Thursday, October 25, 2018

Jeff Jarrett vs Chris Benoit, WCW Starrcade 1999




Vamos a ver una segunda lucha de Jeff Jarrett para el especial sobre el Salón de la Fama de WWE, y su gala de 2018. El combate de hoy corresponde a su segunda etapa en WCW, y tiene lugar en el evento Starrcade 1999. Su rival es Chris Benoit.

No había visto esta lucha hasta ahora. Pero es uno de los singles matches disputados por JJ con mejor puntuación por parte de Dave Meltzer, así que me he decantado por ella para el especial. En mi opinión, no está cerca de ser una de sus mejores luchas, pero es entretenida.

Jarrett había vuelto a WCW en octubre del 99, proclamándose a sí mismo como El Elegido (The Choosen One). Se metió en una rivalidad con Dustin Rhodes (Goldust), y le derrotó en Starrcade 1999. Pero no sería esa su única pelea de la noche.

Chris Benoit era United States Heavyweight Champion. Esa noche, debía luchar contra Scott Hall en un Ladder Match por el título, pero el outsider se lesionó, así que el canadiense estableció un reto abierto. Jeff, triunfante de su lucha, apareció para intentar patear el trasero de Benoit.

Infructuosamente. Chris sale victorioso de un combate que no está nada mal. No hay grandes spots de escaleras como los que se verían en años posteriores, pero hay buenos ataques. Y mucha igualdad. A cada lanzamiento o escalerazo de uno, responde uno del otro. Finalmente, Jeff queda KO en el suelo, y Benoit sube la escalera para coger la correa. Pero decide, primero, librarse por completo de su rival, volando con un Diving Headbutt desde arriba. Se destroza la cabeza, pero sabe que Jarrett no se va a levantar después de eso. Benoit coge el campeonato, así que continúa siendo el campeón.

Puntuación: ***1/4

Wednesday, October 24, 2018

Jeff Jarrett vs Shawn Michaels, WWF In Your House 2




Retomamos el especial sobre el Salón de la Fama de WWE, y sus inducidos en 2018. Hoy hablamos de un tipo que, por su relación con TNA, había estado vetado un tiempo en WWE. Nadie se atreve a hacerle la competencia al señor Vince McMahon. Se trata de Jeff Jarrett quien, en 2017, abandonó Impact Wrestling para pedir ayuda en WWE por sus problemas con el alcohol. Como resultado, fue, de nuevo, admitido en la compañía, fue inducido al Hall of Fame, y tuvo la oportunidad de estar en algún programa de la WWE Network.

Jarrett es una auténtica leyenda del wrestling, y merece estar en el salón de la fama. Tuvo un buen paso por la empresa, dio buenas luchas, y se hizo un nombre. Pero fue en WCW donde se convirtió en campeón mundial, y, posteriormente, en TNA, empresa que manejó a su antojo, gracias al dinero de su padre. Hoy en día, sigue en activo. Próximamente, le veremos luchar frente a Dr Wagner Jr con las cabelleras en juego, en el evento Héroes Inmortales de Triple A.

Pero vayamos por partes. Como he dicho, Jeff Jarrett tuvo una entrada en el mundo del wrestling relativamente sencilla, gracias al hecho de que su padre era promotor. Era muy normal, en otros tiempos, que el hijo del dueño fuera la principal estrella de las empresas que pertenecían a los territorios de la NWA. Aunque tampoco hay que hablar, simplemente, de nepotismo. Cuando uno crece en un entorno de wrestling, también es normal que lo ame, y se empape de ello más que nadie.

Jarrett heredó las habilidades de su padre, tanto para pelear como para hacer de promotor. Porque Jerry era considerado como un genio del wrestling, y también fue un gran promotor. Fundó la CWA de Memphis, en el estado de Tennesee, en el 77, empresa en la que debutó  Jeff en el 86. En el 89, con la colaboración de Jerry Lawler y la familia Von Erich, fusionó la empresa con la WCCW de Dallas, para crear la USWA, un intento de alternativa al poder de WCW y WWF. Hace unas semanas, ya pudimos comentar una lucha de Jeff Jarrett en esta empresa, en en la que se enfrentó al recientemente fallecido Brian Christopher.

La USWA tuvo una interesante relación, y una rivalidad con la WWE, gracias a las cuales, Lawler y JJ acabaron en la empresa de Vince. Poco después, en el 97, Jerry Jarrett vendió la empresa a su tocayo, Jerry Lawler. Por su parte, Jarrett, como otros luchadores, durante los 90, se estuvo movimiento entre WWE y WCW. En su primera etapa en la empresa de Vince, se convirtió en campeón intercontinental, con su personaje de rubito rudo. La lucha que comentamos hoy es de esa época.

Jarrett tuvo un primer run corto también en WCW, donde se convirtió en Campeón de USA. Estuvo sólo un año en esa empresa, antes de volver a WWE como parte de la invasión de la NWA. En esa etapa, Jeff Jarrett tuvo buenas oportunidades y rivalidades. Pero, en el 99, volvió a moverse a WCW, siendo una de las principales estrellas de la compañía en esa última etapa, en la que los bookers, desesperados, hicieron lo que algunos les pedían: dar oportunidades a gente más joven por encima de Hogan, Luger, Sting y los de siempre. Ni Steiner, ni Jarrett ni Booker T consiguieron levantar la situación.

