que los campeones fueran gente como Bo Dallas o Adam Rose. Los shows se emitían por la tele local, pero eran instalaciones pequeñas, en las que cabía muy poca gente, y no había un gran nivel de producción. Aunque WWE ponía su dinero ahí, FCW era, al fin y al cabo, un show indy.

Ante un público corto y no muy pasional, estos tres tipos se enfrentan en una lucha que resulta ser bastante mediocre. Tampoco se puede decir que Tyler Black y Jon Moxley fueran lo mejor del circuito independiente. Y el público no ayuda mucho. Ambrose le pone un poco de interés al match, porque está en rivalidad con William Regal, que hace de comentarista, así que tiene varios mensajes para él, como el uso del Regal Stretch. Roman, por su parte, aplica un doble Samoan Drop, sobre sus dos rivales al mismo tiempo, que queda muy bien, y gana al aplicar una especie de Bulldog sobre Ambrose, que debía ser su finisher entonces, de manera que luchará con kruger la semana siguiente. Veremos esa lucha en el siguiente post del blog.

Puntuación: **1/2