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domingo, 20 de noviembre de 2022

 Antonio Inoki vs Jack Brisco, JWA 08/05/1971




Especial fallecimiento de Antonio Inoki

Continuamos hablando sobre el enorme Antonio Inoki a pocas semanas de su fallecimiento. Estamos desarrollando una pequeña serie especial en la que incluimos luchas suyas que vale la pena ver. Comenzamos hace poco comentando un combate suyo en JWA, la empresa en la que debutó, fundada por el legendario Rikidozan. Antes de pasar a comentar algunas de sus aventuras en New Japan, la empresa que Inoki fundó en 1972 y que, desde entonces, es la más importante de Japón, vamos a mirar otra lucha propia de su primera etapa. Y es que en New Japan destacan muchos trabajos suyos que han pasado a la historia por motivos comerciales, como su lucha ante Muhammad Ali, o su enfrentamiento de samuráis ante Saito. Pero en JWA la pureza luchística era absoluta, para bien o para mal, de tal manera que es complicado, a veces, diferenciar las luchas que se daban en esa empresa, de una real, así que creo que el especial debe tener al menos dos referencias a JWA. Si en el primer artículo lo vimos luchar contra el Campeón Mundial de la NWA, Dory Funk Jr, hoy observamos un match suyo ante otro gaijin de primer nivel: Jack Brisco, con el que luchó en 1971.

Ya sabemos que, en esa época, NWA controlaba el Campeonato Mundial de Peso Pesado, e impedía a las empresas desarrollar uno propio a través de acciones mafiosas. Eso también implicaba que su campeón tenía que recorrer Estados Unidos luchando en todas las empresas asociadas, e incluso el extranjero. Más le valía, pues promotoras rebeldes como WWWF o asociaciones alternativas como IWA crearon sus propios títulos y amenazaban su soberanía. Otros países con tradición luchística, como Japón, México y Puerto Rico, vieron luchar a diversos campeones de la NWA. El problema es que las luchas siempre estaban cohibidas: el título no iba a ir a manos de gente que no controlara la NWA, y las empresas locales no querían que sus héroes fueran derrotados por el invasor. Por eso mismo, ocurrieron cambios de título que no fueron reconocidos por los dueños de la correa. Por eso, la alianza tuvo que crear otros muchos campeonatos que acabarían quedándose por siempre en otras empresas y en otros países, para conseguir que no se crearan títulos propios. Así ocurrió con el NWA United National Title, un título principalmente disputado en Japón, que se quedó en All Japan, y que acabó formando parte de la unificación que dio paso al Triple Crown Championship, uno de los títulos más importantes de esta industria. La correa del NWA United National Title se utilizó como cinturón del Triple Crown Championship hasta 2013. Pues bien, en 1971, esta correa estaba en la cintura de Antonio Inoki.

Antonio ganó el campeonato en un evento de la NWA en Los Ángeles, y así, lo llevó a Japón por primera vez. Lo tuvo durante un año, hasta que fue despedido de JWA, por intentar comprar la empresa. Ya sabemos lo que pasó después: fundó su propia compañía. Así pues, sólo pudo realizar unas pocas defensas. Una de ellas fue la que comentamos frente a Brisco, el 5 de agosto de 1971, en el Tag número 12 de Summer Big Series, en Nagoya, ante unas 7000 personas. Porque la lucha libre había crecido mucho en Japón durante los años 60, causando una gran ilusión entre ese cansado pueblo que reconstruía su nación trabajando sin parar después del desastre de la Segunda Guerra Mundial. Y esa fama se repartía, en gran medida, entre dos hombres: Giant Baba y Antonio Inoki, aquellos que seguirían con la tradición luchística en el país. Porque, después de la marcha de ambos de JWA, la empresa apenas duró un año en circulación. Cerró en 1973.

Pero vamos con la lucha entre Inoki y Brisco. Esta es más corta que la comentada anteriormente; "sólo" dura una media hora. No es, el disputado, un Campeonato Mundial, así que no es requerida tanta duración. Mas la pelea está muy bien bookeada; a mí me gusta más. Es al mejor de tres caídas.

Como suele ocurrir con las luchas titulares de esta época, esta es muy técnica. La primera caída ocurre principalmente a ras de lona. Ambos luchadores llavean y se levantan en muy contadas ocasiones. Asimismo aprovechan cualquier oportunidad para poner la espalda del rival plana. Inoki no logra nada usando sus brazos para aplicar candados, así que pasa a aplicarlos con las piernas. La fuerza de sus extremidades inferiores es por todos conocida, y eso es algo propio también de Baba. Parece ser que la escuela de Rikidozan preparaba bien esa zona, aunque coincide que ambos atletas tenían piernas largas y fornidas. Como sea, el caso es que Brisco aprende la lección, y pasa a atacar la pierna de su rival con precisión.

En la mayoría de los casos, las luchas de esta época, efectivamente, gozan de un gran nivel de llaveo, aunque muchas veces carecen de esa búsqueda de debilidades concretas que a mí tanto me gusta. En este caso, no es búsqueda de debilidad, sino debilitamiento de fortaleza. Jack ataca de forma muy creíble la pierna del japonés, provocándole una cojera evidente. Ya no podrá volver a aplicar sus duros candados, al menos durante un rato. Aplica Figura 4, para expectación del respetable, pero Inoki llega rápidamente a la cuerda. La lucha continúa; Antonio aplica un Boston Crab con el que daña la espalda de su oponente. Intenta aprovechar tal dolor para aplicar su poderoso Manji Gatame, pero, inteligentemente, el americano se revuelve y pega un cabezazo hacia atrás al campeón para sorprenderle durante un momento y conseguir un veloz conteo de 3. Se lleva la primera caída después de 21 minutos, y aunque el final puede resultar confuso, es bastante verosímil.

Durante la segunda caída, el ídolo japonés se deshace de su rival, a pesar de los potentes candados y ataques a la cabeza de este. Con sus piernas recuperadas, llavea el brazo de Brisco, inhabilitándolo, y no lo suelta de ninguna manera. Está atrapado durante varios minutos. Cuando consigue soltarse y va a luchar de pié, se encuentra con la apisonadora de Inoki, un luchador adelantado a su tiempo. Brisco se zafa de su veloz rana, pero por otro lado se come un perfecto German Suplex que no ve venir, para perder la segunda caída. El golpe lo deja muy tocado, y en la tercera caída, no tiene ninguna oportunidad. Emocionado, Antonio le golpea en el cuello con gran violencia. Aplica Body Slam, y acaba la lucha con su Manji Gatame. Victoria para él.

Hay quien critica a esta lucha, porque la última caída es, básicamente, un squash. A mí me parece perfecto que lo sea. Tiene sentido: da crédito a lo ocurrido en la caída anterior, y no lo desperdicia. Asimismo, otorga credibilidad a los grandes golpes del wrestling. Vender mucho un gran ataque es algo bueno. Gran lucha, en mi opinión.

Puntuación: ****3/4


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