Tras el fin de WCW, Jerry y Jeff Jarrett apostaron por un nuevo proyecto, TNA, explorando las oportunidades dentro del negocio del wrestling. En una época en la que las cadenas de televisión no parecían interesadas en este deporte, inventaron, con los guiones de Vince Russo, un sistema basado en PPVs semanales.

En 2002, Panda Energy compró el 72% de las acciones de la empresa, así que el control de los Jarrett pasó a ser muy pequeño. No obstante esto, Jeff siempre tuvo bastante poder creativo, que le permitió ser algo así como el Triple H de TNA, y ganar un montón de títulos. Y también  dar un montón de buenas luchas, dicho sea de paso.

Durante años, Jarrett rivalizó con Dixie Carter, presidenta ahora de la empresa, por el control de la misma. en 2014, sin esperanzas de tener éxito, Jarrett abandonó y formó una nueva liga, la Global Force Wrestling. Intentó inventar un concepto de wrestling distinto, más global, pero fracasó en el objetivo de colocar los programas que grabó en TV. Estos programas, llamados Amped, sí que están ahora disponibles, si no me equivoco, en la Network de Impact Wrestling, después del intento de fusión de ambas empresas que realizó Jarrett en 2017. Fue entonces cuando el luchador entró en rehabilitación con la ayuda de WWE para superar sus problemas con la bebida. Hoy en día, sigue siendo luchador en activo, y, como digo, sus apariciones más importantes tienen lugar en la empresa mexicana Triple A, con la que siempre ha mantenido una gran relación. Además, la página web de Global Force Wrestling parece ahora estar más dedicada a la nueva NWA que a la finiquitada promoción. Jarrett acompañó a su amigo Nick Aldis tanto en All In como en el show del 70 Aniversario de la NWA.

En In Your House 2, la segunda edición del PPV mensual de la WWF, llevado a cabo en verano del 95, JJ defendía su campeonato Intercontinental ante el estelar Shawn Michaels, muy querido por el público ya entonces. Jarrett, rudo, va acompañado de Roadie, que no es otro que Road Dog. Entre los dos, cumplen bien el rol de villanos huidizos y cobardes.

Jarrett huye a ringside una y otra vez, a sabiendas de que, si pierde por count out, mantendrá la correa en su poder. Michaels se muestra muy superior y muy sobrado, con el beneplácito del público, que se burla del rubito. Esa prepotencia acaba provocando que salga disparado del ring en un movimiento muy peligroso.

Después de eso, Jeff le castiga bien la espalda, aprovechando el daño provocado en la caída. Con una Sleeper, intenta finiquitar la lucha, pero Michaels se recupera y aplica todos sus movimientos de marca sobre la cara del rival. Tan sólo las trampas de Roadie consiguen poner, de nuevo, las tornas en favor del campeón, que busca la pierna de Shawn. Aún así, es se saca una Sweet Chin Music de la nada, para ganar la contienda.

La lucha es bastante buena, aunque creo que está un poco sobrevalorada.

Puntuación: ***1/2

Monday, October 22, 2018

Hiromu Takahashi vs Dragon Lee, NJPW G1 Special San Francisco



Seguimos hablando de Hiromu Takahashi. Hoy toca repasar su defensa del IWGP Junior Heavyweight Championship ante Dragon Lee, con el que ha tenido 1000 batallas en México, USA y Japón, por máscaras, cabelleras, campeonatos, o por nada. Hoy, después de tanta guerra, se enfrentan por el título más importante que existe en el mundo para gente de su peso.

Lo hacen en San Francisco. NJPW ha creado un Dojo en USA, tiene un canal que retransmite sus shows en el país, y una Network a nivel global. Ya tiene un poco de infraestructura para competir con WWE. Aunque está lejos de hacer eso, en este show de San Francisco junta a más de 6.000 espectadores, que le colocan en el podium de los shows no-WWE y no-WCW con más seguidores en USA en este siglo. En el main event, Kenny Omega defendía su campeonato IWGP  Heavyweight ante Cody.

La lucha que mantienen Dragon Lee y Takahashi en San Francisco es buena, aunque se corta a la mitad por el accidente del el que Hiromu sale tristemente lesionado. 

Lee entra muy fuerte. Lleva la sangre ingobernable en sus venas. Vuela sin parar. Los dos se pegan golpes realmente fuertes, sin un gran orden, pero de una forma rápida y bruta. Se dan con todo, hasta que Hiromu trata de doblegar a su rival con el Triangle Shock. Dragon consigue levantarlo, y convierte la llave en un Dragon Driver demoleador, del que su oponente aterriza con el cuello de una forma horripilante. Ese ataque siempre me ha parecido muy peligroso y excesivo, y parece que se ha cobrado su primera víctima. 

Con este ataque tan doloroso, Dragon tiene la excusa perfecta para atacar con una bomba sobre el cuello. Pero Kamaitachi sabe que no puede seguir, que algo va mal, y concantena algunos ataques sobre el cuello de su rival, para acabar la lucha con un Time Bomb. 

Hiromu salva una lucha, aguantando una lesión terriblemente grave, con un gran final. No le veremos en un tiempo, por desgracia, así que el título queda vacante.

Puntuación: ***1/2

Sunday, October 21, 2018

Hiromu Takahashi vs Will Ospreay, NJPW Dominion 2018




Ya comentamos hace poco que Hiromu Takahashi se llevó la victoria en en Best of Super Juniors 2018, derrotando en la final a Taiji Ishimori. Fue una gran lucha, y una gran victoria para Takahashi, que, así, conseguía una oportunidad por el título junior de la empresa ante el campeón, Will Ospreay. Ganaría la correa tras una nueva batalla de infarto frente al inglés, y la defendería en otro muy buen combate ante su rival de México, Dragon Lee. Pero, en esa lucha, se lesionaría de gravedad, quedando fuera de los cuadriláteros durante un año. Una desgracia, dado su estado de forma. Vamos a repasar esas dos luchas comentadas.

Takahashi tiene su oportunidad titular frente a Ospreay en Dominion, un evento muy completo. Y dan la lucha de la noche, a pesar de la competencia. Will tiene problemas en su hombro y viene vendado. Pero, contra todo pronóstico, es él el que ataca el hombro de su oponente, después de un salto increíble desde la rampa de entrada.

Lejos de convertir esto en un spot fest, Ospreay emula a los grandes high flyers de la historia, y selecciona inteligentemente los momentos idóneos para utilizar movimientos aéreos. Hiromu acaba buscando el mismo objetivo: cuello y nuca de Ospreay, con lo que tenemos un duelo de bombazos y llaves muy bueno.

Ospreay trabaja más que nunca a ras de lona, pero el japonés consigue reponerse muy bien, y aplicar bombas y súplexs sobre la dañada zona del campeón. Además, consigue aplicar un Triangle Shock ante el que Will está a punto de rendirse. Primero, lo transforma en bomba, pero no es suficiente. Finalmente, consigue quitarse a Kamaitachi de encima, con un movimiento muy peligroso sobre su cuello.

Prácticamente no hay ningún movimiento que no dañe cuello y hombros del rival. Y, en los minutos finales, son más enloquecidos que nunca, con Bombas, Piledrives, hurracarranas o Frankesteiners por todos lados. Finalmente, Takahashi asesta un montón de ataques mortíferos seguidos, que dejan KO a su oponente. El japonés se convierte en IWGP Junior Heavyweight Champion.

Lucha casi perfecta, impecable. No hay casi nada que sea gratuito.

Puntuación: ****3/4

Saturday, October 20, 2018

Negro Navarro vs Zack Sabre Jr, Lucha Memes Chairo 10



Vamos a comentar una lucha de las que tengo en el montón de la mesita de noche, acumuladas. Hace ya año y medio que tuvo lugar, y todavía no le había encontrado un hueco. Hoy, le ha tocado.

Zack Sabre Jr no se ha prodigado mucho por México. Y en sus declaraciones sobre ello, supongo que dentro de su personaje rudo, ha comentado que no tiene muchas ganas de volver. El caso es que en abril de 2017, sí que hizo su aparición, y no en una gran empresa. Se fue a Lucha Memes, a un show que hacía esa empresa en conjunto con MDA, promotora que cumplía su segundo aniversario. En la Arena Neucalpan, Zack se enfrentó a un gran maestro de la lucha técnica, un hombre al que debe admirar bastante: Negro Navarro.

Y es que, Zack es el gran luchador técnico de la actualidad. Un maestro del llaveo, con una velocidad mental inigualable. Y también un tipo que ha aprovechado cada oportunidad para enfrentarse a luchadores de su mismo perfil. No podía faltar en su historial el Negro Navarro.

Negro Navarro podría ser el padre de Zack. O su abuelo. Literalmente, le dobla la edad. En el momento en que ocurre la lucha, Navarro tiene 60 años, mientras que Sabre tiene 30. Pero ojo, aunque el mexicano tiene mil años, se mantiene en una forma envidiable. Aparenta 45 o así.

Negro Navarro es una gran leyenda de la lucha mexicana, que triunfó en la UWA, en el Toreo de 4 Caminos. Junto a El Texano y El Signo, formó la inmensa tercia ruda conocida como Los Misioneros de la Muerte, que, literalmente, estuvieron a punto de matar a El Santo, la mayor leyenda de la historia de la lucha libre, que sufrió un infarto en un combate frente a ellos.

La leyenda de Navarro es inmensa, y es posiblemente uno de los mejores luchadores de la historia. Sabe ser un gran rudo, pero sabe ser muy técnico. Sabre también sigue un camino propio para convertirse en alguien grande. Aquí, se ven las caras sin historia, sin rivalidad, y sin un gran público. Pero la lucha es genial.

Bueno, no mintamos. El público no es ingente, pero es un buen público. Durante la lucha, apoyan al Negro, cantan "Esto es Lucha", y acaban tirando dinero al ring cuando acaba la acción. Apoyan el estilo clásico de este combate.

Sabre Jr y Navarro se enfrentan en un duelo de llaveo y contrallaveo. Toda llave de uno es respondida por la contrallave del otro. Lo interesante es que Zack, allá a donde ha ido, ha troleado a todo rival, sin dejarle vivir, ni respirar, atrapándole durante todo el combate con llaves a las que no puede responder. Sin embargo, aquí se le ve frustrado y dolido en su amor propio, al ser superado por el Negro una y otra vez.

El estilo de Navarro es más tranquilo y sosegado. Sabre, empleándose a fondo, seguramente, le superaría, pero la historia que cuentan va sobre su frustración, y sobre su derrota ante el estilo mexicano. De hecho, Negro Navarro nunca se acerca a las cuerdas, aunque en muchos casos podría hacerlo y, así, se libraría de los candados del inglés, no cae en la tentación, y decide librarse mediante habilidad. Por su lado, Zack se repliega una y otra vez, mostrándose cada vez más enfadado. Finalmente, se rinde ante las llaves del mexicano, y tras la lucha, se arrodilla ante él, demostrando su admiración, a lo que Negro responde con más de lo mismo. Maravilloso.

Puntuación: ****1/2

Friday, October 19, 2018

CMLL Grand Prix 2018



Hace unos días, tuvo lugar uno de los grandes eventos del Consejo Mundial de Lucha Libre en su calendario anual: El Grand Prix, un torneo cibernético en el que lo más granado de la empresa se enfrenta con las hordas extranjeras, para defender el orgullo de la patria mexicana. Es una lucha que trae a mucha gente a la Arena México, ya que los aficionados son muy nacionalistas.

La mayoría de los años, vemos a los mexicanos ganar la batalla. En esta ocasión, los asistentes a la función se llevan un chasco grande, porque Michael Elgin se lleva la victoria. A pesar de que no es una decisión buena, de cara a darle su ración de patriotismo al público, debo quitarme el sombrero ante la elección de los programadores del Consejo, porque Elgin se lo merecía de verdad.

El canadiense debutó en 2016, siendo el mejor de la pelea, aunque fue derrotado. En el 2017, dio un nuevo recital, y quedó finalista, pero cayó ante el poder de Diamante Azul. En 2018, a la tercera va la vencida. Se lo merece, porque es un gran luchador, y ha demostrado que le gusta la lucha mexicana y que disfruta en la Arena México. Esta vez, ha estado más tiempo, y ha tenido luchas en la Arena Coliseo de Guadalajara, y en la Arena Puebla. Debe ser guay estar en las grandes arenas del país, y disfrutar el ambiente de cada una de ellas.

El Consejo presenta un equipo potente, con La Nueva Generación Dinamita (Sansón y Cuatrero), Volador Jr, Último Guerrero, Diamante Azul, Carístico, El Terrible, Euforia, y uno de mis luchadores favoritos en México, Hechicero.

En el equipo de extranjeros, está el japonés residente en México, Okumura, los Hermanos Briscoe, el propio Elgin, el traidor Matt Taven, el joven David Finlay, Flip Gordon, El Mesías, ahora llamado Gilbert el Boricua, y un desconocido Black Magic.

Elementos del ejército mexicano tocan el himno, y la gente canta. Una y otra vez, los 18 gladiadores se revuelven y se arma el gran brawl. Hay mucha tensión, en gran medida, por la traición de Taven sobre Volador Jr en el Aniversario. También Elgin quiere demostrar a Diamante que es mejor que él.

En una de esas batallas campales, Volador sale sangrando por algún ataque de Taven. Hechicero hace un buen papel en algunas confrontaciones, así como los Dinamita, que tienen un buen intercambio con los Briscoe. Elgin vuelve a comportarse como un animal, derrotando a varios rivales.

Durante los primeros minutos, esto parece un Lumberjack Match, ya que cuando alguien cae en la parte de sus rivales, estos le pegan una paliza. La cosa se centra más arriba del ring, y aunque al principio pasa mucho tiempo hasta que hay eliminaciones, luego estas llegan de manera oportuna. Elgin consigue derrotar y eliminar a Diamante Azul a base de bombas, y el público alucina. No se esperaban eso, pero este año, el canadiense llega más fuerte que nunca, y eso se nota en su físico.

Ahora hay muchos conteos rápidos, y cada vez quedan menos luchadores. Mesías está más fuerte que nunca, y aunque Hechicero es mucho más hábil que él, toda esa habilidad se ve truncada por un Spear del boricua. Quedan tres para tres. Volador Jr, Último Guerreo y Euforia hacen equipo para debilitar a Michael Elgin, pero las bombas del calvo se demuestran imposibles de derrotar por los mexicanos. Volador le aguanta todo, de forma heroica, pero Taven aprovecha su cansancio para atacarle sin piedad.

Volador y Matt se odian mucho. Seguramente, seguirán con su rivalidad una vez que el mexicano regrese tras participar en el Super Junior Tag Tournament de NJPW, junto a Soberano. Los dos recientemente pelados tienen un buen enfrentamiento, del que sale victorioso Volador, después de una Frankesteiner y un Canadian Destroyer.

Gilbert va a por Volador, que está muy castigado. Con un Alabama Slam y un Back Breaker, Ricky Banderas elimina al ídolo. Así, quedan los dos elementos más poderosos del equipo yanki, frente a Los Guerreros Laguneros, Último Guerrero y Euforia.

Los mexicanos trabajan mejor como equipo, y se van turnando para enfrentar a Gilbert. Este es más fuerte que ambos, pero le van desgastando. Con la Soberana del Halcón, Euforia le hace rendir, mientras Elgin descansa. Él solo tiene que derrotar a dos elementos del consejo, que son de los más fuertes y experimentados, que saben luchar en equipo, y que juegan en casa.

Parece imposible, pero consigue ganar. Y lo hace, básicamente, a base de bombas, y demostrando un gran coraje y un gran cardio. Ya durante la lucha ha estado muy activo, y en esta final, no para. Con un Superplex, seguido de una powerbomb, deja noqueado al Gigante Lagunero, y después de varias idas y venidas, dos bombas dejan KO al Luchador de Otro Nivel.

Elgin celebra la victoria en una batalla muy interesante, muy disfrutable, y muy larga. La gente queda muy enfadada, pero Elgin quiere coger el micro y hablar. Lo malo es que no encuentra a nadie que le traduzca, y queda todo un poco ridículo. Finalmente, uno de los comentaristas se acerca y lo hace, aunque de una forma un poco libre. Elgin sólo quiere demostrar amor por la Arena y por el público mexicano.

El gigante Rayo de Jalisco, ganador de la primera edición del trofeo, entrega el premio a Elgin. En primera instancia, duda sobre darle la mano. Los luchadores mexicanos siempre quieren robar un poco de protagonismo, aunque la cosa no vaya con ellos, como ocurre con el Raro en esta ocasión.

La semana siguiente, Guerrero se enfrentaría a Michael en un mano a mano, en el que lo derrotaría, devolviendo a su país el honor.

Puntuación: ****

Wednesday, October 17, 2018

Cedric Alexander vs Buddy Murphy, WWE Super Show-Down




Volvemos a hablar sobre Super Show-Down, el gran evento de WWE celebrado en Melbourne. Para algunos, era un Live Event retransmitido por la WWE Network, y es cierto que, como en la mayoría de los Live Shows, no hubo cambios titulares para ninguno de los campeonatos de los grandes programas de la empresa. Pero sí que se proclamó un nuevo Cruiserweight Champion: Buddy Murphy, natural, precisamente, de Melbourne, Australia.

No sé si, cuando Murphy perdió un montón de kilos para entrar en 205 Live, alguien estaba pensando en que se daría este momento. Desde luego, estaba cerrado el show en un estadio de fútbol en la ciudad australiana desde hace tiempo. Pero quizás sólo sea casualidad. El caso es que Murphy fue llevado al programa poco después de que Triple H se hiciera cargo de él, y la cosa mejoró mucho. Cada semana hay alguna buena lucha que ver en 205 Live, y más luchadores interesantes, como Lio Rush o Mike Kanellis, han llegado para proponer nuevas opciones. Además, ahora que el programa ha sido movido a las tardes de los miércoles, antes de NXT y el Mae Young Classic, la audiencia ha subido bastante. Esas tardes de wrestling son oro puro. El martes, después de Smackdown, WWE retransmite el Mixed Match Challenge por Facebook en su lugar. Mucha tela que cortar.

Ya hemos visto algún genial combate entre Cedric Alexander y Buddy Murphy en 205 Live por el título. Creo, firmemente, que es bueno para el programa que los combates titulares, y las rivalidades, se den en él, y no en RAW o en PPVs. Es la única manera de proponer algo único en el show, y de darle a las luchas el tiempo y la importancia que merecen. Dicho esto, si haces un show en Melbourne, y uno de los principales luchadores de 205 Live es de allí, tienes una oportunidad de incluir algo en el evento que será recordado por todos los asistentes: la primera vez en la historia en la que un compatriota gana un título en WWE. Eso había que aprovecharlo. Además, Vince, que está obsesionado por la pasta, ve, de esta manera, una forma de aprovechar económicamente el gasto que se hace en producir 205 Live.

La lucha que Alexander y Murphy mantienen en Super Show-Down también es muy buena, aunque creo que no llega a los niveles de las que han tenido en 205 Live. Porque una lucha de cruceros en un PPV siempre tiene que ser una cosa secundaria, para ver más saltos y acción que en los combates principales. Tiene su propia función dentro de la función. El correcto manejo de las emociones de los aficionados es un aspecto importante dentro del trabajo de un promotor. Y la verdad es que esta lucha es atléticamente notable. Murphy comienza con ataques a la espalda bastante buenos, pero sucumbe ante el aluvión de patadas y ataques a la cabeza de Cedric. Los dos vuelan a ringside con buenos movimientos, y el ataque del campeón llega a buen puerto al conseguir aplicar su finisher, el Lumbar Check. Buddy sobrevive, y el público alucina por completo. Y lo hace aún más cuando el héroe local acaba llevándose la victoria, después de frenar el ataque del moreno con un gran rodillazo, seguido de La Ley de Murphy.

Muy buena lucha, mucha acción, y una gran sorpresa para el público. Murphy, normalmente rudo, hoy, por estar en su tierra, ha demostrado un espíritu mayor, que le ha permitido resistir ataques poderosísimos del campeón, incluido un Michinoku Driver desde el esquinero, muy doloroso. Parte del público parecía no conocerle al empezar, como es normal, pero la reacción a su victoria es de alegría y sorpresa genuina. Alexander termina un reinado largo y lleno de buenos combates, aunque es obvio que le falta carisma.

Puntuación: ***1/2

Tuesday, October 16, 2018

The Undertaker vs Triple H, WWE Super Show-Down



El negocio del wrestling de hoy en día es una locura. Es imposible seguir el ritmo a todos los shows que hay, y a todos los records que se rompen. Y no sólo en el mundo independiente, en Japón o México, también en WWE, una empresa terriblemente conservadora, pero que está haciendo muchas cosas.

Mae Young Classic, NXT UK, 205 Live y el WWE Mixed Match Challenge. Son cuatro nuevos productos que tendremos que comentar en algún momento. Por suerte, no hay wrestling en Total Divas y todos esos realities, porque no apetecen. Pero, por encima de ellos, están los PPVs de nuevo cuño.

En los programas de WWE, hemos visto, al mismo tiempo, cómo se estaban preparando rivalidades para Hell in a Cell, Super Show-Down, Evolution y Crown Jewell. Nunca ha habido semejante lío.

Por encima de todo, destaca el regreso de la rivalidad entre Triple H y Undertaker, que, gracias a la pasta de los jeques sauditas, traerá consigo el regreso a los encordados de Shawn Michaels, algo que todos pensamos que no pasaría jamás. Pero, antes, en Super Show-Down tenemos un Last Time Ever, el último combate de la historia entre The Undertaker y Triple H.

Undertaker y Triple H tienen mucha historia juntos. Son dos de los grandes protagonistas de la Era Attitude, y tuvieron muchos enfrentamientos. En WrestleMania 17, se enfrentaron en una buena brawl.

Pasaron los años. Triple H y Shawn Michaels era los grandes veteranos de RAW, mientras que Taker mandaba en Smackdown. El Enterrador ganó el Royal Rumble 2007 al eliminar en último lugar a Michaels, y por la calidad de su enfrentamiento, la gente soñaba con verlos luchar de nuevo, y rememorar batallas del pasado.

En WrestleMania 25, al fin se enfrentaron, en un combate que ocurrió, básicamente, porque no había más planes para ninguno de los dos. Pero fue increíble, una de las mejores luchas de la historia de la empresa. Así, cuando Michaels quiso retirarse, el año siguiente, eligió a Taker como su rival. Escribieron una gran historia en la que Shawn se demostró obsesionado por su derrota previa. En WrestleMania 26, volvieron a tener una pelea tremenda, y la carrera de Michaels se acabó.

Un año después, fue Triple H el que acudió a por venganza, y también él fue derrotado en dos tremendas batallas en WrestleMania 27 y 28. Esta última fue dentro en una jaula infernal, llamada The End of an Era, con Shawn como referee especial. Hicieron un gran trabajo, y cerraron a lo grande una gran época en la historia de WWE.

Pero ahora, esa Era regresa por última vez. Bueno, dados los acontecimientos, ya sabemos que no será la última vez. WWE va a realizar un show a Melbourne, en Australia, a un estadio en el que caben 100.000. Entonces, se tiene que inventar excusas para vender entradas.

En el show The Greatest Royal Rumble, Triple H se enfrentó a John Cena en una lucha old school sin mucha historia. Y parecía que la que tendría en Australia con Undertaker sería del mismo tipo. Una excusa para vender entradas en un house show. Pero las promos continuaron. Y se metió Michaels en medio, y después Kane. Los Brothers of Destruction aplicaron un ChokeSlam sobre DX, preparando ese combate entre Undertaker y Triple H, con Kane y Michaels, respectivamente, en las esquinas. Esta lucha dará lugar a otra entre las dos parejas, que jamás se dio anteriormente. Y a WWE le encanta dar choques entre stables que sean inéditos.

Ya hablaremos de ello cuando comentemos Crown Jewell. Si tiene lugar. Porque hay una gran polémica con respecto a los negocios de USA con Arabia, por la desaparición de un periodista, que podría haber sido asesinado por el régimen. WWE va a cobrar cientos de millones por sus negocios con Arabia, pero también va a ganar cientos de millones por su acuerdo con Fox. Y Fox no es muy fan de Arabia. Se ha dicho que el PPV puede ser cancelado, y muchos fans de la empresa, de hecho, lo exigen. Recordemos, por otro lado, que Linda McMahon trabaja en el gabinete presidencial de Trump, y que Kane ha sido elegido alcalde de su pueblo. Pero claro, si haces negocios con una dictadura como esta, y encima, los haces durante mucho tiempo, hay muchas posibilidades de que te metas en líos como este. Veremos qué pasa.

La lucha entre Taker y Hunter ha sido la más promocionada para Super Show-Down, y por eso es el main event. La empresa superó las 62.000 entradas vendidas, aunque anunció 70.000, y en gran parte, es gracias a ella, aunque hay varios atractivos, como la vuelta de John Cena con su nuevo golpe chino, un Styles vs Joe, una lucha de The Shield, y un enfrentamiento entre Miz y Bryan para determinar el próximo retador al título de WWE, además de un combate en el que Ronda Rousey hace equipo con The Bella Twins, y otro en el que un australiano lucha por el campeonato Cruiserweight. No es mal evento, en absoluto, aunque una entrada de 62.000 personas para algo que no es WrestleMania es una salvajada que creo que no se está valorando lo suficiente.

Sobre esta lucha, soy consciente de que las críticas no van a tener piedad. Posiblemente ya estaban escritas antes de que empezara el evento. No obstante, a mí el combate me parece un producto muy interesante, por los motivos que comentaré a continuación.

Hemos visto muchos combates indy con una ejecución mil veces mejor. Pero los luchadores usan la misma ejecución con cualquier rival, y en cualquier contexto. Esto es otra cosa; es storytelling.

Triple H y Shawn Michaels están obsesionados. Ninguno de los dos pudo vencer a Undertaker. Les humilló. Hoy, entre los dos, lo van a conseguir. Y uno de los mecanismos que se inventa Triple H es cambiar las reglas del juego: la anunciadora comunica al público que la lucha será sin descalificación. Triple H ríe, y Undertaker lo acepta de buen grado.

La lucha es lenta. Undertaker, no sólo está viejo, sino que además apenas lucha. Este año ha tenido 3 combates, pero han sido muy cortos, sin apenas exigencia. No tiene un cardio para aguantar luchas tan largas como esta, así que los golpes se venden en exceso, para descansar. Por lo demás, hay que decir que no hay ningún error que hable mal de su condición física. El combate es muy digno, y se cuenta una historia.

Poco después de comenzar la lucha, Michaels empuja a Taker contra el poste, haciéndole daño en la cabeza. Todos los ataques de Triple H, que ha sido anunciado, no por casualidad, como "El Asesino Cerebral", son a la cabeza del Phenom. Tanto el Pedegree como la Sweet Chin Music son un arma muy peligrosa, así que el plan es partirle la cabeza al gigante. Shawn está ahí siempre para ayudar a su amigo, o para captar la atención del Enterrador, que no parece concentrarse en Triple H por la presencia de HBK. Por su parte, Kane fracasa a la hora de proteger a su hermano. Triple H le aplica un codazo volador sobre una mesa, y Shawn le pega un golpe bajo. Estos dos ataques le tienen KO en ringside la mayor parte del enfrentamiento.

En cuanto a estilo, la lucha es muy del tipo Era Attitude, con brawl y storytelling, pero sin una ejecución excesivamente brillante. Además, hay alguna referencia a la lucha de WrestleMania 17, y hay ataques a los referees, clásicos en el Deadman. Me gusta el momento en que Taker intenta hacer rendir a Triple H con el Hell's Gates, pero este le ahorca con su mazo. Con golpes de mazo, Sweet Chin Music y Pedegree, los DX terminan de derrotar a Undertaker, que ha recibido mucho daño en la cabeza.

Como digo, la lucha es lenta y la ejecución no es muy técnica, pero me gusta la historia que se cuenta. No está mal, y está adaptada a los hechos ocurridos en una historia larga. Finalizada la lucha, DX y Brother of Destruction celebran juntos, pero los dos gigantes atacan a sus rivales. Todo queda preparado para un tag team match en Crown Jewell.

Puntuación: ***1/2

Sunday, October 14, 2018

Alex Shelley vs Bryan Danielson, ROH Arena Warfare 11/03/2006



En julio de 2018, el luchador independiente Alex Shelley anunció su retiro de los encordados. A través de Twitter, Shelley, de 35 años de edad, afirmó que la lucha que habían tenido los Motor City Machine Gun frente a los Young Bucks y los Roppongi 3K en War of the Worlds 2018, había sido el último de su carrera.

Alex realizó este anuncio poco después de haber finalizado su contrato con Ring of Honor. Parece ser que su objetivo es dedicarse a su propia escuela de wrestling. Sin embargo, dada su juventud, dudo mucho que se trate de un retiro definitivo. Hemos visto en los últimos años muchos luchadores que han dicho retirarse, y han vuelto pasado un tiempo. Posiblemente, el estar confinado durante tantos años en la división tag team haya desgastado mucho su ilusión por luchar. Pero todo se cura viendo las cosas con perspectiva.

Por eso tampoco le voy a dedicar un gran especial. No tengo mucho tiempo para ello, en cualquier caso, dado el movimiento continuo que hay en la actualidad de la industria. Pero sí que vamos a repasar una lucha suya: la que tuvo frente a Bryan Danielson en 2006, por el ROH World Championship.

Alex Shelley es un luchador con gran carisma, y con una buena mezcla de técnica y agilidad. En sus primeros años como luchador independiente tuvo buenas oportunidades para demostrar sus habilidades como luchador individual, así como en la División X de TNA, y posteriormente, en la División Junior de New Japan Pro Wrestling. Pero, por lo general, le hemos visto en el tag team que ha conformado junto a Chris Sabin, llamado Motor City Machine Gun, que ha dado montones de grandes combates tanto en TNA como en ROH. Será por ese trabajo por lo que pase a la historia, al menos, si no vuelve nunca a luchar.

La lucha que comentamos hoy tiene lugar en 2006, durante el gran reinado de Bryan Danielson como campeón de Ring of Honor. El American Dragon defendió la correa en decenas de ocasiones, ante muchos rivales de gran nivel. Se enfrentó, posiblemente, a lo mejor de una gran generación de luchadores independientes. Y entre ellos estuvo Shelley.

En marzo de ese año, Alex tuvo su oportunidad titular, aunque no fue capaz de aprovecharla. Se enfrentaba a un Danielson que tenía un personaje de mejor luchador del mundo, muy ególatra y odioso. Alguna discusión tiene con el público antes de empezar. Pero Shelley tiene más peleas todavía, y usa al público como excusa para no enfrentarse a Bryan, que es mucho mejor que él a ras de lona. Ejecuta llaves a las piernas de Alex muy buenas, aunque este vende poco. Shelley tampoco es manco, y él también aplica buenas llaves a las piernas, así como golpes a cara y brazos, preparando su finisher, el Border City Strech.

Las continuas faltas de respeto por parte de Alex llevan la lucha al terreno de lo personal, y ambos acaban dándose un montón de guantazos bien dados. Shelley sigue dañando el cuello de su rival, adueñándose de la segunda parte de la contienda. Aplica DDT y Brainbuster, y utiliza su llave especial varias veces sobre el Dragon Americano, pero este lo aguanta todo.

Shelley falla un topetazo suicida hacia ringside, y Danielson contrataca con su habitual vuelo hasta las sillas del público. Shelley sigue dominando sobre el ring con sus llaves, pero el campeón se pone por delante. Aplica el Cuttle Mutilation, pero rápidamente lo cambia a un conteo con el cuerpo sobre la cabeza de su contrincante. Este no tiene forma de levantar la cabeza, así que es derrotado.

La lucha es buena. Stiff, con personalidad, y mucho llaveo. Shelley parte como rudo cobarde, pero acaba luchando a un gran nivel.

Puntuación: ****

Saturday, October 13, 2018

Christopher Daniels vs Stephen Amell, All In




Una de las cosas más llamativas en la celebración del evento indy All In, es la participación como luchador profesional de Stephen Amell, que seguramente le habrá dado bastante publicidad al producto de Cody Rhodes y los Young Bucks. Pero, ¿es realmente conocido este chico?

Depende del contexto. Desde luego, si te gustan los superhéroes, o las series de televisión, te sonará. Stephen Amell es un actor que se ha hecho famoso por dar vida a Arrow (Flecha Verde), superhéroe arquero, en el universo televisivo de DC. Es protagonista de la serie homónima, y también es un personaje recurrente en series como Flash, Super Girl o DC's Legends of Tomorrow. En su momento, se habló de que podría aparecer en la película de La Liga de la Justicia, pero luego DC y Warner decidieron que las series de televisión y las películas formaran universos distintos, así que no hubo suerte para Amell.

Pero comenzó a hacerse un hueco en Hollywood al aparecer en la última película de Las Tortugas Ninja, haciendo el papel del mítico Casey Jones. No es una gran película, aunque en 2018 participó en un corto llamado Mi Madre, My Father, que ha sido premiado en Cannes. Tiene buena pinta.

Amell es fan del wrestling, y tuvo varias apariciones en WWE, cuando Cody trabajaba en la empresa con el papel de Stardust. Gracias a su interacción en redes sociales, montaron una rivalidad bastante original, muy basada en lo superheróico. Cody creó una especie de joker muy divertido, que se enfrentaría al arquero Arrow.

Pero WWE no se siente segura al meter a famosillos a luchar en un ring sin un gran entrenamiento previo, al menos en un single match en el que el negocio se vea muy expuesto. Eso es lo que rompió el trato con Shaquille O'Neal de cara a su combate con Big Show en Wrestlemania; querían ponerlo en una lucha de equipos. Y eso es lo que hicieron con Arrow, que acabó haciendo tag con el aéreo Neville, para enfrentar a Stardust y el Rey Barrett. La rivalidad tuvo una temática superheróica, una ambientación especial para ello, y las promos de los malos fueron propias de unos supervillanos. Divertido.

Pero la idea de un combate definitivo entre Amell y Stardust no cuajó. No creo que a WWE le interesara demasiado. Pero Cody y el actor hicieron buenas migas, se convirtieron en buenos amigos. Cuando Cody salió de WWE, Amell retomó su ilusión por luchar. Hizo algunas apariciones en Ring of Honor, y fue introducido en el Bullet Club. En Survival of the Fittest 2017, tuvo su segunda lucha profesional, haciendo equipo con Cody, Los Young Bucks y Kenny Omega, para enfrentarse a The Addiction, Flip Gordon y Scorpio Sky. Y, en All In, tenemos su tercera lucha, la primera en singles, y su rival es el veterano Fallen Angel Christopher Daniels.

Tampoco hay una gran historia detrás de este combate. Se vieron las caras en esa lucha por equipos, y tuvieron careos en algún vídeo del canal de Youtube de The Élite, pero poco más. En un vídeo, Amell aseguraba que su primer single match sería el último de Daniels, mientras que este se reía de tales palabras, asegurando que dejaría en ridículo al actor. No hay mucho de ambas amenazas en el combate.

Que, no obstante, no es malo. Amell está muy digno, no comete ningún gran error. Daniels, desde el primer minuto, ataca el estómago del rival, preparando sus planchas y su moonsault. Aunque domina buena parte de la lucha, Amell no se deja humillar, y contraataca. Sus ataques son básicos, pero cuando intenta cosas más arriesgadas, lo hace de forma espectacular. Aplica Coast to Coast, y se lanza con un Flying Elbow sobre Daniels, que estaba en una mesa. Pero todo era una trampa por parte del Fallen Angel, que se aparta. Stephen atraviesa la mesa, poniendo su físico en juego.

Jerry Lynn es el referee especial de este combate. Después de ese movimiento, parece que puede haber un doble count-out, pero el excampeón de la ECW vuelve a introducir a los luchadores en el ring. Mientras Daniels discute con él, Amell está a punto de ganar con un paquetito, pero no lo consigue. El veterano, finalmente, se lleva la victoria mediante un Moonsault.

La lucha no es mala, es bastante correcta. Daniel hace un buen trabajo sobre el estómago del rival, aunque no hay nada específico de su condicion de estrella en la rutina del enfrentamiento. Amell demuestra que no ha venido a pasearse, y que el wrestling el gusta de verdad.

Puntuación: ***